Estos pastizales crecen en ambientes todo donde se realizan desmontes, así como en pastizal prospera por el efecto del
pera por el efecto del intenso
húmedos, bajo la influencia del clima cálido
húmedo con abundantes lluvias en verano,
donde han sustituido a la vegetación de selva
alta perennifolia. Algunas especies arbóreas
empleadas como sombra para el ganado en
estos lugares son: Tabebuia rosea (palo de
rosa), Gliricidia sepium (cocuite), Acrocomia
mexicana (coyol, guacoyol), Parmentiera
aculeata (cuachilote) y Piscidia piscipula
(cocuite).
Más hacia el sureste, también en terrenos
de la Llanura Costera del Golfo Sur, el pastizal
se conforma, además de los ya mencionados,
por: Panicum purpurascens (pará) y
Pennisetum purpureum (elefante).
Los potreros se manejan intensivamente,
sobre todo para cría y engorda de ganado y en
menor proporción lechera. Poseen buena
capacidad de carga animal: las principales
razas de ganado bovino empleadas son: Cebú,
suizo, brahaman, criollo y holandés.
Hacia la costa del Pacífico también se
presentan pastizales cultivados: destacan los
que se ubican en el extremo sureste del
territorio, en los alrededores de la laguna Mar
Muerto, Laguna Superior y Laguna Inferior.
Estos tugares pertenecen a la provincia
fisiográfica de la Cordillera Centroamericana, se
trata de terrenos llanos y lomeríos suaves bajo
la influencia de clima cálido subhúmedo, donde
se reportan como dominantes los pastos
estrella africana, jaragua y guinea.
A lo largo de la costa del Pacífico, en la
estrecha franja litoral, el pastizal se presenta de
manera discontinua; cerca de Santiago
Pinotepa Nacional, está constituido
principalmente por Digitaria pentzii, Panicum
maximum, también es frecuente en los
alrededores de San Juan Cacahuatepec, en
terrenos intermontanos. En las cercanías de la
Laguna de Chacahua, los pastizales están
conformados por Panicum maximum y Cynodon
plectostachyus, en algunos terrenos se
aprovecha Orbignya sp. (palma de coquito de
aceite} como sombra para el ganado.
Pastizal Halófilo
Este tipo de vegetación tiene poca presencia en
el estado; el pastizal halófilo se desarrolla en
lugares propios de suelos con alto contenido de
sales, los cuales se presentan en lugares
cercanos a las costas y tienen poca extensión,
el área más representativa se ubica hacia la
región del Istmo de Tehuantepec, en la barra
costera de las lagunas Superior e Inferior. Se
trata de terrenos con influencia marina sujetos a
inundaciones periódicas que colindan con
manglares y áreas abiertas al cultivo; el tipo de
suelo es Solonchak. con gran contenido de
INEGI. Síntesis deInformación geográfica del estado de Oaxaca. 2004
sales debido a que poseen texturas finas y
drenaje deficiente; el clima es cálido
subhúmedo con régimen de lluvias de verano;
la especie dominante es Distichlis spicata
(zacate salado), donde también se encuentran:
Eragrostis domingensis y Bouteloua filiformis
(zacate pelillo).
Pastizal Inducido
El pastizal inducido es el que prospera en
lugares donde es eliminada la vegetación
original; aparece como consecuencia de
desmontes de cualquier tipo de vegetación;
también puede establecerse en áreas agrícolas
abandonadas o bien en terrenos que se
incendian con frecuencia.
Se distribuye sobre las laderas de algunos
cerros al noreste, centro y sur del estado, sobre
110
las laderas con suelos muy degradados por la
erosión. Estos pastizales son mantenidos
artificialmente por el hombre, generalmente a
través de incendios periódicos, para perpetuar
en ellos la capacidad de sostenimiento de una
ganadería extensiva y sin control de los hatos
de ganado.
Los pastizales antropogénicos así
establecidos, corresponden a una fase inicial en
la sucesión de la vegetación original, que
generalmente corresponde a bosques o selvas,
y el fuego intencional impide el rebrote de
elementos leñosos y arbóreos característicos
de la sucesión natural. El pastoreo continuo
del ganado y el pisoteo, que afecta la
estructura del suelo, contribuyen también
al estancamiento del proceso de recuperación
gradual de la vegetación primaria y ayudan al
mantenimiento de esta condición de zacatal.
Los suelos se presentan en una amplia
gama, desde los menos fértiles con alto grado
de erosión, hasta muy fértiles, someros o
profundos.
Al noreste del estado, en las cercanías de
Santiago Chazumba, crece un pastizal
inducido sobre laderas de cerros que
anteriormente sostenían vegetación de selva
baja caducifolia y matorral de cardonal, en
ambientes propios del clima semicálido
subhúmedo y semiseco semicálido; los suelos
son someros y pedregosos tipo Regosol donde
se observan amplios espacios con erosión
severa. Este pastizal está determinado por
varias especies de Arístida. sobre todo A.
ternipes y A. adscensionis en el estrato rasante
menor de 0.20 m. como eminencias entre 2.0 y
3.0 m se reportan: Ipomoea wollcottiana,
Myrtillocactus sp., Acacia constricta,
Stenocereus weberi, Pitheceilobium sp. y
Caiiiandra eriophylia. Estos pastizales
presentan sobrepastoreo, con ganado bovino y
caprino; las eminencias se encuentran muy
dispersas y evidencian la vegetación inicial de
selva baja caducifolia y en las partes menos
húmedas al matorral crasicaule.
Hacia las laderas de la subprovincia Sierras
y Valles de Oaxaca, este pastizal se encuentra
formando mosaicos con la agricultura de
temporal, en lugares que antiguamente
sustentaban bosque de encino. Aquí el índice de
erosión es muy elevado, la especie dominante
es Microchloa kunthiien asociación con Hilaria
cenchroides en un estrato inferior a 0.30 m,
donde también se encuentran: Bouteloua
triaena, Tridax coronopifolia, Heliotropium sp.,
Bouteloua filiformis, Bulbostylis capillaris, Oxalis
sp., Bouteloua hirsuta, Eragrostis elliottii,
Evolvulus alsinoides, Cyperus seslerioides, Milla
biflora y Ferocactus sp., entre otras; en diversos
puntos de estos lugares se presentan elementos
arbustivos aislados entre los que destacan:
Ipomoea sp., Quercus castanea, Quercus
glaucoides, Acacia farnesiana, Senecio sp.,
Agave sp. y Opuntia sp.
En las laderas de la Sierra Madre del Sur
con exposición hacia el Océano Pacífico, los
pastizales inducidos que se encuentran a más
de 1 500 msnm, crecen en sitios que en
principio sostenían bosques templados y los
que se presentan por debajo de la cota
mencionada, prosperan en lugares donde ha
sido destruida la selva.
En la región de los valles centrales, sobre
todo desde Zaachila hasta Miahuatlán de
Porfirio Díaz, muchos de los terrenos presentan
erosión severa; la vegetación consta de
pastizales inducidos y se desarrolla agricultura
de temporal en buena parte de ellos, aquí el
disturbio provocado por el hombre, a través del
pastoreo y los incendios periódicos. En estos
zacatales, las gramíneas más comunes son:
Stipa ichuy Muhlenbergia macroura. la cual es
aprovechada en la elaboración de escobas.
BOSQUES
Vegetación arbórea, que puebla principalmente
regiones con temperaturas frescas, propia de
las zonas montañosas del estado. En cuanto a
su composición y estructura existen variantes
que van desde las masas de encino, pasando
por los bosques mixtos donde se mezclan con
pinos, hasta los bosques puros de coniferas. En
las regiones poco templadas y con mayor
humedad prospera el bosque mesófilo de
montaña, y en sitios más localizados existe
bosque cultivado. Aunque de reducida
extensión, hay en Oaxaca también bosque de
táscate y bosque de galería.
Bosque de Pino
Los bosques de pino son comunidades siempre
verdes formados en su gran mayoría por
diferentes especies de coniferas; poseen una
gran importancia económica pues constituyen
el recurso forestal por excelencia; ocupan las
partes más altas de la región montañosa del
estado.
Se trata de poblaciones arboladas qúe
poseen un crecimiento relativamente rápido;
muchas de las especies son resistentes a los
incendios, a las sequías y soportan el pastoreo;
además, los bosques de pino tienen una
estructura muy homogénea pues en general las
poblaciones se componen de unas cuantas
especies, lo que facilita su explotación, por ello
estos bosques están sometidos a intensos
aprovechamientos forestales comerciales, a
diferencia de las selvas tropicales que están
constituidas por infinidad de especies, no todas
con la calidad deseada en el mercado, por lo
que su explotación es más selectiva y se
complican de sobremanera las tareas de corte,
transporte, secado de la madera, etcétera.
Los bosques de pino en Oaxaca ocupan las
partes altas de los sistemas montañosos de la
provincia fisiográfica de la Sierra Madre del Sur,
con excepción de algunos pinares
pertenecientes a la Cordillera Centroamericana.
En la Sierra Madre del Sur, se presentan en
altitudes máximas de 3 720 m del cerro Nube
(Quie yelaag) y llegan a bajar hasta 500 msnm
en la subprovincia Cordillera Costera del Sur, al
norte de San José del Progreso, donde
colindan con selva mediana subcaducifolia. En
la porción de la Cordillera Centroamericana el
bosque de pino crece desde 200 msnm. sin
embargo, en la mayoría de los casos esta
vegetación se mantiene en altitudes entre 1 000
y 2 500 m.
Sobre la distribución del bosque de pino
en el estado, Miranda y Sharp, 1950, citado en
Rzedowski (1978) afirman que: "En las
montañas del centro y del norte de Oaxaca
Pinus oaxacana var. oaxacana, P. lawsoni y P.
leiophylia son las especies más corrientes,
además de P. rudis en las partes más altas y de
P. oaxacana en las más húmedas, donde
también hay bosques de P. ayacahuite, P.
patuia, y P. strobus var. chiapensis en
colindancia con diferentes asociaciones del
bosque mesófilo de montaña".
En relación con el sustrato rocoso donde
crece el bosque de pino, factor que junto con el
clima determinan el tipo de suelo que a su vez,
también influye en la fisonomía y composición
florística de los pinares, el elemento principal
corresponde a rocas metamórficas antiguas
constituidas por gneis y esquisto; existen
además, rocas ígneas intrusivas de naturaleza
Acida, sobre todo el granito, y en sitios más
reducidos, rocas sedimentarias como la caliza,
lutita y arenisca. En estos ambientes imperan
climas templados subhúmedos, en las laderas
inferiores de las sierras, semicálidos
subhúmedos y en las partes más altas,
semifríos subhúmedos. Los suelos son
someros, tipo Litosol, Regosol, y hacia los
lugares donde subyacen estratos calizos se
desarrolla Rendzina; también existen suelos
poco desarrollados tipo Cambisol, otros son
profundos, ricos en arcilla en el subsuelo y con
cierto grado de acidez, como el Luvisol, o bien,
muy ácidos denominados Acrisol.
Los bosques de pino localizados en las
cercanías de Heroica Ciudad de Tlaxiaco,
ocupan laderas de sierra con fuertes
pendientes, desde cerca de 1 000 msnm y
hasta las partes más altas que alcanzan
3 350 m; al sureste de esa población colindan
hacia las zonas bajas con: agricultura de
temporal y pastizales inducidos en laderas con
suelos degradados por la erosión, y en otros
lugares el bosque de pino entra en contacto con
bosques de encino-pino y pino-encino. Aquí
sobresale la asociación Pinus oocarpa-Pinus
oaxacana var. oaxacana, en el estrato arbóreo
superior, que alcanza 20 a 25 m de altura,
donde se acompañan además por: Pinus
leiophylla (ocote chino) y Pinus douglasiana
(pino blanco); en el estrato arbóreo entre 5 y
15 m son frecuentes: Quercus elliptica (encino),
O. obtusata (encino blanco), Q. glaucescens
(encino), Byrsonima crassifoliay Quercus
crassifolia (encino); en el estrato herbáceo,
entre 0.5 y 1.5 m se encuentra entre otras:
Stachytarpheta frantzii, Aristida schiedeana,
Paspalum plicatulum, Digitaria filiformis y
Pteridium sp.
El grado de disturbio en estos bosques
varía de medio a alto, donde los incendios son
frecuentes, en algunas cañadas más húmedas
y protegidas de la insolación excesiva, domina
Alnus acuminata ssp.arguta acompañada de
varias especies de Quercus, además de:
Clethra sp., Cyathea sp. y Liquidambar
styraciflua. En sitios cercanos, el bosque de
pino está dominado por la asociación Pinus
oaxacana var. oaxacana-Pinus ayacahuite, en
ciertas partes por Pinus michoacana-Pinus
teocote y en otras más, domina la asociación
Pinus oocarpa var. trifoliata-Pinus teocote.
Los bosques de coniferas tienen una amplia presencia en las sierras del estado
Hacia las partes altas de la sierra ubicada
al poniente y suroeste de Villa de Zaachila
existen bosques de pino, que se extienden
desde poco menos de 1 500 msnm, hasta poco
más de 3 000; en algunos de estos lugares
predomina Pinus teocote en asociación con
varias especies de Pinus que integran el estrato
superior entre 15 y 20 m de altura; el estrato
arbóreo inferior está integrado por árboles bajos
hasta 10 m con: Quercus magnoiiifolia (roble
negro), Q. peduncularis, Arbutus xaiapensis
(madroño) y Quercus crassifolia; en el estrato
arbustivo hasta 3.5 m: Pinus spp., P. teocote
(pino colorado), Arbutus xaiapensis, Alnus sp.
(aile) y Quercus magnoiiifolia; en el estrato
entre 1 y 1.5 m: Pinus spp., Quercus sp.,
Arctostaphylos sp. (tepezquite), Baccharis sp.,
Vaccinium sp. En estos sitios es común la
extracción de resina de ciertas especies de
pinos como Pinus oocarpa y se obtiene leña y
carbón de los encinos. En estos mismos
lugares, así como en la sierra al sureste de
Miahuatlán de Porfirio Díaz, pero en altitudes
mayores de 2 000 m, en ambientes de mayor
humedad y menor temperatura existen
comunidades densas de pinares, con alturas de
hasta 30 m donde sobresale la asociación:
Pinus herrerai- Pinus patula var.
longepedunculata-Pinus oaxacana var.
oaxacana (chalmaite); en este mismo estrato
también se encuentran: Quercus crassifolia
(encino negro), Abies hickelii (yaga-laga-xe),
Pinus douglasiana (pino blanco), P. oocarpa
(pino), Quercus acatenangensis (encino
blanco); entre los árboles de10a15m.se
reportan: Pinus oaxacana var. oaxacana
(chalmaite), P. herrera/(pino), P. patula var.
longepedunculata (ocote colorado), Quercus
crassifolia (encino negro), Q. rugosa (t-nuyá),
Cleyera theaeoides (escoba), Clethra sp. (ya-
guii), Quercus laurina (encino), Arbutus
glandulosa (nuzu-nudu), A. xaiapensis
(madroño, nuzu-nudu), Alnus acuminata ssp.
arguta (aile), Alnus acuminata ssp. glabata
(elite), Chiranthodendron pentadactylon
(mapasúchil).
En las partes altas, templadas, con mayor
humedad y con una distribución bastante
restringida, se desarrollan comunidades de
bosque de oyamel (no cartografiables a la
escala de trabajo), con el predominio de Abies
oaxacana, donde también es frecuente Pinus
hartwegii, con alturas hasta de 25 m.
Hacia la región del Istmo de Tehuantepec,
en la provincia fisiográfica de la Cordillera
Centroamericana, existen bosques de pino
que crecen en niveles altitudinales bajos,
como sucede en las cercanías de Matías
Romero, donde el bosque crece a partir de
200 msnm, aquí la asociación predominante
es de Pinus lawsoni-Pinus oocarpa, con
alturas hasta de 10 m; poseen un estrato
arbustivo menor de 2 m, donde se
encuentran: Acacia cornígera (cuernitos) y
Dodonaea viscosa (jarilla). Los cuernitos y la
jarilla son especies indicadoras del disturbio
a que son sometidos los bosques, sin
embargo existen sitios donde la explotación
forestal es adecuada. En las cañadas que
bajan hacia la llanura del Golfo de
Tehuantepec se desarrolla la selva mediana
subperennifolia.
El principal uso que se da en los bosques
de pino aquí descritos, es la extracción de
madera para trozas de aserrío, y en ciertos
lugares la obtención de resina constituye el
principal aprovechamiento. Las materias primas
que estos bosques proveen a la industria son
variadas y de gran importancia económica,
algunos de los productos que se obtienen son:
pulpa para papel, celulosa, madera para la
elaboración de innumerables productos, resina
necesaria para la producción de pinturas, brea
y aguarrás, además proporcionan leña, madera
para aserrío, para la construcción, puntales,
durmientes para ferrocarril, todo ello sin
considerar la gran importancia ecológica que
los bosques poseen, para la captación de agua,
en la purificación del aire, como reservas de
carbono, para la preservación de la fauna,
formación de suelo, etc.; por ello es de vital
importancia preservar estos recursos naturales,
porque existen numerosos lugares en la entidad
con vegetación de bosque de pino en estadio
secundario de desarrollo, debido a
explotaciones forestales inadecuadas,
desmontes para ampliar las zonas agrícolas y
ganaderas e incendios, que influyen de manera
negativa y modifican la composición de los
bosques.
Bosque de Pino-Encino
Es una comunidad de bosque ampliamente
distribuida en Oaxaca, conformada por
diferentes especies de pinos y encinos, en
donde, dependiendo del dominio de unos y
otros, se denomina pino-encino cuando
rebasan en número las coniferas y encino-pino
cuando lo hacen las latifoliadas.
Casi la totalidad de estos bosques se
localizan en la provincia fisiográfica de la Sierra
Madre del Sur, excepto pequeñas áreas muy
localizadas al oriente del estado, en la provincia
de la Cordillera Centroamericana.
De manera general, la transición del bosque
de encino, pasando por el de encino-pino, pino-
INEGI. Síntesis deInformación geográfica del estado de Oaxaca. 2004
encino y pino está determinada por el gradiente
altitudinal. En las laderas más bajas de las
sierras impera el bosque de encino y, conforme
se asciende, van apareciendo algunos
elementos aislados de pino mezclados entre
numerosos encinos. Al continuar el ascenso, los
pinos se multiplican y van teniendo mayor
cobertura que los encinos, de tal manera que
dominan sobre éstos, hasta que, las partes más
altas de las montañas están constituidas por
masas puras de pinos.
Los límites altitudinales de este tipo de
vegetación se sitúan, el inferior hacia menos de
500 msnm en la región de barlovento de las
sierras orientales del estado, y el superior
alcanza hasta poco más de 3 000 m en la sierra
Juárez y 3 250 m en el cerro Negro, ubicado
al suroeste de Asunción Nochixtlán, en la
subprovincia Cordillera Costera del Sur, pero
111
 en su gran mayoría estas comunidades se
mantienen entre 1 500 y 2 500 msnm.
Crece en ambientes influenciados por
climas templados subhúmedos y semicálidos
subhúmedos; en las sierras del oriente del
estado, donde este bosque se desarrolla en
niveles altitudinales inferiores, el clima
corresponde a semicálido húmedo con lluvias
todo el año e inclusive, penetra hasta lugares
donde colinda-con selva alta perennifolia.
Al sur de Huautla de Jiménez, en ambientes
influenciados por climas templados
subhúmedos, este bosque crece en laderas de
sierra a más de 2 500 msnm y colinda hacia los
niveles inferiores con bosque mesófilo de
montaña y con bosque de encino-pino, y hacia
el nivel altitudinal superior con bosque de pino;
está dominado por la asociación Pinus
hartwegii-Quercus laurina, que conforman el
estrato superior de hasta 10 m de altura; en el
estrato arbustivo no mayor de 1 m se
encuentran, entre otros: Comarostaphylis
discolor (yaga-ya-na) y Lupinus montanus,
sobre todo en sitios que han sido objeto de
extracción de madera, donde se observan
"claros" en el bosque que son invadidos por
especies arbustivas.
Más hacia el sur y sureste, el bosque de
pino-encino aparece en la sierra Juárez
cubriendo laderas y cerros desde 2 000 msnm
hasta poco más de 3 000, donde transita a
bosque de pino; presenta un estrato superior de
hasta 25 m de altura y en muchos de estos
espacios domina: Pinus patula var.
longepedunculata en asociación con Pinus
ayacahuite- Quercus scytophylla- Quercus
crassifolia; en el estrato entre 6 y 15 m se
reportan, además: Quercus glabrescens
(encino amarillo), Q. scytophylla, Alnus sp.
(aile), Quercus laurina (encino), Clethra sp.
(ya-guii), Oreopanax xalapensis (xocotamal),
Quercus castanea (encino), Arbutus xalapensis
(madroño, nuzu-nudu) y Prunus brachybotrya
(cerezo montes); en el estrato inferior a 3 m
están: Litsea glaucescens (laurel, cu-jue-e),
Tripogandra sp. y Pernettya ciliata (capulincillo).
Los incendios son frecuentes en algunos
lugares; en las cañadas húmedas es donde
mejor se desarrollan: Alnus, Clethra,
Oreopanax, Litsea y Prunus. En varios lugares
cercanos, el bosque está dominado por
asociaciones de Pinus oocarpa- Quercus
obtusata y en otros, donde el bosque de pino-
encino transita hacia bosque de pino, en estos
lugares el bosque está conformado por la
INEGI. Síntesis deInformación geográfica del estado de Oaxaca. 2004
Los bosques mixtos forman parte de la riqueza natural de Oaxaca.
112
asociación Pinus herrerai-Pinus lawsoni-
Quercus crassifolia- Quercus rugosa.
Hacia las partes altitudinales más bajas de
las laderas de algunas serranías pertenecientes
a la subprovincia Sierras Orientales, el bosque
de pino-encino se desarrolla desde menos de
500 msnm hasta poco más de 1 000; aquí el
bosque colinda hacia los niveles inferiores con
selva alta perennifolia y hacia los superiores
con bosque mesófilo de montaña; los
ambientes imperantes están determinados por
climas semicálidos húmedos con lluvias todo el
año, semicálido subhúmedo con lluvias en
verano y aún, por clima cálido húmedo con
abundantes lluvias en verano, con índices de
precipitación por arriba de 2 000 mm y
temperaturas más o menos altas; el sustrato
rocoso está conformado por materiales
metamórficos tipo esquisto, ígneas extrusivas y
sedimentarias como las calizas, limolitas y
areniscas; los suelos derivados son Acrisoles,
Cambisoles y delgados como el Litosol. Aquí es
frecuente encontrar asociados a Pinus oocarpa
con Quercus elliptica con alturas de hasta 18 m,
y en otros sitios cercanos la asociación es de
Pinus sp .-Quercus sapotaefolia-Quercus
glaucescens, donde también se encuentran
Byrsonima crassifolia (nanche dulce),
Leucothoe mexicana (hierba de la sarna) y
Clethra mexicana, entre otras.
Los bosques que se observan hacia el
oeste y suroeste de la presa Presidente Benito
Juárez, prosperan en ambientes propios de
climas templados y semicálidos subhúmedos,
con lluvias moderadas en verano y
temperaturas frescas; la litología en este lugar
está constituida por rocas volcánicas de
naturaleza ácida, que originan suelos tipo
Luvisol, Cambisol, Regosol y Litosol, limitados
por el lecho rocoso cercano a la superficie y
con gran abundancia de piedras; estos bosques
están constituidos por un estrato superior
arbolado de casi 20 m de altura dominado por
Pinus oocarpa, en asociación con Pinus
michoacana y varias especies de Quercus,
entre las que destacan: Q. peduncularis (encino
blanco), Q. conspersa (encino rojo), Q.
glaucescens (encino amarillo), Q. tuberculata,
Q. oleoides (yag psuy), entre algunos más.
En la subprovincia Cordillera Costera del
Sur, existen bosques de pino-encino que
cubren una buena parte de la sierra, en muy
diversos niveles altitudinales, se presentan
desde menos de 500 msnm donde colindan
con selva mediana subcaducifolia, selva baja
caducifolia y bosque de encino, y llega hasta
2 450 m de altitud, donde entra en contacto con
el bosque de pino; los climas imperantes son
cálido y semicálido subhúmedos, el sustrato
rocoso consta de materiales metamórficos muy
antiguos, tipo gneis y rocas ígneas intrusivas
ácidas, que dan lugar -mediante procesos de
intemperismo- a suelos poco profundos tipo
Cambisol, Regosol y Litosol, además de suelos
con mayor espesor y ácidos tipo Acrisol, y
Luvisol con menor grado de acidez; en estos
lugares una asociación frecuente es Pinus
michoacana y diversas especies de Quercus: el
estrato superior alcanza 20-25 m de altura,
donde también se encuentran: Pinus oocarpa
(pino), P. douglasiana (pino blanco),
P. montezumae (yuntu-satnu),
Chiranthodendron pentadactylon (mapasúchil);
en el estrato arbóreo bajo, entre 12 y 15 m:
Quercus scytophylla (encino), Q. conspersa
(encino rojo), Q. rugosa (t-nuyá), Cleyera
theaeoides, Alnus acuminata ssp. arguta (aile),
Quercus urbanii (ya-cuchar), Arbutus
xalapensis (nuzu-nudu), Quercus glaucescens
(encino roble amarillo), Q. elliptica (encino
nanche), Q. obtusata, Q. acutifolia, Carpinus
caroliniana e Ilex sp.; en el estrato arbustivo de
hasta 1.80 m se encuentran algunas de las
siguientes especies: Baccharis glutinosa
(escoba de monte), Desmodium sp., Tephrosia
Ianata, Arctostaphylos sp., Dodonaea \/iscosa
(jarilla) y Acacia pennatula (algarrobo). La
mayor parte de estos lugares se encuentran
sometidos a explotaciones forestales
comerciales y a nivel doméstico. En muchos
sitios hay evidencias de incendios.
Hacia el extremo oriental del estado, en los
limites con Chiapas, existe bosque de
pino-encino que pertenece a la provincia
fisiográfica Cordillera Centroamericana. Aquí la
comunidad se desarrolla en altitudes entre
800 y 1 400 m, donde colinda con bosque de
pino, de encino, bosque mesófilo de montaña,
selva baja caducifolia e inclusive hace contacto
con selva alta perennifolia. Crece bajo la
influencia de climas cálidos y semicálidos
subhúmedos con régimen de lluvias de verano
y precipitaciones superiores a 1 500 mm, las
temperaturas son altas la mayor parte del año;
el sustrato rocoso consta de rocas ígneas y
complejos metamórficos del Paleozoico, que
dan lugar a suelos de escasa profundidad,
pedregosos, con texturas francas limitados por
el lecho rocoso, clasificados como Regosol,
Cambisol y menores de 10 cm, clasificados
como Litosol. Es frecuente el dominio de Pinus
oocarpa y Pinus michoacana, con alturas de
hasta 18 m en asociación con varias especies
de Quercus, con tallas hasta de 8 m, entre los
que destacan: Quercus peduncularis (encino
blanco), Q. conspersa (encino rojo), Q.
glaucescens (encino amarillo), Q. tuberculata,
Q. oleoides (yag psuy), Quercus spp.; en el
estrato arbustivo inferior a 2 m Byrsonima
crassifolia (nanche dulce) y Leucothoe
mexicana (hierba de la sarna) son frecuentes;
en el nivel herbáceo menor a 0.5 m: Pteridium
aquilinum (yogo), Stevia sp. y Muhlenbergia sp.
Toda la comunidad está sometida al uso
forestal, pero existen sitios sobreexplotados; los
encinos son empleados como combustible. En
las cañadas más húmedas es frecuente
encontrar elementos de selva alta perennifolia,
siendo estos lugares muy favorables para el
cultivo de café.
Existen numerosas áreas sobreexplotadas
y, en consecuencia, con diferentes grados de
erosión.
Bosque de Encino-Pino
Vegetación arbórea donde se.combinan
diferentes especies de pinos con encinos, con
el predominio de estos últimos, se ubica en
general, en los límites altitudinales inferiores de
los bosques de pino-encino.
Las condiciones ambientales donde se
desarrolla este bosque mixto, son similares a
las del bosque de pino-encino, dado que ambos
tipos de vegetación comparten condiciones
ecológicas muy semejantes.
Se ubican en lugares no muy extensos,
distribuidos de manera irregular, sobre todo,
hacia las subprovincias fisiográficas de las
Sierras Orientales y la Cordillera Costera del
Sur, pertenecientes a la Sierra Madre del Sur,
y en la subprovincia Sierra del Sur de Chiapas
que corresponde a la provincia de la Cordillera
Centroamericana.
Al sur de Huajuapan de León, estos
bosques se presentan desde 1 700 msnm
donde colindan con bosque de pino, agricultura
de temporal y pastizal inducido, este último
sobre terrenos muy degradados por la erosión y
llegan hasta 2 100 m donde colindan con
bosque de pino y bosque mixto de pino-encino;
crecen bajo la influencia de climas semicálidos
subhúmedos, rocas metamórficas y
sedimentarias que han originado suelos
delgados y pedregosos, donde son frecuentes
varias especies de Quercus, como Q.
magnoliifolia, O. conspersa (encino rojo), Q.
peduncularis (encino blanco) y Q. scytophylla,
en asociación con eminencias más o menos
aisladas de Pinus oocarpa.
Al norte y oriente de la ciudad capital estos
bosques ocupan las laderas intermedias de
algunas sierras, desde 1 600 msnm, donde
colindan con bosque de encino y selva baja
caducifolia y alcanzan hasta cerca de 2 400 m
de altitud, donde el bosque cambia a bosque de
pino y pino-encino, aunque la mayor parte de
las masas boscosas se mantienen en niveles
cercanos a 2 000 m. Crece en ambientes
propios de los climas semicálidos y templados
subhúmedos, aquí el bosque crece sobre
suelos limitados en profundidad por fases
líticas, donde prevalecen encinares de Quercus
castanea y Q. magnoliifolia en asociación con
Pinus oocarpa y P. teocote (pino colorado), con
portes de hasta 15 m, los encinos alcanzan
alturas de hasta 8 m, donde destacan: Quercus
crassifolia (encino negro), O. laeta y Q. urbanii
(ya-cuchar); en el estrato arbustivo menor de
4m: Arbutus sp., Arctostaphylos pungens
(pingüica) y Quercus magnoliifolia; en el estrato
inferior, entre 0.5 y 1.0 m: Panicum bulbosum,
Arctostaphylos sp., Penstemon campanulatum,
Bouvardia ternifolia y Lamourouxia
rhinanthifolia.
En la Cordillera Costera del Sur, sobre todo
hacia la zona meridional de Miahuatlán de
Porfirio Díaz, esta vegetación presenta un alto
grado de disturbio y suelos degradados, donde
muchas áreas son abiertas al cultivo, en
lugares poco propicios para ello, pues
manifiestan fuertes pendientes con suelos
delgados y pedregosos, que al quedar
descubiertos de la protección que les brinda el
bosque y al ser removidos durante las tareas de
labranza, quedan expuestos a la acción del
agua y del viento y finalmente se pierden por la
erosión.
En las cercanías de Matías Romero, al
oriente del estado, el bosque se desarrolla en
niveles altitudinales muy bajos, a partir de
200 msnm, donde colinda con selva alta
perennifolia y bosque de encino; prevalecen
climas cálido subhúmedos con lluvias en
verano y el bosque está integrado en el estrato
superior de 14 m por Pinus lawsoni en
asociación con varias especies de Quercus,
con alturas de hasta 8 m, entre ellas: Quercus
excelsa, Q. glaucescens (encino roble amarillo)
y Clethra macrophylla\ en el estrato herbáceo
inferior a 0.5 m: Muhlenbergia sp., Aristida sp.
y Stevia sp. Esta comunidad se observa bien
conservada, y es frecuente que entre el bosque
se encuentren elementos arbolados de la selva
alta perennifolia.
Más hacia el oriente, en los límites con el
estado de Chiapas, el bosque de encino-pino
prospera desde 500 msnm hasta casi 2 000.
ocupando parte de las sierras que conforman
el cordón El Fetén.
Aparentemente algunas asociaciones de
encino-pino constituyen fases sucesionales del
bosque de pino y pino-encino, debido a que
éstos han sido sometidos a intensos
aprovechamientos forestales, dando como
resultado profundos disturbios, con tendencia a
la disminución de las poblaciones de pino; en
estos sitios se observa el dominio del encino,
pero con claras evidencias de la explotación
indiscriminada de que son objeto los pinares,
por tal motivo es frecuente observar también
numerosas áreas erosionadas.
Bosque de Encino
Este tipo de vegetación está constituido por
diversas especies de Quercus (encinos) y de
manera general es el que prospera a menor
altitud entre los diferentes tipos de bosques
templados que crecen en el estado. Sin
embargo, los encinares cubren las laderas
intermedias de las sierras y se extienden en
muy amplios rangos altitudinales, pues
penetran a más de 2 500 m y descienden hasta
menos de 200 m. Es por ello que los encinos
prosperan en muy diferentes condiciones
ecológicas.
Es muy probable que muchas de las áreas
que actualmente presentan bosques de encino,
hayan sostenido en alguna época bosque de
pino-encino.
En la sierra Juárez al noreste de la ciudad
capital, el bosque de encino crece en
condiciones de alta humedad bajo la influencia
de climas semicálidos húmedos con
abundantes lluvias en verano, en altitudes
mayores a 2 000 m, donde Quercus laurina
constituye el elemento dominante de estos
bosques, alcanza alturas de hasta 20 m,
acompañado, sobre todo en las cañadas y
lugares protegidos de los fuertes vientos y la
alta insolación, por Phoebe sp. (yaxo-mul),
donde también se observan heléchos
arborescentes; existen eminencias de Pinus sp.
con alturas mayores de 25 m distribuidas de
manera dispersa y sin constituir un estrato
definido; en el estrato Intermedio entre 3 y 4 m
se encuentran: Oreopanax xalapensis
(xocotamai), Ternstroemia lineata ssp.
//'neafa(flor de tilia grande), Clethra sp. (ya-guii);
en el estrato Inferior se encuentran, entre otras,
a Miconia glaberríma y Symplocos citrea.
En los valles centrales del estado, sobre
todo en los alrededores de Miahuatlán de
Porfirio Díaz, los encinares son bajos y
prosperan en condiciones de clima semiseco
semicálido, con precipitaciones escasas, que
fluctúan entre 600 y 800 mm, concentradas en
su mayoría durante los meses de verano; aquí
el bosque se desarrolla desde altitudes
cercanas a 1 400 m y alcanza hasta poco más
de 2 500 msnm, presenta un alto grado de
disturbio y dominan elementos de Quercus
acutifolia, con alturas no mayores de 5 m,
donde son frecuentes también Quercus
magnoliifolia y Juniperus flaccida (táscate,
enebro); en el estrato arbustivo inferior a 2 m
se encuentran: Mahonia fascicularis (yaga-
buxe); en muchos lugares, la erosión exhibe de
manera lamentable, la roca desnuda.
En los alrededores de Huajuapan de León
existen encinares secundarios, establecidos
en las laderas de las sierras a más de 2 000
msnm, los cuales han sido objeto de un intenso
disturbio provocado por la tala indiscriminada
para la obtención de leña y carbón para uso
doméstico, y por el intenso pastoreo sin control
de ganado caprino, ovino y bovino. Estos
lugares están cubiertos con elementos
arbustivos inferiores a 2 m, donde destacan:
Mimosa aculeaticarpa (uña de gato), Ipomoea
sp. (casahuate prieto) y Amelanchier
denticulata (membrillo cimarrón), donde
también son frecuentes: Brahea sp., Dasylirion
sp., Dodonaea viscosa (jarilla), Opuntia sp.,
Senna pallida (flor de San José),
Pseudosmodingium multifolium (petlacía),
Senecio sp., Galphimia glauca (rama de oro),
Thevetia peruviana (venenillo, yambigo) y
algunas más. En ciertos lugares cercanos
existen elementos aislados de Quercus
magnoliifolia y Q. peduncularis y en otros, el
bosque de encino presenta moderado disturbio,
cuyo estrato arbolado alcanza alturas de hasta
10 m, donde domina la asociación Quercus
castanea-Q. acutifolia-Q. obtusata, los cuales
son acompañados por elementos de: Arbutus
xalapensis (madroño), Quercus crassifolia
(encino negro}, Q. rugosa (t-nuyá), Q.
glaucoides y Q. obtusata. En varios lugares
domina Quercus magnoliifolia en asociación
con Q. acutifolia.
En la subprovincia fisiográfica Cordillera
Costera del Sur, los bosques de encino ocupan
las partes inferiores de las laderas de sierra,
descienden hasta menos de 500 msnm, donde
colindan con selva mediana subcaducífolía y
selva baja caducifolia, y alcanzan, hacia el
techo altitudinaL más de 1 500 m, donde
cambian a bosques de pino, pino-encino y
mesófilo de montaña; los climas corresponden
en su mayor parte a cálidos y semicálidos
subhúmedos, con precipitaciones veraniegas,
en volúmenes cercanos a 1 000 mm anuales,
las temperaturas son altas la mayor parte del
tiempo. Los encinares prosperan aquí sobre
muy diversos tipos de roca, tanto metamórficas,
sobre todo gneis, como sedimentarias,
principalmente calizas, areniscas y
conglomerados, también existen rocas ígneas
intrusivas ácidas, como el granito; de igual
modo, los suelos son diversos, en su mayoría
someros, limitados por el lecho rocoso, como el
Regosol, Lítosol, Cambisol, Feozem y Luvisol
con texturas francas.
Los encinares secundarios que existen al sur
de Santiago Yosondúa, habitan en las laderas
que flanquean la angosta cañada, en cuyos
fondos crece la selva baja caducifolia, se trata
INEGI. Síntesis deInformación geográfica del estado de Oaxaca. 2004
de bosques abiertos y muy degradados, con
árboles bajos, de menos de 5 m de altura, muy
separados entre sí, cuyos espacios están
ocupados por gran cantidad de especies
arbustivas, herbáceas y muchos puntos
desnudos por la erosión, donde aflora la roca
madre; en el estrato superior persisten varias
especies de Quercus, entre ellas: Q. elliptica
(encino nanche), Q. magnoliifolia, Q. castanea,
Arbutus glandulosa (nuzu-nudu), Bursera sp.,
Juniperus flaccida (táscate, enebro), Quercus
peduncularis (encino blanco), Q. glaucoides; los
amplios espacios interarbolados, están
cubiertos por arbustos no mayores de 1.5 m,
incluyen las siguientes especies: Rhus
terebinthifolia (temazcal), Arctostaphylos
pungens (pingüica), Muhlenbergia sp., Acacia
sp., Cnidoscolus sp. (mala mujer), Tecoma stans
var. velutina (guiabiche), Lindleyella mespiloides,
Cassia sp. Opuntia sp. y Agave sp., entre otras.
113
 Hacia el extremo oriental del estado, en la
provincia fisiográfica de la Cordillera
Centroamericana, existen bosques de encino
de limitada extensión, que se desarrollan en
ambientes influenciados por climas cálidos
subhúmedos con precipitaciones en verano,
con lluvias en cantidades cercanas a
1 500 mm y las temperaturas son altas la gran
mayoría del año; colindan con selva mediana
subperennifolia y selva baja caducifolia hacia
los niveles altitudinales inferiores que alcanzan
en algunos puntos, hasta poco menos de
200 msnm, y hacia los niveles altos cercanos a
1 000 m, esta vegetación transita a bosque de
pino y mixto, sobre todo encino-pino; estos
encinares son bajos, la altura del estrato
arbolado alcanza más de 8 m, y está
determinada -en varios lugares- por el dominio
de Quercus glaucescens y Q. excelsa, entre
varias especies más y donde es posible
observar diversos elementos propios de la
selva, entremezclados en el bosque de encino.
De manera similar a los otros tipos de
bosque en la entidad, los encinares han sido
bastante explotados; los encinos son
empleados sobre todo para la obtención de
leña y carbón, también son frecuentes los
incendios intencionales con propósitos
pecuarios y el pastoreo indiscriminado de
ganado. Es por ello que en muchos lugares se
evidencia la pérdida de suelo y el deterioro del
recurso forestal.
Bosque Mesófilo de Montaña
Esta forma de vida, cubre amplios espacios de
sierra, sobre todo los que se encuentran a
barlovento y que atrapan los vientos húmedos
provenientes tanto del Golfo de México, como
del Pacífico.
La vegetación es siempre verde, de
crecimiento denso, cubre laderas de sierra en
niveles altitudinales no muy altos, similares a
los de los encinares, pero protegidos de los
fuertes vientos y la excesiva insolación, son
lugares donde se forman neblinas durante
buena parte del año.
Los limites altitudinales del bosque mesófilo
de montaña, dependen tanto de la temperatura,
como de la humedad, porque se desarrollan en
zonas con alta humedad atmosférica. En
terrenos donde la condición de saturación no es
tan favorable, el bosque crece en las barrancas
y cañadas que resguardan mayor humedad que
la circundante. Es notable la mezcla de
elementos templados y tropicales que
conforman este tipo de vegetación.
En la entidad, el bosque mesófilo que se
localiza hacia la subprovincia fisiográfica
Sierras Orientales, forma amplias franjas más o
menos continuas, que corren desde la Sierra
INEGI. Síntesis deInformación geográfica del estado de Oaxaca. 2004
Mazateca, en el norte de la entidad, hasta cerca
de Matías Romero, donde se interrumpe, para
aparecer de nuevo hacia el extremo oriental, en
los límites con Chiapas. Hacia las sierras del
sur, en la vertiente pacífica, su presencia
también es amplia, pero más discontinua.
En los alrededores de Huautla de Jiménez,
en la Sierra Mazateca, el bosque mesófilo
presenta, en su mayor parte, un crecimiento
secundario de desarrollo, debido sobre todo al
intenso nomadismo agrícola; aquí el bosque se
presenta desde aproximadamente 700 msnm,
donde colinda con la selva alta perennifolia,
alcanza hasta 2 500 m donde cambia
gradualmente a bosque de pino-encino y
bosque de pino. En condiciones poco alteradas,
la vegetación de estos lugares alcanza hasta
25 m de altura y es frecuente el dominio de
varias especies de encinos, junto con
114
Liquidambar styraciflua y Clethra sp.; entre los
encinos son frecuentes: Quercus mexicana,
Q. laurina, Q. candicans y Q. glabrescens
(encino amarillo), entre algunos más; en el
estrato superior también están presentes
Podocarpus reichi (palmillo) y Alnus glabrata
(elite); en el estrato entre 5 y 8 m: Clethra sp.,
Quercus corrugata (chicharro), Q. candicans,
Saurauia sp.r Podocarpus reichi, Litsea
glaucescens (laurel) y Ternstroemia sp.; en el
estrato arbolado entre 5 y 8 m: Viburnum sp.,
Miconia sp., Drymis sp. (chachaca),
Gymnanthes sp.. Cestrum sp. y Salvia elegans;
en el estrato arbustivo inferior a 2 m:
Conostegia sp., Chamaedorea tepejilote
(palma, gueecho-guiaroo), Miconia lacera,
Baccharis sp., Tibouchina spatulata; en el
estrato herbáceo, entre 0.5 y 1 m se presentan,
entreoirás: Senecio sp., Miconia echinoidea,
Pteridium aquilinum (yogo), Fuchsia minutiflora,
Dryopteris sp., Parathesis melanosticta
(ma-cu-lai), Iresine sp. y Castilleja sp. Dentro de
ciertas comunidades de crecimiento secundario
abundan: Heliocarpus appendiculatus (jonote),
Coccoloba sp. y Lysiloma sp., como evidencia
de la gran afinidad que existe entre el bosque
mesófilo y la vegetación con características
tropicales, sobre todo por la colindancia que
tiene con las selvas y cuyas especies tienden a
invadir las áreas del bosque altamente
perturbadas, donde además existe agricultura
nómada, incluso en sitios con fuertes
pendientes y suelos delgados y pedregosos,
muy susceptibles a la erosión.
En la sierra Juárez, el bosque mesófilo
forma una franja más o menos continua, que se
extiende de noroeste a sureste por las laderas
orientales de la Sierra Madre del Sur, que
recogen los vientos húmedos del Golfo de
México; el límite altitudinal inferior se presenta
cerca de los 500 m, donde entra en contacto
con la selva alta perennifolia y el superior
alcanza niveles poco mayores de 3 000 msnm,
donde el bosque mesófilo transita a bosque de
pino y pino-encino. En altitudes cercanas a
2 000 m, se reporta un bosque mesófilo
dominado por la asociación Vaccinium
stenophyllum-Podocarpus sp., los cuales
ocupan el estrato superior de más de 15 m; en
el estrato intermedio, de 4 m cohabitan: Persea
sp., Symplocos sp. y Phoebe sp.; en el estrato
de 2 m: Oreopanax iiebmannii, Conostegia sp.,
Phoebe sp.. Ternstroemia tepezapote
(zapotillo), Psychotria cuspidata (palo de agua),
entre otros. Esta comunidad penetra en un
bosque de Pinus patula a través de las cañadas
más o menos profundas de exposición sur, en
las partes de la sierra Juárez cercanas a
Santiago Comaltepec.
En lugares próximos a los anteriormente
descritos, esta formación ostenta como
especies codominantes a: Quercus
laurina-Persea americana var, drymifolia, entre
10 y 15 m de alto, donde se presentan como
eminencias aisladas de poco más de 20 m
elementos de Pinus sp.; el bosque posee un
estrato intermedio entre 3 y 5 m, donde
destacan, entre otros: Weinmannia pinnata
(yo-vela), Oreopanax xalapensis (xocotamal),
Cornus disciflora (canelo), Symplocos coccínea,
Phoebe sp., Callicarpa acuminata (granadilla),
Viburnum sp.; en el estrato entre 0.5 y 2.0 m se
encuentran: Meliosma dentata, Miconia
hemenostigma, Nectandra sp., Styrax
glabrescens (azahar del monte), Symplocos
coccínea y Solanum sp., entre otras. Gran parte
de las formaciones boscosas, presentan alto
disturbio y manifiestan diversos estadios
secundarios de crecimiento, dado que buena
parte de los elementos arbolados poseen
madera que se aprovecha Iocalmente para
diversos fines; la agricultura nómada y
seminómada también afecta enormes
extensiones que perjudican de manera
permanente el desarrollo de este tipo de
vegetación.
Hacia la vertiente del Pacífico, en la
subprovincia Cordillera Costera de Sur, el
bosque mesófilo se presenta de manera más
discontinua y dispersa que en los de la
vertiente del Golfo. Hacia el poniente de
Heroica Ciudad de Tlaxiaco, en los límites con
el estado de Guerrero, se reporta un bosque
mesófilo que presenta a Clethra mexicana-
Alnus acuminata ssp. arguta -Guarea excelsa
como codominantes en el estrato arbóreo de
13 m, donde también se encuentran: Miconia
glaberrima, Quercus candicans (encino), Q.
laurina y Ternstroemia lineata ssp. lineata (flor
de tilia grande); presenta un estrato arbustivo
entre 1.5 y 3.0 m conformado por: Alnus
acuminata ssp. arguta, Baccharis confer}a
(escoba de monte), Miconia glaberrima, Senna
pallida (flor de San José) y Miconia sp.; en el
estrato herbáceo inferior a 0.7 m se reportan:
Tibouchina longifolia (entrodelia), Baccharis
confería, Triumfetta sp. (abrojo), Dryopteris sp.
y Phytolacca icosandra (quelite).
Cerca de estos lugares, también se reporta
un bosque mesófilo en condición secundaria de
desarrollo, provocada por actividades forestales
inadecuadas y el nomadismo agrícola; fen él
codominan en el estrato superior, varias
especies de Quercus, entre ellas: Q. ¡aurina-Q.
glabrescens-Clethra mexicana, con alturas de
15 m, donde también se presentan Quercus
crassifolia (encino negro) y Arbutus xalapensis .
(madroño, nuzu-nudu); en este lugar, el bosque
mesófilo presenta un estrato arbolado bajo,
entre 6 y 8 m conformado por: Clethra sp.,
Quercus laurina, Cleyera mexicana y Arbutus
xalapensis; en el estrato inferior de 0.4 a 1 m:
Comarostaphylis discolor (yaga-ya-na),
Ternstroemia sylvatica (tepezapote), Fuchsia
sp. y Arbutus xalapensis.
Al norte y noroeste de Puerto Escondido,
existen grandes extensiones de bosque
mesófilo alteradas para propósitos de
establecimiento de cafetales, donde el estrato
inferior es sustituido por los cafetos y en el
estrato superior son favorecidos aquellos
árboles empleados como sombra (las
variedades de café cultivado en estos lugares
son: Típico, Borbón, Mundonovo y Garnica).
En estos bosques se aprecian 2 estratos
arbolados; en el superior que alcanza de 20 a
25 m las especies favorecidas y dominantes
son Inga vera (agotope) e Inga aff. micheliana
(chalum), donde se presentan además:
Quercus sp. (encino). Alchornea latifolia (palo
de mujer) y Clethra mexicana; en el arbolado
inferior, entre 10 y 12 m se reportan: Quercus
peduncularis (encino blanco), Q. glaucescens
(encino roble amarillo), Ardisia sp. (capulín) y
Cecropia obtusifolia (chancarro); en apariencia
y a distancia no se observa el bosque
perturbado, hasta que al acercarse se aprecian
los cafetales.
Al norte de Santa María Huatulco se reporta
un bosque mesófilo también utilizado como
sombra para cafetos; aquí se reporta un solo
estrato arbolado superior que alcanza hasta
15 m y las especies favorecidas para sombra
son: Inga edulis (chalahuite), Sommera
guatemalensis (mameyito), Saurauia nelsoni,
Alchornea latifolia (palo de mujer), Persea sp.,
Prunus sp., Ficus sp. (matapalo) y Montanoa sp.
Hacia el oriente del estado, en la provincia
Cordillera Centroamericana, el bosque mesófilo
colinda con la selva alta perennifolia, desde
1 500 msnm, y ocupa las sierras hasta poco
más de 2 000 m, donde cambia a bosques de
coniferas y mixtos; en el estrato arbóreo de
más de 15m, se citan entre otros, a:
Liquidambar styraciflua (estoraque, ococote),
Pinus michoacana (pino lacio), Clethra
pachecoana, Vernonia aff. aschenborriiana,
Inga sp. y Saurauia pñngtei. Liquidambar
styraciflua forma masas homogéneas y domina
ampliamente junto con Pinus michoacana.
Debido sobre todo a que el bosque mesófilo
de montaña habita en lugares de condiciones
climáticas favorables, provoca que tengan un
fuerte atractivo para llevar a cabo agricultura, a
pesar de lo inadecuado de los terrenos para
ello; el resultado es que muchas de estas
masas boscosas presentan estadios
secundarios de desarrollo, otras se han perdido
al ceder espacios al cultivo, y la erosión, en
magnitud variable, está casi siempre presente;
es notable también la excesiva e inadecuada
explotación forestal que se lleva a cabo en
estos lugares.
Bosque de Táscate
Los bosques de táscate están formados por
árboles escuamifolios (hojas en forma de
escamas) del género Juniperus, también
conocidos como cedros o enebros, los cuales
poseen escasa altura y forman comunidades
abiertas en donde existen amplios espacios
entre los árboles.
Este tipo de vegetación no cubre grandes
áreas en el estado, las más representativas a la
escala de trabajo se localizan sobre todo en la
porción noroeste, bajo la influencia de climas
semicálidos y templados subhúmedos, los
materiales subyacentes corresponden a rocas
sedimentarias como: areniscas, conglomerados
y calizas, que han dado lugar a su vez, a suelos
delgados y pedregosos muy susceptibles a la
erosión, clasificados como: Litosol, Rendzina y
Cambisol.
Al norte de Huajuapan de León se ubica el
área más extensa con este tipo de bosque,
cubre las sierras a más de 2 000 msnm y
presenta un alto grado de erosión; está
integrado por elementos bajos de Juniperus
deppeana, no mayores de 4 m, muy
espaciados unos de otros; en el estrato
arbustivo inferior a 2 m dominan: Rhus
terebinthifolia (temazcal), Acacia schaffneri,
Rhus mollis (yucucaya), Mahonia sp., Agave sp.
y Opuntia sp.; el estrato herbáceo está
dominado por gramíneas, sobre todo Aristida
aff. pansa que crece entre los numerosos
surcos y cárcavas.
La selva alta perennifolia es la más rica y compleja de todas las comunidades vegetales.
Al sur de Santa María Tecomavaca existe
otro bosque que colinda con selva baja
caducifolia a partir de 1 700 msnm y con
pastizales inducidos y bosques de encino a
poco más de 2 000 m; la composición florística
de este bosque está conformada como sigue: el
estrato arbóreo superior, que alcanza 5 m está
dominado por Juniperus flaccida y presenta un
estrato arbustivo bien desarrollado, dominado
por: Rhus mollis (yucucaya), Amelanchier
denticulata (membrillo cimarrón), Antiphytum
parryi, Brickellia veronicifolia (orégano de
monte) y Verbena sp.
Rzedowski (1978) describe a esta forma
de vida, así: "Comunidad que prospera en
condiciones ecológicas diversas. Se le
encuentra preferentemente en forma de una
estrecha faja transicional entre el bosque de
Quercus y de Pinus por un lado, y el pastizal,
matorral xerófilo o bosque tropical caducífolio
por el otro. Muchas veces los bosques de
Juniperus no parecen constituir una comunidad
climax, sino que son más bien de origen
secundario, aunque este aspecto no se ha
estudiado a fondo en ninguna parte de México".
Bosque de Galería
Comunidad arbórea que se encuentra en las
márgenes de los ríos o arroyos en condiciones
de humedad favorables.
En la entidad, el área más representativa es
la que se localiza al norte de Santo Domingo
Tehuantepec y se encuentra sobre las
márgenes del río Tehuantepec.
Bosque Cultivado
Es aquel que se establece mediante la
plantación de diferentes especies arboladas
realizada por el hombre, sobre todo en aquellas
áreas que han sido degradadas y presentan
una marcada perturbación debido a las
actividades humanas. Estas poblaciones se
pueden considerar como bosques artificiales,
ya que son consecuencia de una reforestación
de varias especies.
En el estado, es urgente ampliar y propiciar
un mayor apoyo a los programas de
reforestación, porque los índices de erosión son
de los más altos en el país, debido al mal
manejo de los recursos.
Las condiciones ambientales donde
prospera el bosque cultivado son variables,
debido a obvias razones, dado que su
establecimiento es artificial y se plantan
especies adaptadas a las condiciones del sitio.
Esta forma de vida está conformada por una
gran variedad de especies cultivadas, con fines
de conservación del suelo, además de
recreativos, ornamentales y forestales.
En la entidad existen muchos lugares con
reforestación, sin embargo, a la escala de
trabajo, el área más representativa se localiza
cerca del poblado Nuevo Ocotlán, sobre
lomeríos de la Llanura Costera del Golfo Sur,
en altitudes inferiores a 200 m y en ambientes
cálido húmedos, en sitios que anteriormente
sustentaban vegetación de selva alta
perennifolia y que fue devastada. La
reforestación incluye varias especies de pinos,
principalmente: Pinus caribaeay Pinus
lumholtzii, donde además se encuentran:
Byrsonima crassifolia (nanche dulce), Quercus
elliptica (encino nanche), Curatella americana
(tachicón) y Conostegia xalapensis (capulín,
serita).
SELVAS
Formas de vida propias de las zonas de clima
caliente, que dependiendo de la cantidad de
lluvia y su distribución, adquieren diferentes
formas y alturas. Están compuestas por un gran
número de especies, y florecen en muchas
regiones del país, es común la presencia de
bejucos, lianas y epífitas. En las poblaciones que
habitan las zonas menos húmedas son
frecuentes también los árboles y arbustos
espinosos. En Oaxaca se desarrollan: la selva
alta perennifolia, selva mediana subperennifolia,
selva mediana subcaducifolia, selva mediana
caducifolia, selva baja subcaducifolia, selva baja
caducifolia y selva baja espinosa.
Selva Alta Perennifolia
Este tipo de vegetación es el más exuberante,
complejo y con mayor biodiversidad de todos
los ecosistemas terrestres del mundo. Posee
árboles dominantes con más de 30 m de altura
y la mayoría de ellos no tiran sus hojas en
ninguna época del año (perennifolíos), por lo
que se mantienen siempre verdes; muchos de
ellos poseen contrafuertes y existe una gran
umbría en el Interior de la comunidad. Casi la
totalidad de los individuos arborescentes
presentan fustes largos y ramificados sólo en la
parte superior de la fronda. Tienen abundantes
bejucos, lianas y plantas trepadoras, cuyos
tallos pueden alcanzar grosores similares a los
de algunos árboles.
En la entidad esta selva crece en la
vertiente del Golfo, formando una franja casi
continua (interrumpida sólo por agricultura de
temporal en las cercanías de San Juan
INEGI. Síntesis deInformación geográfica del estado de Oaxaca. 2004
Ozolotepec), que corre de noreste a sureste,
desde Cosolapa hasta la sierra Espinazo del
Diablo, donde penetra al territorio chiapaneco;
se desarrolla en altitudes entre 200 y 1 600 m.
Los climas corresponden a cálido húmedo
con lluvias todo el año y cálido húmedo con
abundantes lluvias en verano; los niveles de
precipitación rebasan los 2 500 mm por año, la
temperatura media anual registra índices
superiores a 24°C y nunca se presentan
heladas. Los materiales geológicos que
sustentan este tipo de vegetación son en su
gran mayoría rocas de origen sedimentario,
aunque también se desarrollan sobre
materiales ígneos. Los suelos son de muy
variada condición, pero limitados casi todos por
lechos rocosos cercanos a la superficie, entre
ellos destacan suelos ácidos con
acumulaciones de arcilla en el subsuelo
denominados acrisoles; también crece sobre
115
 suelos con buen drenaje, menos ácidos que
éstos y más fértiles clasificados como luvisoles;
los feozems, con una capa superficial oscura,
suave, rica en materia orgánica y nutrientes;
también hay en esta selva, suelos de menor
desarrollo como las rendzinas, poco profundos
y con una capa superficial abundante en humus
que descansa sobre la roca caliza; regosoles,
que son suelos delgados y pedregosos que
cubren a las rocas y no presentan
diferenciación de horizontes; y los litosoles,
suelos muy superficiales con menos de 10 cm
de espesor.
Al noreste del estado, en las sierras calizas
cercanas a las presas Miguel Alemán y Miguel
de la Madrid Hurtado, la gran mayoría de las
comunidades de selva alta perennifolia
presentan estadios secundarios de desarrollo,
sin embargo, en sitios aún conservados se
reporta el dominio de Brosimum alicastrum-
Manilkara zapota en el estrato superior entre
30 y 35 m, donde también son frecuentes:
Cedrela sp. (cedro), Bursera simaruba (palo
mulato), Ficus sp., Ampelocera hottlei (frijolillo),
Terminalia amazonia (sombrerete), MyroxySon
balsamum (bálsamo), Schizolobium parahybum
(palo de picho), Ceiba sp., Pouteria sp., Trophis
sp., Cordia alliodora (suchicahue, pajarito prieto)
y Vatairea lundellii (amargoso); el estrato
arbóreo intermedio alcanza 20 m de altura,
formado por: Cedrela sp., Cupania sp.,
Hetiocarpus sp., Inga sp., Pouteria sp., Spondias
mombin (jobo de monte), Sickingia salvadorensis
(nazareno), Astronium graveolens (gateado) y
Aspidosperma megaiocarpon (colorado); en el
estrato entre 12.0 y 15.0 m: Protium copal
(copalillo), Stemmadenia sp., Aphananthe
monoica (palo de armadillo). Pouteria sp.,
Rinorea guatemalensis (badoo); entre 2.0 y
5.0 m se reportan: Piper sp. y Boehmeria
ulmifolia: en el estrato herbáceo sobresale
Paspalum conjugatum. En los estratos
arbustivos, entre 1.0 y 2.0 m, hay gran cantidad
de plántulas de los árboles que dominan en los
estratos altos. En varios de estos lugares la
selva sirve como sombra para el cultivo de café,
también se extrae madera con fines domésticos,
sobresaliendo en este aspecto la madera de
Cedrela sp. y Manilkara zapota (chicozapote); la
Dioscorea sp. (barbasco) es abundante en
varios lugares, pero no ocupa un estrato
definido.
En las comunidades secundarias arbóreas
de las selvas de estas sierras calizas, se
describe un estrato arbóreo superior de hasta
15 m, en algunos sitios dominado por Cordia
alliodora, Spondias mombin, Acacia glomerosa
(teposonte blanco), Bursera simaruba, Pouteria
sp., Dendropanaxsp., Talauma mexicana (flor
del corazón), Rollinia sp.; en el estrato arbolado
de hasta 10 m de altura: Heliocarpus
appendiculatus (jonote) y Cecropia obtusifolia
INEGI. Síntesis deInformación geográfica del estado de Oaxaca. 2004
(chancarro), Cupania dentata (agua al ojo
blanco), Chrysophyllum mexicanum (caimito,
palo de canela), Eugenia sp.; en el estrato
arbolado bajo, entre 4 y 6 m: Zanthoxylum sp.,
Spondias mombin, Lonchocarpus sp., Plumería
rubra (súchil); en el estrato hasta 4 m:
Lonchocarpus sp., Spondias mombin, Trema
micrantha (pie de paloma, yaco de cuero),
Louteridium donnell-smithii, Siparuna riparia
(limoncillo), Heliocarpus donnell-smithii (jonote
blanco); en el estrato arbustivo inferior a 2 m:
Miconia argéntea (tecalate), Cupania glabra
(nogalito, huanchal), Vismia sp., Bunchosia sp.,
Cestrum sp., Tabernaemontana sp., Verbesina
sp. y Piper sanctum (hierba santa). En estos
lugares el nomadismo agrícola es el factor que
determina en mayor grado la condición
secundaria, en algunas partes la agricultura
tiene carácter permanente, caracterizada por el
cultivo de café, en donde los árboles de la selva
proporcionan sombra.
116
La selva al sur de Tuxtepec cubre las
sierras calizas, desde aproximadamente
200 msnm, y alcanza, en esta parte del estado,
hasta 1 600 m, donde transita a bosque
mesófilo. Hacia altitudes inferiores a 200 m, en
terrenos aluviales, profundos y con buen
drenaje de la Llanura Costera, la selva ha sido
destruida casi en su totalidad, para dar paso a
la agricultura y pastizales cultivados y sólo
quedan algunos vestigios muy perturbados de
selva conocidos como "acahuales". En estas
sierras el clima es cálido húmedo con
abundantes lluvias todo el año, con
precipitaciones mayores de 2 500 mm (en
algunos puntos alcanza niveles cercanos a
4 000 mm), con temperaturas altas todo el año;
la selva presenta un alto grado de disturbio, sin
embargo en lugares mejor conservados alcanza
entre 25 y más de 30 m de altura, donde
predomina Brosimum alicastrum (ramón, lan-fe-
lá), y también abunda: Terminalia amazonia
(sombrerete), Ficus sp., Aphananthe monoica
(palo de armadillo), Swietenia macrophylla
(caoba, calpacua) y Pouteria sapota (zapote
mamey), en el estrato entre 10 y 20 m es
frecuente encontrar a: Ouararibea
guatemalteca, Sickingia rhodoclada (nazareno),
Cedrela sp. (cedro), Rheedia intermedia
(zapotillo), Rinorea guatemalensis (badoo),
Sapranthus aff. microcarpus (madre de cacao),
Guarea excelsa (bejuco colorado), Pouteria
unilocularís (zapotillo) y Ardisia sp. (capulín); en
el estrato arbustivo entre 1 y 3 m:
Chamaedorea sp. (palma, gueecho-guiaroo),
Psychotria chiapensis (yoale prieto), Dioscorea
sp. (barbasco) y Piper sp. En estos lugares la
actividad forestal maderable se reduce a la
extracción de trozas para aserrío de caoba y
cedro; también tiene gran relevancia la
extracción de barbasco y plántulas de
Chamaedorea sp.
Hacia la provincia de la Cordillera
Centroamericana, al noreste de Matías
Romero, la selva alta perennifolia crece en las
sierras bajas de origen sedimentario e ígneo,
entre 200 y 1 450 m de altitud, bajo la influencia
de clima cálido húmedo, con abundantes lluvias
en verano. Presenta tres estratos arbolados
más o menos bien definidos, donde domina
Dialium guianense (paquí) y Vatairea lundellii
(amargoso), con elementos que conforman un
estrato superior en forma de eminencias más o
menos aisladas que alcanzan entre 40 y 50 m,
en cuya composición también se encuentran:
Ficus sp., Terminalia amazonia (sombrerete),
Brosimum alicastrum (ramón, lan-fe-lá),
Calophyllum brasiliense (barí), Ceiba pentandra
(ceiba), Pouteria sapota (zapote mamey) y
Poulsenia armata (carnero blanco); en el
estrato arbóreo intermedio, entre 20 y 30 m se
encuentran: Dialium guianense, Guarea
excelsa, Terminalia amazonia, Spondias
mombin, Brosimum alicastrum, Tabebuia rosea
(palo de rosa), Swietenia macrophylla y
Zuelania guidonia (campanillo); el estrato
arbóreo bajo ocupa el espacio desde 10 hasta
15 m y está representado por: Cassia grandis
(caña fístula), Rinorea guatemalensis,
Zanthoxylum sp., Psychotria sp., Quararíbea
sp., Cupania dentata, Didymopanax morototoni
(chancarro blanco), Tabernaemontana sp.; el
estrato inferior entre 1 y 5 m, con: Bactrís
balanoidea (palma chiquiyul), Rheedia edulis
(zapotillo), Ormosia mexicana, Cephaelis elata
(canutillo), Miconia sp., Rhynchospora
cephalotes, Reinhardtla gracilis (tepejilote),
Nectandra ambigens (laurel), Costus pictus
(yetotzi) y Chamaedorea sp.
Al norte de Matías Romero, cercano a la
población de Cuauhtémoc, se describe una
comunidad secundaria de selva alta
perennifolia, con elementos arbóreos entre 20 y
35 m, dominada por Dialium guianense-
Terminalia amazonia, donde destacan además:
Bursera simaruba (palo mulato), Manilkara
zapota (chicozapote), Vatairea lundellii
(amargoso), Calophyllum brasiliense (barí),
Guarea excelsa (bejuco colorado) y Astronium
graveolens (gateado); existe un estrato
arbolado bajo, que ocupa el nivel entre 10 y
15 m, donde habitan: Pithecellobium arboreum
(frijolillo), Vochysia hondurensis (corpo),
Cupania dentata (agua al ojo blanco),
Nectandra rectinervia (laurel), Didymopanax
morototoni (chancarro blanco), Cecropia
obtusifolia (chancarro), Schizolobium
parahybum (palo de picho), Miconia argéntea
(tecalate), Cordia alliodora (suchicahue),
Apeiba tibourbou (pachiote), Quararibea
funebris (tepecacao), Brosimum alicastrum
(ramón, lan-fe-la), Spondias mombin (jobo de
monte), Trophis racemosa (leche María); en el
estrato arbustivo, entre 1 y 4 m: Heliocarpus
donnell-smithii (jonote blanco), Leucothoe
mexicana (hierba de la sarna), Lonchocarpus
phlebophyllus, Heliconia sp., Reinhardtia
gracilis (coyolillo), Cecropia obtusifolia.
Aegiphila monstrosa (café cimarrón),
Quararibea sessiflora, Desmoncus sp., Bactris
balanoidea, Luehea speciosa, Cephaelis
tomentosa, Chamaedorea sp., Faramea
occidentalis, Hamelia sp. y Celtis iguanaea.
A pesar de lo exuberante de esta selva, la
explotación forestal tiene poca significancia
debido a que muchas de las especies arbóreas
tropicales no tienen demanda en el mercado, sin
embargo, para las que sí lo tienen, la actividad
forestal es intensa, y provoca cambios profundos
en la estructura de la selva, dado que la
explotación es selectiva y favorece la
abundancia de ciertas especies y la escasez de
otras. Además de Swietenia macrophylla (caoba)
y Cedrela sp. (cedro), se aprovecha la madera
de algunas especies, como: Vatairea lundellii,
Calophyllum brasiliense, Astronium graveolens
(gateado), Myroxylon balsamum (bálsamo),
Pithecellobium arboreum (frijolillo), Zanthoxylum
kellermanii, Spondias mombin. Dendropanax
arboreus (mano de danta, palo blanco), Dialium
guianense (paquí), Brosimum alicastrum (ramón,
lan-fe-la), Bursera simaruba (palo mulato), Ceiba
pentandra (ceiba), Ficus sp., Manilkara zapota
(chicozapote), entre otras más.
Además, este tipo de vegetación ha sido de
los que más ha afectado el ser humano con fines
agropecuarios, debido a las características
favorables del clima donde se desarrolla esta
selva y la humedad es constante durante la
mayor parte del año, todo ello a pesar de que la
gran mayoría de estos terrenos no poseen
características favorables para las actividades
agrícolas, pues presentan topografías abruptas,
suelos delgados y pedregosos, ácidos, muy
lixiviados, poco fértiles y con alto riesgo de
erosionarse cuando quedan expuestos al ser
eliminada la cubierta verde.
La agricultura nómada afecta enormes
extensiones; se trata de una agricultura de
subsistencia que se establece mediante el
método de roza-tumba-quema. Consiste en
desmontar la selva de manera manual, para
luego quemar la vegetación e incorporar las
cenizas al suelo para favorecer el crecimiento
del cultivo; generalmente se siembra maíz para
autoconsumo durante algunos años, que varían
de 2 a 5, y la producción disminuye en cada
ciclo agrícola al ir agotándose los nutrientes del
suelo, hasta que los rendimientos son tan
exiguos, que hacen incosteable estos trabajos,
entonces la actividad se traslada a otra área,
y el terreno empobrecido se abandona por un
periodo más largo de tiempo, durante el cual la
vegetación crece y el suelo recupera (cuando
menos en parte) su capacidad productiva y
entonces se repite el ciclo de apertura al cultivo.