LOS TRES DESEOS Laura Junowic2 E el sétano de su casa, Zaira encontrd una vieja lampara, de esas que se utiliza~ ban mucho tiempo atras para iluminar. Como estaba sucia, la froté para limpiarla, sin ima- ginar que pasaria lo que pasé: de la lmpara sali un espeso humo de colores y, luego, un genio de turbante, barba y bigotes. —iTe cumpliré tres deseos! —anuncié el genio, y Zaira le pidié lo primero que se le ocurrié: —iQuiero ser rica! —dijo, entusiasmada. —iDeseo concedido! —sentencié el go- nio con los brazos cruzados, y la habitaci6n se volvié a llenar de humo de colores, ‘Cuando la nube se esfumé, Zaira miré al- rededor pero no encontré ni oro, ni joyas, ni ninguna riqueza. Sin embargo, se sen- tia un poco extrafia. Se miré al espejo: su cuerpo ya no era de came y hueso, jsino de comida!: los brazos, de chocolate; las piernas, de queso; el pelo, de fideos. —jQué me has hecho? —le pregunt6 desesperada al genio, que se agarraba la panza y reia a carcajadas. —Solo cumpli tu deseo. Eres tan rica jque cualquiera querria comerte! —le respondio al genio entre risas—. Ahora, te quedan dos deseos, muchacha. Zaira volvié a mirarse al espejo. Se veia tan horrible, tan transformada, que solo se le ocurria una cosa. Entonces, pidid: —Quiero ser 2 mas bella del reino. —iDeseo concedido! —volvié a senten- ciar el genio con los brazos cruzados. Cuando el humo de colores se disolvid, Zaira se mird rapido al espejo: jseguia exactamente igual!, con el cuerpo hecho de alimentos. El genio se refa a mas no poder. —iDije que queria ser la mas bella, no la #RomeroCuentero més fea! —reclamé Zaira, —Muchacha, en un reino de sapos, crée- me, eres la més bella. Zaira miré por la ventana y comprobé lo que decia el genio: afuera ya no habia pers sonas, jtodos eran sapos! —Ahora solo te queda un deseo —dijo el genio con tono burlén. —Pensé que los genios eran buenos, pero estaba equivocada: eres muy malva- do —dijo Zaira, y al genio le cambid la cara. —No soy malvado... —respandié con tono tristén—. Llevo muchos afios espe- rando que alguien encuentre la limpara, ¥ alli adentro estoy tan solo y aburrido... —Entonces ya tengo mi tercer deseo: jdeseo que ya no seas el genio de la lam- paral —exclamé la muchacha, y el humo de colores no solo inundé la habitacion, también el reino entero. Cuando se eva- Pord, Zaira era otra vez de carne y hueso. Afuera, ya no habia sapos, sino humanos. Y al lado de la muchacha, parade, un sefior de turbante y bigotes. El genio se habia convertido én hombre y, con él, su magia se habia disuelto. As{co- nocié la amistad, sin engafios ni trampes. ¥ tuvo verdaderos amigos, como Zaira.EL ARBOL DE LIBROS Marco Manazzone ‘sé tiene un drbol especial en el fondo de la casa. Los arboles comunes tienen hojas, que salen de las ramas, Pero el ar bol de José tiene hojas... jde libros! Si, de las ramas brotan libros, y no hojas verdes y gruesas, como en un olmo, u hojas finitas, como en un pino. Es un drbol que en vez de dar flores 0 frutos, da libros, aunque pa- rezca raro. Por eso, muchos chicos del barrio lo visi- tan. José los deja paser y ellos, con una es- calerita, descuelgan un libro y se lo llevan para leer en la casa. José les pone una tni- ca condicién: que se lleven y lean el libro que les toca, sin quejas ni devoluciones. Porque todos los libros son divertidos si se los lee con ganas. Lo que nadie en el barrio sabe es cémo logré José tener ese arbol. Es un secreto. Resulta que, hace ajios, José estaba leyendo en el fondo de su casa, en una reposera, y se habia llevado dos libros. De pronto se nublé y empezé a llover, por lo que él salié corriendo con el libro que estaba leyendo... iy se olvidé el otro en el pasto! Ese dia llovid muchi. simo, y siguié lloviendo al dia siguiente, y al otro dia. Cuando al fin paré de llover, José fue a rescatar el pobre libro que habia dejado a la intemperie, pero no lo encon- tré: solo vio un aqujero en el suelo, como si el libro se hubiera hundido. José se sintio muy mal por haberse olvidado el libro en medio del aguacero, y se prometié no ha- cer nunca mas una cosa asi. Lo cierto es que tiempo después, alli mis- mo, en ese agujero, germind un brote ver de. Asombrado, José lo empezd a reger todos los dias, 2 ver qué planta era. Y final- mente, era el 4rbol... que en vez de hojas, flores 6 frutos, jtiene libros! Ahora, cada vez que esté por largerse a llover, José va corriendo al fondo de su casa y arranca del érbol los libros que cuel- gan, para que no se mojen. Y se los da a los primeros que lo vienen a visitar al dia siguiente. Y a los que llegan més tarde, los deja pasar y les da la escalera para que se agarren uno, porque seguro que del drbol ya brotaron libros nuevos. #RomeroCuenteroEcucativas.com Mi nombre es: EL ALUMNO MISTERIOSO Era una tarde fria, acosada por la brisa y las grandes gotas de agua que arrojaba el cielo y chi estaba Nito, sentado sobre una piedra, tratando de memorizar los numeros de la pizarra a través de la ventana. Cada vez que lo observaban, muchos de los nifios se preguntaban que hacia ahi sentade, pero nadie se preguntaba adénde iba después de que terminaran las clases. Pasaban las semanas y Nito no se despegaba de los cristales. Los prefesores continuaban con su clase y simplemente lo observaban de vez en cuando, a lo que el pequefio contestaba sonriendo, pues a pesar de todo era feliz. Cuando los nifios salian al descanso, Nito deseaba poder correr con los demas, pero era imposible desde el otro lado de la verja del colegio. Ademas habia un inconveniente, los nifios nunca hubieran querido acercarse a alguien como Nito, un pequefio con los zapatos viejos y los pantalones remendados. La tarde del seis de abril, Lucia, la profesora de geografia, escribié en la pizarra una pregunta pero nadie respondia. Nito trataba de hablar a través de la ventana pero no le prestaban atencién. Continud insistiendo hasta que la profesora abrié laEI! gato con botas Un dia, el gato se enteré que el rey iba a salir de paseo con su hija y urdié un plan. Le pidié a su amo que se metiera al rio a nadar y que él haria el resto. Cuando la carroza del rey pasé cerca del rio, el gato empezéa gritar: “IEI marqués de Carabas se ahogal iAyuda, ayuda!” El rey, que escuché al goto, pidié a sus guardias que lo salvaran. El animal se acercé al rey para contarle que mientras nadaba, unos ladrones se habian llevado la ropa del marqués. Al escuchar que se trataba del marqués de Carabas, aquel que le habia mandado conejos y demas animales cazados, el rey, para agradecer los regalos, mandé que le trajeran finos trajes a este marqués. Con tales trajes, el hijo del molinero parecia todo un noble y la princesa al verlo asi, se enamoré de él. El gato tramé un par de ocurrencias mas para hacer parecer que su amo era muy rico. El rey cayé en su trampay le dio la mano de su hija. El hijo del molinero se casé con la princesa, fue muy feliz Y nunca mas volvié a ser pobre gracias a la astucia de este peculiar gato, que también vivid con todas comodidades el resto de sus vidas, porque los gatos tienen siete vidasCo oe Vor ore or hr oc na om nr ir a Ecucativas.com Mi nombre es: EL NUEVO AMIGO Erase un crudo dia de invierno. Caia la nieve, soplaba el viento y Belinda jugaba con unos enanitos en el bosque. De pronto se escucho un largo aullide. éQue es eso? Pregunto la nifia . Es el lobo hambriento. No debes salir porque te devoraria le explico el enano sabio. Al dia siguiente volvié a escucharse el aullido del lobo y Belinda, apenada, pensé que todos eran injustos con la fiera. En un descuide de los enanos, salié, de la casita y dejo sobre la nieve un cesto de comida. Al dia siguiente ceso de nevar y se calmo el viento. Salié la muchacha a dar un paseo y vio acercarse a un cordero blanco, precioso. (Hola, hola! Dijo la nifia. GQuieres venir conmigo? Entonces el cordero salto sobre Belinda y el lobo, oculto se lanzo sobre el, alcanzdndole una dentellada La astuta y maligna madrastra, perdié la piel del animal con que se habia disfrazado y escapo lanzando espantosos gritos de dolor y miedo. Solo entonces el lobo se volvié al monte y Belinda sintid su corazén estremecido, de gozo, mas que por haberse salvado, por haber ganado un amigo. http://www.imageneseducativas.com/Educati.as.com Mi nombre es: LA BRUJA PELUJA Habia una vez un princesa delicada y exquisita a la que le gustaba tenerlo todo muy limpio y ordenado. Pero la princesa tenia un gran defecto: tenia muy mal humor. Cada vez que alguien hacia algo que no le gustaba a ella o que le llevaba la contraria, la princesa gritaba y se ponia hecha una furia. Un dia Ilegé al palacio el hada madrina de la princesa, que llevaba afios fuera, atendiendo a sus otras chiadas. La princesa, al verla, se puso muy contenta, y empez6 a pedir deseos. Pero el hada madrina le dijo: -No estoy aqui para cumplir tus deseos, princesa, sino para ensefiarte cosas importantes que debes saber. Tu madre me ha encomendado tu educacién durante el préximo afio. La princesa se puso roja como un tomate de la ira y empezé a gritar y a tirar cosas. -INo eres un hada, eres una bruja! -le decia-. éPara qué quiero yo aprender nada, si soy una princesa? iTodo el mundo hace lo que yo le pido! -Lo primero que voy a ensefiarte es a controlar esa ira -dijo el hada madrina-. Podemos hacerlo por las buenas o por las malas. http://www.imageneseducativas.com/