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La desesperación.

Quisiera estar a tu lado

para expresarte lo que siento,

me tienes alucinado

con éste horrible tormento.

Ya no aguanto ni las ganas

de poder darte un beso,

porque todas las mañanas

mi mente sólo piensa en eso.

Sé que un día he de verte

y ese día ha de llegar,

mi motivo es conocerte

porque tus ojos quiero mirar.

Estrella.
Sólo pienso en ti.

Anoche que observaba la luna

y me puse a pensar en ti

dije: como tú no hay ninguna

que provoque amor en mí.

Cerré los ojos un momento,

pensado yo contigo estar,

y aunque fue muy poco el tiempo

en mi mente no me dejabas de abrazar.

Daba muchas vueltas,

no dejaba de pensar,

¡que ganas cómo éstas

las que tengo de amar!

Estrella.
Mi única flor.

Sus pétalos son tan lindos

y de un color inigualable,

el aroma que ella brinda

es algo tan inolvidable.

Sus hojas son verdes

y muy frágil es en verdad,

sus raíces son fuertes,

¡no la podrán arrancar!

No dejo que se marchite,

no me lo voy a perdonar;

mientras yo sepa que existe,

siempre la he de cuidar.

Estrella.
El amor.

Mirada tierna como la brisa,

amor sincero de mi corazón,

única y hermosa es mi sonrisa

que te brindo en cada ocasión.

Oscuridad que oculta tu ser,

niebla que cubre tus ojos,

quisiera que cambiaras de parecer

y que no los tengas tan llorosos.

Alguna culpa tendré que tener

para sentir tanto dolor,

sentimientos buenos debí perder

para que tu vida tenga más color.

Quisiera decirte todo directo,

pero sabemos que nada es perfecto,

que el amor es un trayecto

y no quisiera salir perdiendo.

Ciro.
Te extraño.

Te extraño cuando no puedo verte

y aún sueño con algún día tenerte,

en mis brazos poder abrazarte

y en tu boca quisiera besarte.

Te extraño, y no quiero perderte;

a mi lado por siempre quiero amarte

y en mis sueños quiero atraparte

para demostrarte lo mucho que voy a quererte.

Te extraño como no te imaginas,

te quiero y de ello no tengo dudas.

Te amo y a nadie se lo digas

porque tu amor y el mío son un mar de ironías.

En cada verso que he escrito

he dicho todo lo que pienso,

pero sobre todo quiero que sepas

lo mucho que yo te quiero.

Ciro.
Mi pensamiento.

Eres como una ola que suena sin cesar,

que retumba en mi oído sin parar;

como el susurro hermoso que siempre quisiera escuchar

o como la linda mirada que has de reflejar.

En toda tu vida te quiero acompañar,

vivir una fantasía y no sólo soñar;

momentos fabulosos a tu lado quiero crear

y con tu gran compañía siempre estar.

Quisiera estar en tu hermoso mirar

para tenerte en mi mente y siempre pensar

en tu linda sonrisa y por ti suspirar,

¡cómo no quererte si siempre estás en mi despertar!

Ciro.
Horas de junio.

Vuelvo a ti, amor, así.

soledad tan cerca de la vida,

como en la otra vida, amor, así.

Tan cerca de la muerte,

junto a la estrella de la buena suerte;

vuelvo como la luna nueva al cielo de la buena suerte,

como la noche, muy fuerte.

Salgo de ti y estoy en tu tristeza,

sales de mí y estás en tu belleza.

Como las estrellas las acercan,

como las noches más bellas,

como la primera nube de las estrellas.

Shon.
La voz.

Cuando pienso en ti,

levanto la voz

y cuando pienso en Dios,

uno la voz.

Tanto cerca como lejos,

tanto el cielo como el agua

forman parte de las montañas.

Como los ríos,

los mares,

las nubes,

la flor…

la esmeralda y la abeja.

La primera voz humana fue asombrosa,

primero, la distancia de las cosas,

después, la tristeza de las cosas.

Tanto la soledad le responde al silencio

como a la tierra,

como al agua, al aire y al fuego.


Sea el pensamiento de las voces del cielo.

Shon.
Poesía mía.

Poesía, verdad.

Poema, mío.

Fuerza de amor que hallo

en tus lindas manos.

Tanto cerca como lejos,

como en mis cortos sueños,

huye de mí, conviértete en mi olvido,

en el tiempo perdido,

en el primero de todos los recuerdos,

en mi primer olvido.

Shon.

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