Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Debido a que México destina a Estados Unidos (EU) más del 80% de sus
exportaciones cualquier impacto negativo en la economía del vecino país del norte
necesariamente afectará las ventas mexicanas al exterior, pero habrá que esperar al
menos el primer trimestre de 2008 para saber en qué magnitud, coincidieron
expertos económicos.
Las tasas de interés son el precio del dinero. Si una persona, empresa o gobierno requiere de
dinero para adquirir bienes o financiar sus operaciones, y solicita un préstamo, el interés que
se pague sobre el dinero solicitado será el costó que tendrá que pagar por ese servicio. Como
en cualquier producto, se cumple la ley de la oferta y la demanda: mientras sea más fácil
conseguir dinero (mayor oferta, mayor liquidez), la tasa de interés será más baja. Por el
contrario, si no hay suficiente dinero para prestar, la tasa será más alta.
¿Cómo influyen las tasas de interés en la economía? Tasas de interés bajas ayudan al
crecimiento de la economía, ya que facilitan el consumo y por tanto la demanda de productos.
Mientras más productos se consuman, más crecimiento económico. El lado negativo es que
este consumo tiene tendencias inflacionarias.
Tasas de interés altas favorecen el ahorro y frenan la inflación, ya que el consumo disminuye
al incrementarse el costo de las deudas. Pero al disminuir el consumo también se frena el
crecimiento económico.
Los bancos centrales de cada país (Banco de México, en el caso de nuestro país) utilizan las
tasas de interés principalmente para frenar la inflación, aumentando la tasa para frenar el
consumo, o disminuyéndala ante una posible recesión.
En México, la tasa sobre CETES (Certificados de la Tesoreria de la Federación, modo de
financiamiento del gobierno Federal) es la tasa base sobre la que se fijan la mayoría de las
otras tasas de interés.
Otra tasa de interés que se utiliza como indicador macroeconómico es la TIIE (Tasa de Interés
Interbancaria de Equilibrio), la cual surgió en marzo de 1995 como necesidad de tener una
referencia diaria de la Tasa Base de Financiamiento. Los bancos la utilizan como tasa de
interés base para aumentarle su margen de intermediación.
La devaluación es la disminución o pérdida del valor nominal de una moneda corriente frente a
otras monedas extranjeras. En el casó de México, seria la reducción del valor del Peso vs el
Dólar, el Euro, la libra esterlina, el yen y en general cualquier moneda de otro país.
Existen otros indices, como el Indice de Precios al Productor, que mide el crecimiento de
precios de las materias primas.
Causas de la Inflación
Para detener la inflación, los bancos centrales tienden a incrementar la tasa de interés de la
deuda pública. De esta manera se incrementan las tasas de interes en los préstamos al consumo
(tarjetas de crédito, hipotecas, etc). Al aumentar las tasas de interes del consumo, se frena la
demanda de productos.
La escalada en el precio de los alimentos llegó para quedarse. El aumento de la demanda, tanto
por mayor consumo en países asiáticos, como por la utilización de granos para elaborar
combustibles, reveló la crisis del modelo agrícola y también la vulnerabilidad de un país como
México, que depende en gran medida de las importaciones para satisfacer las necesidades de
abasto de maíz, trigo y arroz, los tres productos que componen la base de la pirámide
alimenticia.
“La producción de alimentos está estancada desde los años 70 del siglo pasado”, comentó este
miércoles Joaquín Vial, economista en jefe de la Unidad de Tendencias Globales del grupo
financiero español BBVA. Los inventarios han disminuido sensiblemente en los últimos años y
es claro “que el mundo ha alcanzado un límite en la superficie disponible para el cultivo
agrícola”.
México, país que fue autosuficiente en el consumo de alimentos hasta hace unas décadas,
ahora muestra una dependencia en tres de los granos que soportan la pirámide alimenticia.
Datos recabados por la Unidad de Tendencias Globales del BBVA, que forma parte del
servicio de estudios del grupo financiero, muestran que México importa 50.2 de cada 100
kilogramos de trigo que consume al año; compra en el exterior 23.6 de cada 100 kilogramos
de maíz que necesita y también importa 75 de cada 100 kilogramos de arroz. Datos
contundentes de dependencia en un país de 105 millones de habitantes, 76 por ciento de ellos
viviendo en ciudades, es decir, sin producir alimentos.
Aunque la disponibilidad de alimentos es también una variable inestable. Maíz, arroz y trigo
son la clave de la pirámide alimenticia humana. A finales de 2001, el inventario mundial de
maíz era suficiente para atender 30 por ciento del consumo mundial del grano, nivel que cayó
a 12 por ciento a finales del año pasado, según datos del Departamento de Agricultura de
Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés).
Casos similares son los del arroz y el trigo. En el primero, también de acuerdo con el USDA,
el inventario en 2001 era equivalente a 34 por ciento del consumo mundial, y ahora es
suficiente apenas para satisfacer a 15 por ciento; en lo que toca al trigo, los porcentajes, para el
periodo mencionado disminuyeron de 35 a 17 por ciento.
Información del USDA indica que entre 1970, después de la llamada revolución verde, y hasta
1990 el rendimiento de las tierras cultivadas en el mundo creció a un ritmo de 2 por ciento en
promedio anual.
El consumo se acelera
El especialista de BBVA dijo que el aumento del consumo de carne y alimentos en países de
rápido crecimiento es uno de los factores que explican el alza en el precio de la comida.
En China, por ejemplo, con mil 600 millones de habitantes, se consume hoy 30 por ciento de
la carne que se produce en el mundo. Un ciudadano chino promedio consume 35 kilogramos
de carne al año, nivel similar al de México, aunque el ingreso allá es una tercera parte, también
en promedio, del de México.
“Se espera que los aumentos en la productividad puedan quitar algo de presión a los precios de
los alimentos, pero lo que se debe esperar es que en promedio esos precios sean más altos en
los siguientes años de lo que lo fueron hasta ahora”, dijo Vial.
Por ello, el especialista llamó a todos los actores económicos y políticos el país a
buscar mayores inversiones nacionales y extranjeras, pues "entre más inversión
haya, se puede generar más empleo".
"Eso no quiere decir que se genera un empleo, un empleo es algo que es seguro, no
temporal", acotó.
De esta forma la balanza turística presentó un superávit por 4,523 mdd,, un aumento
anual de 11%, es decir, esta es la diferencia entre el gasto de los turistas extranjeros
que visitaron México contra el gasto que los turistas mexicanos hicieron en el
exterior.
El gasto promedio de los turistas no fronterizos subió 4.70% a 750.65 dólares por
cada uno.
"Con esta decisión de la Concamin se congelan a partir de hoy y hasta fin de año los
precios de más de 150 productos", dijo el presidente, Felipe Calderón, en rueda de
prensa junto al presidente de la Concamin, Ismael Plascencia.
La inflación anual de México llegó en mayo a 4.95%, su mayor nivel desde diciembre
del 2004, alejándose de la meta del banco central del 3.0 más/menos un punto
porcentual.
El alza de precios es más leve que en otros países de América Latina, pero analistas
creen que México empezó a mostrar signos de contagio por el alza global de los
precios de los alimentos derivada de una mayor demanda de países como China e
India, la fabricación de biocombustibles y los precios récord del crudo.
Recientemente, el gobierno decidió eliminar aranceles a la importación de maíz,
alimento base de la dieta de los mexicanos, así como al arroz, trigo y otros productos
básicos, para prevenir un posible desabastecimiento en medio de una crisis mundial
de alimentos. Plascencia dijo que en el caso de la harina de trigo, el precio se
mantendrá hasta julio, momento en que se evaluará si el precio sigue fijo o se eleva.
La lista de productos con precio congelado incluye también sopas, atún, sardinas y
algunos postres de marcas como AMI, Angel, Campbell's, Herdez, Jumex Soya y
McCormick.
El banco de inversión JP Morgan dijo el martes que espera al menos dos recortes
en la tasa de interés de referencia en México a partir de la segunda mitad del
año, por una desaceleración de la inflación y la economía.
El Banco de México (central) mantiene desde octubre del año pasado la tasa de
interés de referencia en un 7.50 por ciento, nivel al que llegó tras un aumento
sorpresivo de 25 puntos base, después de que la institución elevó sus
proyecciones de inflación para el 2008 y el 2009.
El banco central espera que la inflación general se acelere a mediados del año
hasta un 4.5 por ciento, para después retomar su tendencia hacia la meta de un
3.0 por ciento +/- un punto porcentual.
JP Morgan proyecta una expansión de la economía mexicana del 2.5 por ciento
este año, menor que el 2.8 por ciento esperado por el Gobierno y que el 3.3 por
ciento registrado el año pasado.
El banco central mexicano calcula que la economía del país crecerá entre un 2.75
y un 3.25 por ciento este año.
Revisa por qué se está debilitando la moneda mexicana ante el dólar, cuáles son
las perspectivas para los próximos días y cómo nos afectará en nuestra vida
diaria.
El dinero en general es una mercancía, de tal manera que su cotización depende de la oferta y
demanda que exista en el mercado.
¿Y el “superpeso”?
La fortaleza que en meses pasados presentaba el peso frente al dólar se debía al exceso de
dólares que había en nuestro sistema.
Y es que, por un lado, las tasas que pagaban las inversiones pesos superaban por mucho a las
denominadas en billetes verdes.
A lo anterior hay que sumar la entrada de dólares por concepto de la venta del petróleo, que en
esos momentos se ubicaba en máximos, y, finalmente, a la entrada por concepto de remesas.
En pocas palabras había muchos dólares en el país, un exceso de oferta que se traducía en un
menor precio, lo que explica las cotizaciones por debajo de los 10 pesos por dólar, que se
alcanzaron a principios de agosto.
Hoy, las cosas han cambiado a raíz de lo que está ocurriendo en EU. El temor de la recesión ha
hecho que los grandes inversionistas busquen inversiones menos riesgosas, entre las que
destacan los bonos del Tesoro estadounidense.
Además, el precio del petróleo ha caído, al igual que las remesas; es decir hay menos oferta de
dólares en nuestra economía, lo que se traduce en una mayor cotización de éstos.
En la jornada del lunes, el peso presentó su mayor caída frente al dólar desde la crisis de 1994.
Sin embargo, a diferencia de aquella ocasión, en que la salida de capitales se dio por las
condiciones locales, hoy la debilidad de nuestra moneda frente al dólar se da en línea con la
caída de otras monedas, como el real de Brasil, el peso chileno e, incluso, el euro.
Temporal la caída
Ante el contexto de elevada volatilidad es factible que en los siguientes días siga el
deslizamiento de nuestra moneda, y puede llegar hasta los 12.30 pesos por dólar.
No obstante, al cierre de año esta debilidad se limitaría, pero difícilmente cerrará el año por
debajo de los 11 pesos por dólar.
Primeramente hay que considerar que nuestro país importa gran parte de los insumos que
utiliza en la producción de bienes, es decir se compran en dólares, lo que implica que ahora
éstos serán más costosos y se reflejará en el precio que los consumidores pagamos. Además,
los bienes finales importados que se vende en nuestro país también tendrán un mayor costo.
Los incrementos en los precios podrían derivar en presiones sobre la inflación, que se traduce
en una pérdida del poder adquisitivo.
No obstante, sólo nos queda esperar a que la volatilidad disminuya y permita la estabilización
de nuestra divisa, para conocer la magnitud de los efectos que sobre nuestro bolsillo tendrá.
Algunos analistas opinan que el dólar spot (el más común) cerraría el año en niveles de 11.80
pesos a la venta. Crédito: Gloria Aragón