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INSTRUCCIONES PARA SONREÍR

Primero, relaje los músculos de la cara deshaciendo los nudos causados por la preocupación.
Deje que su mente disipe los miedos que nublan sus sentidos y que no le permiten apreciar la
belleza de la vida. Conceda al momento el poder de borrar las huellas que dejó el estrés del día y
de apreciar genuinamente el presente. Piense en aquello que lo invita a sonreír; ya sea un
recuerdo entrañable, una efímera sensación de victoria, tal vez un chiste bien contado o la simple
compañía de un amigo. Deje que ese pensamiento invada su ser y lo llene de alegría.

El segundo paso es darle la libertad a sus labios de curvarse guiados por la emoción que ha
dejado crecer en su interior. Permita que su sonrisa se extienda con la elegancia de una flor
abriendo sus pétalos, déjela encender el brillo en su mirada e iluminar el resto de su rostro. Ese
destello en sus ojos será una prueba de que su sonrisa es honesta y tendrá el poder de transmitir
su felicidad a otros. Notará cómo todo a su alrededor se llena de colores y sus tristezas
desaparecen en un abrir y cerrar de ojos, entonces, se dará cuenta de que va por el camino
correcto.

En este punto, la sonrisa ha sido dibujada; a partir de ahora, debe permitirse disfrutar la
experiencia. Contemple la belleza de aquello que lo hizo sonreír y trate de mantenerlo vivo por el
mayor tiempo posible, de esta manera, su experiencia será más placentera. Sienta cómo se
disuelven las tensiones, la serenidad inunda du ser y la delicadeza se posa suavemente en su
corazón. Recuerde que la simplicidad de una sonrisa genuina tiene el poder de transformar, no
solo su expresión facial, sino su estado de ánimo y perspectiva; también es capaz de mostrarle al
mundo que está feliz de estar donde está.

Es importante que no conserve la sonrisa solo para usted, compártala con los que le rodean. Trate
de contagiarla a los demás y permitirles sentir lo que usted está sintiendo. Sonreír cuando ve a
una persona que le agrada es hacerle saber lo feliz que está de verla; esto puede alegarle el dia.

Finalmente, recuerde que para convertirse en un experto a la hora de sonreír, debe practicar
siempre que tenga la oportunidad de hacerlo. Si lo hace correctamente, en unos días se dará
cuenta de que su vida es más agradable.

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