Tuvimos el honor de platicar con Don Luis Urzúa, unos de los 33 mineros que sobrevivió al incidente en Copiapó, Chile en el 2010. Además de compartirnos su testimonio de vida y de esperanza, Don Luis nos da una mirada a la minería irregular y sin seguridad en el mundo. Nos cuenta que los mineros, en la mayoría de los casos, trabajan en condiciones extremas, sin capacitación, sin el equipo necesario y sin las facilidades para realizar un trabajo digno; reconociendo la falta de regulación y seguridad. Hace 12 años ellos vivieron una historia de crisis y de resiliencia. Hoy en México vivimos una tragedia donde al menos 10 mineros están desaparecidos, enterrados en el Estado de Coahuila, esperando -como fue su caso- que EL MINERO 34 nos dé una esperanza de vida.