• Vehículos espaciales que entran a la atmósfera planetaria (y o Tierra) como el
trasbordador espacial requiere del uso de un sistema de protección térmico (TPS) para protegerlos de calentamiento aerodinámico. • El sistema de protección térmica (TPS) está diseñado para que la temperatura de la estructura de aluminio del orbitador se mantenga por debajo de los 177 grados Celsius aunque en algunas superficies que están más expuestas, la temperatura puede llegar hasta los 1.260 grados Celsius • El desarrollo de TPS en el Centro de Investigación NASA Ames son las Cerámicas de Ultra Alta Temperatura (UHTC). El tipo de losetas utilizadas son de dos colores: de color blanco y negro. • La nave sufre un fuerte calentamiento en su cubierta exterior desde los 5 min. hasta los 15 min. de iniciado el regreso. Se interrumpen las comunicaciones y la nave tiene que disipar su energía desde una velocidad de más de 26.000 km/h a los 335 km/h que alcanza en el aterrizaje.
En el regreso es preciso disipar la energía sobrante por varios métodos (3):
a) Radiación del calor al vacío b) Evaporación o sublimación de la superficie del vehículo c) Transferencia de calor a la atmósfera (es decir, al aire situado junto al vehículo, dejando una estela de aire caliente).