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lusiOn y PTCe como politicas educativas de Estado ito como opcion » mercado Gr 1B ~ IncLSION ¥ cALDAD Como PaLIcAS eDucATVAS be EsTADD plegado procesos de participacién y protagonismo juvenil y trabejando para reconfigurar el lugar de los estudiantes y su centralidad en la escuela De mode de profundizar la mirada acerca de los supuestos que marcan la Vida escolar de los sujetos que hoy habitan las escuelas secundarias, Carine Kaplan propone un valioso recorrido acerca de la propuesta meritacratica sobre la que se ha construide la escuele modeme y su relaci6n con las concepciones ue desde los dones, os talentos o las inteligencias responsabilizan a los ni- fos y j6venes por su éxito 0 fracaso. Comprender estos procesos nas lleva a ditucidar cémo se construyen los discursos que pretenden explicar las desigual ddades, pero que terminan por profundizarias, y creando nuevas taxonomias y clasificaciones. Graciela Morgade, en el capitulo 14, describe lo que ha significado, en 16 rminos de ampliacin de derechos y de inclusi6n, la Ley de Educacién Sexual Integral. Asimismo, plantea los avances v os desafios al respecta que, sin mas, suponen ls transformacién de las practicas escolares y de los enfoques a lahora de asumir que la educacién sexual integral debe atravesar el curriculum y las los diversos contextos. Al decir de Morgade, la ES! “resi: prdcticas escolares: rifica y pate En el capitulo 15, Ricardo Baquero realize un anélisis de experiencias de inclusién en la escuela secundaria. Propone una caracterizacion de las cor ciones de époce y nos invita a pensar acerca de aquellos recién llegados al nivel secundario. Para hacerles lugar a estos recién legados debemos repensar las racticas escolares y sus efectos de sentido, de modo de evitar practicas estig matizantes o patologizantes, Los invitamos a recorrer los diferentes capitulos, donde estos referentes Bonen en tesién el sentido comin acerca de la calidad educaivay nos ayy ddan a problematizar desde las pra teniendo siempre como horizonte e! rl leducacion pablica, ualador del Estado y la defensa de la capiruvo a La EDUCACION COMO DERECHO. NoTAS SOBRE INCLUSION Y CALIDAD EoUAROG RINES!* Durante fos ditimos afios, en los que se produjo en la Argentina un conjunto de transformaciones muy relevantes que no siempre nos hemos ocupado de conceptualizar como habria sido necesario, dos palabras que aquf vamos « tra: tarde poner en didlogo reciproco poblaron abundantemente la ret6rica pablice len general y {s gubernativa en particular. Me refiero a las palabras ficlusion y derecho, que formaban parte por igual de un tipo de discurso, sin duda am- liamente celebrable, que acompaf6 y organiz6 una serie de précticas y de tribucién més juste de los bienes pai ciudadanos. Esas posibilidades, en una sociedad tan desigual como la nues son por supuesto muy desparejamente usufructuadas por los individuos que pertenecen a grupos y estratos diferentes, y garantizar que incluso los mas des- protegidos pudieran incorporartas a su horizonte existenclal fue un norte muy visible de una cantidad de politicas impulsadas en el pais en es0s afios. Esas politicas se calificaron de manera general como inclusivas. porque buscaban inciuiren un cierto sistema a quienes, por le raz6n que fuera, estaban fuera de 41:2 quienes nunca habian estado adentro 0 a quienes, habiendo estado aden- tro alguna vez, habian sido desplazados de ese sitio como consecuencia de los re 2010920, done atualnent se dese lost Pati, procesos de desindustializcion, de privatizacién y de severa reduccion de las funciones protecivas del Estada en los afios anteriores, Asi, en una cantidad de campos de le accién pablica estatal, se diseRaron Planes yestrategias para incorporar a los beneficios generals de un denso sis tema de ressuardos Sostenidos sobre las insttucionesy as oficnas del Estado ‘millones de personas. Se crearan puestos de trek ia cignidad latoral de trabajadores y trabajadoras cuyo estatuto estaba signade por una fuerte informalicad y desprotecci6n, se ampliaron muy signiNeativamente las pasibilidades de ingreso al sistema de beneficios pcevisionales, se permitié el reconacimiento cabal de a identidad de género de todas las personas, e am ia posbilidad de contraer matrimonio a las parejas de arientacién diferente 2 lz heterosexual que hasta hace poco Funcionaba (y que sigue funcionando en le mayoria de los pafses del planeta) como norma exclayente de cualquier otra 6 el universo de vatantes de los representantes del pueblo Feciuciendo en dos afos la edad minima exigible para poder ejercer esa compe- tencia, se disefiaron estrategias comerciales, financleras,credticias, pare que iad de personas, matrimonios y familias tradicionalmente excluidos ad de acceso a determinados bienes electrodomésticos, automé- 5 € inmuebies) pudieran acceder-y sola subrayarse: “por primera veo"= @ esos consumos. Se celebré y se puso ala cuenta del éxito de estes po ‘nclusivas el hecho de que cientos de mils de familias de trabajadores inunda ‘an todos los veranos, las semanas santas y los fines de semana targos centros ‘urstieos que, durante décadas, les habian estado vedados. En el tereno educativo, el despliegue de estas paliticas de inclusion fue ‘muy notorio, Se disefaron cantidad de planes para permitr que todas los ni Tos, adolescentes y jovenes del pals estuvieran adentro del sistema educativo formal. Se establecié, por una ley ce lanacién, ta Ley de Educacin Nacional, @ obligatariedad dea escuela secundaria y de hecho se consigui6incrementar la ‘antidad de adolescentes y jovenes en edad escolar que, en efecto, estin hoy dentro de la escuela y no afuera de ella. Se implements la Asignacién Univer: Sal por Ho, importanisima politica péblica de transferencia de ingresos hacia las familias con hijos en edad educativa. Se construyé una enorme cantidad de escuelas que permitieronalbergar, y hacerlo en mejores condiciones, a los millones de nuevos estudiantes que faa recibiendo un sistema que, por todos ‘estos motives, protagonieé durante estas aftos un franco proceso de expansién. ‘Se incrementaron muy significativamente los salarios docentes, que estaban seriamente deprimidos a comiemzos de este siglo y que verfcaron sustantivas (il a ~ mejocias 2 lo largo de estos aflos. Se desarrollaran imparantes sistemas de becasy de alento «la permanencia yelavance de los estudiantes, asfcomo a le recuperacion para el sistema escolar formal de aquellos que lo habian abando. nado. Se ide6 ylev6 adelante un plan de finalizacin de los estudio primarios vy secundarias para los ciudadanos adultos que, por la ra26n que fuera, no hu bieran podido terminarlos 2 su hora En el campo especica de la educacién universitaria, el impulse inclusi- vo de las poltcas diseRadas e implementadas estos aflos fue especialmente ‘manifesto, Hubo un aumento significativo del presupuesto destinado alas uni- versidades pablicas, queen estos aos tuvieron un crecimiento muy isible de su matrcula, desu infraestructura y de sus posibilicades de expansién, Se amplié considerablemente el sisteme publco de universidades através dela creacién de una cantidad de instituciones nuevas, muchas de ella en regiones o provi clas que todavia carectan de,una, se desplegaran, por todas partes, sistemas muy amplios ¥ generosos de bacas tendientes a garantizar la permanencla, el avance y le promocién de los estudiantes. ce alenté un tipo de trabajo, en las universidades y de las universidades, tendiente a favorecer este movimiento de inclusién social y educativa, y las propias universidades, en muchos casos, incorporaron a su modo de gestionarse y de vincularse can su entorn, con Su comunidad de referencia, con las escuelas, las organizaciones y la vida social y ad, su provincia osuregién,orientaciones fa despliegue de programas culturales yde todo tipo, yun modo de entender la ac: 6 ro asociado ya al espiitu del extensionisme més tad sino al de una apertura de las puertas de la Universidad hacio adento, por asi decir, de sus propios muros, menos para permitr su mas 0 menas flantépica salida de 57 misma que para faciltar la legada a ella, el ingreso a ella (de nue ), de actores alos que alla haba sido traccionalmente {Lo que me importa subrayar como signo comdn de todas estas poltcas, de todos estas programas, y de ls alscursos que los promovieran y las acampe: fiaron, es la centralidad de esta idea de inclusin, de esta vocacién por incluir, por incorporar, par hacer entrar por meter adentvo lo queesté afuera, por metet [dentro a os que estén afuera, Por sacar de lalntemperle (“de a esquina”, sola, decir el ministro Sleoni en sus discursos) a los j6venes, 0a los ciudadanos de ‘manera general que na venian encontrando un lugar en otra pat, por sacarles Ge la inclemencia de la desproteccibn, de la falta de redes de contencién, dela 22 + ‘Incision yAUDAD Come FouAseDUoATAS 0 EstAD0 ausencia de instituciones y de Estado, y por meteros dentro de esas redes, de esas instituciones, de ese Estado protector (de sus escutlas, de sus universde des, de sus sistemas previsionales, de sus marcos normativos,y por ese via, también -y de manera an mas general, y como expectativa time, sin dude, de todo este movimiento de incusiGn-, de! sistema socal en su conjunto: de as ‘oportunidades de trabalo, de las oportunidades de consumo, de las oportuni | dades de bienestr, de las oportunidades (que no deberian conacerresewvas ni | exciusiones) ce usufuctuar el tiempo libre, de disfrutar de las vacaciones, acceder al mundo de la cultura el arte. A garantizar para todas estas posi ages es 2 la que se llamo, en estos titimas afios argentinos, inclu. Lo interesante, decia, es que este discus y esta préctcas dela Incusién ‘estuvieron también acompafados, durante estos mismos afios, por una retérice | que noni et acento en ofr idee, no necesariamente opueste & la de inclusion ‘pero que tiene con ella un conjunto de aiferencias importantes, que es lz cea de derecho. La postulacin, a pretensin, de que las personas tenian un derecho | a gozar deta o cual benefcio u oportunidad: de que existia un derecho, veri sracia, al jublacion. la educacidn. 0 acasarse. 02 lo que fuera. De que no | habe derecho a que algunas posibilidades funcamentales paral vide de todos | os sujetos no fueran posblidades ceras y efectivas para todos: ueran enton ces, al ne ser para todos, privlegios de solamente algunos (de unos pocos, de unos cuantos, aun de muchos, pero no de todos), y de que, por lo tanto, esas posibilidades que tenfan que poder se ciertasyefetivas pars todos debian ele varse la categoria de derechos, y debia exigise al Estado que los garantizara. Lnidea de derecho. en efecto, supone le nocion de un Estado activo. garante € incluso -a veces- promotor. Tenemos derechos porque tenemos un Estado que promueve, defiende y garantiza.A diferencia de laidea liberal de libertad (de la idea de ibertad negativa de los individuos frente a todos los poderes, inclu do el del Estado), que pone al Estado del lado de las cosas malas de la vida y de la historia, aides democrétice de derecho pone al Estado en oto sitio: no en el de las amenazas de las que debemos preservarns, sino en el de ls recursos con los que contamos pare que nuesttos derechos puedan re ero lo que aqui querra resltar, para indicar una primera ciferencia (ve remos tres) entre la idea de inclusisn que consideramos al comienzoy ls idea de derecho que estamos presentando ahora, es que, de esos derechos que ! Estado tiene la obligacion de garantzar, nasotros, los cudadanos, somos los sujetos. Somos nasotras, cudadanos, los que tenemes, los que detenta- mos, unos derechos que el Estado, porque los reconoce como tales derechos, ee Cormuor + a3 'y porque nos reconece # nesotres como sus titulates, debe asegurarnae. Por ‘supueste que podriamos conversar sobre esto un rato largo. Incluso parainto:

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