Inicio, Ww
Inicio.
ADELANTO
Soy Ignacio Brown, estaba concentrado
revisando unas cosas en la computadora cuando
la puerta se abrid, levanté la mirada por un
instante para‘divisar quien habia ingresado,
cuando vi'quién era regresé fa mirada a la
pantalla y la concentré en lo que estaba. Ella se
acercé y lanz6 sobre el escritorio. una carpeta
quien sabia que contenia.
—Necesito que revises eso y firmes—y
demando como si fuera mi jefa ;Quién se creia
€sa-mujer para darme 6rdenes?, jacaso olvidé
que el Gnico que mandaba aqui era yo?
—Lo haré después—, vocalicé siguiendo con
la mirada puesta en la pantalla, al ver que
continuaba ahi vociferé —Ahora no tengo
tiempo, estoy muy ocupado, asi que te pido de
la manera mas amable que salgas y me dejes
solo.
—Es que td nunca tienes tiempo—, le miré
por un instante porque lo dicho me soné a
reproche, y no entendia porque esa mujer venia
a reprocharme mi falta de tiempo, cuando lo
que mas odiaba era que me acercara a ella —
iQuiero el divorcio! —, dijo. Ante aquellas
palabras detuve el andar de mis manos, bajé laInicio, 27
tapa de la laptop y la miré —Ahf esta la
solicitud del divorcio, quiero que firmes y de
una vez por todas me dejes libre—, sonrei de
medio lado porque me hacia gracia su peticion.
Agarré la carpeta y comencé a leer todo lo que
decia ahi, mi sonrisa se hizo més notoria a
medida que leia porque eso me parecia una
estupidez —No quiero tu dinero, no quiero
nada, solo quiero que me des el divorcio—,
enarqué una ceja y dejé aquel papel.a un lado.
Sin darle una respuesta objetar algo volvi a
levantar la tapa de la laptop para continuar en lo
que estaba haciendo minutos antes de que ella
ingresara.
—Sal de aqui—, solicité, pero ella levanté su
mano y cerré la tapa de la laptop para obtener
Mi/atencién. Ante aquella actitud apreté mis
dientes y la miré de manera fulminante=;;No
estas entendiendo!? {Quiero que firmes el
divorcio ahora y que me dejes libre! —. Levanté
la voz y eso solo provocé que la ira dentro de
mi se incrementara mds, pues odiaba y
detestaba que me gritaran, mds si no eran mis
padres, nadie se habia atrevido hacerlo hasta
ese dia, que esa mujer tuvo la osadfa de hacerlo.
Sin desconectar el contacto visual, asenté
mis manos sobre la fina madera y refuté —jLa
que no entendid y pareciéd no comprender que
jamés existird un divorcio entre nosotros, eres
td! jSabes bien que nosotros no nos vamos aInicio, 317
divorciar nunca! sComprendes? jNos casamos.
para toda la vida y solo la muerte nos podra
separar!
—jQuiero el maldito divorcio! —, volvié a
bramar —El, regresé y quiero estar a su lado,
para hacer eso debo divorciarme.
—jRegres6? Y no decfas que yo lo habia
asesinado, has pasado todos estos afios
acusdndome de la muerte de aquel individuo, y
ahora resulta que esta vivo, que hajregresado y
quieres irtecomél.
—Me equivoqué, crei que lo habias
asesinada, que lo habias desaparecido pata asi
poder lograr tu objetivo—, dijo mas serena —
Pero ahora que esta de regreso, no quiero perder
ni un dia mas lejos de él—, volvi aenarcar una
ceja, seguido sali de entre el escritorio,
caminando con los brazos ¢ruzados me acerqué
aella, me detuve a su costado y procedf a
recalcarle las cosas.
—Me alegra que ese infeliz haya regresado y
te estés dando cuenta que no tuve nada que ver
en su desaparici6n, es un placer para m/ ver
cémo te tragas tus acusaciones, cémo bajas la
guardia ante la obstinacién que te habias
formado en esa cabeza, de que yo lo asesiné—,
sus labios estaban fruncidos, y me miraba de la
misma forma que siempre lo hacia, con odio —
Pero... Que ese tipo haya regresado no quiere
decir que vaya a darte el divorcio ;Qué te haceInicio, 47
pensar que te dejaré libre para que corras a sus
brazos? ;Acaso ese diminuto cerebro te empezd
a fallar? —, sonrei de medio lado —No pierdas
tu tiempo en hacerme esa peticién, mds si me lo
pides de esa forma—, dije al dar la vuelta y
regresar a mi asiento.
—jEres un miserable! —, dijo con la voz
quebrada, estaba a punto de llorar, lo sabia
porque la conocia muy bien, y sabia que asi se
ponia cuando iba a Ilorar.
—Di lo que quieras, pero nada me hard
cambiar de opinion. No nos divorciarémos Ana
Paula, ni intentes escapar porque dénde.sea que
te escondas te encontraré, y si estas conél no
me temblara la mano para acabarlo. Piensa dos
veces antes de traicionarme porque de lo
contrariolo.lamentaras—, me senté y levanté la
tapa de la laptop —Espero’sea la ultima vez que
ingresas a mi despacho y levantas la voz, o peor
atin, lanzarme cualquier cosa como lo hiciste
hace un momento. Que no se te olvide quien
soy y de lo que soy capaz de hacer.
—Si se quién eres. Eres un maldito mafioso
que asesin6 a mis padres, que me quité mi
libertad desde que era una nifa.
—Me alegra que lo tengas claro, asi no
tengo que estartelo repitiendo cada dia, y piensa
dos veces antes de serme infiel, porque debes
saber que eres mia y ningun miserable mas
pondrd sus manos sobre ti—, sentencié y leInicio, si7
solicité se retire. No la miré, pero pude ver
c6mo limpiaba sus mejillas, también suspiré, y
antes de irse comunicé.
—No sé cémo le voy hacer Ignacio Brown
Linos. Pero algo si te aseguro y es que, me
divorciaré de ti cueste lo que me cueste,
acabaré con este absurdo matrimonio que es
una farsa—, dijo, al dar media vuelta lanz6 el
portalapiz logrando que todos mis boligrafos
cayeran. Rodé los ojos ante su groseria.
Inhalando y.exhalando para apaciguar la ira que
me provoc6 esa mujer, traté de serenarme.
Después deque desapareci6 me levanté.a
servirme un trago, agarré una copa y caminé
hasta la botella, verti el licor en ella, al estar
lena la Ilevé a mi boca y procedf a beberla de
Un'solo; tras dejar la copa vacia la apreté entre
mis manos, seguido la lancé:con toda‘lafuerza
que pude, en la pared. No pude controlarme
ante el descaro de esa mujer, venir a decirme
que amaba a otro y que su amante a regresado
me enervé la sangre. Definitivamente no tenia
vergiienza, menos respeto por mi. Era su esposo
Carajo, cémo se atrevia a decir tales cosas, al
menos debia tener decencia al hablarme de su
amante, era un completo descaro de su parte.
Ya calmado regresé al escritorio, levanté la
tapa de la computadora y continué revisando los
videos que observaba minutos antes de que esa
mujer ingresara. Cuando estaba mdsInicio, 67
concentrado que nunca Ilegé una empleada a
interrumpirme, suspiré profundo y pasé mis
dedos por ambas sienes.
—Seiior, disculpe que lo moleste, pero la
sefiorita Ana Paula esta incontrolable. Se metié a
su habitaci6n, esta destruyendo todas sus cosas
—, entrecerré los ojos y me levanté, a pasos
firmes me dirigf hacia las gradas, mientras sub{a
jugaba con mis dedos con el botén de mi
esmoquin, llegué hasta la habitacion, al verme
me lanz6 un-zapato, sim inmutarme me acerqué
y la agarré dejandola amaneada con sus mismos
brazos y de-espalda a mi.
—iTe odio!,jTe desprecio! ;Suéltame!
iInfeliz!
—Te vas a calmar.
—jNo quiero! —, pataleé como una nifla
rebelde —jLo nico que me daria calma es que,
la puta que te parid se muriera! —, la tiré a la
cama, al verme con el rostro carmesi fue
retrocediendo cémo cangrejo, al asentar mis
manos sobre el colchén y mirarla con ojos
afilados inquirf
— Miedo? —, con una media sonrisa
continué acercandome —Hace un momento
parecias tener la valentia suficiente para
enfrentarme ;Qué te
le agarré el rostro entre mi mano y asenté su
cabeza en el colchén, vi en sus ojos pavor y
como una lagrima se desprendié des sus ojos —
izo apaciguar esa ira? —,Inicio, 7m
No vuelvas a nombrar a mi madre, ni siquiera
en tus miserables suefios te atrevas a nombrarla
—, me arrodillé al momento que la soltaba. Tras
pararme arreglé mi traje y sali.Pasado. 2
Pasado.
HACE ANOS ATRAS.
«La primera vez que lo vi, fue cuando estaba
sentada en el grande corredor que daba al
exterior en la casa del arbol, observaba
fijamente aquelpaisaje.y lo plasmaba en mi
cuadernosLlego y se par en frente cubriendo
mi vista y desconcentrandome por completo.
Agarro una silla y se sent6, me quedé anonada
ante su perfecto rostro, aquel terno le hacia ver
cémo un principe de ensuefios, su rostrovera tan
limpio y hermoso, se veia muy joven, quizds no
pasaba de los veinte. Aquellos ojos mieles me
observaban fijamente, no lograba descifrar que
habia tras de esa mirada, pero si era extrafia.
Aunque me miraba de tal forma que lograria
asustar a una nifia pequefia, no senti miedo,
conecté mi mirada con la suya y me perdi en
ella. Contaba con solo trece afios de edad, se
suponia que debia salir corriendo y llamar a mi
madre, decirle que un hombre muy extraiio
habia ingresado a nuestra casa y se habia
sentado delante como si quisiera que lo pintase,
pero me quedé observandole al igual que él a
mi.
—Recoge tus cosas que vienes conmigo—,
demand6 sin levantarse.Pasado, 2n2
— Con usted? —, pregunté en un susurro.
—Soy tu nuevo tutor, tus padres acaban de
morir—, lo dijo con tanta frialdad, sin rodeos ni
nada, sin importarle que me doliera.
Mis ojos se empafiaron ante lo que
escuchaba, smis padres estaban muertos?, no
podia creer que fuera cierto. Me levanté y sali
corriendo, bajé y fui al interior de la casa, antes
de ingresar un hombre me agarré evitando que
ingresara.
—jMama! =, grité en solicitud de auxilio,
pero nadie meescucho, nadie vino a mi rescate.
Aquel hombre que hace ratos.se sent6 en frente
de mi, observaba desde Io. alto coma otte me
Mevaba hacia el auto —jDéjeme! —, supliqué.
Ahora si sentia miedo, temor y pavor de estar
con estas personas.
—Quédate tranquila, que si te portas bien
nada te sucederéa—, decia mientras me colocaba
el cintur6n de seguridad. Con los ojos
empajiados observé hacia mi casa, ahi dentro
estaba mi madre, lo mas probable era que
estuviera muerta porque no salfa a impedir que
estas personas me llevaran.
Limpiando mi mejilla dirigi la mirada hacia
la casa del arbol, y ahi seguia él, observandome
con determinada atencion. Llenandome de ira le
saqué el dedo del medio y desde ese dia un
odio crecié dentro de mi.
El auto emprendis la salida y él continuabaPasado, 3/12
ahi arriba, seguro iba a limpiar la escena, se
desharia de los cadaveres, tal vez lanzaria a mi
madre a una quebrada, o enterraria su cuerpo
donde nadie lo pudiera encontrar. Era un
maldito asesino, un desgraciado que le habia
arrebatado la vida a mis padres, me habia
dejado huérfana y sola en el mundo, me quité
lo Gnico que amaba, mis padres.
Dentro de unas horas Ilegamos al
aeropuerto, pera no precisamente por dénde
abordaban Jos pasajeros, era por otra parte, me
llevaron hasta un avi6n, solicité ayudayy nadie
regres6 a verme,era como si estuvieran sordos,
como si ignoraran mis stplicas, Ilegué’a pensar
que todos esos militares que se encontraban ahi
estaban aliado a él.
Unaivez dentro del avién dirigt la mirada
hacia el exterior, con dolor vi como levantaba el
vuelo, cémo la ciudad que me vio nacer
quedaba atras. Sollocé con fuerzas porque no
tenia idea de ;qué iba a pasar conmigo?, sdénde
me llevaba?, squé me harian?
Eran tantas las preguntas que me hacia y
solo de imaginar lo que podia pasarme me
aterraba. Durante todo el vuelo lloré encerrada
en ese camarote, fueron muchas las horas
porque Ilegamos al otro dia.
Una hermosa mujer ingresé y colocé sobre
la mesita mi comida —Come algo pequefia.
—No quiero, solo quiero irme a casa, porPasado, 4n2
favor aytideme, me estan secuestrando, me
quieren lastimar.
—Claro que no—, se acomodé a mi lado —
Nadie de aqui puede lastimarte, estas bajo la
proteccién de Ignacio Brown, y si alguien llega
a tocarte se las verdn con él.
3Quién diablos era Ignacio Brown? 3Y por
qué estaba bajo su proteccidn? Yo no tenia
enemigos, mama no los tenia, spor qué ese
hombre iba a protegerme?
—No quiero protecci6n de nadie, solo
quiero irme, irme a mi-casa—, dije molesta y
lancé el plato de. comida. Aquella mujerno dijo
nada més, solo sali6 y al rato entré él, ese
hombre, el mismo que llegé a interrumpir mi
dibujo. Ingresé y observé el lugar, luego posé su
mirada enmi y dijo.
—Regla numero uno, limpias lo que
ensucias.
—jNo eres mi padre para que me des
6rdenes! —, dije Ilena de terror, pues ese
hermoso hombre tenia una mirada aterradora,
ademas, un arma se encontraba en la pretina de
su pantal6n —Quiero irme a casa, no quiero
estar aqui.
—TU no podras volver nunca més a Estaquia,
estards bajo mi cuidado por siempre.
— Quién te dio ese derecho? —, me
levanté, atin con los ojos llenos de lagrimas lo
enfrenté —Tengo una mama, ella debe dePasado, S/i2
estarme buscando.
—Nadie te estd buscando, porque nadie
sabe de tu existencia, tu madre y ti padre estan
muertos, creo que ya eres lo suficientemente
grande para saber que significa muerto.
—jEs mentira, mi madre estaba viva hasta
que yo subi a la casa del Arbol!
—Aun estas muy chica para saber que fue lo
que paso, te lo contaré cuando seas mayor de
edad. Por ahora limpia este desorden.
—Ti,los mataste ;Verdad? —, pregunté antes
que saliera, recordaba haber escuchado el
nombre de Ignacio cuando mi padre lleg6é a mi
madre pidiendo ayuda, escuché claramente que
ese hombre lo iba asesinar. El se detuvo y sobre
el hombro me miré —jMataste a mis padres! —,
me levanté —jAsesino! jMaldito asesino! —, él
se gird y dijo.
—Ya sabes lo que soy, asf que empieza a
comportate bien, nifia estipida, porque
paciencia para ser nifiero de adolescentes
rebeldes no tengo.
—jEntonces déjame ir!
—sQue parte no entiendes que no podras
liberarte de mi jamés? sSabes lo que significa
jamas? —, dicho eso se fue.
Horas después llegamos, de la misma forma
que me subieron me bajaron. Me daba terror
bajar del avidn, temia que después de descender
estuviera la muerte esperandome,Pasado, 6/12
atin era muy joven, no queria morir, solo tenia
trece afios, tenia toda una vida por delante, se
supone que iba a ser una gran artista, que
pintaria grandes cuadros los cuales serian
vendidos a nivel mundial. No obstante, con lo
que acababa de suceder no podria saber que
seria de mi futuro, quizds seria vendida a
pedéfilos.
Tras salir del avi6n me subieron a un coche y
manejaron por largo rato, no tenia idea de
dénde estaba, cuandoempezamos a llegar a la
ciudad pude ver las sefiales de las calles, todo
estaba en inglés» Los Angeles?,;Qué haciamos
aqui?
Una hora después los coches se detuvieron
dentro de un palacio, era tan grande y estaba
rodeadovde hombres en el techo y en cada parte
del jardin. Me quedé observando el lugar, esto
parecia una mansi6n de pelicula.
Dos hombres me jalaron del brazo y sin
revisarme me dejé llevar. Al estar dentro, me
dejado en la sala y salieron. Recorri la vista por
todo el lugar —;Es ella? —, escuché la voz de
esa mujer, me giré a verla, por la ropa que trafa
parecia una mucama —Vamos carijio, te Ilevaré
a tu habitacién—, la mujer era muy amable, no
senti miedo con ella, tal parecia que esta seria
mi carcel, y de aqui no podria salir jamas, tal
cual lo dijo ese hombre.
Me quedé encerrada en esa habitacién,Pasado. ma
haciéndome tantas ideas en la cabeza, y cuando
la puerta se abri6 me quedé mirando en blanco
—Debes bajar a comer. El sefior Ignacio te
espera en el comedor.
—No quiero comer con ese hombre.
—Debe hacerlo, hay muchas cosas de las
cuales va hablar—, esa mujer se senté a mi
lado, me abrazo y suspir6 —Quizds pienses que
él es una mala persona, pero. En realidad, no es
asi, mi muchacho es un gran hombre.
—Asesin6 a mis padres, ese no es un gran
hombre. Ignacio Brown asesino a Kemal
Mancini y mi madre, .je6mo puede un asesino
ser buena persona?
Aquella mujer no dijo mas, solo se levanté y
pididé que bajara porque de lo contrario él
vendria por'mi. Me rehusé a bajar, y tal cual esa
mujer lo dijo, ese hombre subio y me obligs a
bajar. Solo con su mirada me amedrantaba y
aterrorizaba.
Bajé corriendo las gradas y me senté en ese
amplio comedor, al ratito escuché sus pasos,
camino hasta su asiento que quedaba frente al
mio y a una cierta distancia.
—Fste sera tu nuevo hogar, vivirds aqui junto
a los guardaespaldas y empleadas, los cuales
son cémo parte de mi familia y debes tratarlos
como personas igual que tu. Se pide por favor y
se da las gracias por la minima cosa que te
ayuden a realizar, nada de responder conPasado, 8/12
arrogancia y lanzar las cosas al suelo para
descargar el enojo. Si estas enojada te encierras
en el bafio, te clavas a la tasa de este y ahi
gritas. La comida no se desperdicia, te comes
todo lo que se te sirve. Y lo mas importante, no
intentes escapar, porque no podras, por las
noches habra docenas de perros sueltos, apenas
salgas te haran pedazos—, trago grueso.
—jMe has secuestrado? —, muele la comida
y me mira.
—;Quéte hace pensar que te secuestraria y
te tendria sentada en la mesa de mi comedor?
No tiene légica. Ahorajcome— Ilevé la primera
cucharada a la,boca, la comida estaba sabrosa,
no podia negar que estaba como para chuparse
los dedos.
Los dias pasaron, y cada dia debia desayunar
y cenar con ese hombre, el cual desaparecié un
mes después de haberme trafdo. Durante el
tiempo que no estuvo me dediqué a estudiar y
realizar varios cuadros de pinturas, los
empleados conseguian todos los materiales que
necesitaba, en mi tiempo libre me dedicaba a la
pintura. El miedo de vivir en esta casa se fue,
poco a poco fui olvidando el dolor de perder a
mi madre. En cada cumpleaiios recibia un
presente de él, todos los guardaba en el baul y
no los sacaba jamas.
Cumplido los dieciséis solicité que me
enviaran al colegio, no queria estudiar en casa,Pasado, on
queria conocer mds lugares de esta hermosa
ciudad, queria hacer amigos y compartir con
ellos. Ir al colegio se me hizo realidad, menos lo
ultimo, amigos me fue dificil de hacer, porque
estaba vigilada por dos hombres, los cuales no
me quitaban los ojos de encima y ahuyentaban
a quienes se me acercaban, el tnico lugar
donde podia estar lejos de la vista de ellos era
en el salén y en el baiio. La vigilancia de esos
grandotes me cohibi6é de tener amigos. Asi fue
hasta que ingresé al gimnasio y ahi conoci a un
hombre maravilloso, el cual me rob6 el corazén
con su amabilidad y su dulzura, El.no temia a
mis guardaespaldas, mientras mds nos
observaban'mas coqueteaba conmigo.
Vivi un amor bonito junto a Milojicon él
tlive miytodo, se suponia que escaparia junto a’
él una vez que me graduara, que nos
liberariamos de los guardaespaldas como nos
libramos la primera vez que estuve entre sus
brazos, lo pondriamos a dormir y asi podiamos
escapar, para cuando ellos despertaran nosotros
estariamos lejos. Sin embargo, todos mis planes
se vieron arruinados porque Ignacio Brown
decidid aparecer nuevamente en mi vida.
Llegé justo el dia de mi graduacién, me hizo
la entrega del diploma y volvié loca a todas las
chicas de ese instituto —;Por qué volviste? —, le
pregunté ya estando en casa.
—Porque es mi casa, voy y vengo cuandoPasado. 10/2
me da la gana—, casi no recordaba lo hermoso
que era, sus Cejas eran tan perfectas como si se
las delineara, sus ojos eran pequefio, tenfa una
nariz muy fina y puntiaguda, sus labios eran lo
que mas me gustaba, eran gruesos y se veian
muy apetitosos —;Qué tengo? —, pregunté sin
voltearme a ver. Se estaba dando cuenta que lo
estaba observando. No dije nada, solo maldeci
en mis adentros porque con la presencia de ese
hombre en esta casa me'seriacdificil de escapar,
y mi escape era esta noche, esta misma noche
me liberarfa de este encierro en el que habia
estado por ¢ince afios..Al llegar 2 casa demand6
—Cadmbiate y te espero en el despacho, hay
mucho de que hablar—, durante el mes que
estuvo aqui, no hubo dia que no discutiera con
él; hoy-no podia darme ese lujo, debia estar en
buenas con él para asf no tener problemas
cuando fuera a salir.
Subi a la habitacién y me cambié, cuando
bajé busqué a Ignacio en el despacho y ahi
estaba, no me miré al momento que ingresé,
solo me sefialé la silla y dijo.
—Ya cumpliste dieciocho ajios, ya es hora
de que nos casemos—, con lo que dijo me dejé
anonada.
— Casarnos?
—Cuando tu padre murié le prometi cuidar
de ti. También me hizo prometerle que te
convertiria en mi esposa, y mi palabra tienePasado. wr
valor, jams rompo una promesa.
—Me importa las promesas que hayas
hecho, pero yo no pienso casarme contigo, yo
tengo novio y me voy a casar con él.
—sTienes novio? ;Y quién te dijo que podias
tener novio?
—No tengo a nadie a quien pedirle permiso,
mis padres estan muertos porque ti los
asesinaste,
—Pues fijate que si debias pedirme permiso,
porque yo soy tu duefio.
—No, yo,no tengo duefio.
—Claro que lo tienes—, dice al levantarse —
Yo te gané en'una apuesta. Tu madre te habia
apostado y el hombre que te gan6 iria por ti,
pero.yo intervine, lo convenci de que jugara
conmigo, le gané y te rescaté de las garras de
ese viejo.
—Eso es mentira, mi madre no haria jamas
eso, tui estés mintiendo. No me casaré contigo,
no uniré mi vida a ti, porque te aborrezco—,
sali echando chispas de ahi, no agarré nada mas
que mi celular y sali de casa, los dos hombres
que siempre me seguian fueron tras de mi. Me
dirigi a casa de Milo, cuando llegué la puerta de
su departamento estaba abierta, ingresé y todo
ahi dentro estaba desordenado, incluso habia
rastros de sangre, lo primero que se me cruzé
fue que ese desgraciado lo asesind, que él le
quité la vida a Milo».Pasado, 12/2
Pero ahora Milo esta vivo, no se que pasé
hace dos afios atrds, ahora Milo a regresado y
necesito estar divorciada para irme con él,
porque durante estos dos afios mi vida a Sido un
infierno al lado de Ignacio Brown.Te daré el divorcio, no
Te daré el divorcio.
Por la noche, cuando bajo a la cena me
siento en el lugar de siempre, en aquel que me
senté la primera vez que llegué a esta casa. El
estd en frente de mi, con la mirada conectada a
la mfa, sus dos.manos reposan en la fina
madera, humedece sus labios y esto es
significado de que va hablar —Estuve pensando
en lo del divorcio—, me remuevo en Ia silla, el
tema que va a tocar es muy importante para mi
—Llegué a la conclusién de que no tiene
sentido seguir casado con alguien que no me
ama—, lo que dice me pone feliz, intento no
mostrar alegria para que no se sienta ofendido y
cambie de parecer —Te daré el divorcio—, una
sonrisa se dibuja en mis labios, la cual se borra
una vez que pone su condicién —Pero antes de
eso me dards un hijo, caso contrario seguiremos
viviendo en este infierno. Y debe ser por
contacto, estd descartada la inseminacién.
—jEres un desgraciado! —, sonrie y levanta
la copa en mi direccién.
—Salud por eso—, suspiro con desilusi6n —
Te estoy dando una salida. Ya cumpli con mi
promesa de cuidarte hasta que fueras una
adulta, ahora tienes veinte afios, aunque falta
dos afios para que termines la universidad, peroTe daré el divor¢ 2/10
con el estudio que tienes hasta ahora creo que
podrds defenderte en la vida. Invert? mucho
dinero en ti, fueron millones los que tuve que
pagarle a ese hombre para que te dejara libre
atin después de haberte ganado en esa apuesta,
al menos debo recuperar una parte de eso, y no
encuentro otra manera de cémo puedas
pagarme si no es, con un hijo.
—Jamas—, digo firme.
—Bueno, entonces vete despidiendo de ese
tipo, porquemovle permitiré que se acerque a ti
ni aun kilémetro ;Entendido?
—No podras separarme de él, lo amo.
—)Segura?/Mira que ya perdoné quese haya
atrevido a tocarte en el pasado, y eso fue porque
estaba lejos y atin no eras mi esposa, pero ahora
que estamos casados que no se atreva a ponerte
un dedo encima porque lo quiebro.
—No conseguirds nada con tus amenazas.
—No son amenazas, son advertencia y en
guerra avisada no muere soldado. De ahora en
adelante, dos de mis hombres te escoltaran a
cualquier parte, ellos te vigilaran hasta dentro
del bafio—, colocan la comida y empieza a
comer, yo me levanto y él me detiene —No te
he dicho que puedes irte.
—No quiero comer.
—Lo haces, sabes que no me gusta comer
solo.Te daré el divorcio, 3/10
—Me importa un carajo si no te gusta comer
solo, porque no vas y te buscas una amante con
la cual compartir y a mi me dejas en paz.
—Siéntate, y deja de amargarme la cena—,
vuelvo a sentarme, se que este tipo no me dejara
en paz hasta que termine de comer. Una vez
que lo hago, me levanto.
—Piénsalo, después de que Nazca mi hijo
podras irte, serds libre y podras estar con quién
te de la gana—, ignoro lo que diceyabandono el
comedor, llegovhasta mi habitacién, después de
colocar seguro,agarro mi celular y le marco a
Milo.
—jTado bien, amor? —, pregunta y niego,
siento que las lagrimas caen sin poder
detenerlas —sTe lastimé?
—No, pero me amenaz6 que va a lastimarte.
—NMiserable. Buscaré la forma de sacarte de
ese lugar Ana, te juro que en esta vez no me
marcharé, me quedaré a pelear por ti.
—Dijo que habia una solucién—, digo
bajando la mirada.
—sCual? —, me cuesta decirle la peticién
que me hizo Ignacio para dejarme libre.
—Quiere que le dé un hijo—, sollozo. Milo
se queda en silencio —Después de que nazca
me dejard libre—, Milo sigue en silencio
observandome fijamente tras esa pantalla —No
pienso hacerlo—, digo tras sonar la nariz.Te daré el divorcio, 4fo
—Hazlo—, dice y me deja anonada —Si
con darle un hijo obtienes tu libertad, daselo.
ilo, c6mo puedes decirme eso, yo no
podria traicionarte.
—No me sentiré traicionado, Ana Paula.
Haré de cuenta que nunca pas6. Si eso te deja
libre de ese mafioso y podemos estar juntos sin
miedo a que nos siga y nos asesine, no dudes en
hacerlo—, me quedo pensando en lo que dice y
no puedo creer que me esté pidiendo que lo
haga, que ledéun
sea él —Hermosa escucha, si no quieres hacerlo
no lo hagas, pero te hago saber que no tengo
problema si tomas la decisidn de hacerlo. De
todos modos, buscaré otra manera para liberarte
de él—, no hay otra manera de liberarme de
Ignacio, menos quiero que Milo se vea
involucrado. Ignacio dej6 claro que lo asesinarfa
si se acercaba a mi, no se ni cémo voy hacer
para verlo, si estaré vigilada por sus guaridas
durante las clases.
a otro hombre que no
Las semanas pasaron, y después de escuchar
la peticin que Ignacio me hizo las cenas se
volvieron mas incémodas. Mientras él revisaba
su mévil lo contemplaba y pensaba en si podria
meterme a su cama y hacer el sexo con él. Era
un hombre muy guapo, su cuerpo estaba en
buena forma, sentir repugnancia de estar entre
sus brazos no me daba, pero sentia que le seria
infiel al hombre de mi vida. Tampoco meTe daré el divorcio, 5/10
imaginaba pariendo un hijo y dejandolo
abandonado.
—{Qué tanto miras? —, dice sin desconectar
la mirada del movil. No sé si ese hombre tiene
ojos alrededor de su cuerpo, pero siempre que
lo observo logra cacharme —;Acaso quieres
decirme algo?
—Si, necesito que quites la vigilancia.
—No-—, dice y vuelve la mirada al movil —
Ya te dije que estaras vigilada mientras ese tipo
siga aqui,
—iY si acepto tu petici6n? sMe dejaras
verlo? —, mueve la cabeza mientras ries
—jTan poco lo amas para meterte a lacama
de otro?
—Por lo que lo amo es que estoy dispuestaja
realizar lo que me pediste. No me importa
sacrificarme con tal de estar lejos de ti y junto a
él—, enarca una ceja —Acepto el trato, acepto
darte ese hijo, pero cuando esté contigo pensaré
en él, eso que te quede claro—, quisiera que
fuera por inseminacién, pero el muy
desgraciado no quiere, ademas, tardaria mucho
mas tiempo en concretarse el embarazo. Y lo
que més quiero es largarme de aqui.
—Bien, la puerta de mi habitacién estard sin
seguro, puedes ingresar a la hora que quieras—,
se levanta y se va, antes de salir dice —No lo
verds hasta después de que te hayas
embarazado, no me arriesgaré que te revuelquesTe daré el divorcio, 6/10
con él al mismo tiempo que lo haces conmigo
—, dicho eso se va, me quedo sola y suspiro,
termino de comer y al rato subo a mi
habitaci6n, me preparo para ir a dormir, después
de hablar con Milo, que por cierto no lo he visto
desde hace semanas, para ser exactos desde que
él regres6, doy vueltas en la cama pensando en
todo lo que tengo que hacer para embarazarme.
De pronto me paro y camino hacia la puerta,
salgo de la habitaci6n y voy -hacia.la de Ignacio,
antes de tocar me arrepiento, regreso a mi cama
y me arropo de pie a cabeza. No estoy
preparada adn para traicionar a Milo,
Durante una semana no pude hacerlo, hasta
hoy que me armé de valor y tocar la puerta de
su habitacién. Mientras mas rapido lo haga, mas
prontorseré libre. La puerta se abre, Ignacia esta
sin camisa, solo una pantaloneta contiene, me
da paso para que ingrese, me quedo parada a
unos cuantos pasos de la entrada, una vez que
se cierra la puerta, él se para a mi lado, camina
hacia delante y cuando queda delante de mi
levanto la mirada y la conecto con la suya. El no
hace por acercarse y tocarme, solo me mira
fijamente, creo que espera que yo haga todo el
trabajo, total, soy yo la que muere por ser libre y
de eso se aprovecha. Cierro mis ojos e inhalo
profundo, seguido doy un paso al frente, abro
los ojos cuando estoy frente a él, me pongo de
puntillas para poder acercar mi rostro al suyo,Te daré el divorcio, 7H0
siento sus fosas nasales expulsar aire que recorre
mi rostro. Desconecto la mirada de sus ojos y la
bajo a esos labios, muerdo el mio y procedo a
rozarlos con los suyos. El sigue parado como
una estatua, ni siquiera mueve los labios. Me
alejo un poco para mirarlo, sonrie de medio
lado, seguido pasa su mano por mi cintura y con
fuerza me acerca a él, poso mis manos en su
pecho, trago grueso ante el calor de su cuerpo.
Al segundo siguiente su boca-ataca.a la mia
formando un beso férvide, siento su lengua
invadir mi boca, respiro el mismo aire,que
expulsa. Ignacio. me eleva un poco dejandome
los pies en el aire. El beso se intensifica hasta
que mi cuerpo se calienta, cuando me estoy
quedando sin aliento me suelta y se aleja,
respiro.aceleradamente, me quedo mirdndole a)
los ojos, de pronto vuelvo a besarlo, emestavez
soy yo la que devora su boca. Las manos de
Ignacio se posan en mis nalgas, desde ahi me
afirma, al segundo siguiente las rueda hacia
adelante y las sube hasta mis senos, aprieta este
y siento como mi Panti se moja. E! dedo pulgar
juega con mi pezon, jadeo ante ese roce.
Ignacio suelta mi seno y empieza a sacar mi
blusa, cuando la saca cubro mis senos con
ambas manos, él me mira con lujuria, lleva su
mano a mis brazos y los quita de ahi, lame sus
labios y no quita la mirada de mis senos, se va
acercando sigilosamente, posa sus manos en mis
caderas, ante ese contacto mi cuerpo enteroTe daré el divorcio, 8/10
se tensa, muerdo mi labio al momento que sus
dedos trazan lineas por mi curvada cintura, al
subir por las costillas las rueda hacia adelante,
con ambas manos cubre mis senos, vuelvo a
morder mi labio y cierro los ojos al mismo
tiempo lanzo mi cabeza hacia atras. El acerca
sus labios a mi cuello y acaricia con demencia,
sube hasta mi oreja y susurra —Después de que
te tome olvidards su nombre, olvidards que
existe, tu interior se humedeceraé pensando en
mi, cada noche desearas ser mia, y cada vez
que te coja gritaras mi nombre. No tendras
tiempo ni depensarlo—, muerde mi oreja,
jadeo al sentir su himeda lengua dentro de esta.
Entierra sus’dedos enmis cabellos y me besa
con demencia, mete su pierna en medio de las
mias;hace un giro y me deja:de espaldas ala
cama, besdndolo camino hacia atrés yeuando
mis talones chocan con la cama me lanza en
ella, de forma rdpida rueda mis shorts de
pijamas dejando mi cuerpo desnudo por
completo, sin perder tiempo abre mis piernas y
se clava en mi humedad —jOh! —, muerdo la
lengua para no soltar palabras. Ignacio embrolla
sus brazos en mis muslos, desde ahi me arrastra
mas al filo de la cama, abre mis pliegues y pasa
su mojada lengua por mi centro —jOh, oh!
jNo... no... pares! —, pido al momento que
presiono sus cabellos y lo afirmo mis. Ignacio
muerde y chupa, cuando los espasmos me ataca
levanto mis caderas y choco mi humedad conTe daré el divorcio, 9/10
su Cara, se aleja para mirarme, veo como
saborea y masculle.
—jExquisita! —. Tras regarme en su boca
sube besando mi abdomen, llega a mis senos,
aprieta uno y chupa del otro. Al momento que
su lengua hace contacto con mi pezén se
humedece mas mi entrepierna. Mis manos que
reposaban en su cabeza las ruedo por su
espalda, voy dejando una linea en ella, llegan
hasta sus caderas y ahf las clavowignacio se
desprende demi seno ysube hasta mi boca, se
come mis labios con ansias. Mis manos las
ruedo por su tonificado pecho;ruedan hasta su
abdomen y la introduzco en el interior de la
pantaloneta, agarro sum*****o el cual esta tan
duro y caliente, es grueso y grande, tal cual lo
imaginaba, al tenerlo en mi mano lo aprieto,
grufie con mi toque, suelto:su falo y ruedo su
pantaloneta. Una vez desnudo se acomoda
entre mis piernas, agarra su m*****0 y lo
restriega en mi humedad. Mordiendo mi labio
llevo mis manos a su cabeza, la bajo hasta mi y
lo beso, muero por tener su m*****o dentro,
anhelo sentirlo abriendo las paredes de mi
v****a. Suelto sus labios y acaricio su cuello,
lego hasta su ofdo y musito —jLo quiero
dentro! —, Ignacio lo rueda hasta el centro, se
empuja apenas y grito.
—Vuélvelo a pedir—, dice mirandome
fijamente. Muerdo mis labios al mismo tiempoTe daré el divorcio, 10/10
que muevo mis caderas y me rehtiso a
volvérselo a pedir. Ignacio se prende de mis
senos, chupa y muerde del pez6n, mientras
tanto su dedo se resbala en mi humedad —jOh,
por favor Ignacio, lo quiero ya! —, chupa con
mas vigor mi seno, se acomoda en el centro de
mis piernas y procede a hundirse lentamente.
Abro la boca y concentro toda mi atencién en la
entrada de su m*****0, se que atin no entra
todo, suplico que entre por completo, al hacerlo
clavo mis ufias en su espalda. Lo que viene
después son embestidas vigorosas cargadas de
placer, me toma.con tanta fuerza que mi
delgado cuerpo se remece a su ritmo.
Ignacio me besa, muerde mi cuello, baja a
mis senos, chupa de ellos, me da la vuelta,
Vilélvea,embestirme, azota mis nalgas, muerde
mi espalda, jala de mis cabellos y raspa’con’sus
cortas ufias mis hombros y caderas, de cualquier
parte donde se sostenga. Perdi la cuenta de las
tantas veces que alcancé el climax. La ultima
posicién en la que me pone es en cuatro, me da
tan duro que hace batir mis rifiones y chocar mi
cabeza con la espalda de la cama. Cuando se va
regar asienta sus manos en mis caderas, se
empuja con gran fuerza y se detiene, gimotea
con la respiraci6n acelerada. Y asi termina mi
primer encuentro con mi esposo.Pasado, parte dos. ve
Pasado, parte dos.
—jiTe vas? —, pregunto al verla levantarse,
sube su short, agarra su blusa y me mira.
—j;Qué creias? ;Qué me quedaria a dormir
contigo? —, sonrie —Recuerda que, si pasd esto
es porque quieroomi-libertad para estar con el
amor de mi vida—, aprieto mis dientes y desed
pararme para volver a tomarla, pero no, no haré
eso, dejaré que sola me busque —No te
confundas Ignacio. Sime acosté contigo fue
porque me viobligada hacerlo, no porque exista
una atraccién. Aqui—, seiiala entre sus pechos
—Jamds podrds ingresar porque hay otro
hombre, y se llama Milo—, dicho eso se.va.
Una vez que la puerta se cierra coloco las
manos debajo de la cabeza y sonrio.
“Amanecerd y veremos Ana Paula”.
Saltando un suspiro cierro los ojos y me
pierdo en el recuerdo «Mancini, estas
atrapado—, seguf sus pasos como perro Beagle,
lo encontré en la cima de una quebrada, el hijo
lanzarse antes que caer en mis
—Brown, no te daré el placer de matarme,
no te lo daré. No eres tan inteligente para
encontrarme por tus propios medios, si hoy estas
frente a mi, es porque la perra esa me vendid,Pasado, parte dos. 28
pero si sobrevivo, si logro sobrevivir, tu y esa
puta pagardn.
—No sobrevivirds, juro que no te dejaré
vivo. Hoy serd el dia de tu muerte, asf cobraré
las vidas que te has Ilevado por delante maldito
infeliz—, Mancini solt6 una carcajada y se
lanzé por aquella quebrada, ese infeliz tenia el
valor para tirarse de tan alto y creer que todo iba
a salir bien.
—Tenia’paracafdas sefior. Elescapara.
—Nodovhara—, me preparé para lanzarme.
Fui tras de él, no podia dejar que esa escoria
humana escapara, tenia que matarlo ahora, si no
lo hacia, la vida de esos nifios estaba enpeligro,
y no podria cumplir con la promesa que le hice
a Paulette. Fl lugar era muy estrecho, al parecer
el paracaidas de Mancini estaba colgado de
algunas ramas, él ya no estaba, se habia
lanzado, y creo que la altura le debié romper
algunos huesos a lo que cay6. Eso me dio
ventaja para alcanzarlo, no estaba muy lejos, se
arrastraba como una rata moribunda, caminé
detrds de él, cuando estaba muy cerca me
dispard, me cubri detras de las grandes rocas
para que no me hiriera, cuando las balas se le
acabaron me acerqué, y con mi pie lo detuve
posdndolo sobre una de sus piernas —Ya no
tienes escapatoria, estds en mis manos, td fin ha
legado—, apunté su cabeza, él reia como un
maniatico.Pasado, parte dos. 3/8
—Crees que con matarme se acabard—, le
solté la pierna, ya mis hombres le habian
revisado por si tenia alguna otra arma —£I no
descansara hasta verte muerto— jEI? ;Cual él?
éDe quién me estaba hablando?
—;De quién hablas?
—Vas a matarme Brown, jhazlo ahora! —,
iba torturarlo, acabarlo lentamente como se lo
merecia.
—Si te mataré, pero no sera tan facil—, me
incliné y leagarré del cabello y desde ahi lo
sostuve —No te mataré con un disparo en la
cabeza, eso seria una muerte facil para ti, y td te
mereces la peor de las muertes, y seré ya. quien
te la de Mancini—, con la cacha del arma lo
golpee dejandolo inconsciente. Junta a mis
hombres losaqué de ahi, un helicéptero
esperaba por nosotros, subimos en él y nos
refundimos en la selva, llegando al lugar donde
tenia todo preparado para acabar con Mancini,
lo colgamos de las manos. Cuando despert6 me
paré delante de él —Me vas a decir ahora
mismo a que te referias cuando decias que con
tu muerte no acabara.
—No te lo diré, no conocerds el nombre de
la persona que quiere verte destruido.
—Veremos si no lo dices—, basté mi sefial
para que los muchachos empezaran a torturarlo
—Suficiente—, dije, me acerqué y le agarré el
rostro —La carga eléctrica no le sacaré nada aPasado, parte dos. 48
este hijo de puta—. Saqué la navaja y la puse en
su cuello, la rodé por su pecho que estaba
morado por las descargas, lo detuve ahi y
mirandole a los ojos pedi —;Nombre? —, no
dijo nada, por ello rodé la navaja y tracé un
corte desde la divisién del pecho hasta el
ombligo —Sobre esa linea pasaré la navaja cada
vez que te pregunte por su nombre y no lo
digas. Asi sera hasta que abra tu maldito pecho y
arranque tu,Coraz6n conmis propias manos—,
respiraba con agitacién, podia sentir el temor en
su mirada, pero también la valentfa que se
cargaba. FuelUna y Otra vez que pasé la navaja
por la linea que habia trazado, estabaapunto de
abrirlo cuando susurré.
—Ai... Airto Smith—, ese hijo dejperra —Va
asésinara.tu familia, va a destruirte y apoderarse
del cartel. Ya no son un bando, son dos=,
Kemal tosi6, la sangre que salfa de su pecho era
en gran cantidad. La muerte le estaba Ilegando,
ya podfa ver la palidez de su piel. Iba a morir, y
era eso lo que yo queria, que muriera porque
solo muerto Eduany Mancini tendria paz—. Ya
habia conseguido el nombre de la persona que
queria acabarme, ya no perderfa mas tiempo
ahi, debia salir de ese pais lo mas pronto
posible. Con un movimiento de cabeza les
indiqué a mis hombres para que terminaran a
Kemal —Espera—, dijo débil. Me detuve y me
acerqué a él, le agarré del cabello y le levanté la
cabeza.Pasado, parte dos. 5/8
—jMe hablas? —, asintid.
—Salva a mi hija. Solo es una nifia—, sonref.
—iMe estas encargando a tu hija? ;Acaso
tengo la cara de nifiera?
—Si cuidas de ella te daré la informacién
que necesitas para llegar a él y cual son sus
planes.
—Ya me los dijiste. Va a matar a mi familia,
y mientras mas.tiempo pierda aqui mas peligro
corren ellos.
—Si,,pero me habia encargado a mi de ese
trabajo.
lograba encontrar a tu familia y me
quedaba con la fortuna de mi padre, ocuparia tu
lugar.
—3O sea que ya me habian buscado
remplazo? —, volvié a toser —Infeliz. Donde
esta esa informacion?
—Primero promete que cuidards de Ana
Paula. Una vez que obtengas los archivos, Airto
ird por ella.
—jjlncrefble!! Kemal Mancini tiene corazén.
—Es mi sangre, yo la concebi. Es mi Gnica
semilla.
—Quizas deba morir ahora que es
indefensa, pueda que si crece sea un peligro
para los Mancini.
—lla no sabe de la existencia de mi
hermano, su Gnica familia es su madre, y yo.
Era importante para mi obtener esaPasado, parte dos. 68
informacién, porque asf sabia a qué me atenia.
Ya conocia al enemigo, habia hablado y
realizado varios trabajos con él. Se suponia que
debiamos ser mano derecha uno del otro, yo
quedé en frente y él, al ser el hijo de Alfonso
Smith seria mi mano derecha. Pero no nos
pudimos comprender cuando decidi acabar con
el trafico de mujeres y nifio, ese trabajo me
repugnaba. Destruf esa organizacién, yo mismo
envié a los lideres a prisiénsY desde entonces
Airto y yo nunca pudimos entendernos.
—Dime una cosa ;Fue ese miserable que te
envié asesinar ami tiaAurora?;—Kemal asintio.
—Vengé la muerte de su padre con la
muerte de tu tia. Aun esta tras los pasos de tu tio
Liam, y no descansard hasta acabar con él.
—Quiero toda la informacién que tengas—
le sostengo Ia cabeza porque esta a punto de
irse, sus ojos ya se estan revirando —Esctichame
—, le palmo la mejilla —Si me dices dénde
estan los archivos no solo cuidaré a tu hija hasta
que sea mayor de edad, si no que la convertiré
en mi esposa y la duefia de todo el cartel, tu hija
podra gozar de lo que té no pudiste.
—jLo prometes?
—Te doy mi palabra que asi sera».
La llamada entrante me saca del recuerdo —
sQué pas6? —, pregunto mientras camino al
bafio.
—Hay un problema. Su prima esta detenida.Pasado, parte dos. 718
—jMierda! Evita a toda costa que le tomen
las huellas, que no de nombres ni nada. Jandry,
que no de su nombre hasta que yo llegue.
—Esta bien sefior—, cierro la llamada y me
visto de prisa, preparo el arma y la guardo en el
lugar de siempre, bajo a toda prisa y de la
misma forma salgo.
—A la comisaria central—, tres autos me
siguen. Dentro de unos minutos lego,
sigilosamente me acerco a Jandry, nos paramos
de lado y dices
—Logré que la liberaran, en un momento la
sacaran, es mejor que espere en el coche, su
rostro puede quedar gravado en las cémaras—,
aunque estoy bien camuflado hago lo que me
piden. Me adentro al coche y espero que salga
Alina, unajvez que ingresa al coche golpeo el
vidrio para que encienda el auto.
— Donde sefior?
—A un hotel—, Alina sonrie.
—sVamos a un hotel? sPor qué cofio no me
llevas a tu casa?
—jEres una irresponsable! Como fuiste a
meterte en problemas.
—Soy joven, quiero divertirme como
cualquier mujer a mi edad.
—Los Brown no podemos divertirnos mas
all4 de nuestra zona, eso lo sabes. Ali, debes
comportarte, ya madura.Pasado, parte dos. 38
— Cuando volviste? Todos estan
preocupados por ti. Debia buscar la forma de
saber de ti, crefamos que algo te habia pasado.
iMaldicién, Ignacio! No llamas no dices nada.
Llevas casi dos afios sin ir a casa.
—Hiciste todo esto para llegar a mi.
—Si, era la Ginica forma de verte.
—Eres una estpida, cémo fue que pusiste tu
vida en peligro. jSabes lo que hubiera pasado si
tomaban tus huellas? ;Tan solo pensaste lo que
te pasaria si llegaban a descubrir quien eras en
verdad? jNo! jNo tienes ni puta idea! Pero yo te
voy a decir lo que estaria pasando en este
momento. Fllos, los que nos siguen te tendrian
en sus manos, ahora mismo estarfas siendo
torturada. No vuelvas hacer esto Alina, promete
que no volverds a cometer esta locura.
—Si vuelves a desaparecer, lo vuelvo hacer.
—jCarajo, que terca!