Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
EL PARE
VENDRELL
I ELS CUATRE
PUNTS
CARDINALS.
“ Feliç qui ha mort abans de desitjar la mort”
Rosamond Lehman
personatges:
l’acció:
Hui, a la sagristia de la parròquia de Sant Nicolau.
SUD
EN LA SACRISTÍA...
ELLA: Le recordaré otra frase: hace algo más de una hora que la soltó Vd.,
ahí fuera, delante de sus vecinos , muy convencido: “Nuestro cuerpo mortal
es agobiante: es preferible dejarlo para ir a morar junto al Señor”. (Corintios,
5,8).
EL: “Un bel morire honora tuta una vita”, ... este... mmm... ¿Dante?
ELLA: Petrarca.
EL: Exacto.
ELLA: ¿Y lo de los puntos cardinales? ¿Ve? Esa forma de entender la rosa de los
vientos no la había oído nunca.
EL: La verdad es que hoy me sentía inspirado, desmemoriado –como siempre-
pero inspirado. “La meua visda limita al nord amb la mort...” Aixó deia no sé
si Blas de Otero o León Felipe. Quina raó tenía.
EL: Aleshores sea como las mujeres del sur, es decir, comprensivas, y déjeme al
menos que me despida de los míos, que pasee por las calles de mi barrio,
que...
ELLA: ¿Para qué? Le recuerdo que vive Vd. en el barrio más feo de la ciudad.
ELLA: Poco tiene Vd. que visitar. La plaza está en obras y las calles están levantadas
por enésima vez para... qué...
ELLA: Entonces le recuerdo una vez más todas esas frases que con tanta pasión
defendía Vd. hace un momento sobre la vida eterna , ¿recuerda? “ El
cristiano muere en el Señor como había vivido para él”...o... “
Bienaventurados los que mueren en el Señor. ¡Descansen ya de sus fatigas!
PAUSA.
7.- Por la resurección entraremos en un mundo nuevo donde ya no habrá muerte (Ap 21,4)
EST
OEST
EL PARE VENDRELL, SENTADO EN UNO DE ESOS TABURETES ALTOS FRENTE A
LA BARRA DE UN BAR...
EL: Posa’m un cafetet amb llet, y le añade un poquito de ron, señorita, señorita, ¿me
oye...?
SE DIRIGE AHORA A UN CLIENTE IMAGINARIO QUE HAY A SU DERECHA...
DURANTE TODO EL MONÓLOGO NO DEJA DE MIRAR HACIA LA IZQUIERDA,
DONDE SUPONEMOS QUE ESTÁ LA PUERTA DE ENTRADA AL BAR.
¿Es nueva, no? Es que así, de espaldas, no la reconozco bien.
Señorita, psss, oiga, me pone un carajillo cuando termine de fregar esos vasos. No,
mejor, un orujo, que creo que me vendrá mejor...
AL CLIENTE.
Entonces no has visto a Tere. Pues es raro, tenía que estar aquí ya. Sólo tenía que
cruzar la calle. Yo es que me he entretenido un poco en la sacristía. ÉSTA NERVIOSO,
COMO DESCONCERTADO... Había quedado allí con otra... Eh, Manel, que no es lo que
piensas, a ver si te crees que todo el monte es orégano. Cosas del apostolado, te lo a
seguro.
SIN APENAS PERCATARSE, ALGUIEN LE HA PUESTO UNA COPA DE ORUJO.
Gracias.
SE LA BEBE DE UN TRAGO.
Y tampoco estaba, tú. Tenía que estar pero no estaba, a ver si me entiendes. Joven.
Y muy guapa. Bueno, ahora que lo pienso, guapa era, pero joven lo parecía, aunque vete tú
a saber los años que tendría... ¡Camarera, otra, por favor!
Vaya plantón más maravilloso. He buscado por todos los rincones y nada.
OTRA COPA, DE REPENTE.
Gracias.
SE LA VUELVE A BEBER DE UN TRAGO.
¿Y si ha sido un sueño, mejor dicho, una pesadilla? ¿O si al final ha sido una de tus
bromas?
PAUSA.
¿Seguro? Pues ya no estaba. ¿Sabes qué sensación tengo ahora en el cuerpo? Como
si me hubieran indultado. Estoy que me subo por las paredes de contento, por eso te estoy
dando la barra, nunca mejor dicho, y perdona, Manel, pero por muy cura que sea necesito
contarlo todo esto a alguien, tú imagínate que eres el cura y esto el confesionario...
He quedado con Tere para darle ciertos consejos musicales por si yo... bueno,
mentira, he quedado con Tere para despedirme de este mundo viendo sus ojos, que es el
paisaje más hermoso que he visto nunca, esos ojos tan dulces y tan tardones. Con perderme
en su mirada un minuto- que en ella vale un siglo- tenía bastante, eso que me llevaba al otro
mundo... Cosas mías...
¡Manel, no te vayas, tómate otra, venga, que te invito...! Bueno, vale... no, no te
preocupes, lo entiendo... Hasta maña... bueno, hasta luego, que es más indeterminado. Por
si ese luego dura treinta años... Que dure, que dure... Aunque viendo cómo te cuidas, te
tengo arriba en menos de lo que te piensas...
¡Señorita, ¿ha visto Vd. a Tere?, es que como me he retrasado un poco...
A ver si por primera vez en su día ha sido puntual y no vea la que me ha gastado...
ESTHER SE DA LA VUELTA Y LE SIRVE LA ÚLTIMA COPA.
ELLA: Bebe despacio.
EL PARE VENDRELL DESCUBRE QUE LA CAMARERA QUE LE DABA LA
ESPALDA ERA ESTHER.
EL: ¿Trabajas ahora de camarera?
ELLA: No.
PAUSA. EL PARE VENDRELL APURA LA COPA DE UN TRAGO.
EL. La vida...
ELLA: Qué...
EL: La vida es como una buena copa de orujo. Te la puedes beber a pequeños sorbos,
pero sabe mucho mejor de un trago, aunque te queme la garganta.
ELLA: La vida es eso que nos pasa mientras hacemos otros planes...
EL: Como dijo Santo Tomás...
ELLA: Exacto, San John Lennon. Vamos.
EL. ¿Y Tere?
ELLA: Llegará tarde.
EL: Como siempre. Me hubiera gustado mirarle a los ojos por última vez. En el coro
siempre se sienta en la última fila.
ELLA: Míreme.
EL: Túteame, total ya...
ELLA: Mírame.
EL. Te estoy mirando.
ELLA: Mis ojos.
EL: Son preciosos.
ELLA: La belleza tambien continúa arriba, sólo tienes que abrir el alma y mirar hacia
cualquier punto cardinal... cardinal...
EL: Cardinal viene de “corazón”
ELLA: Eso es, por eso siempre habrá un arcángel a tu alrededor...
EL: Vale, norte, pero... ¿Hay alguien más?
ESTHER NO HA ENTENDIDO EL AMAGO DE CHISTE.
EL PARE VENDRELL SE LLEVABA LA COPA. MIRA DENTRO DE ELLA Y VE
QUE QUEDA ALGUNA GOTA REZAGADA DE ORUJO. LA APURA.
ESTÁ ALGO CHISPADO, CONTENTO A PESAR DE LA SITUACIÓN.
LE HACE UN GESTO A LA MUERTE PARA QUE INICIE LA SALIDA, LAS
DAMAS PRIMERO, Y ACOMPAÑA SU RETIRADA CANTÁNDOLE EN CLAVE DE
BLUES “ A TI LEVANTO MIS OJOS...” MIENTRAS SE VA HACIENDO OSCURO.