comportamiento del sujeto, usan tecnologías de la imagen (resonancia magnética) para ver que zonas del cerebro están activas durante esos experimentos. Esta habilidad está guiada por un mecanismo de “predicción del error” por el que el cerebro aprende a hacer predicciones a partir de errores previos. Nadie quiere perder dinero de la misma forma que nadie quiere experimentar dolor, por lo que tendría sentido que la forma en que aprendemos a predecir y evitar ambas cosas estén relacionadas. La situación de perder dinero activa el mismo sistema antiguo del cerebro que nos permite evitar el dolor. El contexto y la presentación influyen en nuestras decisiones. Esto explica por qué tantos inversores se resisten a invertir en los mercados extranjeros, aunque eso les permitiría diversificar sus carteras a bajo costo. Se tomaron imágenes cerebrales sólo a los jugadores respondientes a las propuestas, donde las propuestas a veces eran justas y a veces injustas.