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Esta obra es un estudio completo sobre la legión VII Gemina (Pia) Felix, la única legión romana acantonada en Hispania durante todo el período altoimperial. Debido a las propias circunstancias históricas, el estudio de esta legión se convierte en un análisis de las relaciones que el ejército romano mantuvo con las provincias hispanas en las que fue una institución más al servicio del gobierno provincial. Tomando como base la documetnación epigráfica, las escasas fuentes literarias y arqueología,
Esta obra es un estudio completo sobre la legión VII Gemina (Pia) Felix, la única legión romana acantonada en Hispania durante todo el período altoimperial. Debido a las propias circunstancias históricas, el estudio de esta legión se convierte en un análisis de las relaciones que el ejército romano mantuvo con las provincias hispanas en las que fue una institución más al servicio del gobierno provincial. Tomando como base la documetnación epigráfica, las escasas fuentes literarias y arqueología,
Esta obra es un estudio completo sobre la legión VII Gemina (Pia) Felix, la única legión romana acantonada en Hispania durante todo el período altoimperial. Debido a las propias circunstancias históricas, el estudio de esta legión se convierte en un análisis de las relaciones que el ejército romano mantuvo con las provincias hispanas en las que fue una institución más al servicio del gobierno provincial. Tomando como base la documetnación epigráfica, las escasas fuentes literarias y arqueología,
Urbano Espinosa ¥ SANTIAGO CASTELLANOS
Eps)
COMUNIDADES LOCALES ¥ DINAMICAS DE PODER
EN EL NORTE DE LA PENINSULA IBERICA,
DURANTE LA ANTIGUEDAD TARDIA
UNIVERSIDAD DE LA RIOJA
SERVICIO DE PUBLICACIONES
2006EL EJERCITO ROMANO EN EL NORTE PENINSULAR DURANTE
EL BAJO IMPERIO A TRAVES DEL REGISTRO ARQUEOLOGICO
Iatenses sin emplazamiento fijo (lig. 1.
No dcbemos obit oe res de Zoxino y Oro, que naan Ia probe
' tropa privadas para la defensa de Hispania.
No vames a detenemos aqui en la amplia produccién historiogratica derive
da deta inuerpreiaciGn de dichas fuentes textuales. Vamos a centrar nucstr iater-
207:
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)
‘vencion ca los testimontos arqucolGgicos disponibles sobre Ix presencia del ejér-
‘cio romano en Hispania durante el Bajo Imperio.
Hasta hace muy poco tiempo los testimonios arqueotégicos disponibles sobre
‘problema, que en buena medida persiste hasta nuestros dias, reside en la diffcul-
tad de identificar el hortzonte arqueolégico propio dei elemento militar a partir
del siglo IT dC. ca Tispania. La integracion de Jos regimientos militares dentro
de la Vida urbana y a carencia de asentamientos militares propizmente dichos,
como refleja claramente la Nottita, por un parte; por ots, la escasez ke maie-
Hales guia de tipo mltar, entre los que cabe enumerar tan s6lo los miifiaria y
algunas emisiones monetales, ban provocado esta situacién, que tan s6lo recien
tes extudiog derivacos de excavaciones sealizadas en diferentes yucimientos det
norte peninsular han comenzado a esclarecer
218
1a inco ROMANO BY NORTE FENISCAR DURANTE BAO EPR A TRS DL REGISTRO.
Hoy por hoy, la principal evidencia arqueolégica de In presencia del ejército
romano en Hispania dutante el Bsjo Imperio son tas mutalss de este period y
el registro anqueoibgico a elias asociado.
Fl problema del anurallamiento bajoimperial
‘catacio que la invasién de los alamanes en cl 270 afectara 2 la Peninsula Toésica
(Arce 1982, 94).
‘Rebull ya habia puesto en cuestiin el caricter estricaamemte defensive de
Jas murallas tardias, resaltando otras posibles causas, como el deseo de la cindad
de manifestar su propio prestisio (1974; 1986).
Results dif, por fala de datos objesivos,establecer una relacién historiea de
ccaustefecto entre invasion del sigio Il y amurallaniento Jonson (1983), 67).
probaciénangucligia desu uso duce dl pesodo tardortomano, Esto argu
219{Gos muy reduc que proporcionan eseass informacion. Para el cas hispano
demos sesalar el problema a ogica a la que
‘Siglo, que comprende desde mediados del siglo It hasta comicazos del V 6.C.
as murallas hispanas y su dataciéa
Casto las dos tnicas forficaciones bejoimpesiales en la Bética a Civitas Igaedi-
tanorum (danhaa-Velha) y Pompacio. Fl caso de Sancander plantea aa mayores
ificultades de identificacin (Fernndez, Ochoa & Morillo 2005, 302303) (Bg. 26).
‘Obviamente no vames a entrar aqui en un andliss pormenorizado de tos datos
au han rade determin as ronolga cue oy apc cats ao de
pl
imbricar est problemtica, de la que y2 nos hemos ocupado en otras ocasiones
(emindez Ochoa & Mosllo 1992, 2002, 2005; Fernandez Ochoa 1997a, 255-256).
ig 2. Mralles tandorromanas en Espanta (egtin C Fernénulee Ochoa y Anget Moro)compen emnosz OCHOA. ANER MORILLO
ig 3. Legio. Recanaciim de sector oeste
ol cereus anrurallado bajoimpertal
(fotografia: V Garcia Marcos)
Fig. 4, Astusica Augusta Wists ares del extorior dol sector ortemtal del circuito
amurallado Dajotimpertal (otografia: Arcs Exbosicion Astures,
Pamdackin Municipal de Cultuea, Gijon Fig. 6, Velcin. Exterior de ta muralle bajotmperial Gbtografa: A Morte).
me 223_Lisincro ROMANO YP NORTH ENINSULAK DURANTE HAO WERE 4 TAS aL BGT
a primer rp ei contd por recon nde egos
Cardcer wbano de dio nico pane gus dats
HI marco temporal durante el que se construy6 esta primera generacién de
‘Sn upufogia. Tos hatagos umisncos presenta el probes insertable de
das largas perduraciones.
‘La lnvestigaci6n actual sobre las producciones cerimicas permite easpezar a
_mente ea ceniros como Asturica Augusta, que ejempliica muy bien la sitaci,
cen el cuadrante noroccidearal de la Peninsula Thérica (%. Morillo et alsé 2005,
49.150 y 157-158). A partir de un momento constantiniano pleno ¢ciraa 320
(yl pasa mate cxpeimecia eicatvstnormacones, que per
an dhrante todo el siglo TV y que en los 4mbitos peninsulzres han comenzado a
dedinirse con mayor cazidad.
los nies comespondenes# segunda mit de io Hy dos pie
as a. a5 Hp. 1), tupscs sp. yh sp 12 Hap 2. Se
Conmazn ambien aguas forms decodes olde come canes Hsp, 37
(Garcia Marcos et alli 1997, 520), Dichos reciplentes sou importados de tos tall
68 rojanos y de los nuevos centros de fabricacion que empiezan a surgir al este
dela Submeseta norte (fg. 7).
os repent de fats en compass en fp mises tees or
Ce Te
9
ie}
Fig. 7. Contento anguealigioo de cavdctr corémico correspondents a a
‘ugioda mitad de siglo ID y comtenzos de} IV dC. en ef yacineento
de Astorga (segtin Moro 9 Gorcte Marcas, 2003).
25CARN FRDNANDEZ- OCHOA. ANGEL NORIO nero ROMANO EN HL NORTE FEENSULAR BURA. O ROPER A TRAYES DSL REGO,
oibemente imports dea éiceydoccmenadn eines de a seg
pen Rodsguc 1985, 246 Pas Peralta 1991, 4750; jan 1997, 330553).
[No obsante, ef monopotio de las producctoneshispinicas no evita a eps
a de algia secipicate de procedencia afsicapa o gilca. Ene las primeras se
fencuentfan algunos ejemplaresaisados de fera sigata africana, entre fos que
‘2 encuentan incernas de los tipos Hayes Tb y Hayes fla (Morillo 1998, 148-152)
than tarien en las erage asorcenses Se dee sing fora iil
+a focense (Late Roman C).
Posiblemente los reciplentes norteafticanos Importados Ueguen @ Astorga a Z
través de los puertos de escala enclavados en las costas gallegas o asturianas,
desde donde sc difunden hacia la Meseta. La presencia de algunas dnforas acei- ig. 8. Gonseato arqueotigio de carder cerdmico correspondiente
‘eras béticas del tipo Dressel 23, asi como anforss orientales y norteafricanas, al sigio IV a la primera maa del V dC on ol yacimtento
confirma la-vigencia de las rutas mavitimas cantibricas. ‘de Astorga (eegin Morilo y Garela Marcas, 2005)
26 227tic, ataves de a Cul pueden haber aleanzado a capital str (3a
‘Ninguna de las muralias de esta primera generacion que acabamos de reseflar
cscalonuda, pero siempre con anteioridad a un momento constantiniano pleno.
A pesur de que por el momento estd mucho peor defiido que el anterior,
parece que va tomando cuerpo un segundo grupo de murals de época poste-
sos, 3 comienzos del siglo V.
‘as murallas del Noroeste peninsular
Copintoapare merece dsrbuclin gengfe de ets enon spect
Grane el Bajo Empero, que analzaemos mas adel
Se constata igualmente una mayor concentraciOn de Jas mulls datadas en
este periado ea el Noroeste peninsular. Las principales cindades de esta regia
“Leén, Lugo, Astorge, Braga-, ademds de Gijén, se rodean de un poderoso sistema
228
s
‘anquitectos romaaos, Hoy en dia se acepta abiertamente la intervencion directa
29ieee ena list eam i de Att provi sla
militaria que relacionan las reformas de fa vieja murallaaltolmperial det Cam-
‘pamento dea legio VII Gemiina con la presencia de nuevas tropas procedentes
‘de la zoma de Pannonis, posibiemente reasignadas a la fepio VII Gemina, en un
momento que pademos sitar a finales del siglo HW.
La inserci6n de las amrailas hispanas dentro de Ia geoestrategia
bajeimperial
‘De todos son conocides los cambios en Ia esteategia defensiva del Imperio
‘on algunos casos sea complicado determinar cuales fucton tos motives en Tos
‘que se bas6 esta supuesta mayor operatividad.
Ts sigificativo que tres de los cuerpos de Himitanet relacionados en la Not
sudocekiental de la Galt, que desempefia un importante papel en las comuntcs
1, Dichas evdencias ve enazarcan dentro del actual proyecto e inverigaciGne Campa
Imenios romance en a Poninrula Paros: andlst anqusoligio 7 arguitetSnico, concess
Go por el MCYT (et BIEA200203305), digido por uno ce noscres (a Marie).
230
sL pfacto ROMANO NOHTE PRUNSULAR DURANTE FLEAS DEFER & TRATES RECRTIO.
CGiones éntze ambas didcesis, en el que se encueatea asentada ia cohors Novem
tem Gallicarn (Perwiinidex, Ochioa 19974, 262) (ig. D.
En los secintos del Noroeste, la construcci6a de la mural parece coincidir en
1 tempo coa profandas remodeiaciones urbunisticas, que afectan en algunos
sos a i totalidad de fx superficie de In ciudad. Hl ejemplo mejor constataco es et
‘correr com los gastos en soltarto, los elevados costes hasian quc Ia construccién se
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2, APENDICE DE ANTROPONDMOS Y ETNONINOS
Alans: 66, 146, 247, 249, 250.
Alarico: 96.
Alfzedo el Grande: 249, 256 s, 262,
‘Aimanzor: 248.
Amiano Marcelino: 245 ss.
Andahusies: 178, 240, 244, 263,
oso: 259,
Beaulio: 90, 96, 97, 154 ss. 159, 168
Beitones: 206.
Burgundios: 90, 246.
337