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ANÁLISIS CONDUCTUAL

Para el psicólogo de orientación conductista, la


psicología es la ciencia de la conducta. Esta definición
tiene dos elementos importantes. En primer lugar,
indica cuál es el objeto de estudio de la psicología: la
conducta. En segundo término, establece que el
procedimiento elegido para estudiarla es el método
científico. La ciencia, en general, se propone explicar,
predecir y eventualmente controlar los fenómenos. La
meteorología, por ejemplo, procura explicar por qué se
producen los cambios climáticos y predecir las
condiciones del tiempo. Del mismo modo, el propósito
de la psicología consiste en explicar, predecir y
modificar el comportamiento del hombre (Malot y
García, 1986).
Los objetivos que acabamos de enunciar pueden ponerse en evidencia
analizando un ejemplo sencillo. Consideremos la conducta de un
estudiante de pedir la palabra en clase para formular preguntas o hacer
comentarios. Nuestra primera tarea consistirá en explicar por qué ocurre
dicho comportamiento, identificando los factores que aumentan la
probabilidad de que intervenga en clase y aquellos que inhiben su
conducta.
Este proceso no es sencillo y requiere un análisis exhaustivo del
comportamiento del sujeto incluyendo sus pensamientos y expectativas,
las circunstancias ambientales que preceden a la conducta y las probables
consecuencias de la misma. Como resultado de este análisis, formulamos
una hipótesis acerca de los factores que están manteniendo o inhibiendo
el comportamiento del estudiante.
La premisa básica de la cual partimos es que la
conducta de los organismos no ocurre al azar, sino
que obedece a ciertas leyes. La conducta de intervenir
en clase, por ejemplo, no ocurre "porque sí". Depende
de la situación actual en que se encuentra el
estudiante -si tiene o no dudas sobre el tema tratado,
si el profesor permite o no preguntas, etc.- y de su
historia personal, por ejemplo los temores e
inseguridades que ha desarrollado en relación a hablar
en público. El análisis experimental de la conducta ha
permitido identificar muchas leyes generales del
comportamiento, tales como el condicionamiento
clásico, el condicionamiento operante o la imitación
de modelos. Estas leyes explican bajo qué condiciones
es probable que un sujeto emita determinada
respuesta.
CONCEPTOS BÁSICOS DEL CONDUCTISMO
A continuación definimos los principales términos de la teoría conductista.

1. Estímulo
Este término se refiere a cualquier señal, información o evento que produce una
reacción (respuesta) de un organismo.
2. Respuesta
Cualquier conducta de un organismo que surge como reacción a un estímulo.
3. Condicionamiento
El condicionamiento es un tipo de aprendizaje derivado de la asociación entre
estímulos y respuestas.
4. Refuerzo
Un refuerzo es cualquier consecuencia de una conducta que aumenta la
probabilidad de que ésta vuelva a darse.
5. Castigo
Opuesto al refuerzo: consecuencia de una conducta que disminuye la probabilidad
de que vuelva a darse.
REPRESENTANTES DEL CONDUCTISMO

Wundt: el nacimiento de la Ps. Experimental


Wilhelm Wundt (1832-1920), considerado por muchos
“el padre de la Psicología”, sentó las bases de lo que
acabaría siendo el conductismo. Creó el primer
laboratorio de Psicología científica y utilizó de forma
sistemática la estadística y el método experimental para
extraer reglas generales sobre el funcionamiento de los
procesos mentales y la naturaleza de la conciencia.
Los métodos de Wundt dependían en gran medida de la
introspección o autoobservación, técnica en la que los
sujetos experimentales proporcionan datos sobre su
propia experiencia.
Watson: la Psicología vista desde el
conductismo
John B. Watson (1878-1958) criticó el uso
de la metodología introspectiva de Wundt
y sus seguidores. En una conferencia en
1913 que se considera el nacimiento del
conductismo, Watson afirmó que para ser
verdaderamente científica la Psicología
debía centrarse en la conducta
manifiesta en lugar de en los estados
mentales y conceptos como “conciencia”
o “mente”, que no podían ser analizados
de forma objetiva.
Watson también rechazaba la
concepción dualista que separaba el cuerpo y
la mente (o el alma) y planteaba que la
conducta de las personas y la de los animales
debía ser estudiada del mismo modo ya que, si
se dejaba de lado el método introspectivo, no
había una diferencia real entre ambas.

En un conocido y controvertido experimento


Watson y su ayudante Rosalie
Rayner consiguieron provocar una fobia a las
ratas a un bebé de nueve meses (“el pequeño
Albert”). Para ello emparejaron la presencia de
la rata con sonidos fuertes. El caso del
pequeño Albert demostró que la conducta
humana no sólo es predecible sino también
modificable.
La caja negra
Para Watson los seres vivos somos “cajas negras” cuyo interior no es
observable. La caja negra es una metáfora para designar aquel elemento
estructural de un modelo abstracto sobre el funcionamiento de un sistema que
se halla entre la entrada (input) y la salida (output). Se utiliza en psicología para
señalar aquel componente que se encuentra entre el estímulo y
la respuesta (conducta).
El concepto fue adoptado en la psicología desde la biología del
comportamiento y fue utilizado en sus inicios por la
corriente conductista para señalar todos aquellos procesos cognitivos de
procesamiento mental interno (incluyendo los afectos, sentimientos,
pensamientos, deseos e ideas que intervengan internamente en estos
procesos) definidos por el conductismo clásico como no observables. Tales
aspectos se definieron como el contenido de la «caja negra» inexplorable (o
no interesante), que no es susceptible definir de manera operacional, ni de
medir directamente con instrumentos científicos. La base epistemológica que
sustenta este modelo es el positivismo.
Condicionamiento clásico: los perros de
Pavlov
Ivan Petrovich Pavlov (1849-1936) era un
fisiólogo ruso que se dio cuenta, mientras
realizaba experimentos sobre secreción de
saliva en perros, de que los animales salivaban
de forma anticipada cuando veían u olían la
comida, e incluso simplemente cuando se
acercaban los encargados de darles de comer.
Posteriormente consiguió que salivaran al oír
el sonido de un metrónomo, de una campana,
de un timbre o de una luz por asociar estos
estímulos con la presencia de comida.
A partir de estos estudios Pavlov describió el condicionamiento clásico, un
concepto fundamental en el conductismo, gracias al cual se desarrollaron las
primeras intervenciones basadas en las técnicas de modificación de la
conducta en seres humanos. Ahora bien, para entender cómo funciona el
condicionamiento clásico primero hay que saber con qué estímulos se
trabaja en él.
Ejemplos de condicionamiento clásico

• El timbre del receso, en los colegios, anuncia la llegada del receso. A


fuerza de repetirse, los alumnos le asociarán a las sensaciones de
libertad y reposo que experimentan en el recreo.
• El plato del perro, donde se le pone la comida, con sólo aparecer
transmitirá al perro la excitación propia de alimentarse, ya que habrá
asociado al plato con su contenido habitual.
• Los traumas emocionales o vivencias traumáticas, asociados a un
lugar específico, producirán a quien las sufrió una sensación
desagradable cuando regrese al lugar de los hechos, por ejemplo, a un
lugar doloroso de infancia.
• El olor del perfume de un compañero amoroso específico,
percibido tiempo después de terminada la relación, puede reproducir
en el sujeto las sensaciones con que la asocia o asocia a ese antiguo
ser amado.
Los animales en el conductismo
Los conductistas clásicos empleaban
frecuentemente animales en sus
estudios. Los animales son considerados
equivalentes a las personas en cuanto a
su conducta y los principios de
aprendizaje extraídos de estos estudios
se extrapolan en muchos casos a los
seres humanos; eso sí, siempre
procurando
Respetar una serie de presuposiciones
epistemológicas que justifiquen esta
extrapolación. No hay que olvidar que
entre especies hay muchos aspectos del
comportamiento que varían.
Condicionamiento instrumental: los gatos
de Thorndike
Edward Lee Thorndike (1874-1949),
contemporáneo de Pavlov, realizó diversos
experimentos con animales para estudiar el
aprendizaje. Introdujo gatos en “cajas-problema”
para observar si conseguían escapar de ellas y de
qué modo.
En las cajas había varios elementos con los que
los gatos podían interactuar, como un botón o
una anilla, y sólo el contacto con uno de estos
objetos podía hacer que se abriera la puerta de la
caja. Al principio los gatos conseguían salían de la
caja por ensayo y error, pero a medida que se
repetían los intentos cada vez escapaban con más
facilidad.

VICTOR OMAR CAMPOS FAVERIO – PSICÓLOGO


A partir de estos resultados Thorndike
formuló la ley del efecto, que afirma que si
una conducta tiene un resultado
satisfactorio es más probable que se
repita, y que si el resultado es
insatisfactorio esta probabilidad disminuye.
Posteriormente formularía la ley del
ejercicio, según la cual los aprendizajes y
hábitos que se repiten se ven reforzados y
los que no se repiten se debilitan.
El conductismo radical de Skinner
Las propuestas de Thorndike fueron el
antecedente de lo que conocemos como
condicionamiento operante, pero este
paradigma no se desarrolló de forma
completa hasta la aparición de las obras
de Burrhus Frederic Skinner (1904-1990).
Skinner introdujo los conceptos de
refuerzo positivo y negativo. Se denomina
refuerzo positivo al hecho de premiar una
conducta dando algo, mientras que el
refuerzo negativo consiste en la retirada o
la evitación de un evento desagradable.
Por ejemplo, en los famosos experimentos de los perros de Pavlov, este
fisiólogo hacía que los animales empezasen a salivar al oír un cierto
sonido, ya que este había sido asociado con la comida en anteriores
ensayos. La clave del condicionamiento simple estaba en asociar
estímulos entre sí.

Skinner admitía que el condicionamiento simple podía ser útil en ciertos


casos, pero descartaba la posibilidad de que la conducta pudiera ser
explicada solo a través de este mecanismo, entre otras cosas porque las
condiciones para que se produzca raramente se dan fuera de un
laboratorio. Sin embargo, sí creía que nuestro comportamiento (y el de
muchas otras formas de vida) puede ser entendido como un proceso de
adaptación a experiencias agradables y desagradables, útiles y no útiles.
Ejemplos de condicionamiento operante
• A los perros guardianes se les refuerza su ferocidad mediante un estímulo
positivo cada vez que atacan a un extraño o muerden a un ladrón. La ferocidad
del perro irá en aumento conforme asocie la recompensa a la conducta y la
propicie para aumentar así lo recibido.
• A los trabajadores en ventas se les estimula a vender mediante un
sistema de recompensas y bonos. La perspectiva de recibir el bono es suficiente
para estimular el esfuerzo del vendedor, tanto como la falta del mismo
desestimula una conducta menos comprometida.
• Las buenas calificaciones de los niños son recompensadas con aprobación
paterna, en forma de obsequios o celebraciones. Este refuerzo positivo se
asociará al esfuerzo de estudio y fomentará cada vez mejores calificaciones.
• Las ofertas en productos buscan reforzar positivamente el consumo, haciendo
que compremos más cantidad.
• A las mascotas se las enseña a hacer sus necesidades a través del
estímulo positivo cuando lo hacen en el lugar correcto y del castigo cuando lo
hacen por fuera.

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