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El documento expresa la tristeza de un estudiante al tener que despedirse de su escuela primaria, sus maestros y compañeros después de 6 años. El estudiante agradece a la escuela por educarlo y cuidarlo como una madre durante ese tiempo. Aunque es difícil decir adiós, el estudiante promete no olvidar ni defraudar a la escuela que formó parte importante de su desarrollo.
El documento expresa la tristeza de un estudiante al tener que despedirse de su escuela primaria, sus maestros y compañeros después de 6 años. El estudiante agradece a la escuela por educarlo y cuidarlo como una madre durante ese tiempo. Aunque es difícil decir adiós, el estudiante promete no olvidar ni defraudar a la escuela que formó parte importante de su desarrollo.
El documento expresa la tristeza de un estudiante al tener que despedirse de su escuela primaria, sus maestros y compañeros después de 6 años. El estudiante agradece a la escuela por educarlo y cuidarlo como una madre durante ese tiempo. Aunque es difícil decir adiós, el estudiante promete no olvidar ni defraudar a la escuela que formó parte importante de su desarrollo.
Nuestros corazones laten agitados En nuestros ojos brillan nuestras lágrimas Nuestros labios quieren decir muchas cosas, más no alcanzan a pronunciar nada.
Tenemos que decir adiós
A mis queridos maestros que tanto me enseñaron A mis compañeros con los que tantas alegrías compartí A mi escuela que cual madre amorosa durante seis años me cobijó.
Tenemos que decir adiós
Porque una etapa ha concluido Porque un sueño se ha realizado Porque un sueño se ha coronado con éxito.
Tenemos que decir adiós
Y seguir la ruta que nos marca el destino Y llevar la fuerza necesaria, para vencer los obstáculos que nos depara el camino Y alcanzar la meta por mis méritos ganados.
Tenemos que decir adiós
Aun cuando en mis oídos todavía llegue ese sonar de tu campana Aun cuando todavía oigo la voz de mis maestros, que me dan algún consejo Aun cuando mis manos siendo todavía la forma de la pluma Y en la espalda el dulce confort de una palmada.
Te decimos adiós querida escuela
Porque tú ya cumpliste con esa noble tarea de educarnos Porque ya nos viste crecer, reír, llorar y aprender en tus lindos salones Porque ya tienes un recuerdo de nosotros Y tú formas parte de nuestros corazones.
¡Adiós a mi querida escuela!
Porque todos los días fue tu portón Brazos tiernos de una madre Que amorosa y tierna abre A sus hijos con amor.
Adiós ¡Nunca te olvidaremos! Adiós ¡Siempre te respetaremos! Adiós ¡Jamás te defraudaremos! Adiós, adiós, adiós.