JUEVES SANTO: “Última Cena”

Una noche después de caminar tanto Jesús se reunió a cenar con

sus 12 discípulos, él sabía que era la última vez que cenaba con sus
amigos, era la Última Cena por eso hizo algo muy especial.
Los discípulos ingresaron muy cansados después de una caminata
larga que tuvieron en el día y descansaron sus pies.

Recuerden que en ésta época cuando los invitados llegaban a una

casa se les ofrecía lavar los pies para que estuvieran purificados,
sin embargo, esa labor lo realizaba el siervo de la casa, Jesús tomó
el lugar del siervo y con una batea de agua lavó los pies de sus
propios discípulos.

Lavó los pies de Pedro, Andrés, Santiago, Juan, Felipe, Bartolomé,

Tomás, Mateo, Simón, Judas Tadeo, Judas Iscariote y Santiago
hijo de Alfeo.

Después de un momento todos se reunieron en la mesa en la cual

Jesús tomó el pan, lo levantó y dió gracias a Dios por él. Éste es
mi cuerpo que será entregado por vosotros, lo partió y lo entregó
a sus discípulos diciéndoles: Recuérdenme cuando coman esto, este
es mi cuerpo entregado por ustedes.

Entonces Jesús tomó la copa y dió gracias a Dios por ello y les dijo:
“Todos beban de esta copa, esta es mi sangre derramada para que
sus pecados sean perdonados”, desde entonces cada vez que el
sacerdote emite las mismas palabras de Jesús durante la misa
convierte el pan y el vino en el cuerpo y la sangre de Jesús.

Cuando terminaron de comer Jesús y sus discípulos se retiraron

contentos.