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LUXACIÓN CONGÉNITA

DE CADERA
LUXACIÓN CONGÉNITA DE CADERA
■ La luxación congénita de cadera constituye uno de los capítulos más apasionantes de la
patología quirúrgica ortopédica. 

Es una afección de origen incierto, evolución insidiosa y tratamiento desalentador si su


diagnóstico no se realiza precozmente. 

CLASIFICACIÓN 
La luxación congénita de cadera puede presentarse de dos formas: que ya exista al nacer, o que
al nacer existan las condiciones para que posteriormente aparezca, lo que lleva a la existencia de
dos tipos de displasias de cadera o malformaciones luxantes:
■ displásicas antropológicas. Tienen carácter hereditario y fundamentalmente se dan en niñas. En
una proporción de 7:1. En el nacimiento, la cadera no está luxada pero se luxa inmediatamente.
En una radiografía antero-posterior se diferencia muy poco de la cadera normal y si acaso en el
tamaño. Si el diagnóstico es precoz, tendrá tratamiento satisfactorio.
■ displásicas teratológicas. El niño nace con la cadera ya luxada. esta situación está íntimamente
ligada a algo que ha sucedido en el período embrionario. Son niños con malformaciones
congénitas asociadas: pie zambo, estrabismo, miembros inferiores displásicos, etc. su frecuencia
es igual en varones que en hembras.
INCIDENCIA Y DISTRIBUCIÓN 

■ Existen factores raciales: nunca se ve en


negros, excepcionalmente en la raza
amarilla y es muy común en la raza blanca
caucasiana. 

Zona geográfica: la zona de máxima


frecuencia corresponde a una banda de
concavidad norte que pasa por Bretaña
francesa, macizo central, norte de Italia,
Yugoslavia, Checoslovaquia, una porción de
Escandinavia y Escocía. En España aún
estando fuera de dicha banda el número es
apreciable, correspondiendo a la zona norte
la máxima frecuencia.
FACTORES DE RIESGO
■ Historia familiar: la herencia es un factor importante. Tienen mayor riesgo
aquellos niños cuyos padres o familiares cercanos la presentaron; por
ejemplo abuelos que hayan sido sometidos a cirugía de prótesis de cadera.
■ Antecedentes del embarazo: la displasia es más frecuente en los
primogénitos, bajo peso al nacimiento, embarazos múltiples, parto en
presentación podálica o cuya madre presentó durante el embarazo una
disminución del líquido amniótico.
■ Sexo femenino: la displasia es mas frecuente en las mujeres respecto a los
hombres en una relación de 6 a 1.
■ Malformaciones asociadas: Es frecuente encontrar displasia de caderas
en niños con otras alteraciones: como el pie zambo, metatarso aducto,
tortícolis de cuello, o malformaciones de miembros.
FACTORES DE RIESGO

■ Todos estos factores tienen en común la


limitación del espacio en el que el feto
puede moverse dentro del útero,
interfiriendo con el normal desarrollo de
sus caderas. El nacimiento por cesárea no
constituye por sí mismo un factor de riesgo
para el desarrollo de la enfermedad.
■ ¡¡¡ Todo niño con factores de riesgo o
con una exploración física anormal debe
ser sometido a las pruebas diagnósticas
confirmatorias para descartar la presencia
de displasia de cadera !!!
PATOGENIA

■ Nos referimos a la luxación típica que por otro lado es la más


frecuente.
■ Es un embarazo normal hasta los cuatro meses. El niño va
creciendo y el fémur, la cabeza y el acetábulo se mantiene en
su sitio. En estos momentos empiezan a crecer en longitud los
miembros inferiores, lo que conlleva a una hiperflexión de la
cadera y de la rodilla hasta que la propia diáfisis femoral se
apoya en la espina ilíaca anterosuperior, y por un mecanismo
de palanca, el fémur deja de presionar activamente sobre el
acetábulo, lo que dará lugar a que éste sea cada vez menos
profundo y más vertical. Está anormal colocación va a incidir
también sobre el ángulo de anteversión del cuello femoral,
que estará muy aumentado. Así, las anteversiones femorales
del recién nacido son grandes y el valgo está aumentado. El
ángulo cérvico-diafisario puede llegar a medir hasta 150°
(normal: 125°), y el ángulo de anteversión puede llegar
incluso hasta 90°, pero pasando siempre de los 30°.
RADIOLOGÍA

■ Va a ser fundamental para el diagnóstico


■ En la radiografía de un sujeto normal sede solamente las imágenes
correspondientes a los núcleos de osificación pélvicos, con una sombra que
corresponde a la porción todavía cartilaginosa y que en los insinúa su
forma posterior. Observando el acetábulo de perfil, el núcleo de osificación
ilíaco supra-acetabular, presenta una fosita horizontalizada, paralela a la
sombra condral acetabular.
■ En la luxación típica la morfología radiográfica es igual que en condiciones
normales, los núcleos de osificación son todavía más pequeños, pero la
forma que es aceptable aunque no es tan profundo el reborde cartilaginoso
acetabular.
■ En la luxación atípica el acetábulo visto de frente está abocado por arriba,
no es ya esférico. Visto de perfil hay una ausencia de fondo, verticalidad
notable de la pared acetabular y no queda matriz condral que pueda
solucionarlo, mientras que en la luxación típica toda vía lo había.
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL ENTRE
LUXACIÓN Y SUBLUXACIÓN 
Es útil la arteriografía con contraste.
■ Cadera normal. Además de las partes osificadas del ilíaco y cabeza femoral, cabe
destacar la imagen del labrum acetabular o limbo, aumentando el revestimiento de la
cabeza femoral, que se ira osificando y formara en el adulto el talus o borde del
acetábulo.
■ Subluxación. El limbo es rechazado hacia afuera, facilitando la expulsión ascendente
de la cabeza hacia afuera del acetábulo, y como la cápsula es laxa, lo permitió. El
músculo psoas ilíaco al estar hipertónico marcha su impronta dividiendo en el recinto
capsular en el dos cisternas (recinto capsular en reloj de arena). Aquí se consigue
reducir con facilidad, pero al soltarlo se reluxa. El problema en este caso es más de
estabilización que de reducción.
■ Luxación. el labrum acetabular está invertido y se convierte en un tope, e está
impidiendo el regreso de la cabeza al acetábulo. La creciente tensión del músculo
psoas ilíaco acentuará más la imagen del reloj de arena. Otros hallazgos son: el
ligamento redondo ocupa un espacio editando también el reingreso. Además en la
parte de es habilitada, el tejido al violar la so (pulvinar) se hipertrofia. El psoas ilíaco,
los aductores, el glúteo mediano, el tensor de la fascia lata, se acortan. Con todo ello
la forma adopta una nueva morfología, oponiéndose al reingreso de la cabeza femora
DIAGNÓSTICO PRECOZ DE LA LUXACIÓN
CONGÉNITA DE CADERA        

       
■ Es el aspecto más importante de la luxación congénita de cadera, ya
que si se realiza precozmente, tiene fácil solución y el niño llegara a ser
una adulto normal, mientras que si se pasa desapercibido que
evolucionará a un adulto inválido.
■ El diagnóstico debe hacerse nada más nacer, fundamentalmente en la
primera semana, pues diagnosticarlo a los dos años es mucho más fácil
pero ya no tiene interés, dado que el cuadro puede ser ya irreversible.
De ahí la gran importancia que tienen un conocimiento, ya no por los
ortopedistas, sino por los médicos generales, pediatras, ginecólogos y
matronas que son los primeros en ponerse en contacto con el recién
nacido, cuando el cuadró es todavía reversible y se le puede solucionar
de forma absoluta y definitiva.
DIAGNÓSTICO PRECOZ DE LA LUXACIÓN
CONGÉNITA DE CADERA        

       
■ Existen unos signos de sospecha de la luxación congénita de cadera en
el recién nacido :
■ La medida universal más útil y efectiva para diagnosticar tempranamente
este problema, es realizar a todo recién nacido un examen clínico de las
caderas en busca de signos clínicos como la disminución en la apertura
normal de las caderas, o la diferencia comparativa en los pliegues cutáneos
de los miembros inferiores o el aparente acortamiento de una extremidad. 
■ Cogiendo al recién nacido por las axilas se observa la actitud de sus
miembros inferiores. Si uno de ellos o a ambos permanece en flexión ligera
de la rodilla con rotación externa de la cadera y sensación de acortamiento
del miembro se puede sospechar a en la presencia de una luxación
congénita de cadera.
DIAGNÓSTICO PRECOZ DE LA LUXACIÓN
CONGÉNITA DE CADERA        

■ Signo del " clic " de Ortolani. La abducción de la cadera enferma flexionada
produce un " clic " con chasquido a nivel de la cadera.
■ Test de Barlow es la maniobra diagnostica más importante, dado
que sólo está presente en las caderas quedarán una luxación
congénita o una subluxación congénita. Este signo hay que
buscarlo en la primera semana, y ya que luego pueden estar
ausente, aparte de que en la segunda semana ya no se puede
hacer la presa necesaria para realizar la maniobra. Existe un test
de Barlow de salida y otro de entrada.

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