Discover this podcast and so much more

Podcasts are free to enjoy without a subscription. We also offer ebooks, audiobooks, and so much more for just $11.99/month.

UnavailableLa mente de los justos. Por qué la política y la religión dividen a la gente sensata. Versión en castellano.
Currently unavailable

La mente de los justos. Por qué la política y la religión dividen a la gente sensata. Versión en castellano.

FromConferencias Magistrales Fundación Rafael del Pino


Currently unavailable

La mente de los justos. Por qué la política y la religión dividen a la gente sensata. Versión en castellano.

FromConferencias Magistrales Fundación Rafael del Pino

ratings:
Length:
51 minutes
Released:
Oct 2, 2019
Format:
Podcast episode

Description

El 30 de septiembre tuvo lugar en la Fundación Rafael del Pino la conferencia de Jonathan Haidt, Thomas Cooley Professor of Ethical Leadership en la New York University Stern School of Business, titulada “La mente de los justos. Por qué la política y la religión dividen a la gente sensata”.

El profesor Haidt inició su intervención señalando que está pasando algo muy raro en el mundo, porque muchos países tienen problemas con sus sistemas políticos, con sus democracias. Es una época extraña, que da bastante miedo, pero también es fascinante, porque vivir en democracia es un desafío que todos tenemos que afrontar juntos. Nadie sabe realmente lo que está sucediendo, pero, para poder solucionarlo, debemos aprender unos de los otros.

Los seres humanos hemos evolucionado para no ser seres tribales, pero no estamos diseñados para vivir en grandes sociedades. Estamos preparados para vivir en pequeñas sociedades, pero no para hacerlo en una de gran tamaño, a menos que se produzcan algunos ajustes que hagan posible la convivencia.

Esa convivencia no siempre es fácil, sobre todo en las democracias. Los padres de la Constitución de Estados Unidos lo sabían. Conocían perfectamente que los intentos previos de democracia en distintos lugares del mundo habían sido verdaderos espectáculos de turbulencia y, por ello, su vida había sido muy breve. En consecuencia, entendían que la democracia era algo muy inestable y por ello querían que sus parámetros estuvieran bien definidos, por ejemplo, la separación de poderes. Si esos parámetros funcionan perfectamente, pensaban, la democracia estadounidense podría funcionar también durante muchos siglos.

Los acontecimientos extraños se iniciaron en 2016 y sorprendieron a mucha gente a causa de su reflejo en las expresiones de la voluntad popular. Se ha producido un incremento de las divisiones políticas, no solo en Occidente. También se observa el advenimiento del populismo en Asia y en Latinoamérica. No sería extraño que, como consecuencia de ello, en los próximos veinte años asistamos a la desaparición de las democracias, al menos de algunas de ellas.

¿Quién ha podido cambiar esos parámetros fundamentales para que las democracias se hayan vuelto tan inestables? Solo un hombre: Mark Zuckerberg. No ha sido algo premeditado ni deliberado, pero es lo que ha sucedido.

Las redes sociales han cambiado los parámetros fundamentales de la sociedad de una forma bastante perjudicial para la democracia. La política es diferente porque las redes sociales la han cambiado. La sociedad humana ahora es muy diferente de lo que lo era en 2007. Las redes sociales reúnen y concentran a las personas, pero eso solo significa que la gente tiene más conversaciones privadas. El problema es que la comunicación es una calle de dos sentidos. En este sentido, lo que sucede en los grupos de las redes sociales condiciona a las personas y provoca que les preocupe lo que piensen los demás de ellas. Esto afecta a la naturaleza de la comunicación y altera el ratio público/privado porque gana importancia lo primero.
Las conversaciones, por tanto, ya no son honestas, ni auténticas. Por el contrario, ahora todo el mundo participa de actitudes de superioridad moral. Quien se comporta así considera que lo que dice es siempre la verdad y que, por eso, nadie puede estar en desacuerdo con esa persona.

Las cosas, sin embargo, no han sido siempre así. Antes de 2009, las redes sociales eran de otra forma. Eran como agendas que permitían a la gente compartir cosas con sus amigos. Eso no alteraba ninguno de los parámetros de la sociedad. Pero, en 2009, Facebook inventó el botón de Like, con lo que ahora se puede cuantificar todo y optimizar lo que una persona ha hecho. Además, también se puede compartir todo en las redes.

Los periódicos, que antaño eran fuente importante de información, han tenido que adaptarse al mundo de las redes sociales porque la gente ya no los lee. Pero eso implica que tienen que atraer lectores y, para conseguirlo, carg
Released:
Oct 2, 2019
Format:
Podcast episode

Titles in the series (51)

La Fundación Rafael del Pino, con el objetivo de contribuir a la mejora de los conocimientos de los dirigentes españoles, organiza Conferencias Magistrales en las que participan destacadas personalidades del ámbito académico, empresarial o político.