53% de los 133 alumnos malos de los grados comunes y el 19% de los
180 buenos alumnos. Se estima que dos o mas indicadores emociona-
les en un DFH indican la presencia de algin problema emocional,
Pareceria en consecuencia que los problemas emocionales se dan en la.
mayorfa de Ios pacientes clinicos y los alumnos de grados especiales,
mientras que los alumnos de grados comunes con bajo rendimiento
pueden estar suftiendo desajustes emocionales o no. Alrededor de un
quinto del total de buenos alumnos puede también mostrar signos de
problemas emocionales.
Comose sefialé anteriormente (pag. 69), un unico indicador emocio-
nal en un DFH no es concluyente, a menos que sea uno de los siete
relacionades con desemperio escolar (Tabla 17). La mera presencia de
un signo de ansiedad o de agresividad en un protocolo no es por si
misma una indicacién de perturbacién emocional. La ansiedad y la
agresividad en grados moderados pueden de hecho servir como
fuerzas motivadoras para un buen desempefio, mientras que una
ausencia total de ansiedad o de agresividad puede impedir el impulso
hacia el éxito y el rendimiento. Séto cuando la ansiedad y la agresi-
vidad son extremas, o de un monto mayor del que el nifio puede
manejar es que se vuelven paralizadoras e interfieren con el éxito
académico. En este orden de cosas, se observé que algunos signos de
ansiedad, por ejemplo sombreado de la figura o nubes, se daban hasta
cierto punte tanto en los DFH de los buenos como de los malos
alumnos. Lo mismo se daba en el caso de los indicadores de agresi-
vidad, p. ¢j., dientes, El valor diagnéstico de cada indicador emocional
aumenta cuando se combina con uno o mas indicadores emocionales
diferentes en el mismo protocolo.
en aetna nee
INTERPRETACION DE LOS INDICADORES EMOCIONALES
En las secciones precedentes de este capitulo, se demostré la
validez clinica de los 30 indicadores emocionales probando su capa-
cidad para discriminar los DFH de grupos de nifios con varios tipos de
problemasy otros que no presentan ninguno. Seha dicho relativamen-
te poco del significado de cada indicador emocional. Aqui analizare-
mos los significados especificos dé los indicadores emocionales en los
DFH. Se intentard integrar los resultados de la autora y relacionarlos
con las hipétesis y los datos obtenidos por otros investigadores,
especialmente Machover (1949, 1958, 1960), Levy (1963), Hammer
(1963) y Jollles (1952, 1953).
Parece haber un consenso entre los expertos en DFH en cuanto a
86
eesapu eines
ee
queno existe una relacion univoca entre ningun signo aisladedel DFH
y un rasgo determinado de personalidad o conducta por parte del
Yyarén ola nifia que hace el dibujo. Las ansiedades, los conflictos o las
actitudes pueden ser expresados en el DFH de distintas maneras por
nifios diferentes, 0 por un mismo nifio en momentos distintos. Esta
autora sélo puede subrayar lo que otros han enfatizado una y otra vez:
noes posible efectuarun diagnéstico o una evaluacién significativade
Ja conducta o dificultades de un nifio sobre la base de un signo aislado
del DFH. El dibujo otal y la combinacién de varios signos e indica-
dores deberfa ser considerado siempre y luego deberia analizarse
tomando en cuenta la edad, maduracién, estado emocional, nivel
sociocultural, y luego evaluarlo relaciondndolo con los datos disponi-
bles de otros tests.
La discusién que sigue sobre el significado de cada indicador
emocional no constituye un esfuerzo para crear otro eémodo “manual
de recetas de cocina” para la interpretacién de los dibujos. Conside-
ramos deplorable el enfoque tipo “recetario de cocina” para el andlisis
de dibujos, ya que a menudo es empleado mecdnicamente por los
psicélogos deficientemente entrenados o con menos experiencia. Con
este métodode“recetario de cocina” uno consulta el significado de cada
signo y sale con un diagnéstico “listo para llevar” sin. eonsiderar fa
figura total ni tomar en cuenta la edad y el sexo del nifio, su
inteligencia ni su contexto sociocultural. También se ignoran las
circunstancias en las que se realizé el dibujo.
La Tabla 19 sintetiza los resultados de los distintos estudios sobre
Jos indicadores emocionales que presentamos anteriormente en este
volumen asf como los resultados de una investigacién sobre los DFH
de nifios con lesién cerebral que sigue mas adelante (pag. 238), Una
ojeada a los datos de la Tabla 19 muestra claramente que algunos de
Jos indicadores emocionales tienen mayor valor diagnéstico que otros.
En esta seccion discutiremos cada indicador emocional por separado.
La integracién pobre de las partes de la figura (ilustraciones 2, 6,14)
es un fendémeno comin en los DFH de losnifios pequesios ¢ inmaduros,
Se establecié que este signo no es un indicador emocional vélido antes
de los 7 afios para los varones y de los 6 afios para las nivias. A partir
de esta edad, la integracién pobre se dio frecuentemente en los DFH
de los pacientes clinicos, nifios manifiestamente agresivos, malos
alumnos de primer grado, alumnos de grados especiales y muy
especialmente an los dibujos de los lesionados cerebrales. No se dio en
Jos protocolos de ninguno de los nifios bien adaptados ni de los buenos
alumnos. Este indicador parece estar asociado eon unoo varios de los
siguientes factores: inestabilidad, una personalidad pobremente in-
87Tabla 19
Resumen de Jos resultados sobre indieadores emocionales
en los DFH infantiles
Indicadores Probl. Timi- Agre- Psico- Robo Dafio Mal Grados
emocionales emoe. dos ives somst. cereb.desomp, capo-
escolar ciales
Integracién
Sombroado: cara
Sombreado: cuerpo
Sombreado: manos
Asimetria
Fig. inclinada
Fig. pequetia
Fig. grande
Transpareneia
o Oo x x x
Ed
4 Pt pe
>
o 0G 2 00
Pd ba De bd
Cabeza poqueita
Qjos bizcos
Dicates
Brazos cortos
Brazos largos
Brazos pegados
Manos grandes
Manes seccionad.
Piornes juntas
Genitales
Monetroo
Tres figuras
Nubes
Omisién de:
Ojos
Nariz
Boca
Cuerpo
Brazos
Piernas
Pies
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°
°
X Esto ttom se da significativamente més « menudo en los DFH dol grupo indicado,
O: Este {tam se da mds a menude en los DFH del grupo indicado.
tegrada, coordinacién pobre o impulsividad. Parece indicar inmadu-
Tez por parte del nifio, la cual puede ser el resultado de retraso
evolutivo, deterioro neurolégico, regresién debida a serias perturba-
ciones emocionales 0 a estos tres factores conjuntamente. Es impo-
88tds acpaeatiopetineote ntl
nuliguovaaremnsiavanieten
sible determinar cul de ellos estd implicade en un caso dado basén-
dose exclusivamente en este indicador emocional.
‘Los resultados que presentamos aqui coinciden con las conclusio-
nes de otros investigadores que trabajaron con dibujos de pacientes
adultes. Reznikoff y Tomblen (1956) encontraron que la integracién
pobre de Jas figuras se asociaba con organicidad en los adultos.
Harnmer atribuye la sintesis deficiente de los DFH a perturbaciones
emocionales, mientras que Machover afirma que se debe a organici-
dad oa retraso mental.
El sombreado en los DFH, segtin todos los expertos, es una mani-
festacién de angustia, y el grado de sombreado se estima que estd
yelacionado con la intensidad de la angustia que experimenta el nifio.
Nuestros datos coineiden con la observacién de Machover de que el
sombreado del DFH es normal en los nifics pequefios y no necesa-
riamente indica un problema psicopatoldgico. Pero a medida que los
nifios erecen, el sombreado de la figura humana adquiere una consi-
derable significacién diagnéstica. La tinica exeepeién a esta regla esel
sombreddo de la cara, que es altamente significativo en todas las
edades. .
El sombreado de la cara es muy inusual en cualquier nivel de edad
y, por Jo tanto, es un indieador emocional valido para todos los nijios
entre 5 y 12 afios. Este item se observ mas a menudo en los dibujos
de los pacientes clinicos y en algunos DFH de nifios manifiestamente
agresivos y que robaban. Se notaron dos tipos diferentes de som-
breado. El primer tipo consistfa en el sombreado de la cara entera
(ilustraciones 28 y 96). En algunos casos, el sombreado era tan espeso,
que habian desaparecide todas las facciones Clustracion 25 oc), Este
tipo de sombreado siempre fue efectuado por nifios seriamente per-
turbados, dominados por la ansiedad y que tenian un concepto muy
pobre de sf mismos.
En el segundo tipo de sombreado, éste estaba reducido a sélo una
parte de la cara (p. ¢j. la boca, nariz, ojos). Los nifios que hacian este
tipo de sombreado en sus dibujos generalmente estaban menos per-
turbados que os anteriores. El sombreado parcial de la cara parece
reflejar ansiedades especificas referidas a los rasgos que han sido
sombreados, 0 a sus funciones. La Hustracién 3 muestra el DFH de
Max, de 7 atios, un nifio de inteligencia normal. Max era el hijo unico
de una madre dominadora y ambiciosa que lo abrumaba de cariiio y lo
agobiaba con sus exigencias. Max era un pequefio muy inmaduro y
dependientecon suceceo infantil. Cada vez que: Max abria laboca para.
hablar, la madre le corregia Ja pronunciacién. Debido a esto, Max se
volvié muy sensible con relaci6n a su lenguaje y comenzé a tartamu-
89dear. El espeso sombreado de la porcién inferior dela cara en el dibujo
de la Hustracién 3 muestra claramente la preocupacién del nifio por
su lenguaje.
Se obtuvieron dibujos similares de otros nifios con dificultades de
lenguaje, que se sentian ansiosos por este problema, Los nifios con
defeetos de lenguaje que no se sentian especialmente preocupades por
el mismo no sombreaban el drea de la boca en sus DFH. Estos datos
coneuerdan con la observacién de Hammer de que el sombreado de la
cara en el DFH indica descontento con uno mismo.
El sombreado del cuerpo y/o extremidades (ilustraciones 6, 9, 15,
28) es comin en las nifias hasta los 7 afios y en los varones hasta los
8. No selo considera un indicador emocional validohasta los8y 9 afios,
respectivamente. La autora concuerda con Machover en que las
implicaciones del sombreado en los DFH no varian por el hecho de que
sea tan comin. El sombreado del cuerpo en un DFH indica ansiedad
por el cuerpo. Pero dicha ansiedad es comin entre los nifios que
comienzan la escuela, quienes precisamente estan empezando ahacer
conscientes las diferencias corporales y las fanciones corporales. Por
consiguiente, ¢l sombreado del cuerpo no puede considerarse un signo
psicopatolégico en este nivel de edad. Sin embargo, si el sombreado
persiste hasta los 8 afios en las nisias 0 los 9 en los varones, y atin mds
allé, entonces se vuelve clinicamente significativo, Entre los nitios
mayores este indicador se encontré significativamente mas a menudo
en los dibujos de los pacientes clinicos, los nifios con problemas
psicosomaticos y los que robaban.
Machover formulé la hipdtesis de que el sombreado de los brazos
refleja sentimientos de culpa por impulsos agresivos o por actividades
masturbatorias, mientras que atribuye el sombreado de las piernas a
ansiedad por el tamajfio y crecimiento fisico o a preocupacién por im-
pulsos sexuales. Los resultados obtenidos por nosotros no son incompa-
tibles con estas afirmaciones, pero es importante recordar que estas
interpretaciones son sélo hipétesis. Se puede asumir con seguridad que
e] sombreaddo en los DFH revela 4reas generales de preocupacién, pero
el sombreado no indica la causa especifiea subyacente a la ansiedad
manifiesta. No es posible diferenciar sobre la base del sombreado de los
brazos los nifios que sufren ansiedad masturbatoria de los que experi-
™entan sentimientos de culpa por robar. Todo lo que puede afirmarse
con certeza es que un nifio que sombrea los brazos en su figura padece
angustia relacionada con alguna actividad real o fantaseada en la que
intervienen sus brazos. La naturaleza de esta actividad tiene que
determinarse mediante los dates de otros tests, preguntdéndole o con-
sultando los datos sobre su conducta que figuran en su legajo.
90
A
sexiness EDAPeintlosaedestatin
El sombreado de las manos y/o cuelio Glustraciones 4, 6, 45) no es
un indicador ‘emocional valido hasta los 7 afios en las nifias y los 8 en
Jos varones. A partir de esta edad se lo encontré més a menudo en los
dibujos de los pacientes clinicosy de Jos nifios que roban, pero también
se dio en los nitios timidos y en Jos agresivos. E] sombreado de las
nanos no parece estar relacionado con ninguna actividad especifica
sino mds bien con angustia per alguna actividad real o fantaseadacon
las manos. Levy, Machover y Jolles han enunciado hipétesis simila-
Los resultados de nuestras investigaciones también confirmaron
Jas observaciones de Machover referentes al sombreado del cuello en
el DFH. Todos los nifios que sombrearon el cuello en sus dibujos
estaban realizando visibles esfuerzos para controlar sus impulses.
Algunos se las arreglaban para mantener un control precario y rigido
de los mismos, siempre que no se los expusiera a una tension y un
esfuerzo excesivos. Otros vacilaban entre Ja impulsividad y el hiper-
control, yendo de un extremo al otro. La Tlustracion 4 muestra el DFH.
dedim, un nitio de@ afios de inteligencia superior con serios. problemas
deaprendizaje. Alternaba entre unaconductaimpulsiva actuadora en.
el hogar y un completo retraimiento y ensuefio diurno en la escuela.
Lagrosera asimetria de las extremidades (ilustraciones 7 [fig. 2], 14
25a) se dio muy a menudo en los dibujos de los pacientes clinicos, los
nifios agresivos, los sujetos con lesién cerebral y los alumnosdegrados
especiales, Ninguno de los buenos alumnos ni de los nifios timidos
presenté esteindicador en sus dibujos. El mismo parece estarasociado
con coordinacién pobre ¢ impulsividad. En nuestras investigaciones
se noté que laasimetria grosera aparecia s6lo en los DFH denifioscon
antecedentes de disfuncién neurolégica y que mostraban otros signos
de organicidad en sus protocolos. No se puede afirmar con certeza si
la asimetria de las extremidades en un DFH es el resultado de falta
de coordinacién y pobreza de control muscular fino o si refloja el
sentimiento del nifio de no estar bien coordinado y sin un equilibrio
adecuado. Machover postulé la hipétesis de que una perturbacién
general dela simetria en el DFH es una manifestacién neurdtica pero
que también refleja falta de coordinacién, torpeza fisiea, inadecuacién.
fisica 0 una confusion de la dominancia lateral.
La inclinacin de la figura en 15° o mds (ilustraciones 2, 8yh)
ocurrié significativamente mas a menudo en los DFH de los pacientes
clinicos, lesionados cerebrales, alamnos deficientes y alumnos de
clases especiales que en los dibujos de los buenos alumnos y los nifios
bien adaptados. Se dio en los dibujos tanto de los nifios timidos como
de los agresivos, en los pequefies con problemas psicosomaticos y en
OLlos que robaban. Este item no parece estar asociado con ningdn tipo
especifico de conducta 0 de sfntoma; mas bien sugiere una inestabi-
lidad y falta de equilibrio general, Similares observaciones fueron
realizadas por Machover, quien afirmé que una figura inclinada
refleja un sentimiento de desequilibrio mentaly una personalidad que
se estd trastornando. Hammer engontré este indicador en los dibujos
de los pacientes adultos pre-esquizofrénicos. En nuestros estudios se
lo observé en los DFH de nifios que sufrian desde una leve pertur-
bacién hasta un trastorno profundo. No creemos que en el caso de los
hifios este item indique conducta pre-esquizoide o necesariamente
una perturbacién seria. En los dibujos infantiles parece indicar un
sistema nervioso inestable o una personalidad lébil; sobre todo su-
giere que al niiic le falta una base firme.
La figura pequena (ilustraciones 2, 4 y 5) se encontré en los proto-
colos de los pacientes clinicos, alumnos de clases especiales y los nifios
timidos. Sélo raramente se dio en los dibujos de los nifies manifies-
tamente agresivos. Este indicador emocional parece reflejar extrema
inseguridad, retraimiento y depresién. Si bien no todos les nifios
deprimidos e inseguros necesariamente dibujan figuras pequefias,
puede preasumirse con bastante seguridad que los nifios que lo hacen
son timidos, retraidos y probablemente deprimidos. Pero el dibujo no
revelard la extensién de ta timidez y 1a depresién. Algunos nitios
t{midos pueden pasarla bastante bien, mientras que otros se depri-
men o retraen demasiado como para poder funcionar adecuadamente
en su casa o en la escuela,
Nuestros resultados concuerdan con las observaciones de otros
investigadores. Machover, Jolles, Levy y Lewinson (1964) coinciden
en que las figuras pequefias indican sentimientos de inadecuacién, un
yo inhibido, preocupacién por las relaciones con el ambiente y, sobre
todo, depresién.
La figura grande, de 23 em o mas de altura (ilustraciones 16, 29y
37), ocurre frecuentemente en los DFH de los nifios pequefios y no
adquiere significacién clinica hasta los 8 aiios (ambos sexos).-En ese
nivel de edad y en los posteriores se dio mas a menudo en los dibujos
de.los pacientes clinicos, y especialmente en los DFH de nifios
agresivos y que robaban, Las figuras grandes aparecen asociadas con
expansividad, inmadurez y controles internos deficientes.
Machover postula la hipétesis de que los dibujos grandes, en elcaso
de pacientes adultos, reflejan sentimientos narcisistas e ilusiones
paranoides de grandiosidad que encubren sentimientos de inade-
cuacién. Se ha dicho también que los dibujos grandes y vacios con una
sintesis pobre revelan tendencias psicopdticas u organicidad. Los
92
spiece soi
:
:
.
:
:
e
:
.
c
:
|
datos obtenidos por nosotros sugieren que el dibujo de figuras ‘grandes
esmenos patolégico en los nifios de lo queparece ser en los adultos. Sin
embargo, se observé que varios de Jos nifios que produjeron figuras de
an tamaiio eran muy inmaduros y tenfan. una historia dedisfuncién
cortical. Esto abonaria la hipétesis de Machover de que las figuras
grandes y vacias pueden indicar organicidad,
Las transparencias (ilustraciones 28, 53 y 82) aparecieron signifi-
cativamente més a menudo en los DFH de pacientes clinicos y
jesionados cerebrales que en los dibujos de los alumnos bien adapta-
dos. Los nitios con antecedentes de robo y los abiertamente agresivos
dibujaron transparencias més a menudo que los nifios timidos y los
que tenian dolencias psicosomaticas. Pareceria, en consecuencia, que
Jas transparencias en el DFH estan asociadas con inmadurez, im-
pulsividad y conducta actuadora.
Se notaron dos tipos de transparencias de los DFH infantiles.
Algunos de los pequefios mas inmaduros y concretistas realizaron
primero el bosquejo de una figura, o una especie de esqueleto y luego
le dibujaron las vestimentas alrededor (ver la Zlustracién 43) como si
estuviera literalmente vistiendo a una persona. Otro grupo de nifios
hicieron un DFH completamente comin, pero luego se concentraron
enuna porcién particular dela figura mediante la transparencia deun.
Area limitada y especifica. Con bastante frecuencia, esta drea se ubiea
enla zona genital. Este tipo especifico de transparencia se estima que
es similar al sombreado e indica ansiedad y preocupacién porlaregién
particular de] cuerpo revelada por la transparencia.
En Ja Zlustracién 9 se muestra un ejemplo de este tipo espectfico de
transparencia, dibujado por Connie, una nitia de 10 afios, de inteli-
gencia normal. Connie habia soliviantado a los padres de familia del
barrio donde vivia al haber iniciado a otros nifios en el juego de las
“estatuas”. En este juego algunos nifios tenian que desvestirse y posar
desnudos para ser admirados y examinados por los otros. Se obtu-
vieron dibujos similares de otros nifios que habfan tenido actividades
y exploraciones sexuales, y de pequeyios que las habfan fantaseado 0
que habfan observado conductas sexuales que no comprendieron y que
los habian confundido y asustado.
Machover sostiene que el tipo coneretista de transparencias en el
DFHes“normal” en losnitios, pero que revela un juiciodeficiente cuando
se da en los adultos, Nuestros resultados no corroboran la primera
afirmacién. Las transparencias, tal como son. definidas en este libro
(Apéndice D) no fueron normales en los nifios de edad escolar. Son
inusuales pero no necesariamente patolégicas. Este tipo primitivo de
transparencia se encuentra habitualmente en los DFH de nifios im-
93pulsivos, inmaduros, de pensamiente concreto y en los que padecen de
disfuncién cortical. Machover sugiere ademas que el dibujode los dedog
en el bosquejo de un pie o un zapato indica agresividad patolégica. Este
tipe de transparencia parece ser mds significativo para los pacientes
adultos que en cl caso de oscolares. Nuestros datos no confirman la
hipétesis de Machover. Ninguno de los nifios con agresividad manifiesta
dibujaron los dedos de los pies en sus figuras, y ninguno de los escasos
nifios pertenecientes a los restantes grupos que lo hicieron, pudo ser
considerado come patolégicamente agresivo, Sus historias clinicas
mostraban mas bien que se trataba de impulsivos con pensamiento
concreto que presentaban evidenecias de disfuncién cortical. Las trans
parencias en los pies no parecen ser diferentes de las demas transpa-
rencias y pueden ser interpretadas de la misma manera.
Podemos afirmar categéricamente que las transparencias de dreas
corporales especificas no son normalesen los DFH de los nitios en edad
escolar, Generalmente indican angustia, conflicto o miedo agudo, por
Jo comdn con respecto a lo sexual, el nacimiento o mutilacién corporal.
Con mucha frecuencia, los nifios que dibujan tales transparencias
especificas estan en efecto pidiende informacién o que los tranquilicen
respecto de sus impulsos o sus experiericias. Creemos que este tipo de
transparencias en los DFH no debertia ser ignorado, ya que muy a
menudo representa un pedido de ayuda por parte de nitios incapaces
de poner en palabras sus ansiedades y preguntas.
La cabeza pequetia (ilustraciones 36, 46 y 50} se dio raramente en
los DFH obtenidos en los estudios que presentamos aqui. Pero cuando
este indicador emocional se dio, fue exclusivamente en log dibujos de
tos pacientes clinices y en los nifios inadaptados. Ninguno de los
buenos alumnos ni de los bien adaptados dibujé cabezas pequeiias en
sus figuras. La presencia de este item parece indicar sentimientos
intensos de inadecuacién intelectual.
Nuestros datos no parecen confirmar la hipétesis de Machover
sobre ol dibujo de cabezas pequerias por parte de los pacientes adultos.
Esta autora afirmé que una cabeza pequefia representa el deseo
consciente de personas cbsesivo-compulsivas que procuran ignorar el
control de su cerebro y buscan seguir el dictado de sus impulsos. Segin
nuestros estudios, los nifios que dibujaron cabezas pequefias no eran
obsesivos,
Los ojos bizcos (ilusiraciones 16y 107) se dieron escasamente yeélo
en los dibujos de algunos pacientes cliniegs. Parece que los ojos bizcos
86lo son dibujados por niftos muy hostiles hacia los demas. Este tipo
de dibujo se interpreta como un reflejo de ira y rebeldfa. En contraste,
el dibujo de una mirada lateral de ambos ojos (Ilustraciones 5, 136, ¢)
94.
e
/
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g
5
i
.
no se establecié que fuera un indicador emocional elinicamente vélido
en los DFH infantiles. Para una discusién mas amplia del significado
dela mirada, ver la pag. 105. Cuando un nifio dibuja una figura bizea
parece significar que las cosas estén fuera de foco para 6, que nove el
gnundo de la misma manera que los demés. Estd “tan chiflado que no
puede ver al derecho”. No puede 0 no quiere ajustarse a los modos
esperados de comportarse.
‘Los dientes (ilustraciones 36, 60y 61) se dieron en alguna medida
en los protocolos de los alumnos bien adaptades y los mal adaptados
yen algunos dibujos de todos los grupos de pacientes clinicos con una
sola excepcién. La excepcién fueron Josnitios timidos; ninguno de ellos
Je dibujé dientes a sus figuras. En la medida en que la presencia de
dientes se da en los DFH con relativa amplitud, no se la puede
considerar como un signo de seria psicopatologia. Pero dado que
ocurrié més a menudo en los protocolos de los nifios manifiestamente
agresivos y no se dio en absoluto en los dibujos de los nifios retraidos,
debe concluirse que los dientes son un signe de agresividad, y no s6lo
de agresividad oral. Por supuesto, admitimos que no toda agresividad
es perjudicial. En los nifios un cierto monto de agresividad es normal
y aun necesaria para ser Vderes y realizarse. Por consiguiente, la
presencia de dientes en un protocolo no puede considerarse eomo un
signo de perturbacién emocional si no hay otros indicadores emocio-
nales en el protocolo. Pero si se dan junto con otros indicadores,
entonces sé vuelven significativos para el diagnéstico y contribuyen a
la interpretacién global del DFH.
Los dientes parecen tener implicaciones més serias en los dibujos.
de pacientes adultos que en los DFH infantiles. Hammer sugiere que
la presencia de dientes puede indicar no sélo agresién oral, sino
también tendencias sadicas, Machover afirmé que el dibujo de dientes
revelaagresién oral infantil y que se encuentra frecuentementeen los
dibujos de esquizofrénicos simples, histéricos adultos emocional-
mente superficiales y deficientes profundos. No se pudo establecer la
validez de estas hipétesis para los dibujos infantiles.
Los brazos cortos (ilustraciones 15, 34 y 56) se dieron significati-
vamente més a menudo en los protocolos de pacientes clfnicos, nifios
con enfermedades psicosomaticas, alumnos de grados especiales y
nifios tfmidos. No estuvieron totalmente ausentes en los dibujosde los
buerios alumnos, Este indicador emocional parece reflejar la difieul-
tad del nifio para conectarse eon el mundo circundante y con las otras
personas, Parece estar asociado con la tendencia al retraimiento, al
encerrarse dentro de siya la inhibicién de los impulsos. Los nifios que
dibujan brazos cortos tienden a ser bien educados; de hecho, a veces
95son demasiado bien educados para su propio bien. Los brazos cortos en
los DFH infantiles no pueden interpretarse como un signo de falta de
ambicién como afirmaba Machover, Pueden indicar timidez y falta de
agresividad y quizé de liderazgo, pero no necesariamente una falta de
deseos de progresar y triunfar. Estos resultados coinciden con los de *
McHugh (1964), que encontré que los nifios de alto y bajo rendimiento
no difieren en este item.
Los pacientes clinicos dibujaron brazos largos (ilustraciones 6, 29y
32) mds a menudo que los alumnos bien adaptados. Las figuras
humanas con brazos iargos se dieron con frecuencia entre los nifiog
manifiestamente agresivos y, en cambio, no se dieron en ningun nitio
timido. Por To tanto, parece que los brazos largos en el DFH estén
asociados con una inclusién agresiva en el ambiente, Estas conclu-
siones concuerdan con las de Hammer y Levy. Estos observaron que
los brazos largos reflejan necesidades agresivas dirigidas hacia
afuera. Machover, por otra parte, pensaba que este item Tefleja
ambicién de logros y adquisiciones, incluyendo la biisqueda de amor
y de afecto. Nuestros datos no permiten confirmar las hipétesis
especificas de Machover. Pero todos los investigadores parecen con-
cordar en un punto: los brazos largos en el DFH estan asociados con
la conexion con los demés en contraste con la tendencia al retrai-
miento que revelan los brazos cortos.
Los brazos pegados a los costados del cuerpo (ilustraciones 16, 40.
56) ocurrieron raramente en los DFH infantiles reunidos en los
estudios presentados aqui, Pero cuando se dio, por lo comin —aunque
no exclusivamente— se trataba de pacientes clinicos. Este indicador
no demostré estar asociade con ninguno de los tipos especificos de
conductas estudiados. Parece que los brazos adheridos al cuerpo
reflejan un control interno bastante rigido y una difieultad de co-
nectarse con los demas. Los historiales elinicos de los nifios que
dibujaron los brazos de este modo revelaban que carecian de flexibi-
lidad y que sus relaciones interpersonales eran pobres. Cuando en un
Protocolo se encuentra unicamente este indicador emocional, no
puede considerarselo como un signo de psicopatologia severa, pero
cuando aparece junto con otros, entonces adquiere signifieacién cli-
nica.
Parece que este signo tiene implicaciones mds serias en el caso de
los pacientes adultos que cuando se trata de dibujos infantiles.
Machover refiere que los pacientes parangides y los esquizofrénicos
frecuentemente dibujan brazos pegados al cuerpo, como para prote-
gerse de los ataques del ambiente. Postula la hipétesis de que los
brazos pegados al tronco revelan una tendencia a la reserva y el
96
gece itczhangi eI
eeyetraimiento. Levy sugiere que este tipo de presentacién de los brazos
yefleja un conflicto profundamente arraigado y un control frégil, y que
se da en los individuos pasivos y muy defensivos.
Las manos grandes (ilustraciones 6, 584 71) se encontraron con una
frecuencia significativamente mayor en los pacientes clinicos y los
alumnos de clases especiales. Este indicador emocional se dio espe-
cialmente mas a menudo en los nifios abiertamente agresivos y en los
que robaban. Ninguno de los nifios timidos ni de los psicosomaticos
dibujaron manos grandes. De este modo, las manos grandes parecen
estar asociadas con Ja conducta agresiva y actuadora en la que estén
jmplicadas las manos, ya sea directamente como en la agresién
manifiesta, o indirectamente, como en el robo. Nuestros resultados
muestran que las manos grandes en un dibujo reflejan agresividad,
pero no ofrecen ningun indicio especifico sobre los factores especfficos
que contribuyen a Ja conducta actuadora infantil.
Levy sostiene que las manos grandes reflejan wna conducta com-
pensadora de sentimientos de inadecuacién, insuficiencia manipu-
Jatoria o dificultad para establecer contacto con otros. Machover
considera que las manos grandes son tipicas de varones que estén
compensando una debilidad fisica 0 que se sienten culpables del uso
que hacen de sus manos. También puede haber otras razones por las
cuales un nifio dibuja manos grandes, Parece mas seguro limitar la
interpretacién de este signo al hecho demostrado de que las manos
grandes en un DFH indican en los nijios una tendencia a actuar
impulsos agresivos con sus manos, La razén subyacente para esta
agresividad tiene que determinarse con los datos de otros tests,
observaciones y el andlisis de las historias sociales.
Las manos seccionadas, 0 seael dibujo debrazos sin manos ni dedos
(ilustraciones 3, 16 y 42) se dio significativamente mas a menudo en
los DFH de pacientes clinicos, lesionados cerebrales y alumnos de
clases especiales. Sele encontré en los dibujos de los niiios timidos mas
frecuentemente que en los DFH de Jos manifiestamente agresivos;
pero las manos seccionadas se dieron con igual frecuencia en los nifios
que robaban y en los psicosomaticos. En consecuencia, parece que este
signo refleja sentimientos de inadecuacién o de culpa por no lograr
actuar correctamente, 0 por la incapacidad para actuar.
Estos resultados coinciden con la observacién de Machover de que
Ta omision de las manos en un dibujo indica los sentimientos de culpa
del nifio por robar 0 por tener mal rendimiento escolar. Menciona
también la posibilidad de la existencia de ansiedad de castracién
cuando un nifio produce un DFH sin manos. Esta hipdtesis fue
confirmada por los historiales de varios de los nifios estudiados en esta
. 97investigacién, que habfan dibujado figuras sin manos. Como la omi-
si6n de las manos parece estar relacionada con un amplia variedad de
actitudes y ansiedades, no es posible determinar tinicamente sobre la
base de la presencia de este indicador emocional en un protocole, si el
nifio en cuestién esté padeciendo sentimientos de inadecuacién
mental o fisiea, de culpa, ansiedad, o todo esto. Sélo es posible afirmar
gue esté preocupado y se siente inadeeuado. La causa de su ansiedad
y su perturbacién debe determinarse mediante pruebas comple-
mentarias, interrogatorio y observacién.
Las piernas juntas (ilustraciones 40, 54 y 66) se dieron raramente en
los DFH examinados en este libro. Se lo hallé mas a menudo en los
dibujos de pacientes clinicos y en nifios con afecciones psicosomaticas,
Un estudio de loshistoriales de losnifios que dibujaron Jas piernasjuntas
en los DFH sugiere la siguiente interpretacién; este indicador emocional
parece indiear sobre todo tensién en el nifio, yun rigide intento por parte
del mismo de controlar sus propios impulses sexualeso su ternorde sufrir
un ataque sexual. Parece significativo que varias de las nifias que
dibujaron figuras con las piernas juntas habian estado expuestas a
traumas sexuales en manos de hombres mayores.
Estos resultados concuerdan.con la observacién de Levy de que una
postura tiesa en el dibujo de una figura indica rigidez y un control
frdgil, y con la hipstesis de Machover de que este signo en los dibujos
de adultos refleja rechazo de la aproximacién sexual de los otros.
El dibujo de los geniiales (ilustraciones 27, 69 y 94) se dio escasa-
mente en los dibujos de la presente investigacién. En los casos en que
se dio, fue invariablemente en los dibujos de los pacientes clinicos que
estaban muy perturbados y que eran manifiestamente agresivos. La
presencia de genitales o sfmboltos de los mismos debe ser considerada
como un signo de psicopatologias seria que implica aguda angustia por
el cuerpo y control pobre de los impulsos.
Se encontraron monstruos o figuras grotescas (ilustraciones 48, 74
y 8Q) primariamente en los DFH de los pacientes clinicos, alumnos de
clases especiales y malos alumnos. El dibujo de monstruos o figuras
Brotescas no parece estar asociado con ningun tipo especifico de
conducta, sino que més bien refleja sentimientos de intensa inade-
cuacién, y un muy pobre concepto de si mismo. Losnifios que dibujaron
monstruos no humanos o artefactos como robots (Hustracién 7D) pa-
recen percibirse a s{ mismos como seres distintos de los demas, como
sino fueran del todo humanos; los nifios que dibujan payasos 0
vagabundos (Iiustracion 68) se consideran individuos algo ridiculos de
los que los demas se rien y que no son plenamente aceptados por los
otros; mientras que los pequefios que dibujan figuras de tiempos
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prehistéricos (Hustracion 72) o miembres de grupos minoritarios de
Jos que ellos no son integrantes (lustracién 47), se sienten como si
furan extrafios que noestén plenamente integrados en la sociedad en
Ta que viven.
Bl dibujo de figuras grotescas se da en todos los niveles de edad y
con cualquier nivel de inteligencia, desde borderline hasta nifios con
eapacidad superior. Un chico inteligente se puede sentir tan inferior
en comparacién con un hermano mayor brillante, como un nifio
yetardado con respecto a una hermana de inteligencia normal baja.
Los dibujes de monstruos o figuras grotescas pueden ser intrincados
ybien ejecutados (Tustracién 68) o tosco y muy inmaduro (Hlustracién
58). Loa resultados nuestros no corroboran la observacién de Harris
(1963, p.148) de que sélo los nifios inteligentes e imaginativos dibujan
figuras grotescas.
‘Los administradores de la prueba explicaran a veces el dibujode un
monstruoo un payaso por el hecho de que el nifio fue hace poco al cireo
o acaba de ver un monstruo en la televisién. Tal explicacién pasa por
alto el hecho de que el nifio vio también muchas figuras hermosas 0
heroicas en el circo que pudo haber dibujado, y que las obras de
television generalmente incluyen un héroe tanto como un villano. De
hecho, la mayoria de los nifios dibujan figuras positivas, La Ilustra-
¢ién 1 muestra les DFH de tres buenos alumnos que eligieron para
dibujar tres de los “héroes culturales” de su época: Davy Crockett,
Elvis Presley y un Beatle. En la extensa coleccién de dibujosinfantiles
dela autora, Superman es dibujado probablemente masa menudo que
cualquier otro personaje real o de la ficeion. (Hustracion 33).
Parece obvio que el nifio refleja experiencias recientes en sus
dibujos. Pero siempre es muy significativo cudles de sus muchas
experioncias decide reproducir y son las que le preocupan. A través de
los afios, los nombres y caras de los héroes y villanos de la radio, la
television y las historietas pueden cambiar, pero los valores y cuali-
dades que reflejan raramente varian. 8] significado ligado a mons-
trues y payasos continda siendo el mismo. Los presentes datos
confirman la observacién de Levy de que una persona que dibuja
payasos, historictas o figuras de aspecto tonto refleja desprecio y
hostilidad hacia sf mismo.
El dibujo espontaneo de tres o mas figuras (ilustraciones 7,8 105)
sedieron significativamente mas a menudo en los DFH de estudiantes
de bajo rendimiento y alumnos de clases especiales que en los de los
buenos alumnos y nifios bien adaptados. Muchos nifios dibujan
espontaneamente dos figuras, un varén y una nifia (Ilustracion 104)
oun hombre y una mujer, pero el dibujo de tres 0 m4s figuras es la
99excepcién. En la experiencia clinica de la autora, este tipo de DFH
siempre esta asociade con bajo rendirmiento escolar. Este indicador
emocional se encuentra casi exclusivamente en los dibujos de nifios de
capacidad limitada provenientes de familias grandes y con privacién
cultural y/o lesionados cerebrales,
Si un nifio dibuja espontaneamente muchas figuras en respuesta a
un requerimiento de dibujar “una persona completa”, exhibe una
forma de perseveracién que no es infrecnente en los preescolares muy
pequefios e inmaduros, y entre los nifios con datio neurolégico. Tal
perseveracién va a interferir necesariamente el trabajo escolar. Se
observé también que algunos de los nifios que dibujan figuras mil-
tiples carecen de un sentimiento de identidad o de ser una persona.
Frecuentemente en la realidad son uno del montén de nivios de la
casa y nunca han recibido mucha atencién individual. Estos nifios
tienden a quedarse perdidos en la escuela ya que nunca aprendieron
a funcionar independientemente. Los nifios que dibujan mas de tres
figuras habitualmente requieren una ayuda especial en la escuela
para poder convertirse en seres humanos individualizados.
Las nubes, liuviay nieve (lustraciones 19, 36 y 108) aparecieron
—con s6lo una excepcién— en los DFH de los pacientes clinicos y
alumnos escasamente adaptados. Las nubes se encontraron espe-
cialmente en Jos dibujos de nifios muy ansiosos con dolencias psico-
sométicas y en ninguno de los dibujos de los nitios con agresividad
manifiesta. Pareciera que lasnubes son dibujadas por los nifios que no
se atreven a golpear a otros y que en cambio dirigen la agresién contra
si mismos, Nuestra hipotesis es que el agregado espontaneo de nubes
en un DFH indica que el nifio se siente amenazado por el mundo
adulto, especialmente por los padres. En efecto, el nifie estd ubicado
bajo una nube, bajo presién desde arriba.
La omision de ojos en los DFH (ilustraciones 7, 12 y 18) es un fe-
némeno raro. Habitualmente los ojos son el primer detalle que agrega
un nifie después de haber dibujado la cabeza. La omisién de los ojos (no
la omisién de las pupilas, o sea, ojos que no ven) jamds debe ser
considerada como un descuido; siempre tiene importancia clinica. En
el presente estudio, este signo sdlo fue encontrado en los dibujos de
pacientes clinicos no agresivos. Se establecié que todos los que habian
omitido les ojos en sus figuras eran nifios aislados socialmente.
Tendian a negar sus problemas, rechazaban enfrentar el mundo y
escapaban a la fantastfa. Estos resultados coucuerdan con los de Stone
y Ansbacher (1965), que encontraron una relacidn significativa entre
la omisién de los ojos y otros “6rganos de comunicacién” en los DFH y
un escaso interés social por parte del nifio.
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Laomisién dela nariz (ilustraciones, 5, 15 y 34) se dio en la presente
jnvestigacion significativamente mas a menudo en los DFH de los
alumnos de clases especiales, los nifios timidos, los pacientes clinicos
y los enfermos psicosomaticos. En consecuencia, la conclusién es que
Ja omisién de la nariz en los DFH esta asociada con conducta timida
yretraida y con la ausencia de agresividad manifiesta. La omisién de
Ja nariz estd asociada con escaso interés social segiin Stone y Ans-
pacher. Tradicionalmente, la nariz ha sido identificada como un
simbolo félico, y en consecuencia su omisién ha sido interpretada por
Machover y otros como un signo de culpa por la masturbacién o
angustia de castracién. Este puede ser el caso de la mayoria de los
pacientes adultos que dibujan figuras sin nariz, pero no es necesaria-
mente vélido para los nifios. En los estudios efectuados por mi, muy
pocos de los nifios que exhibfan este indicador emocional en sus
dibujos, padecfan angustia de castracién. Para la mayoria de los nifios
que omitian la nariz, ésta no pareeia ser primariamente un simbolo
falico, sino un simbolo de empuje ¢ independencia. “Metemos la nariz”
cuando nos aventuramos en el mundo. Cuando un nitio omite la nariz
en su dibujo, puede estat expresando un sentimiento de inmovilidad
eindefensién, una incapacidad de progresar, avanzar con aplomo. La
omisién de la nariz parece reflejar mas a menudo una tendencia a
retraerse y ala timidez, pero a veces puede también sugerir angustia
por el cuerpo.y culpa por la masturbacion.
La omisién de la boca (ilustraciones 5, 18 y 46) se encontré mas a
menudo en los DFH de los pacientes clinicos, los alumnos de clases
especiales, los alumnos mediccres y los enfermos psicosomdticos.
También diferenciaba significativamente entre los jévenes timidos y
Jos agresivos. La omisién de este rasgo es siempre clinicamente
signiticativa. Refleja sentimientos de angustia, inseguridad y re-
traimiento, inclusive resistencia pasiva. Este indicador emocional
revela o la incapacidad del sujeto 0 su rechazo a comunicarse con los
demas, Los historiales de los nifios que omitieron la boca mostraron
una alta incidencia de miedo, angustia, perfeecionismo y depresién.
Estos resultados concuerdan con la observacién de Machover de que
algunos pacientes deprimidos de edad adulta omitian la boca en sus
dibujos. También sugiere que este signo se da en los dibujos de
asmaticos. La presente investigacién no incluyé suficiente mimero de
nifios asmaticos como para confirmar o rechazar la hipdtesis.
La omisi6n del cuerpo Clustraciones 50, 97 y 101 a) ocurrié signi-
ficativamente mas a menudo en los DFH de los pacientes clinicos, los
lesionados cerebrales, los estudiantes mediocres, los alumnos de
clases especiales y los que robaban. Es normal para alummnos de
101guarderfas dibujar el “renacuajo”, esto es, dibujar figuras sin euerpos
que consisten meramente en una cabeza de la que salen los brazos y
las piernas (Ilustracién 105). Cuando los nifios de jardin de infantes
no pueden hacer cuerpos en sus DFH, pude suponerse que son todavia
inmaduros como los nifios de cuatro afios y que estan funcionando a
este nivel. En Jardin, esta omisién puede representar un grade de
maduracién esencialmente normal, aunque algo lento, o puede serun
signo de retraso y/o dafto neurolégico. Entre los nifios de edad escolar,
la omisién del cuerpo es invariablemente un signo serio de psicopato-
logia y puede reflejar cualquiera de las siguientes condiciones: retraso
mental, disfuncién cortical, inmadurez severa debida a retraso evo-
lutivo, o perturbacién emocional con aguda ansiedad por el cuerpo y
angustia de castracién. No es posible establecer a partir de un solo
DFH cual de estos factores es la causa de la omisién del cuerpo y si dos
o mas de estos factores inciden conjuntamente. Si un nifio incluye el
cuerpo en e] dibujo de una mujer, pero lo omite en el de un hombre
(lustracién 104) entonces parece probable la presencia de problemas
emocionales. El nifio retardado o el lesionado cerebral que no esté
emocionalmente perturbado es mds probable que omita el cuerpo
tanto en las figuras masculinas como femeninas.
La omision de los brazos (ilustraciones 2, 27 y 56) se hallé signifi-
cativamente mds a menudo en los DFH de los pacientes clinicos, los
estudiantes mediocres y los alumnos de las clases especiales. Se
establecid también que los nitios agresivos y los que roban omitian los
brazos mucho més a menudo que los timidos y aquellos con enfer-
medades psicosomaticas. Por consiguiente, parece que la omisién de
los brazos en el DFH refleja ansiedad y culpa por conduetas sociales
inaceptables que implican los brazos o las manos. Estos resultados
concuerdan con la observacién de Machover de que la omisién de los
brazos en un dibujo refleja culpa por la hostilidad o la sexualidad. Pero
la presente investigacién no corroboré la hipétesis de Levy y Machover
en el sentido de que este tipo de omisién esta asociada con depresién
y retraccién de la gente y del mundo de los objetos. Esta hipotesis
puede ser valida para pacientes adultos, pero no se cumplié en les
DFH infantiles. La omisi6n de los brazos fue extremadamente raraen
Jos dibujos de los niftos deprimidos y retrafdos. En el tinico caso en que
un varén timido y deprimido omitis los brazos en su DFH, también
tenia una historia de robos. Creemos que la omisién de los brazos
reflejaba su culpa y angustia por los robes mas que su depresién.
Los DFH son particularmente valiosos porque pueden reflejar
tendencias y actitudes cohflictivas. La clasificacién de los nifios en
grupos o categorias diagnésticas 0 de conducta es, cuando més,
102arbitraria, y aqui se hace sélo con fines de investigacién. En la vida
yeal, los nifios que vienen a la consulta del psicélogo casi nunca son
exelusivamenie deprimidos y retrafdos o sdlo agresivos. Habitual-
monte muestran una variedad de sintomas y problemas de conducta
que varian de tiempo en tiempo y en diferentes estadios evolutivos y
aun en situaciones distintas, p. ej., en el hogar y en la escuela.
La omisién de las piernas (ilustraciones 10, 16 y 65) es extrema-
damente rara y se dio sdlo en los dibujos de unos pocos pacientes
dinicos y alumnos mediocres, Las piernas figuran generalmente
entre los primeros rasgos que produce un nifio preescolar. Tienden a
aparecer en la secuencia evolutiva del dibujo después de la cabeza y
los ojos, atin antes de que empiece a dibujar el cuerpo y los brazos. Por
consiguiente, puede suponerse que la omisién de las piernasen el DFH
nunca es accidental. Machover postula la hipétesis de que la ausencia
de piernas revela conflictos en este 4rea. En el presente estudio este
indicador emocional parecia reflejar intensa angustia e inseguridad.
Las implicaciones especificas de este signo parecian estar relaciona-
das con el modo particular en que las piernas eran omitidas.
La Hustracion 10 muestra el dibujo de Nick, un nifio de 7 afios, con
distrofia muscular, Para Nick era dificil caminar y correr. Se le habia
brindado gran cantidad de atencién y cuidados asus piernasa lolargo
delos aiios. Por consiguiente, no es sorprendente que las haya omitido
totalmente, indicando asi su extrema preocupacién por las mismas.
Shirley, una nifia de 9 afios, de tamatio diminuto (pag. 141), hizo un
DFH tan enorme que la porcién inferior de la figura, incluyendo las
piernas, quedaba interrumpida por el borde inferior de la hoja
(Hustracién 16). En este caso, la omisién de las piernas esta direc-
tamente relacionada con el tamafio del dibujo y parece reflejar la
intensa preocupacién y ansiedad de la nifia por su pequefia estatura
y sus piernas cortas.
Las ilustraciones 11 y 12 muestran los DFH de dos pequerios gra-
vemente perturbados y retraidos. En ambos casos, las figuras estan
dibujadas de tal manera que las piernas quedan ocultas. Este tipo de
omisién de las piernas parece mostrar la falta de interés o la inca-
pacidad del nifio para “plantarse y hacerse ver”, valga la expresién.
Los dos varones que hicieron los dibujos eran tan inseguros y ansiosos
que buscaban refugio en la fantasia. En efecto, sus piernas eran
soportes demasiado débiles; todo lo que podian hacer era ocultarse 0
yacer y sumergirse en suefios diurnos. .
En la presente investigacién el nimero total de nifios que mostré
omisién de las piernas en sus DFH era demasiado pequefic como para
permitir generalizaciones amplias o efectuar eémputos estadisticos
103significativos. Las interpretaciones de los diferentes modos depresen-
tar la omisién de piernas deben considerarse, por consiguiente, sélo
como sugerencias que requieren ser sometidas especificamente a
ecomprobacién y confirmacién.
La omisién de los pies (ilustraciones 9, 27 y 68) no fueron clinica
mente significativas hasta los 7 afios en lasnifias ylos9 en los varones;
esto es, hasta que les nifios llegan a una edad en que comienzan a tener
més confianza en sf mismos y “pararse sobre sus propios pies”. En el
presente estudio, la omisién de los pies se hallé mds a menudo en los
DFH de los pacientes clinicos y de los nifios muy timidos. Parece que
esta omisién no esta asociada con ningun tipo especifico de conducta
o sintoma; en cambio, parece reflejar un sentido general de insegu-
ridad y desvalimiento, un sentimiento de “no tener pies en qué
pararse”, Estos resultados concuerdan con los de Machover, para
quien la omisién de los pies indica inseguridad de base.
La omision del cuello (ilustraciones 27, 38 y 70) no se constituyé en
un indicador emocional clinicamente valido hasta Ios 9 afios para las
nifias y los 10 para los varones. A partir de esa edad, se dio significa-
tivamente mas a menudo en los DFH de los pacientes clinicos, los
lesionales cerebrales y los nifios que robaban. Ninguno de los nifios
bien adaptados ni los que tenfan enfermedades psicosomaticas omitié
este rasgo. Estos dos ultimos grupos tienen algo en comun: tienden a
desplegar un buen control interno sobre sus impulses y acciones. La
omisién de] cuetlo parece estar relacionada con inmadurez, impulsi-
vidad y controles internos pobres. Estos datos concuerdan con la
observacién de Machover de que la omisién del cuello es un signo
comun en los DFH de los nifios inmaduros, los deficientes adultos y
pacientes regresionados, Postula la hipstesis de que esta omisién
revela falta de control racional y pobre coordinacién de los impulsos y
la conducta.
INTERPRETACIONES DE LOS SIGNOS EN EL DFE.
QUE NO SON INDICADORES EMOCIONALES VALIDOS
Ademés de los 30 indicadores emocionales validos discutidos ante-
riormente, otros ocho signos fueron investigados e interpretados.
Estos ocho signos habfan sido considerados originalmente (pég. 61)
como potenciales indicadores emocionales, pero posteriormente fue-
ron excluidos cuando no pudieron satisfacer los criterios establecidos
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