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Ciclo de rocas

En una primera etapa de formación, el magma procedente del interior de la


corteza terrestre se enfría en su camino de ascensión hacia capas
superficiales, dando lugar a una roca ígnea, que podrá ser extrusiva, si
alcanza la superficie y se deposita sobre ella, mediante las erupciones
volcánicas (Lava solidificada) o intrusiva, que se produce cuando va subiendo
por las cavidades y grietas de la corteza terrestre, sin llegar aflorar en
superficie (granito).

Estas últimas por desgaste de las capas superiores o bien por levantamientos
verticales, pueden aflorar en superficie, sometidas en este caso a los agentes
de meteorización que darán lugar a la separación de las rocas y a la formación
de los suelos.

La erosión y el transporte producirán que las pequeñas partículas separadas,


sean transportadas y almacenadas en cuencas sedimentarias (principalmente
los océanos, donde por el peso, poco a poco irán compactándose y sufriendo el
proceso de diagénesis, aquel por el cual a partir de sedimentos se conforman
las rocas sedimentarias mediante el proceso de litificación de estos.

Estas rocas, una vez consolidadas pueden por levantamiento cortical aparecer
en la superficie terrestre entrando de nuevo en el ciclo de meteorización-
erosión-transporte o bien continuar descendiendo en la corteza terrestre debido
a los procesos orogénicos. Es en ese momento cuando los cambios en la
presión y en la temperatura ambiente producen alteraciones de los minerales
dando lugar a rocas metamórficas. En este caso encontramos arcillas que se
transforman pizarras o granitos que se pueden dar lugar a gneis (roca
metamórfica compuesta por los mismos minerales que el granito, pero con
orientación definida en bandas, con capas alternas de minerales claros y
oscuros). Una vez llegados a ese punto, las rocas metamórficas pueden por
levantamiento cortical ascender y aflorar también en superficie, o bien sufrir
niveles de calor y presión elevados que den lugar a la transformación de estas
en rocas ígneas, cerrándose así el ciclo.

Tipos de rocas
Las rocas ígneas son las rocas que se forman cuando se enfría el material
fundido en la corteza terrestre. El magma es el material fundido por debajo de
la superficie terrestre y la lava es el material fundido que brota a la superficie.

Existen dos tipos de rocas ígneas:

 Roca ígnea extrusiva: también llamada roca volcánica, es la roca que se


forma cuando la lava se endurece. Ejemplo de piedras extrusivas son la
obsidiana y la riolita.

 Roca ígnea intrusiva: también llamada roca plutónica, cuando el magma


cambia de fluido a sólido debajo de la tierra. Ejemplo de piedras intrusivas son
el basalto y el granito.

Las rocas sedimentarias son rocas que se forman a partir de fragmentos que
se han cementado. Por lo general, los sedimentos se acumulan formando
capas horizontales, que se compactan por la presión de materiales por sobre
las capas. Materiales como la sílice, el carbonato de calcio o los óxidos de
hierro sirven para cementar o pegar los fragmentos.

La formación de las rocas metamórficas se producen a partir de otras rocas,


ya sea sedimentarias, ígneas o metamórficas, las cuales cambian sus
propiedades por efecto del calor, la presión y las reacciones entre diferentes
minerales.

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