Agotado el debate o la etapa probatoria, el juez debe decidir sobre el
caso llevado a su consideración. Este debe formase un juicio para decidir los procesos bajo su conocimiento y competencia bajo estricta justicia y equidad. Para resolver lo anterior el sistema jurídico, a través de su desarrollo, ha implementado varios sistemas: El sistema del íntimo convencimiento o de la libre convicción, el sistema de la tarifa legal o de la prueba legal y el sistema de persuasión racional o de sana crítica. SISTEMA DEL INTIMO CONVENCIMIENTO O DE LA LIBRE CONVICCIÓN
De conformidad con este sistema, la escogencia de la prueba y el
valor de ésta depende del libre arbitrio del juez para juzgar.
En este sistema el funcionario no tiene por que motivar sus fallos,
lo que en la práctica se presta a que se imponga el capricho y la voluntad del juez y no la verdad de lo ocurrido. Este sistema le es propio al Jurado de Conciencia, hoy desaparecido en nuestro medio judicial.