Está en la página 1de 4

RESEÑA DE “EL ALBA DE LA EDAD MEDIA”

EL ALBA DE LA EDAD MEDIA

Nos situamos en el siglo VI. Las invasiones bárbaras en Italia ya han tenido lugar, y como
consecuencia de esto, ocurre el debilitamiento del imperio bizantino en Occidente. Muchos
hablan de un colapso de la sociedad, pero lo que realmente sabemos, es que el entorno se
destruye y cambia totalmente.

Este momento se conoce históricamente como una “tierra de nadie”, situación que no hace
nada más que expandirse. Las ciudades quedan completamente abandonadas, la población
disminuye diariamente, y aparecen los ermitaños, que crean nuevas formas de vida en torno
a la religión. Los monasterios también comienzan a tomar forma.

La obra que analizaremos se llama “El alba de la edad media”, publicada en el año 1966,
escrita por Vito Fumagalli, un historiador medievalista italiano, autor muy importante e
influyente, que se dedica a hablar de disciplinas históricas muy diferentes.

Capítulo 4: El fin del mundo

En este capítulo, el autor nos habla de la situación socioeconómica de Italia desde el siglo
VI. Se trata de un país invadido por los longobardos, que se encuentra en medio de una
fuerte crisis económica. Además, también nos dice que su estructura cívica se está
perdiendo: las ciudades que antes eran tan imponentes, tan majestuosas, ahora no lo son
tanto.

Las ciudades ya no son tan seguras. A causa de la invasión, los ciudadanos emigran al
campo, dejando los pueblos vacíos y en ruinas.

El autor describe a la Italia tan influyente y fuerte que conocíamos, a nada más que
simples ruinas, nada más que decadencia y negatividad. No solo esto, sino que se
propagan muchas enfermedades (como la peste), la tasa de mortalidad infantil es
increíblemente alta y en general, la vida en esta época es muy complicada. Hay muchos
factores que juegan en contra de las personas.

Europa también se encuentra enfrente a una crisis climática que impacta negativamente a
su agricultura, de la cual dependen. Esta crisis afecta a la economía italiana, ya que la
agricultura, se había desarrollado bastante y con ella la dependencia de las personas de
esta, aumentando la preocupación por los productos del campo…

Por todas estas cosas, la gente se ve obligada a abandonar las ciudades y dirigirse al
campo, en busca de mejores oportunidades. La metrópoli acaba teniendo una presencia
prácticamente fantasmal: las ciudades quedan vacías y con el tiempo, acaban siendo nada
más que devastación, destrucción o decadencia.

La Edad Media en Italia no fue más bien un paso atrás para la humanidad. Nos
encontramos en un mundo de avances, pero eclipsado por todos los factores externos a las
personas, que empeoran la situación.
“Arriba, en lo alto del cielo, se veían señales espantosas: lanzas de fuego, escuadras de
hombres armados, enrojecidos en dirección al norte. Y he aquí el cruel pueblo de los
longobardos, llegando desde sus tierras, cayó como una espada desenvainada sobre
nuestras cabezas. La gente, que se había hecho numerosa, que había crecido como un
campo de grano, fue como segada. Burgos destruidos, iglesias entregadas a las llamas,
monasterios saqueados, ciudades privadas de sus habitantes, campos despoblados,
pueblos abandonados transformados en refugio de bestias salvajes: tal fue la obra de los
longobardos”.

Esta cita es bastante interesante, especialmente por la creativa manera de describir las
cosas. También es importante, porque básicamente es un resumen breve de la situación, de
la época de la que se habla en este libro. La decadencia de esta época aparece a causa de
las invasiones de los bárbaros, lo cual es descrito sencilla y perfectamente en esta cita. Por
eso pienso que es relevante mencionarla. Para entender esta obra, hay que tener claro
cómo empieza todo esto.

Capítulo 5: Bajo el signo de la esperanza

En este capítulo, se trata de manera principal el tema de los nuevos movimientos religiosos
que surgen en la Europa medieval. Se menciona que la religión ha desarrollado una cierta
mística a causa de la ruralización de la sociedad y la novedosa cercanía con la naturaleza.

La religiosidad en las personas, les da fuerzas para enfrentar la violencia del momento. A
causa de todo esto aparecen nuevos personajes: los ermitaños o los peregrinos. Mucha
gente se aísla, para encontrar la fe en esta soledad. Ermitaños, como Salvio, se convierten
en monjes que viven temporalmente en comunidad: dejan la soledad para guíar a otros.

El eremitismo fue el medio para la recuperación: muchos participan en esta actividad, para
poder volver a “la vida cotidiana” con más fuerza, más voluntad. El Papa incluso los admira
y le impresiona la forma de vida de estas personas tan valientes: de esta manera, decide
enviar a algunos de ellos a evangelizar Inglaterra.

Se fundan monasterios, comunidades de pobres…La solidaridad de estos hombres en las


comunidades de ermitaños también se vee en el medio ambiente y sobre todo, los
animales: se llega a crear una cultura espiritual en torno a los animales.

El cristianismo todavía era dominante, siendo la religión oficial. De todas maneras, con los
cambios de la época, acaban llegando nuevas prácticas y creencias. Todo esto lo cuentan
sobre todo los textos de Diácono, así como los escritos del Papa Gregorio Magno. Gregorio
era bastante pesimista en lo que escribía, especialmente cuando hablaba de la toma del
poder de los lombardos, describiéndolo como “la llegada del Apocalipsis”.

“El mundo natural, en fin, era para todos como un marco al que estaba soldada la vida
misma del hombre: era inconcebible distanciarse de él más allá de una mayor proximidad
del hombre con la divinidad cristiana. Poco a poco las cosas fueron cambiando; con el paso
del tiempo, pero con ritmos desiguales según las zonas, las clases sociales, las ideas y los
sistemas de valores”.
Con esto concluye el capítulo 5. En este, se recalca bastante la importancia de la religión y
como la vida del hombre, realmente no tiene sentido sin esta. Y de nuevo, Fumagalli nos
muestra la importancia del cristianismo y el tradicionalismo de la época, pero siempre
recalcando el constante cambio y desarrollo.

CONCLUSIÓN

En resumen, por más extraño que suene, la Edad Media fue sobre todo un periodo en el
que hubo muchos cambios y desarrollo en favor de los humanos, sin embargo,
paralelamente a esta evolución, hubo un paso hacia atrás de cierta manera.

Fue una época oscura, gobernada por los bárbaros, en la que el ser humano tuvo que
abandonar la ciudad, en la que perdió su lengua, regresó al paganismo, perdió lo que había
aprendido, y en definitiva, se convirtió en un hombre más rural, más tradicional.

El historiador Vito Fumagalli lo muestra describiendo la sociedad europea del momento y


utilizando como ejemplo la invasión de Italia. Es algo indudable, el hecho de que hubo
muchos avances, que hubo muchos cambios que ayudaron al desarrollo de la sociedad,
pero también hay una parte de la historia que no se explica, que no se conoce, pero que
Fumagalli, expone en estos capítulos.

OPINIÓN

Esta obra está bien escrita y la buena narración hace más amena la lectura. Aparte de los
temas que son tratados en estos capítulos: la historia, el pasado de los seres humanos…
siempre es algo interesante de lo que aprender y conocer.

Vito Fumagalli nos muestra de manera eficiente la realidad de la vida cotidiana en la Edad
Media y los efectos devastadores de la caída del Imperio Romano. Nos sitúa ante la muerte
de una civilización, pero también ante el nacimiento de una nueva, ni mejor ni peor,
simplemente una nueva civilización fundada en principios e ideas extremadamente
diferentes.

Con la ágil conexión de noticias, anécdotas, leyendas que el autor sabe exponer, poco a
poco obtienen atención nuevas figuras, una de las más interesantes desde mi punto de
vista: los ermitaños. En el silencio y la soledad de los monasterios, ellos se encargan de
sentar las bases de una nueva era.

Vito Fumagalli nos expone el lado más oscuro de los primeros siglos de la Edad Media.
Desde mi punto de vista, se puede ver una cierta actitud negativa hacia gran parte de las
características, de las tradiciones de la época.

También podría gustarte