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de la acción de riesgos
psicosociales en el
trabajo
Somatización
Es la forma de expresar un malestar
psicológico, ejemplo la rabia, los celos, etc. a
través del cuerpo o sea a través de síntomas
físicos.
Es muy común escuchar exclamaciones
como éstas: Tengo serios problemas en el
trabajo y he empezado a sentir dolor de
cabeza, ¿estaré somatizando?
Con frecuencia las causas las provocan la
presencia de uno o varios factores de estrés,
como pueden ser el aumento de
responsabilidad laboral, una separación, la
muerte de un ser querido, y el inicio o
intensificación de los síntomas.
Entre un 70 y 80 por ciento de los pacientes somatizadores presentan un trastorno
físico demostrable, pero éste no explica los síntomas por los que el paciente efectúa
la consulta, es decir, son somatizaciones.
Casi todos percibimos síntomas somáticos leves y transitorios, pero no por ello
consultamos al médico. Sin embargo algunas personas experimentan un profundo
malestar o se sienten incapacitados hasta tal punto que creen estar enfermos.
Estos enfermos imaginarios, suelen ser diagnosticados y tratados por trastornos
vagos y difusos, en vez de recibir el tratamiento para su verdadero problema, que
es el trastorno por somatización.
En ocasiones las somatizaciones no son
más que síntomas fisiológicos, como los
dolores musculares, trastornos del sueño,
taquicardias correspondientes a un estado
depresivo, o ansioso, pero que son
identificados por la persona que sufre no
como un problema psicológico, sino como
una señal de enfermedad.
Por otro lado, es fácil imaginar que la
cronoficación por tanto, el sufrimiento de
las somatizaciones acaba provocando
una alteración del estado de ánimo, es
decir, una depresión o un estado ansioso.
Son muchos los síntomas y síndromes que pueden presentar las personas que somatizan, algunos de
tal gravedad que pueden desencadenar otros problemas de salud física más amplios. Entre ellos se
encuentran los que se exponen a continuación:
c)Síntomas dolorosos: dolor difuso, dolor en extremidades, dolor de espalda, dolor articular, dolor al
orinar, cefaleas.
El estrés laboral también puede originar una serie de reacciones en nuestro cuerpo
alterando nuestro sistema motor, digestivo, respiratorio o cardiovascular.
Entre los síntomas físicos más frecuentes podemos encontrar los siguientes:
Problemas intestinales y/o estomacales
Sudoración excesiva
Hiperventilacion
Dolor de cabeza
Mareos y náuseas
Temblores
Taquicardia
Tensión muscular y contracturas
Hiposalivacion (Sequedad de la boca)
Consecuencias psíquicas:
Entre las consecuencias físicas del estrés laboral en el trabajador, que suelen manifestarse
en el medio y largo plazo, encontramos las siguientes patologías:
Alteraciones cardiovasculares:
-Hipertensión.
Alteraciones dermatológicas:
-Caída del cabello (alopecia).
Alteraciones sexuales:
-Disfunción eréctil (vulgarmente conocida como impotencia).
Alteraciones musculoesqueléticas:
-Contracturas musculares.
Alteraciones digestivas:
-Diarrea.
-Alteraciones del sistema inmune:
-Disminución de la resistencia del organismo frente a agentes patógenos y por tanto
mayor propensión a enfermedades infecciosas.
Ejemplos
http://www.estreslaboral.info/casos-reales/pagina1.html
Trastornos Emocionales
Características:
La hiperactividad
Agresiones
Dificultades en el aprendizaje
Retraimiento (falta de iniciar intercambios con los demás; el retiro de los
intercambios sociales; temores o ansiedades excesivas)
Los síntomas más frecuentes son:
cansancio
piel seca
sed
dolores de huesos y articulaciones
alteraciones del sueño