ORACIÓN DE ABANDONO AL PADRE

PADRE me pongo en tus manos, haz de mi lo que quieras, sea lo que sea, te doy las gracias.
Estoy dispuesto a todo, lo acepto todo, con tal que Tu Voluntad se cumpla en mi y en todas tus
criaturas. No deseo nada más Padre. Te confío mi alma, te la doy con todo el amor de que soy
capaz porque te amo, y es para mi una necesidad de amor el darme, el ponerme en Tus Manos
sin medida con una infinita confianza, por que Tú eres mi PADRE.

CORONILLA DE LA DIVINA MISERICORDIA UNIDA A LA PRECIOSA SANGRE DE CRISTO

Por Señal de la Santa Cruz…….+++

Yo pecador me confieso ante Diosa Todopoderoso………

¡Oh Santo Espíritu de Dios! Por las Preciosas Llagas y Sangre Redentora de Nuestro Señor
Jesucristo, te imploramos que infundas en nuestra vida tus siete dones, Así como los apóstoles
de Jesús, seamos fortalecidos en el cuerpo, alma y espíritu, para que podamos dar testimonio
ante los hombres de la presencia de Dios en nosotros. Refleja en nuestro rostro la imagen de
Jesús y por la gracia de Dios seamos transformados en nuevas criaturas para Gloria de Tu
Santo Nombre. Te amamos, te adoramos y nos sometemos a ti ¡oh! Divino y Santo Espíritu de
Dios. ¡Padre Santo! dadnos la efusión de tu Espíritu, para ser verdaderos testigos de tu
Misericordia y anunciar sin temor tu Santa Palabra y el regreso triunfal de tu Amado Hijo.
Amén
Creo en Dios Padre todo Poderoso, creador….
PRIMER MISTERIO; LA MANO DERECHA DE NUESTRO SENOR JESUCRISTO ES CLAVADA.
(Contemplarla en el Cristo)
Todos: Adoramos la Preciosa Llaga de Tu Mano Derecha, Adoramos el dolor que padeciste por
el clavo que la atravesó, Adoramos la Preciosa Sangre que brota de tu Santa Mano. Por Tu
Divina Sangre, y por las Lágrimas y Sangre de tu Santísima Madre, sálvanos a nosotros y a los
pecadores del mundo entero. Por sus méritos infinitos, convierte muchas almas. Amén
Todos: Padre Eterno, te ofrezco el Preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Tu
Amadísimo Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, como propiciación de nuestros pecados y los
pecados del mundo entero. Amén
Lector: ¡Oh! Preciosísima Sangre de Jesucristo.
Todos: Sana las heridas del Sacratísimo Corazón de Jesús y del Inmaculado Corazón de María.
Todos: Padre Nuestro....Ave María...
Lector: Padre, por la dolorosa Pasión de Jesús
Todos: Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.,,
Lector: Sangre Preciosa y Redentora de Jesucristo.
Todos: Sálvanos a nosotros y al mundo entero. (Repetir 10 veces las 4 oraciones)
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, como era en un principio ahora y siempre por los
siglos de los siglos. Amén.
Padre, que la Sangre Preciosa que brota de la Sagrada Cabeza de Nuestro Señor Jesucristo, el
Templo de la Divina Sabiduría, Tabernáculo del Divino Conocimiento, Luz del Cielo y de la Tierra,
nos cubra ahora y siempre. Amén.
SEGUNDO MISTERIO: LA MANO IZQUIERDA DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO ES CLAVADA.
(Contemplarla en el Cristo)
Todos: Adoramos la Preciosa Llaga de Tu Mano Izquierda, Adoramos el dolor que padeciste por
el clavo que la atravesó, Adoramos la Preciosa Sangre que brota de Tu Santa Mano. Por tu
Divina Sangre, y por las Lágrimas y Sangre de tu Santísima Madre, libera a las almas del
purgatorio, cubre con tu Misericordia a los moribundos y protégelos de los ataques de los
espíritus malignos. Amén
Todos: Padre Eterno, te ofrezco el Preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Tu
Amadísimo Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, como propiciación de nuestros pecados y los
pecados del mundo entero. Amén
Lector: ¡Oh! Preciosísima Sangre de Jesucristo.
Todos: Sana las heridas del Sacratísimo Corazón de Jesús y del Inmaculado Corazón de María.
Todos: Padre Nuestro...Ave María...
Lector: Padre, por la dolorosa Pasión de Jesús
Todos: Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.
Lector: Sangre Preciosa y Redentora de Jesucristo.
Todos: Sálvanos a nosotros y al mundo entero. (10 veces)
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, como era en un principio ahora y siempre por los
siglos de los siglos. Amén.
Padre, que la Sangre Preciosa que brota de la Sagrada Cabeza de Nuestro Señor Jesucristo, el
Templo de la Divina Sabiduría, Tabernáculo del Divino Conocimiento, Luz del Cielo y de la Tierra,
nos cubra ahora y siempre. Amén.
TERCER MISTERIO: EL PIE DERECHO DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO ES CLAVADO.
(Contemplarlo en el Cristo)
Todos: Adoramos la Preciosa Llaga de tu Pie Derecho, Adoramos el dolor que padeciste por el
clavo que lo atravesó, Adoramos la Preciosa Sangre que brota de tu Sagrado Pie. Por tu Divina
Sangre, y por las Lágrimas y Sangre de tu Santísima Madre, protege los fundamentos de
nuestra Iglesia Católica contra los planes y ataques del reino oculto y los hombres malos. Amén
Todos: Padre Eterno, te ofrezco el Preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Tu
Amadísimo Hijo, nuestro Señor Jesucristo, como propiciación de nuestros pecados y los pecados
del mundo entero. Amén
Lector: ¡Oh! Preciosísima Sangre de Jesucristo.
Todos: Sana las heridas del Sacratísimo Corazón de Jesús y del Inmaculado Corazón de María.
Todos: Padre Nuestro....Ave María
Lector: Padre, por la dolorosa Pasión de Jesús
Todos: Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.
Lector: Sangre Preciosa y Redentora de Jesucristo
Todos: Sálvanos a nosotros y al mundo entero. (10 veces)
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, como era en un principio ahora y siempre por los
siglos de los siglos. Amén.
Padre, que la Sangre Preciosa que brota de la Sagrada Cabeza de Nuestro Señor Jesucristo, el
Templo de la Divina Sabiduría, Tabernáculo del Divino Conocimiento, Luz del Cielo y de la Tierra,
nos cubra ahora y siempre. Amén.
CUARTO MISTERIO: EL PIE IZQUIERDO DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO ES CLAVADO.
(Contemplarlo en el Cristo)
Todos: Adoramos la Preciosa Llaga de tu Pie Izquierdo, Adoramos el dolor que padeciste por el
clavo que lo atravesó, Adoramos la Preciosa Sangre que brota de tu Sagrado Pie. Por Tu Divina
Sangre, y por las Lágrimas y Sangre de tu Santísima Madre, protégenos en todos nuestros
caminos contra los planes y ataques de los espíritus malignos y sus agentes. Amén.
Todos: Padre Eterno, te ofrezco el Preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Tu
Amadísimo Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, como propiciación de nuestros pecados y los
pecados del mundo entero. Amén
Lector: ¡Oh! Preciosísima Sangre de Jesucristo.
Todos: Sana las heridas del Sacratísimo Corazón de Jesús y del Inmaculado Corazón de María.

Todos: Padre Nuestro...Ave María...

Lector: Padre, por la dolorosa Pasión de Jesús
Todos: Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.
Lector: Sangre Preciosa y Redentora de Jesucristo
Todos: Sálvanos a nosotros y al mundo entero. (10 veces)
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, como era en un principio ahora y siempre por los
siglos de los siglos. Amén.
Padre, que la Sangre Preciosa que brota de la Sagrada Cabeza de Nuestro Señor Jesucristo, el
Templo de la Divina Sabiduría, Tabernáculo del Divino Conocimiento, Luz del Cielo y de la Tierra,
nos cubra ahora y siempre. Amén
QUINTO MISTERIO: EL COSTADO DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO ES TRASPASADO.
(Contemplarlo en el Cristo)
Todos: Adoramos la Preciosa Llaga de Tu Sagrado Costado, Adoramos el dolor que padeciste
por la lanza que lo traspasó, Adoramos la Preciosa Sangre y Agua que de allí brotan, como
manantial inagotable de Misericordia. Por tu Divina Sangre y Agua, y por las Lágrimas y Sangre
de tu Santísima Madre, sana a los enfermos en el cuerpo y en el alma, resucita a los muertos
por el pecado, dadnos la gracia de hacer Tu Santa Voluntad y muéstranos el camino para llegar
al Padre en su Eterna Gloria. Amén
Todos: Padre Eterno, te ofrezco el Preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Tu
Amadísimo Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, como propiciación de nuestros pecados y los
pecados del mundo entero. Amén.

Lector: ¡Oh! Preciosísima Sangre de Jesucristo.

Todos: Sana las heridas del Sacratísimo Corazón de Jesús y del Inmaculado Corazón de María.
Todos: Padre Nuestro...Ave María...
Lector: Padre, por la dolorosa Pasión de Jesús
Todos: Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.
Lector: Sangre Preciosa y Redentora de Jesucristo
Todos: Sálvanos a nosotros y al mundo entero. (10 veces)
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo....
Padre, que la Sangre Preciosa que brota de la Sagrada Cabeza de Nuestro Señor Jesucristo, el
Templo de la Divina Sabiduría, Tabernáculo del Divino Conocimiento, Luz del Cielo y de la Tierra,
nos cubra ahora y siempre. Amén.
ORACIONES FINALES (Todos)
Santo Dios, Santo Omnipotente, Santo Inmortal, ten Misericordia de nosotros y del mundo
entero. (3 veces)
¡Oh Sangre y Agua que brotan del Sacratísimo Corazón de Jesús como fuente inagotable de
Misericordia para nosotros, Jesús en ti confío. (3 veces)
Adoración Sangre Preciosa de Jesús, Adoración Sangre Preciosa de Jesucristo. Te Adoramos
Sangre Preciosa de Jesús, te Adoramos Sangre Preciosa de Jesucristo.
Dios te salve Reina Y Madre.....
¡Oh! Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo, te honramos, te veneramos, te
adoramos por la obra de tu Eterna Alianza que trae paz a la humanidad, Sana las heridas del
Sacratísimo Corazón de Jesús y del Inmaculado Corazón de María. Consuela al Padre Todo
Poderoso en su Trono y lava los pecados del mundo entero. Que todos te adoren ¡Oh Preciosa
Sangre ten Misericordia de Nosotros! Amén.
Sangre de Cristo protégenos/Sangre de Cristo libéranos/ Sangre de Cristo restáuranos/Sangre
de Cristo santifícanos/ Sangre de Cristo pacifica nuestro corazón y hazlo manso y humilde como
el vuestro.
Al Santo Dios, Uno y Trino toda adoración, honra, poder, imperio y gloria sea dada a la
Majestad de su Gloria por los siglos, de los siglos. AMEN.
Finalizada la Coronilla, de rodillas frente al Sagrario, o a Jesús Crucificado, hacemos la
consagración a la Divina Misericordia y a la Preciosa Sangre de Jesucristo).
ORACACIÓN AL SEÑOR DE LA MISERICORDIA
De nuevo aquí me tienes, Jesús mío, confuso y humillado ante tu altar. Sin saber qué decirte ni
qué hablarte. Ansioso solamente de llorar. Vengo del mundo, vengo del combate, cansado de
sufrir y de luchar. Traigo el alma llena de tristezas y hambriento el corazón de soledad. De esa
soledad dulce, divina, que alegra tu Presencia celestial. Donde el alma, tan solo con mirarte, te
dice lo que quiere sin hablar. Mis miserias, Señor, aquí me traen. Mírame con ojos de piedad.
Soy el mismo de siempre, Dueño mío, un abismo infinito de maldad, un triste pecador siempre
caído, que llora desconsolado su orfandad, y gime bajo el peso de sus culpas y ansía recobrar
su libertad. Soy un alma sedienta de ventura, un corazón que muere por amar y abrasarse en la
llama inextinguible del fuego de tu eterna caridad. Concédeme, Señor, que a Ti me acerque,
permite que tus pies llegue a besar. Déjame que los riegue con mi llanto y sacie, en ellos, mi
ardoroso afán. ¡Oh, qué bien se está aquí mi dueño amado!, ante las gradas de tu santo altar.
Bebiendo de la fuente de agua viva, que brota de tu pecho sin cesar. Quién pudiera vivir
eternamente, en aquella divina soledad, gozando de tu amor y tu hermosura, en un éxtasis
dulcísimo de paz. Amén.