Recomendaciones: 1. VER “La hora de los hornos” de Solanas y Getino: estudiantes y obreros en rebelión (2 hs 48 min a 3 hs 08 min): https://www.lahaine.org/mundo.php/video-la-hora-de-los Otras fuentes: Crónicas de Archivo: Agustín Tosco 1 y 2: https://www.youtube.com/watch?v=56Jv8Im2dNs; https://www.youtube.com/watch?v=bQCSDdaYWfs
2. PENSAR los 60 de otra manera, dimensiones de la historia social.
Cosse, Isabella, Felitti, K., Manzano, V., Los ‘60 de otra manera. Vida cotidiana, género y sexualidades en la Argentina, BsAs, Prometeo Libros, 2010. Chamosa, Oscar, Breve historia del folclore argentino, BsAs, Edhasa, 2012 Lobato, Mirta Zaida, Buenos Aires. Manifestaciones, fiestas y rituales en el siglo XX, BsAs, Biblos, 2011 Lorenz, Federico, Algo parecido a la felicidad. Una historia de la lucha de la clase trabajadora durante la década el setenta (1973-1978), BsAs , Edhasa, 2013 Algo de contexto general Se intentó desarmar el modelo económico-social armado durante los gobiernos peronistas y desde 1958 se intentaron varias opciones: desde la política neoliberal a la inspirada por los desarrollistas de la CEPAL, que en los hechos significó el deterioro de las clases populares, baja de los salarios e insatisfacción social y creó resistencias y sublevaciones revolucionarias.
Cambios en las culturas. También nacieron o crecieron -bajo
nuevas formas- fenómenos culturales que se iban conectando, interrelacionando, como la Televisión, el cine comercial, el folklore, los modernos ritmos juveniles o "para la juventud" de los 60, como el rock y el pop, los del "Club del Clan“ (y los posteriores desde los 70), el Movimiento Nuevo Cancionero y la canción protesta, el cine político y social, distintas expresiones artísticas de las vanguardias (los happenings del Di Tella, hasta Tucumán Arde) La televisión cuya primera emisión realiza Canal 7 el 17 de octubre de 1951 desde la Plaza de Mayo con Perón y Evita como protagonistas principales ... en un episodio político y nacional conocido como "El Día de la Lealtad", va descubriendo dimensiones como la que llegará en 1969 a mostrar al hombre sobre la Luna por satélite, o iluminar los fogonazos y las imágenes de la rebelión popular, obrera y estudiantil del Cordobazo, es decir "la representación audiovisual de las masas" (Mirta VARELA) Los films de Lucas Demare Después del silencio (1956) un "retórico film antiperonista" y Los guerrilleros (1965) que mostraba y enfrentaba las primeras expresiones de la izquierda armada (según Getino en el libro Cine argentino). Desde otros ángulos y posiciones políticas el cine argentino crítico realizó obras como Crónica de un niño solo o El Dependiente de Leonardo Favio, y en 1968-69 La Hora de los Hornos de Fernando Solanas y Octavio Getino y fundadores del Grupo Cine Liberación. CHAMOSA. El 11 de febrero de 1963, en el Círculo de Periodistas de Mendoza, "Tito" Francia, Armando Tejada Gómez, Manuel Oscar Matus y Mercedes Sosa lanzaban las bases del Movimiento Nuevo Cancionero (MNC), inesperado frente al desarrollo en los 30 y 40 del movimiento folclórico inspirado por el complejo conservador bodeguero y militar imperante en Mendoza. El Manifiesto del MNC leído por Tejada Gómez el 11/2/63 es un documento clave (Chamosa) con análisis, objetivos y programa. Coincide con los tradicionalistas (destacar los peligros de la "invasión del pop internacional“) condena la compartimentación de géneros en la música popular (la típica o tango), desaprobando el giro comercial, así como el tradicionalismo que imperaba que en su celo por "formas puras y originarias" (crítica Yupanqui). Como la Nueva Canción Española (en pleno franquismo), el MNC se proponía cantar sobre la actualidad: incluir ritmos de todas las regiones, incluso tango, sin fusión; colaborar con otras artes (plástica, teatro, danza, cine) con elementos de raíz popular y se nutrieran mutuamente explican la preponderancia del tango por el dominio político de BsAs, y el boom del folclore por la migración interna que creó su mercado; y el MNC sería un epifenómeno de esa migración; combinan con viejos reclamos de grupos de artistas, intelectuales y políticos: llamado a modernizar el arte desde las raíces populares (criollismo, los "Artistas del Pueblo", Grupo Boedo, Forja, el peronismo) como un giro a la izquierda Si miramos el índice del libro sobre vida cotidiana y sexualidades compilado por Isabella Cosse, Karina Felitti y Valeria Manzano denominado Los '60 de otra manera, descubrimos varios temas Dos de estas expresiones en los 60 y 70s fueron: - las "Juventudes", una de cuyas expresiones fue el Club del Clan y la llegada a la juventud de "la nueva ola" entre 1955-65; siendo Palito Ortega el símbolo más exitoso o famoso- (que analiza Valeria Manzano) - por otra parte, el estudio de la presencia de la Juventud Peronista (pro montonera) como actor protagónico de la política y que lograra hegemonizar los "signos" de la juventud argentina. La JP se caracterizó por articular los valores de internacionalización y de izquierda nacional (Karin Grammatico) MANZANO. El Club del Clan remonta a 1960 cuando un ejecutivo de la RCA se trasladó a Bs As y percibió un vacío: no había ídolos juveniles. Inició una búsqueda de talentos, seleccionó una docena de jóvenes con características de una "juventud feliz", representar un microcosmos de la juventud y sus gustos musicales (Lalo Fransen, clase media, playboy, twist y boleros; Tanguito Cobian, tangos; Chico Novarro y Raúl Lavié, 30 años, ritmos tropicales y boleros; Jolly Land chica americanizada, pop; Violeta Rivas canta en castellano famosas canciones pop italianas; Jonhy Tedesco, rock y twist; y Palito Ortega, del interior, boleros, folklore y twist. Iniciado en 1962, luego de un éxito mediocre en canal 11, pasaron a un contrato en canal 13 que "los catapultó al centro de la escena de la cultura de masas". El programa de tv "El Club del Clan" de fines de 1962 a fines de 1963 se volvió una "plataforma central para la juvenilización de la cultura de masas", dispersándose a partir de 1964 hacia otros. La tv se volvió el medio (a diferencia de Francia con la radio y las revistas) que abrió el camino a la implosión juvenil o "juvenilista". Según Mirta VARELA la tv buscaba la representación de la familia como espacio en que la brecha generacional era sentida y resuelta sin disrupciones. En ese marco se incluía El Club del Clan, en un sentido de transformación cultural en torno a los jóvenes, mostrando el conflicto intergeneracional a partir de los diferentes estilos musicales, lo que se resolvía mediante la integración del rock/twist, los "jóvenes en familia" en un continuo de ritmos nacionales e internacionales. El Club del Clan se instaló en el centro de una red de discos, programas radiales, revistas y películas. En 1963 RCA lanzó tres discos, vendidos a un precio cuatro veces inferior al promedio, logrando un espectacular éxito de ventas (c/u 300mil copias); promovió solistas, Palito Ortega ocupó la cima en Perú, México y Chile, sus discos fueron el 50% de los totales de la RCA en AL. Estos discos inundaron las radios y los programas de TV, y se reforzaban con las imágenes en Revistas como Antena, Radiolandia y Nuevaolandia. Los fans podían ir al cine: Enrique Carreras dirigió El Club del Clan (1964) y Fiebre de Primavera (1965) MANZANO ¿Cual era el mensaje del Club del Clan? Basado en lo musical, orientado a un público joven, que celebraba la diversión contenida, la juventud como un valor y la vida familiar; boleros o twist eran temas para ser bailados más que cantados, y los cantores se movían en una actuación ordenada, sugiriendo un disfrute controlado; además, siempre estaban sonriendo, salvo Palito. ¿Por qué sonreían?, pensemos en la canción “Qué suerte”: "qué suerte que tengo / una madre tan buena / que siempre vigila / mi ropa y mi cena / que suerte que tengo / que suerte mi padre / callado y sereno / qué suerte saberlo / tan justo y tan bueno / qué suerte el amor / qué suerte la escuela /qué suerte que esta noche voy a verte" (Letra y música Palito Ortega y Chico Novarro, Violeta canta, RCA,1964). Optimismo edulcorado, omite toda posible insatisfacción, ubica los roles de género tradicionales, celebra el amor romántico y no cuestiona la institución más cuestionada, la escuela, no sugiere ninguna rebeldía o disconformidad También surgieron otros jóvenes talentos, como Roberto Sánchez, Sandro (el Gitano), muy distinto en varios aspectos. (sus movimientos excesivos, sexuales y hasta eróticos hicieron que fuera sancionado del Canal que emitía una de sus audiciones).
En 1968 se estrenó "Un muchacho como yo" de Enrique Carreras
con Palito Ortega, film iniciado con un grupo de motociclistas que cantan "grita grita fuerte grita como yo palabras de amor", duro contraste con el film contemporáneo de Denis Hopper, Busco mi Destino (Easy Rider, 1969) cine de carreteras con historias de dos motociclistas rebeldes ante el “sistema americano de vida”, comenzado con el tema Born to be wild, nacido para ser salvaje (de Steppenwolf, por el "lobo estepario" de Herman Hesse). Algo parecido a la felicidad de Federico LORENZ cuyo subtítulo nos direcciona algo más: "Una historia de la lucha de la clase trabajadora durante la década del setenta (1973-1978)". Iniciado con los poemas Ya caminando de Juan Gelman y A los hombres futuros de Bertolt Brech, que culmina "Pero ustedes / cuando lleguen los tiempos / en que el hombre sea amigo del hombre / piensen en nosotros / con indulgencia". el 24 de mayo de 1973, la víspera de la asunción de Cámpora, un trabajador naval tuvo un accidente en el astillero y fallece días después, motivó la toma del astillero por militantes clasistas del Sindicato de Obreros de la Industria Naval -cuya agrupación fue formada un año antes para disputar la dirección del sindicato de la zona. El 2 de junio el Mº de Trabajo obligó a la empresa a reconocer todas las demandas, y la agrupación que impulsó la toma, parte de la Juventud Trabajadora Peronista (frente sindical de Montoneros), celebró su primera victoria. La muerte del obrero Alesia tuvo insospechadas consecuencias. En menos de tres años, entre mayo de 1973 y el golpe del 24 de marzo de 1976, los integrantes de la Agrupación Naval Peronista José María Alesia vivieron quizá la experiencia más intensa de sus vidas, y su proyecto resultó salvajemente derrotado: 28 trabajadores y militantes y algunos de sus familiares fueron secuestrados, asesinados y desaparecidos. Uno de los líderes de la Agrupación que sobrevivió la represión, Luis Benencio dijo a fines de los 90: "¿Por qué, durante ese tiempo, fuimos distintos? ... en nuestras vidas, en cómo veníamos armados desde atrás. Y me pareció que era esa humanidad que habíamos logrado desplegar entre nosotros. Que fue una búsqueda permanente de algo parecido a la felicidad ... y que no tenía sentido sino era compartida". En Perspectivas, Lorenz dice que el libro fue un "tremendo y apasionante desafío historiográfico": requirió una profunda inmersión en las fuentes, una reconstrucción detectivesca y obsesiva, en medio de un sentido común que traduce masividad, intentar recomponer hilos individuales de vidas atravesadas por la política de masas. Usó y combinó los testimonios y entrevistas, colecciones documentales (prensa, de orgs políticas, judiciales) y los archivos de la represión, la DIPBA (Dirección de Inteligencia de la Policía de la Provincia de Bs As), con papeles efímeros "preservados paradójicamente para la posteridad por quienes los combatían".