Está en la página 1de 9

Edificio Consorcio

( Santiago)
Arquitectura y medio ambiente
Profesoras: Bruna Da Cunha
Manon Pommiez
Alumno: Gerardo Lara
Descripción:
El proyecto contempla dos largos volúmenes que
conforman una galería que contiene los accesos. Un
cuerpo tiene tres niveles, mientras que el principal
tiene 17 niveles.
Un aspecto que sobresale de esta obra es su planta
en forma de ¨bote¨, que deriva de la alineación de
su fachada principal con los ejes mayores que
bordean el edificio: Av. El bosque por el poniente y
Av. Tobalaba y Canal San Carlos por el Sur.

Arquitectos: Enrique Browne – Borja Huidobro


Ubicación: Las Condes, Santiago, Chile
Paisajismo: Juan Grim, Maria Angelica Schade
Propietario: Consorcio Nacional de Seguros – Vida
Empresa constructora: Huarte Andina
Superficie Construida: 26.720 M2
Superficie Terreno: 3.781 M2
Mes Dia Hora Altura Azimut

Enero 21 12.OO 75° 0

Julio 21 13.00 50° 163


Los 2 pisos superiores fueron protegidos por una
gran visera de 4,5 mts. La visera fue
confeccionada con celosías que eliminan la
radiación solar directa sobre los termopaneles (
de 5,5 mts de alto). Esto permite reducir la carga
térmica de enfriamiento y reducir la capacidad
instalada de climatización, con el ahorro
energético consecuente durante la vida útil del
edificio.

Las fachadas fueron desarrolladas con especial


atención. Para reducir la molesta radiación de la
orientación Poniente durante las fechas de
verano se trabajó con medios técnicos y
naturales, generando una doble fachada: una
interior con termopaneles y otra exterior de
vegetación para la absorción solar. La fachada
vegetal se transforma en un jardín vertical de
alrededor de 3,000mt2, la misma superficie del
terreno en la que se construyó el edificio. La El Edificio como principal estrategia pasiva
vegetación va cambiando con el paso del año considera una doble piel verde que regulariza el
dando un aspecto distinto dependiendo de la confort térmico dentro del edificio y la entrada de
época en que sea visto. luz en su verticalidad.
El edificio fue sectorizado verticalmente, quedando los
pisos inferiores para el Consorcio y los catorce superiores
para renta. Ambas áreas tienen acceso y circulaciones
verticales independientes. Los accesos están en los
extremos de la galería. Al Consorcio se entra por el Sur,
mientras a las oficinas de renta se entra por el Norte, a
segundo nivel. Esta zona se balconea sobre la primera,
quedando ambos accesos visualmente relacionadas.
El tratamiento de las fachadas mereció especial atención.
La orientación Poniente produce en Santiago graves
problemas de calor en el Verano. Por lo mismo, en el
edificio se trabajó con medios técnicos y naturales,
produciendo una doble fachada: una interior con
termopaneles y otra exterior con vegetación. Esta “doble
piel vegetal” reduce la absorción solar. Además
transforma el edificio en un jardín vertical de unos 2.700
m2, equivalente a los jardines de las casas que estaban
en el lugar. Metafóricamente se levanta verticalmente el
verde preexistente. Esta vegetación alegra el edificio y le
da un aspecto cambiante durante las estaciones del año.
Los dos niveles superiores del edificio están protegidos
por una gran visera metálica, la cual actúa como remate
del edificio y protege el nivel superior.
Se puede decir que el Edificio Consorcio es uno de los
edificios más admirados de Chile. El Edificio Consorcio,
propiedad del Consorcio de Compensación de Seguros
chileno, es una obra de los arquitectos Enrique
Browne y Borja Huidobro que se culminó en 1993. Se
diseñó como sede para el propio consorcio, que ocuparía
las tres primeras plantas, destinando el resto al alquiler.
Tiene 17 pisos, 26.751 m2 construidos y plantas de 1.200
m2 divisibles en dos oficinas cada una. Ocupa media
manzana con una fachada curvilínea sobre la Avenida el
Bosque –a su poniente-, en la Comuna de Las Condes en
Santiago.
Pensaron Browne y Huidobro, con razón, que la larga fachada -73 metros- del Edificio
Consorcio, orientada hacia poniente, significaría un gran problema de calentamiento en los
meses del estío austral –de octubre a marzo- y se decidieron por un aislamiento vegetal
que ha convertido al edificio en un auténtico icono. Los árboles resolvieron el problema
hasta el tercer nivel, pero la clave está en el cuerpo del edificio, de las plantas 4 a la 15.
Basados en sus experiencias previas optaron por una “doble piel vegetal” o parrón vertical,
distanciado a 1,40 metros de la superficie exterior del edificio, con trepadoras caducas y
“árboles” caducos (Acer Japónicos y otros), que permitiesen el paso de sol en invierno,
http://www.disenoarquitectura.cl/edificio- plantados en jardineras inferiores ubicadas en la “chimenea” entre fachada y parrón vertical. La
expectativa era que las trepadoras alcanzaran una altura de 12 metros en 6 años, por lo que se
consorcio-santiago-de-enrique-browne-y- dividió la fachada en tres franjas verdes de cuatro pisos cada una.
borja-huidobro/ El mantenimiento de la cubierta del Edificio Consorcio ha corrido a cargo del paisajista Juan
Grimm, que ha hecho un excelente trabajo, utilizando plantas que cambian su coloración a lo
largo de las estaciones.

También podría gustarte