personas a las que querer… Mi gran amigo Alvin, sigue recibiendo de mi, mis más profundas condolencias por la enorme pérdida de tu venerable abuela Lilian…. Estamos profundamente entristecidos y seguimos unidos a ti en un cálido abrazo. Mi amigo y hermano, la vida se asemeja a un viaje en tren. Con sus estaciones y cambios de vía, algunos accidentes, sorpresas agradables en algunos casos, y profundas tristezas en otros. Al nacer, nos subimos al tren y nos encontramos los seres amados, creemos que siempre viajarán a nuestro lado. Pero en alguna estación ellos se bajarán dejándonos seguir el viaje, de pronto nos encontraremos sin su compañía y su amor irreemplazable...
El viaje continúa, lleno de desafíos, sueños, fantasías, tristezas,
alegrías, esperas y despedidas... El gran misterio para todos, es que no sabremos jamás en qué estación nos toca bajar. Como tampoco dónde bajarán nuestros compañeros de viaje, ni siquiera el que está sentado a nuestro lado. A veces pienso en el momento en el que me toque bajar del tren. ¿Sentiré nostalgia, temor, alegría, angustia...? Separarme de los amigos que hice en el viaje, será doloroso y dejar que mis hijos sigan solos, será muy triste. Pero me aferro a la esperanza de que en algún momento, tendré la gran emoción de verlos llegar a la estación principal con un equipaje que no tenían cuando iniciaron su viaje. Lo que me hará feliz, será pensar que colaboré para que ellos crecieran y permanecieran en este tren hasta la estación nal. Mi gran amigo Alvin, hagamos que nuestro viaje en este tren siga teniendo signi cado, que siga valiendo la pena. fi fi Sigamos viviendo de manera que cuando llegue el momento de desembarcar, nuestro asiento vacío, continúe dejando lindos recuerdos a los que continúan viajando en el Tren de la Vida. No obstante, muchas otras personas que nos serán muy especiales y signi cativas, nos acompañarán... Nuestros hijos, nietos y demás seres queridos estarán con nosotros...
Mi muy querido amigo Alvin, cumple con tu deber de llorar la
muerte de tu venerable Lilin. Pero has de recordar que nuestros antepasados perdieron a sus padres también. ¿quién con ó en el Señor y se arrepintió de haberlo hecho? ¿Quién perseveró en su temor y fue abandonado? ¿Quién lo llamó y no fue escuchado? En el momento de la adversidad será un punto a tu favor, y tus adversidades se derretirán como hielo al sol. Luego del velorio, consuélate de tu tristeza. Porque la tristeza lleva a la muerte, y la pena interior consume las energías. Porque de la tristeza viene la muerte, y la tristeza del corazón consume el vigor. Que la tristeza se acabe: no puedes vivir siempre a igido. Después del funeral, que pase la pena; pues una vida de a icción es dañosa para el corazón. ¡No abandones tu corazón a la tristeza, échala y piensa en tu propio n! No des tu corazón a la tristeza, apártala recordando tu último n. No lo olvides: es sin vuelta. Tu te perjudicarías y no le harías ningún bien. No olvides que no hay retorno; que al muerto no le aprovecha, y tú te haces daño. El viaje continúa, lleno de desafíos, sueños, fantasías, alegrías, tristezas, esperas y despedidas... Consuélate… Dios te bendiga… te quiero… fi fi fi fl fl fi