Buena parte de la gente que imparte formación, miente. Dicen que el powerpoint es para que lo vea la audiencia, pero en realidad la presentación es para ellos. La necesitan mucho más que los que el público que les está viendo.

Cuando dí mi primera formación tenía una sensación de angustia importante. Es como que quieres tenerlo todo controlado. Tenía la necesidad de hacerlo bien y el powerpoint me daba cierta tranquilidad. Parece una tontería, pero la mayoría de la gente funcionamos así!

Lo curioso es que con el tiempo te das cuenta de que esa presentación es algo en el cual te escondes para no mostrar tus mierdas, tus inseguridades o incluso el miedo a que tus alumnos sepan más que tú.

Si te pasa esto, deja de centrarte en ti! Cuanto más tratas de ocultar una inseguridad, más visible es. Apóyate en tu audiencia, ellos pueden ser una buena guía.

Esta semana he charlado con Juan García Cousela, un formador que está convencido de que el conocimiento si no lo compartes, se pudre.

En esta charla descubrirás:
El motivo por el que Juán se siente cómodo cuando alguien cuestiona lo que él está diciendo.
El sentido de esta afirmación: “no hay preguntas tontas, solo tontos que no preguntan.”
Por qué a Juán le resulta muy útil ponerse en ridículo delante de sus alumnos.
1 clave para contagiar emoción cuando hablas.
La explicación de esta frase: “comunicar es superar la necesidad de contarlo todo”

Para dejar de ser un espectador y crear tu propia audiencia: crearpresentaciones.com/comunidad