Está en la página 1de 3
CAPITULO 6 Prestarle atencién Hay una enorme diferencia en cémo se siente Benjamin al hablar , cuando os habla, vosotros le escuchiis y ests interesados en lo que ice. Los padres deberfan ser esa clase de personas con las que sus ios disfrutan hablando. Pero, cuando el teléfono suena, el bebé grita o lora, el gato esté araftando la tapicerfa y Benjamin esta ti faldas de su madre diciendo: “Mami, mami, mami”, e6mo vamos a ventiva de prestar atencién ? Fundamentalmente nuestra tarea consiste en escuchar a Benjamin, pero al mismo tiempo debemos reconocer que no es posible escuchar cuidadosamente y todo el tiempo a un nifio palabrero, Cuando hablamos queremos que la persona a la que hablamos escuche lo que estamos diciendo. Si lo que decimos es algo com do 0 dificil de explicar, nos ayuda el estar seguros de que el oyen esperaré y que no haré més dificil lo que ya de por st es diffi. Si ‘atencién del oyente divaga, nos damos cuenta de que lo que decimos apremiado u obstaculizado, atencién perdida a medio c, 61 ir y escuchar ‘ir noes lo mismo que escuchar. Cuando oftnas cantar alos pj ros 0 jugar a los nifos o entrar un tren en la estacin, sabemes lo que ces pasando, ofmos Jo que esti sucediendo sin que prestemos aten: cién: ofmes, pero no escuchamos. Cuando Benjamin habla, es féc puede incluso ser un hébito, que le oigamos pasivamente pero sin esc char activamente lo que dice. Tal vez quiere contar a su madre algo de lo que ha sido testigo, mientras ells ve la television y le presia poca pero ella no responde aunque se “Ahora gqué te pasa”. En uno y otro caso, Benjamin sentir’ que tenia algo imporante que contar a su madre, pero que ella no estaba intere- sada, Ese desaie favoreceré poco a su autoestima y mvcho menos a sa precisamente, cuando su madre tiene que concentrase en algun cosa, etc. Con frecuencia escuchamos lo sufciente para oir © medio oir lo que nos di tras seguimos con To que estamos haciendo; 0 quiz4 dejamos lo que hacemos pero nos sentimos c En ecasiones, podemos estar tan absortos en. nuest mientos que s6lo nos damos cuenta cvando el que h © podemos incluso deliberadamente desconectar ni {que el que habla se pare, para poder seeui ‘Cuando Benjamin habla nos esté diciendo algo que quiere que enters palabras para enviarnos sw mensaje, pero también para transmitimos sus pensamie comprendamos el Sgr ‘Cuando nos eventa qu Perdido su petota ayudarle a enc: a | | pidiendo que lo beses y lo pongas, weno, Las Hubo un tiempo en que todos nosotros hemos sido Benjamin tirando desesperadamente de la falda de su madre, tratando de lamar sv aten- cin, Si ella no se la presta, diré eventualmente algo, lo ms probable tartamudeando, por su completa frustracién. Los padres piensan fitay tartamudea como tan duro para ganars I ‘consiga, pues ‘de eso. Si puede obtener la atencién ro se le puede reprochar el uso de 0 tartamudeo, y no habria que ponerle en situacin de necesitarusarlo para conseguir su propésito. Es perfectamente posible y natural que se pponga a tatamudear si sabe que es el nico cemino para que sus padres ‘escuchen lo que desea decir. Cuando poner en practica Ia terapia ya no estan acertado (Otros padres dicen que escuchar a Benjamin no presenta proble- ‘ma, que disfrotan escuchndole y hablando con él, y ereen que casi siempre escuchan atentamente y responden ad

También podría gustarte