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Cuáles son los beneficios penitenciarios que se pueden conceder a un sentenciado: 1. Permiso
de salida; 2. Redención de la pena por el trabajo y la educación; 3. Semilibertad; 4. Liberación
condicional; 5. Visita íntima; y 6. Otros beneficios. Precisa igualmente los requisitos para cada
uno de ellos (artículos 43º al 58º), y los otros beneficios que pueden ser otorgados a un interno
(artículo 59º), en tanto evidencie espíritu de solidaridad y sentido de responsabilidad, en el
comportamiento personal y en la actividad organizada en el Establecimiento Penitenciario,
circunscritos básicamente a recompensas, que van desde la autorización para trabajar en
horas extraordinarias, hasta la concesión, también extraordinaria, de comunicaciones y visitas
Los beneficios penitenciarios, entonces, estimulan la readaptación social del interno y, entre
otras cosas más, permiten la reinserción paulatina en la sociedad de personas condenadas a
pena privativa de libertad efectiva, que muestren progreso en su readaptación, además que
coadyuvan a la des tugurización de los Establecimientos Penitenciarios, que, como es sabido,
acogen a un número muy superior de internos en relación a la capacidad para las que fueron
construidos.