Las personas estúpidas culpan a otros de sus propios
errores. Una persona inteligente, profesional y genuina
nunca culparía a alguien por sus propios errores. Una persona verdaderamente inteligente es aquella que es responsable y se toma sus errores en serio. Las personas estúpidas, por otro lado, no son capaces de asumir la culpa de sus errores. Idiota es una persona engreída sin fundamento para ello y con poca inteligencia e incómoda con sus palabras o acciones.