Zezé crece repentinamente como consecuencia de su operación de garganta. Zezé
tiene buenas notas y solo está un poco flojo en matemática. En su casa lo dejaron tener un amigo. En este caso era el vecino de enfrente, que era uno de los más ricos. Era criado por sus tías. Se llamaba João Galvão de Medeiros (Joãozinho, como el piano). Un día, mientras jugaban, encontraron una gatita abandonada. A Joãozinho no lo dejaban tener animales por lo que Zezé lo guardó en su casa en la habitación de las valijas con ayuda de Dadada. El padre lo descubre y le prohíbe acompañarlo en la ambulancia a ver los rayos X