teria sane?
roy). Degas estaba encantado con la precisin y la exactiud de ss
dibujo y con la firmeza de su mano. Quiaé los criticos twieron,
alguna esperanza puesta en que, con Degas, elarte de los maestros
antiguos pudiera unirse con éxito al de la vanguard,
CCabe decir que eso era precisamente lo que pretendia Degas. Se
‘consideraba asi mismo como un pintor realist yrechazabs el calc
ficativo de simpresionista, aunque participara activamente en la
‘exposici6n inaugural de 1874 y contribuyera con sus obras a las
sete restates celebradas durante los doce aos posterioes, Aunque
no sea correcto inclur a Degas entee Ios impresionistas con todas
las letras, como Monet, Renoir 0 Pissarro, muchos de sus procedi-
mientos evocan los de sus colegas sus temasson moderes,urbanes,
, Estaba listo. Vincent puso en prictica la téenica impresionis-
ta de la pincelada répida, tivo sus primeros escarceos con el
{mpasto—una técnica en la que la pintura se aplica bastante espe-
sten el lienzo, con determinacién, de modo que produce un