Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
LA PAZ
ESTUDIO DEL ESPIRITU SANTO,
Y SU OBRA EN LA VIDA DICE BETHEL
J O R G E M I L L A R E S M .
INTRODUCCIÓN
El Espíritu Santo bautiza a todo creyente en el momento del nuevo nacimiento (Ef.1:13).
El Espíritu Santo bautiza a todo creyente para ser parte de su cuerpo (1.Co.12:13).
El Espíritu Santo transforma la manera de vivir (Ro. 8:9).
Es el único modo para recibir la justicia imputada (Ro.8:1; 2.Cor.5:17,21).
Único modo de ser aceptos por Dios (Ef.1:3,6).
Todo salvo ha sido bautizado por el Espíritu Santo en el momento del nuevo nacimiento, quien no lo ha sido, no ha sido
salvo jamás.
EL BAUTISMO DEL ESPÍRITU NOS COLOCA “EN CRISTO” (G 3:27,28). DESDE ESTA NUEVA
POSICIÓN TENEMOS Y PODEMOS DISFRUTAR DE:
a. Un nuevo estado. El bautismo en Cristo nos identificó con su muerte. En la cruz fuimos
librados de la autoridad de la naturaleza pecaminosa y hechos hombres libres en Cristo
(Ro. 6:3, 6 ,9-11, 18, 19).
b. Una nueva autoridad. Con Cristo como la cabeza de la iglesia, cada creyente tiene acceso a
su enseñanza, su cuidado, sus consejos y su dirección. Estamos completos en El (Col.
1:18; 2:3, 9-12, 19).
c. Una nueva colocación. Dios coloca a cada miembro en el cuerpo de Cristo como a Él le place
(1Co.12:18). Necesitamos estar menos preocupados de dónde estamos en el cuerpo y
más preocupados por lo que estamos haciendo en dónde estaos.
d. Un nuevo compañerismo. Cada creyente goza de una nueva y maravillosa relación con todos
los otros miembros del cuerpo. Somos responsables los unos de los otros (1Co.12:12-14,
19-20, 25).
e. Un nuevo servicio. Al colocarnos en el cuerpo de Cristo, se nos capacita para el servicio del
cuerpo (1ª Corintios 12: 27,28; Efesios 4:4-6, 11, 12).
LA PLENITUD DEL ESPIRITU
Al creyente se le manda ser lleno del Espíritu Santo (Ef.5:18).
La plenitud del Espíritu es vital para la vida de testimonio (Hch.1:8; Lc.24:48-49).
La plenitud es necesaria para una vida victoriosa (Jn.15:5; Fil.4:13; Rom.8:2).
Sólo es posible vivir vidas victoriosas bajo la dirección y control poderoso del Espíritu Santo (Zac.4:6).
Jesús no solo nació del Espíritu, sino que también lo llenó y ungió (lo que significa que el Espíritu le dio la plenitud
y obraba por medio de él).
El Espíritu lo guiaba, y de esa misma manera él nos quiere guiar.
EL MORAR DEL ESPIRITU SANTO EN EL CREYENTE
Hechos importantes acerca del morar del Espíritu Santo en
el creyente.
a. La venida y el morar del Espíritu Santo en el creyente
fueron prometidos (Jn.7:37-39; 14:16,17).
b. En todos los cristianos mora ahora el Espíritu Santo (1ª
Corintios 6:19, 20; 3:16; 1ª Juan 3:23, 24; 4:12, 13;
Romanos 8:9).
c. Si el Espíritu no mora en nosotros, no somos salvos
(Romanos 8:9b; Judas 19).
d. El Espíritu Santo ha venido a morar con nosotros para
siempre (Juan 14:16, 17).
EL SIGNIFICADO DEL MORAR DEL ESPÍRITU SANTO EN EL CREYENTE
Las manifestaciones que conforman el fruto del Espíritu, son actividades sobrenaturales que el Espíritu opera en el
creyente (Gal.5:22).
Las tres primeras en relación con Dios.
Las tres siguientes con el prójimo.
Las tres finales con el propio creyente.
Condiciones para la plenitud y el fruto del Espíritu.
No contristar al Espíritu Santo. (Ef.4:30).
Se le contrista cuando hay pecado sin confesar.2.2. No apagar el Espíritu (1.Tes.5:19).
Se apaga cuando se le resiste.
Andar en el Espíritu (Gal.5:16).
Se anda en El cuándo se somete la vida a su control y conducción.
X. LOS DONES DEL ESPIRITU
Don es un regalo de Dios.
1. Los dones de Dios son irrevocables (Rom.11:29).
2. El Espíritu Santo es el dador de los dones (Rom.5:5; 1.Cor.12:4,11).
3. Se otorgan por un acto soberano de Dios (1.Cor.12:11).
4. Se otorgan a todos los creyentes (1.Cor.12:11).
5. Se otorgan sin atención a mérito personal alguno (1.Cor.12:11).
6. Se otorgan para provecho de la Iglesia (1.P.4:10).
7. Las listas de los dones (1.Cor.12; Rom.12; Ef.4).
XI. APLICACION PERSONAL
El creyente necesita estudiar la doctrina del Espíritu Santo para "andar en El" y "no proveer para la carne" (Gal.5:16),
a ser "semejante" a Cristo (Rom.8:29).
El Espíritu Santo es Dios glorioso y santísimo.
Habita en el creyente (1.Cor.3:16).
Siendo morada del Espíritu Santo, el creyente debe procurar la santidad sobre todas las cosas (2.Cor.7:1; Ef.4:22-
24; 1.Tes.3:13; Heb.12:14; 1.P.1:15-16).
El creyente debe aprender cual fue la relación del Señor con el Espíritu para procurar su forma de vida.
Cristo anduvo en el Espíritu, así también el creyente (Gal.5:16).
Como Cristo vivió en la plenitud del Espíritu, así también el creyente (Ef.5:18).
LIBOPEN
LA PAZ
ESTUDIO DEL ESPIRITU SANTO,
Y SU OBRA EN LA VIDA DICE BETHEL
J O R G E M I L L A R E S M .
EL ESPÍRITU SANTO Y SU DISCIPLINA