Querida princesa,

Nueva York, 13 de septiembre de 2008

Hoy te he visto en la cafetería a la que siempre íbamos. Estabas con un amigo nuestro, Gabi. Me
alegro de que estuvieras contento y feliz, me gusta verte así.

Todas las noches lloro pensando en ti, te extraño, no puedo dormir, pienso en ti todas las noches, y
cuando duermo sueño con nosotros juntos.

Necesito verte y tenerte, ¿qué puedo hacer para eso?

No puedo prometer darte una vida perfecta, pero prometo hacerte feliz mientras estemos juntos,
porque nuestro amor es hermoso así, con nuestras imperfecciones.

No es que quiera perderte de nuevo, no quiero sentir miedo por las noches porque estés con otra
persona, tu no eres perfecto, no por ti somos muy diferentes y eso hace que nuestra relación sea
más bonita, tengo muchas incertidumbres, pero una cosa sé, te quiero.

Ass. Noah