Está en la página 1de 12
Ro dulog Alicla Lo Giddlee:Psicoanalista. Responsable del rea terapéutca y Directra del onto de Atoncisn pore Derecho ala Ientidad de Abuelas de Plaza de Mayo. Po fesora adjunta, Facultad de Psicologia, UB. “Maria Cristina Olivares: Psicoanalista,Itegrante del equipo terapéutico del Centro tencidn por et Derecho a ta Kentidad de Abuelas de Plaza de Mayo, Dacente de grado y posgrado, Facultad de Psicologia, UBA Centro de Atencién por el Derecho a la Identidad Equipo Terapéutico: Alicia Lo Giddice, Marfa Cristina Olivares, Ana Zabala, Alicia pez, Maia Inés Masc6, Daniel Riquelme, Maria Lavallo, Tatiana Sfiligoy, Graciela ‘Emma Chistc, Gracola Kal, Virgina Aliaga, Enrique Goldengyuss 4 | MOUACONESA Ls DEREHOS HAUAOS REE AOS EEE ALA VEROND EEEAD InTRopUCCION Desde las primeras restituciones de niftos por orden judicial fuimos con- vocados por ios jueces 2 cargo de los diferentes casos. Tomaremos dos «ejemplos a modo de introduccién. En uno se trataba de una nifa secuestrada junto a sus padres a los 25 ‘meses, A los 7 afios y medio, a partir de la instalacin de la democracia en el pafs, se solicita su restitucién a su familia. El Juez que Heva la causa Ja deniega a pesar de las pruebas hematologicas que probaban consan- guinidad con su familia. Apelando a otras instancias judiciales la Céma- 1a otorga la restitucion en diciembre de 1984. La nia inicia un tratamiento psicoanalttico al afo siguiente y el Juez convoca a laanalista a una entrevista en la que plantea su dificil stuacién dado que por “el bien de la menor” tenia que “condiliar” los pedidos de la abuela materna, a la que se le habfa otorgado la guarda provisoria,y os de “los padres" que reclamaban un régimen de visitas, La imtervencién de la analista consistié en diferenciar padres de “apro- ppiadores”, puesto que de lo contrario se renegaba del hecho, equiparando €l robo al acto filiatorio instituido por los padres; con la consecuencia de omitir la situacion de los padres “desaparecidos" y las condiciones de vio Tencia que habian inaugurado la convivencia con Ios secuestradores. Algo notable es que esta nia logra conservar su nombre ya que era al nico que respondfa: verdadero acto de la pequefia sujeto de resistencia ala apropia- ibn, Pero, por otro lado, suicumbia alo ordenado por los apropiadores que Ia hactan vivir como recién nacida, a pesar de sus 25 meses. Su desarrollo ‘seo responde al mandato, detenitido dos aos su crecimiento (Con posterioridad dicho Juez. demora la entrega de los documentos durante 3 afios y manifiesta su sorpresa cuando la analista diferencia adopcion de apropiacion, En el otro caso que tomaremos un Juez se expide con prontitud en. relacion a una nifia de diez afios que habia nacido en cautiverio, ubican- do el lugar de objeto en que habia quedado desde el secuestro y su apro- piacién. Este Juez otorga la documentacién correcta a partir de la anula: pono vREsrotsau | #5 i dela falsifcada, argumentando que la documentaci6n también hace a su seguridad juridica. ‘Nos encontramos ante la misma circunstancia, secuestro y apropia- cin denis durante el Terrorismo de Estado en Argentina (1976/1983), y dos|respuestas: = un Juez que reniega de lo acontecido, intentando “legislar” como si la convivencia con los apropiadores, que se bas6 en el secuestro,desapari- cién y asesinato de los padees, se debiera aun abandono y no a una rup- ‘ura de la legolidad que perpetua el secuesto dela nifa. + ot Juez que ubicando lo sucedido,lgraefectivizar un reordenamiento simbélico restinayendo su lugar alana como sujet del derecho. Frente al vacto juridico que gener6 el accionar del Terrorismo de Estado fue mecesario crear nuevas ficciones juridicas que dieran cuenta de esta nueva situacién, pero algunos Jueces llenaron ese vacto con lo conocido, sin considerar que se traté de un hecho inééito en la moder nidad. Al secuestrar a un nifioe inscrbislo como otro, se usaron ins- cripciones fraudulentas como modo de perpetuar Ia ilegalidad, consu- mando otro modo del exterminio: puesto que al desaparecerlose inscri- birlos como otros se produce otro modo de filiacién (alsificada) como ‘optimizaci6n racional del encierro siendo lo que permanece vigente de Ia dictadura en Ia atualidad. Com a dictadura se ha dislocado la inscripciém de a vida en el ordena ‘miento del Estado, lo que nos hace prever nuevas y mis delirantes for- ‘mas normativas de le inscripeién de la vida en la ciudad. Vivimos en ddemocracia pero la dictadura sigue vigent en los modos de sostener el secestoy el cautiverio de ls hoy jovenes que permanecen “desapareci- dlos", en la ignorancia de lo sucedido, amparados algunas veces en el accionar mismo del Poder Judicial. ~ Seré necesario ubicar con qué concepto de familia y de amor filial se sostiene la permanencia en dichasituaci. se | WoUCINE ns OEEEH0S MNOS RENE ALOS DRED ALAYEDAD EOEEND INCIDENCIA DE ABUELAS DE PLAZA DE MAYO 1a invencién de Abuelas, con la creacién de su institucién, fue un acto “tic y ciudadano como respuesta a la usurpacion del poder por parte de Jas fuerza armadss. Se trataba de buscar los modos de localizar y poder recuperat a sus nietos desaparecidos, hijos de sus hijos desaparecidos. Junto con otros organismos de derechos humanos nombraron el accionar del poder tota- litaro: Terroristno de Estado. Recordemos que a partir del 24 de marzo de 1976 las Fuerzas Armadas ‘usurparon el poder einstalaron dicho Terrorismo de Estado como meca- nnismo generalizado y sistemstico de represion de la sociedad. Por una decision politica y planificada se utilzaron las estructuras y recursos del Estado en forma dlandestina y con a complicidad de todos os organismos oficiales para dejar a sus habitantes en la indefensin, producto del tercor. Persecucién, asesinato y desaparicin de personas, apropiacion de ni ‘hos, censura y desarticulacin de los lazos sociales fueron algunos de los ‘miétodos utilizados. EL Estado de Derecho perdié su vigencia durante ese periodo, yelcontrol del poder absoluto quedé a cargo de las Fuerzas Armadas. Esta situaci6n ‘avo como consecuencia el avasallamiento de todas las garantias indi- -viduales protegidas por la Constitucién, ya que se utiliz6, de forma ge- neralizada, la violencia como medio para los fines del Estado. La implementacién del estado de siti, como estado de excepeién, permitié su fundamento juridico. El estado de excepcién deja de teferi- se a una situacién de peligro realy tiende a confundirse con la propia norma; el mismo fue creado para la supuesta realizacién de la “reorga- nizacion nacional”. Deciamos anteriormente que una de las formas de la violencia fue la prictca de la “desaparici6n forzada de personas” ylainstitucionalizaci6n de campos de concentracin y exterminio (legaron a ser més de 600 en todo el pais), quedando organizada una modalidad represiva del poder. Este modelo de poder concentracionario fue propio del siglo XX y fue ‘wemmo yeesronsasuo% | 97 creado por el nazismo durante la segunda guerra mungial y fassivas como poder totalizante, ducfio de la vida y dela muerte. La violencia quedé implantada en la sociedad como modo de vide, ‘euya coaccién implied el terror y la pardlisis, desarmando el azo social El tratuma vivido, en tanto genocidi, afectaa toda la comunidad convir- iéndose en trauma historic. PE, Strawson plantea que nuestra eleccién de los nombres es parcial- ‘mente arbitraria y depende de la observancia de reglas sociales y legales. Hi criterio que permitiria jar un sistema de nominacién es un criterio deuso, Inventa el concepto de “quasisnombre” que se trata de locuciones que, en el uso que hacemos de la lengua, tienen un empleo seméntico particular; no son nombres propios sino nombres que funcionan como ‘nombres ptopios. Expresiones de est tipo vienen ser impresas o escritas cusndo una cierta clase de acontecimientos o cosas resulta de tn interés primordial ‘en una sociedad. Desigaa a esos quasi-nombres como sintomas en una sociedad, son Jos nombres del malestar en a civlizacién, de las nuevas traducciones del goce que escapan al sentido, Es necesaria una marca, un rasgo que inscriba el quasinombre, se trata de Ja inscripcién de la «dimension del sintoma en la lengua. ‘Asi podemos designar como quasinombre al Terrorismo de Estado con su prictica de desaparicién forzada de personas e instalaci6n de cam- po de concentracion y exterminio. EL DERECHOY EL PSICUANALISIS Ena Introducci6n concluiamos interrogando con qué concepto de farni- lia del amor filial se intent6 legisar en relacin a Jos hechos que nos convocan. Recordemos que tanto el Derecho como el Psicoandisis se encuentran involucrados en el acto de “institut lo vivo" con operaciones diferentes; para el Derecho el vinculo de fliacin esté creado por las instituciones 8 | ouces kts ererins HAMAS RATE AOS DRECNOS AL VERONDE ENTOAD juridicas. Se trata de un principio politico de organizacién, que permite elamudamniento de lo biolégico, lo social y lo subjetivo yloinstituye a tra- vés de la genealogis, ya que es la ley la que asigna un padre aun hijo en virtud de una presuncién legal que aslo establece, El Derecho Romano nos dice que no basta con nacer pues ala vida hay que insttuirla,einsti- ‘uir implica la normatividad, cuya exigencia serd la existencia de un ‘marco de legalidad que garantice la conservacién de la especie. Para el Psicoanilisis“institur lo vivo” serd planteado desde las opera- otis de subjetivacién necesaria para que el pequefo sujeto se humani- La familia ese] émbito donde se desarrlla el ser hablante desempe- “fia un papel primordial en la transmisién de la cultura. Lo simbélico, que precede al sujeto, es la funcién ordenadora de la cultura que separa al Hombre de ls naturaleza, inscribiéndolo de entrada en el enguaje, ley fandadora cuyas interdicciones fandamentales son la prohibicién de tar yl prohibicin del incesto.y en las estructuras de parentesco que “organizan la diferencia de sexos y de las generaciones, lnitio, al nace, por su prematuraci6n,necesitaré de a funcién mater- na y paterna para vivir, y para consttuirse subjetivamente se identificaré asus padres, de ellos recbiré una marca simbélic, trazoidentificatorio 4que le permit ser, Se lo marcaré con un nombre, inscripion que inchu- yela etimologfa del apellido la novela faniliar, pues uno se nombra como ha sido nombrado yal hacerio se ubica con relacion a cada uno de os pro- genitores, aquél que lo incluyé en el orden de las generaciones. ‘Una idetificacin es una insripién inconsciente con eficacia sim impide la epetcién deo idéntco. En cada inscripcion ice sujeto ocupa en el orden de las generaciones, quees tino y que abreel camino a nuevos eslabones en el sistema de parentesco. Es en este sentido que, desde el psicoandliss, podemos pensar la iden- tidad: ser inscripto por los padres en el sistema de parentesco recono- ciendo la igualdad y la diferencia, pues s6lo siendo diferente puedo par tieularizarme. El sujeto no puede pensarse ni autoengendrado ni siendo ‘d&ntico a oo! pues, al nacer, sostenido por el deseo de los pade jefivarse seré producirse como sujeto nuevo. - ‘menOYaEronsaBunD | 99 1a funcibn de a familia tiene a su cargo la transmnision de una const tucién subjetiva que implica la relacién con un deseo que no sea andni- ‘mo, Para la made su relacién con el nifio llevaré [a marca de um interés particularizado por él, que es indice de su investimento libidinal. Con selacién al pare, su funcién sera del “nombre del padre”, en tanto pro- hibe el incesto, humaniza el deseo y es el que, en tanto descante, se hace responsable de sus actos. J. Lacan vinculi el tema de a familia as lengus, en tanto quela lengua ‘que cada uno habla es cosa de familia, ésta es prithordishmenteel lugar donde se aprende la lengua materna. Es a madre quien habla al nino en su propia lengua y compartila es lo que hace posible su transmision, ~ Sila lengua ces el parentesco, ser secuesirado y apropiado es ser des- Pojado del contexto familiar, donde el pequeno sujeto se prende a las marcas singulares de la lengua. __~Hi'@ste punto nos podemos servir de una expresién introducida por Eric Laurent, el “familarismo delirante”, para desarrollar las consecuen- cias que recaen 0b Tas personas cuando la funcién de la familia estd soportada por lavoluntad del bien. Lo que degrada la familia en “familia. rismo” es la aladidura del término “delirante”, del que podemos extraer al menos dos incidencias pricticas caultamiento de os acontecimientos que serén tramados com historia adherencia aun e6digo Gnico que, sin dejar de encontrar sus simpati «5 en la opinion piblica, hace obsticulo a los equivocos propios dela len- gua que dan luger a la constitucién subjetiva del nino, “En ocasiones, desde lo juridicn se sostienen faces tales como: “oscuras circunstancias’, “forzada situaci6n de orfandad”, “estado de intensa subor- inact afectva”“intensoslazo afectvos con aquellos que la razon y a quienes sigue viviendo como si fueran sus verdaderos padres", para ‘iantener la apropiaci6n, aunque se reconozca que se viola la ley penal con a falsficacién de la documentacién. Podemos decir que es desde la Jegalidad que se sostiene una situacion de Tegalidad, Recordemos que. Lacan plantea en “Funcion y campo de la palabray del lenguaje en psicoanslisis", Evts, du Seu, Paris, 1966, pégina 277, too woUctones 4 108 oERSHeS WAMNGS ENE ALS DERECHOS AVERDAD EBEITOND redo se empeia en sstenerl mentira®™. “= Lasituacién de los j6venes seeu apropiados y aun no localiza- dos, como de aquellos que se presume justificadamente que pueden ser ‘uno de ls nietos buscados por las Abuclas y alos cuales la justicianiegala posibilidad de verificar cienificamente el lazo de parentesco, nos conduce ‘a plantear que se reniega dello acontecido. En tanto selegista como sinada Inubiera sucedido, planteando un modo de familia temporal, espacial y ahist6rice. Deja la decisin en el sujto involucrado es renegat que la situacign de apropiacin fue sostenida por un Estado puede ni debe de ninguna manera ser sostenida por un Estado de Derecho. Es responsabilidad del mismo verificar que a ruptura dela Jegalidad no se siga sosteniendo e incidir para que un sujeto pueda tomar a distancia nnecesaria de un discurso que lo aliena fintensa subordinacion activa) y que ‘mpide una decision propia. El Estado debe operar sobre el discurso apro- piador abriendo paso a ofr versién de lo acontecido, modifcando su situa ion de indefensin que deja al sujeto en una desorientacion siniestra Es a partir de esta modificacin que el sujeto podré decidir qué ha plicado esto para él puesto que no es posible borrar las marcas que la apropiacién produjo, en tanto que las funciones parentales se ejercieron desde una particular petversién, De lo que se trata es de generar las condiciones para dar lugar a un ‘muevo discurso que permita al sujeto obtener un saber sobre su historia. a situacion de un joven secuestrado debe ser considerada desde la légica concentracionaria, puesto que el mismo ignora que el oigen del vineulo con quienes lo criaron se basa en el asesinato de sus padres “des- aparecidos" y su propio robo. Su situacién esté falsficada, asi como su documentacin,fliacién e identidad, Su estatuto de ciudadano es pars- déjico, ya que su estado de excepciOn se sitta dentro y fuera del orden juridico, Estos jévenes viven con independencia de cualquier control judicial y de toda referencia al ordenamiento jurfdico, poniendo en cues- ‘i6n los conceptos de derechos subjetivos y de proteccién juridica, Cabe bank YRESRORSABUDAD [102 {nterrogar por qué se los priva de sus derechos, a conocer la verdad y el derecho aia identidad, Se persste en la optimizacién racional del encie- ro como modo de renegat la historia vivida. Este modo de permanencia eno social podrfamos nombrarlo como renegacln de renegocin. En el caso de una joven que sostiene su negatva a realizarse el andl- sis genético la Corte Suprema faliaa su favor, argumentando la preserva- cin de su derecho ala intimidad, lo que implica nuevamente renegar que el robo de nifios durante el Terrorismo de Fstado es ur acto pablicoy Es necesario un acto jurico para dar lugar a la construccién de su int: miéad c identida. Tampoco se puede apelar ala mayoria de edad de la joven, dado que los actos que estamos tratando tienen el caricter de crimenes de lesa hhumanidad, que no caducan con el tiempo. Es de destacer que un Juez, cen uno de io casos mencionados en la Introduccién, pudo argumentar para sostener su restitucin juridica que “el ocultamiento no sélo fue hacia la justcia sino hacia quien le dio twato de hija, privandola de su his ‘oria, de su derecho a la verdad y de su real identidad’, planteando ” necesidad de un pronunciamiento r4pido que haga cesar en su beneficio sti sitacién de incertidumbre que padece, referida en especial a su 2 la necesidad de contar con documentos que hagan cesar la ‘posiblidad de cualquier dato moral para la misma”. Planteé su posici6n “para administra justicia en que no se puede desconocer la realidad de la ‘Argentina en los afios en que estos hechos sucedieron y que “estén en juego los derechos y garantias humanos,el derecho a la vida en dignidad, a evitar que alguien indefenso sea despojado de su singularidad como persona, el derecho inalienable de cualquier individuo dtrdestthistoria y crecer entre los suyos los derechos de Estos a tener ‘ea eT seno familiar a sus indefensos descendientes”. Si caracterizamos a apropiacion de niios durante el Terrorismo de Esta do como un hecho inédito, las soluciones tienen que ser inéditasy:no con formamos con lo “ya sabido”. Fs necesario desplazar os limites del discur- 0 conocido para dat liga alo inédito, para lo cual se necesita decision, toa] vous 10s DeREOIOS MUN ATE LOS DEREEHOSALAVERDAD EENTEKO DDAR LUGAR A LA SINGULARIDAD Desde nuestro equipo, orientados por una préctica psicoanalitica, soste- ‘emos que estas cuestiones no pueden ser pensadas tnicamente desde cl trzuma, ni sélo desde el reclamo de derechos, sino que es necesario, articular el deseo con la verdad, Esto se verifica con el accionar de Abue- 4eo decidido han huchado contra el silencio del asesina- zando wn movizniento cultural, social y juridico que toy el robo, g necesita de a produccién de nuevas fieciones. Los psicoanalistas que integramos el Centro de Atencién por el Dere- cho a la Identidad de Abuelas de Plaza de Mayo nos sentimos convoca- dos por el desafio que introduce Abuelas; no nos proponemos resolver Jos impasses de otras disciplinas, tratamos de ser déciles ala lengua del Otto, introduciendo enigmas en las normas ¢ incluyendo la singularidad ‘en el uso de las normas juridicas. Dado que algunos jévenes que fueron secuestrados y apropiados pre- suntamente han sido ubicado pero se niegan a tealizar Ja prucba genética «que confirmaria parentalidad, proponemos ofrecerles entrevistas para habi- Iitar otro espacio, posbilitando otro tiempo subjetivo que devele el culta- ‘mento, permita otras versiones y que dé lugar a una decisin propia. l acto jurfdico de restitucién de identidad es.1sn paso necesario, en tanto hace al uso de los derechos, pero no suficiente. Es en el espacio ana- ico ofertado, como sitio de lo posible, para que surja el sujeto del WBconsciente, donde pods resttuirse situando las marcas del estrago, con la deslocalizacion del goce que conlleva Desde el Psicoanilisis y el Derecho, en la medida que afrontamos el problema de instituir lo vivo, debemos interrogarnos para encontrar los ‘modos més adecuados para su tratamiento. ‘Ambos estariamos ante la posibilidad de dar hugar a lo inédito, para dar lugar 2 la invencién, soem yaesronsniuon [19 sieuogRAria ‘Agamben, Giorgio: Homo Sacer . Hl poder soberano pla nuda vida, Pretextos, Valencia, 1998. ‘Aksman, Daniel, Dassen, Florencia, Lo Gitdice, Alicia, Riquelme, Daniel y otros: “Abriendo el enpediente de la transferencia". Segundo Encuentro interna- ional del Campo Freudiano, Buenos Aires, 2005 {aean, Jacques: "Dos notas sobre el nito",en Intewencionesy Testor 2. Manan tial, Buenos Aires, 2988, ~Funcién y campo dela palabra y del lenguaje en psicoandliss,en Bsetos, Siglo XX1, México, 1972 Laurent, Eric: “El discurso del inconsciente y el enigma de las normas", en CCIEN Centro Intertisciplinario de Estudios sobre el Nino, Cuadern 3. Buenos Aires, 1999. ‘Lo Gitidice, Alicia: “Derecho al Mdentidad™ en Pricoundlisis:Restucion, Agro piacin, Fliacién, Centro de Atenci6n por el Derecho le Identidad, Abuelas de Plaza de Mayo, Buenos Aires, 2005 que se resttuye en un anlisis, sons. Tees Haches, Buenos Aires, 2000. Resttucién, apropiaién,fliacién. Desplazando lo limites del discurso". Jomadse sobre Identidad organizadas por la Univereidad Nacional del Comshue yyel Consejo de Psicélogos del Neugueén. Neuguén, Julio 2095. ‘Riquelme, Daniel: “Fillacén flsifcada y estrago", en Prcoandliss Restitucion, Apropiacén, Filiacién, Centro de Atencibn por el Derecho al Kdentided, Abuelas de Plaza de Mayo, Buenos Aires, 2005. Equipo Juridico de Abuelas de Ptaza de Mayo: Los niRosdeeaparecdos pla Jur tick. Algunos fallosyresolucones. Tomo x. Buenos Aires a Psicoanalisis dels Derechos dels Per- 2

También podría gustarte