Está en la página 1de 35
TEORIA Y NUEVOS ESCENARIOS DE LA BIBLIOTECONOMIA Margarita Pérez Pulido * José Luis Herrera Morillas Segunda Edicién Margarita Pérez Pulido José Luis Herrera Morillas > TEoRIA Y NUEVOS ESCENARIOS DE LA BIBLIOTECONOMIA VANESA J. KLUG Ar Alfagrama Tec Bibliotecaria (ms Ediciones Documentalisia Pérez Pulido, Margarita Teorfa y nuevos escenarios de la biblioteconomfa / Margarita Pérez Pulida y José Luis Herrera Morillas. - 24. ed., aumentada. -- Buenos Aires : Alfagrama, 2006. 265 p. : 23316 cm. (Biblioteca Alfagrama / dirigida por Pablo Somma) ISBN 987-1305 10-9 1. Biblioteconomia. 2. Servicios a los usuarios. 3. Mercadeo de la informacion. 4. Etica de la informacién. 5. Biblioctecatios. 6. Alfabetizacién informacional, |, Herrera Morillas, José Luts Il, Titulo Ill, Serie COD o25.1 Alfagrama Ediciones S.R.L. Bolivar 547 - 28 of. A (Cl066AAK) Ciudad Auténoma de Buenos Aires Tel. 4342-2452 E-mail: libros@alfagrama.com.ar ‘www alfagrama.com.ar Comecein: Emesto Gutiérrez Disefio de Tapa: Diego Soler ‘Composici6n Interior; DONAGH IMATULICH La reproduccién total 0 parcial de este libro, en cualquier forma que sea, idéntica o modifica- a, escrita a maquina, por el sistema “multigraph”, mimedgrafo, impreso por fotocopia, foto- uplicacién, etcétera, no autorizada por los editores, viola derechos reservados. Cualquier uti- lizacién debe ser previamente solicitads. 2® edicién, septiembre 2006 Impreso en Argentina - Printed in Argentina (Queda hecho el depdsito que previene ia ley 11.723 © 2006 Alfagrama Ediciones S.R.L. ISBN-10: 987-1305-10-9 ISBN-13: 978-987-1305-10-0 Inpice TEMA |, 1a, Lad 4.1.2. 1.4.3. 12. 12. 1.2.2, 1.2.2.1. 1.2.2.2. 2.23. 1.2.2.4. 1.2.2.5. 1.2.3. 1.2.3.1. 1.2.3.2. 1.2.3.3. Parte | LA BIBLIOTECONOMIA COMO DISCIPLINA TEORIAY CONCEPTO ... ~e + 15 Evoluci6n histérica de la Biblioteconomia . 15 De los origenes hasta el siglo XV 16 De los siglos XVI-XVIII » 19 Del siglo XIX hasta nuestros dias . vane 20 Analisis conceptual de la Biblioteconomia como disciplina ......... Precisiones terminolégicas . . Estudio y evolucién del concepto de Biblioteconomia ....... . o6 31 Alemania ..... a see Wesw evict cescceee St Los paises del Este de Europa............ a El Ambito anglosaj6n...... la Europa mediterranea... . Latinoamérica . . sete dee Relacion de la Biblioteconomia con otras ciencias ..... 56 El concepto tradicional ..... El concepto divisorio. . . El concepto integrador. . 1.2.3.4. 12.4. 1.2.4.1. TEMA Il. 2A. 2.2. 213. TEMA III. 3-1 3:2. 3.3. 33.4. 3:3-44. 3.302. 3.3.1.3. 3.31.4. 3.3.1.5. 3.3.1.6, 33.2. 3.3.24, 33.2.2. 3:3-2:3. 3.3.2.4, 333 Bq. El concepto innovador..... 2.252 cere nreene nee OF Definici6n de Biblioteconomia ....4. eee cence ees 65 Divisiones de la Biblioteconomla .......++.0+.05++ 67 NUEVAS TENDENCIAS Y PERSPECTIVAS. DE LA BIBLIOTECONOMIA . Un modelo cientifico aplicado a la organizacién y administracién de bibliotecas: la Teoria General de Sistemas ........ +2 69 La Biblioteconomia inspirada en el principio del Management ..... Scere pera ris oe Biblioteconomfa y cultura digital: un nuevo concepto de biblioteca para un nuevo modelo de sociedad ..... 87 Parte Il NUEVOS ESCENARIOS DE LA BIBLIOTECONOMIA USUARIOS Y COMUNIDAD. COMUNICACION CON EL USUARIO Y RELACIONES (CON LA COMUNIDAD. LA ATENCION AL USUARIO + 7 Biblioteca, mediaci6n y comunicacién . » 7 La atenci6n al usuario......6.. 0.5 +5105 El Servicio de Atencién al Usuario OAT 5» chee SOD Actividades @ instrumentos de fecbimiento y acogida ., 110 Horarios ..... Neer eee eee e ee eewewnv ween eee MND GestiGn de flujos de pablico av eulnlee eealele alles eee 2 Disposici6n de espacios ....... sane ereeeenee Visitadores a domicilio ..... Documentos de informacién al piblico ......... Queias, reclamaciones y sugerencias. Actividades e instrumentos de orientacién ba sefializaci6n |... .2ver ise rea ae Documentos de orientacién al piblico Asistencia y formacién de usuarios. Actividades de animacion. ....- 2. +4 240545 Actividades e instrumentos di agen y promocién . Servicios de Informaci6n Documental ...........+.. 35+ 3.6. 3-7 38. TEMA IV. 4. 4d. 4.1.2, 443. 4.2. 436 43. 4.3.2. TEMA V. 5. 5.2. 5.21. 5.3 5.34 5.3.2. 5.3.3. 5.3.4. TEMA VI. 6.1, 6.2. 6.3. La web institucional —..... ety ew cee vak te + sare +. 128 Andlisis. de la comunidad y tipos de piblico ......... 131 Los recursos humanos .....-....256-2.45 sees 133 La evaluaci6n de la atenci6n al usuario ...... eee 135 IMAGEN, PUBLICIDAD Y PROMOCIGN DE LA BIBLIOTECA. ARQUITECTURA BIBLIOTECARIA, MARKETING E IMAGEN CORPORATIVA........ La arquitectura bibliotecaria ........ El nuevo concepto de espacio bibliotecario Programacion y planificacin ......... Tendencias y modelos de la arquitectura bibliotecaria desde las Ultimas décadas del siglo XX Publicidad y marketing ........ Imagen corporativa ... Configurar la personalidad corporativa . El programa de identidad visual corporativa: metodologia para su elaboracién ............02..- 165, ELEMENTOS DEFINITORIOS DE LA PROFESION. HABILIDADES Y COMPETENCIAS DEL NUEVO PROFESIONAL. ETICA Y DEONTOLOGIA DE LAINFORMACION .......... ai Evolucién histérica de la profesién. Perfil del bibliotecario actual ........... sateen eeale WPS Habilidades y competencias del nuevo profesional . Estatus y prestigio social . Etica y deontologia de la informacion . Principios, valores y normas ...... Cédigos deantolégicos de los bibliotecarios .........209 Cédigos deontologicos de otros WF profesionales de la informaci6n ......00eeeceeeeee 215 La ensefianza de la ética y la deontologia en los estudios de Biblioteconomia y Documentacién ....216 LA ALFABETIZACION INFORMACIONAL iibrodeeclon tect Oh: Neh +219 Concepto de alfabetizacién informacional . + +222 WRG VRE g's oc cia ge sia eis cnc wit ale alee 225 219 6.4. La practica del ALFIN ... 20. ..5 00.505 0045 tee B29 6.5. La ensefianza e investigacién en Alfabetizaci6n Informacional..............+.+231 6.6. La alfabetizaci6n informacional en Espafia ........235 BIDLIOGRAFIA. | cus ceem.aeestin Serre Rote ee eras oc ae sae 241 1a 42. 13. ae. 2.3. 24 2.5. 2.6. 2.7. 2.8. 3a. 3.2. 3:3: 4a. 422. 43. 5a. 5.2. 5-3- Sa . Técnicas de comunicacién para transmitir un mensaje positivo . INDICE DE FIGURAS Cuadro resumen de precisiones terminoldgicas de la disciplina ...... 29 Cuadro resumen de la evolucién del concepto de Biblioteconomia .... 53 Relacion de la Biblioteconomia con otras ciencias 65 . La biblioteca como parte del sistema de comunicacién social . n La organizacién como sistema - 73 Concepeién sistémica de ta biblioteca segin Enciso 5 La biblioteca como sistema segin McMahon y Tydeman . 76 Relacin entre sistema y administracion ......---.00se0ereneees TF Relaci6n de las funciones administrativas de planificacién y evaluacién. 84 Modelo conceptual de biblioteca digital segin Rowland y Bawden .... 93 Evolucién hacia la virtualidad de la biblioteca ........ Organizacién de la atenci6n al usuario en la biblioteca Reproduccién del texto de sistema de cita en la BPI de! Centro Georges Pompidou de Paris . Seleccién de indicadores relacionados con la atenci6n al usuario . . . Medios, soportes y formas convencionales de publicidad .......... 159 Programa de identidad visual corporativa: Etapas . Contenido de un manual de normas . . Distribucién de los grandes grupos en las clasificaciones intemacionales. ..........-...+e00eeeee% aga Situacién de los profesionales de Ia informacién segiin la clasificacién intemacional 1SCO-68 Estructura de la clasificacién intemacional ISCO-88.. Situacién de los profesionales de Ia informacién segiin la clasificadién espafiola (NO-94 . 2.0.20 .0.e 0s eee e ee £195 sss 192 + 193 10 5-5. SF 5.8, 5.9. 5.10. 5.1. 5.12. 5.13. 5.14, TEORIA Y NUEVOS ESCEWARIOS DE LA BIBLIOTECONOMIA Puntuaciones de prestigio de los profesionales de la informacién en escalas internacionales ........ 40.0000 +397 Puntuaciones de prestigio de los profesionales de la informacién segiin la escala nacional PRESCA seer aaah Comparacién de profesiones segiin las escalas internacionales SIOPS e ISEI .. Comparacién de profesiones segin la escala nacional PRESCA . Relaci6n principio-valor-obligaclén. Ejemplo 1... . Relacién principio-valor-obligacién. Ejemplo 2 Reproduccién del texto del Cédigo de la ALA . i Extracto del texto del Cdigo de los bibliotecarios de Québec . sevey BQ Extracto del texto del Cédigo de Brasil. . 233 Extracto del texto del Cédigo de la Library ‘Association weet: 21g > PR6LOGO La presente obra, a la que hemos dedicado mucho entusiasmo, esta elaborada desde una perspectiva docente, en la capa- cidad de transmitir conocimientos, y desde una perspectiva social, en la capacidad de preparar para una vida profesional. Esta escrita desde la universidad, en la idea ortegiana de que las tres funciones de la univer- sidad —la transmisién de la cultura, la investigaci6n cientifica y la ense- fianza de las profesiones— deben proyectarse en el estudiante desde la institucién, sobre lo que él es, sobre su facultad adquisitiva de saber y Sobre lo que necesita saber para vivir, por lo que aquello que se ofrece a| estudiante ha de caracterizarse por ser pedagdégicamente sintético, Sistematice y completo. Los contenidos que aqui presentamas tratan de conjugar la dimensién docente, investigadora y profesional de la universidad, en un intento de in- troducir al lector en unos contenidos tedricos esenciales sobre la materia, mostrando la posibilidad de investigacién sobre ta disciplina en cuanto a ciencia, y conectando con la realidad profesional, a partir de la aproxima- cién al-entorna mas inmediato, con la colaboracién de los profesionales, 312 ‘TEORIA Y NUEVOS ESCENARIOS DE LA BIBLIOTECOWOMIA Sin embargo, no consideramos funcién de esta obra recoger siste- maticamente los contenidas de la asignatura de Biblioteconomia a mo- do de manual. Nos ha parecido oportuno sefalar las lineas basicas de los aspectos tedricos y conceptuales que integran esta materia, asi co- mo referimos a las tendencias actuales de la Biblioteconomfa, en la aportacién de un modelo cientifico, ya que consideramos esta disciplina una ciencia, lo cual nos acerca a la concepcidn sistémica de la bibliote- ca como organizacién y a la aplicacién del principio del management co- mo motor de funcionamiento. Igualmente, considerar la perspectiva de futuro en el desarrollo de un nuevo concepto de biblioteca, de acuerdo a un nuevo modelo de sociedad y de filosofia de vida, y como conse- cuencia de ello, la aparicién de nuevos escenarios por donde transcurre el quehacer y la manera de ser de los profesionales. El libro se encuentra dividido en dos partes bien diferenciadas, si bien podemos encontrar en ellas un nexo de unién en la idea de la evoluci6n conjunta de los conceptos de biblioteconomfa, biblioteca y bibliotecario, cuestién que mantenemos a lo largo de toda la obra. En la primera parte, encontramos una aproximacién a la biblioteco- nomia como disciplina, en su evolucién histérica, conceptual y en el de- sarrollo de las nuevas tendencias hasta la actualidad. El valor de esta primera parte reside en la posibilidad que se ofrece al lector de obtener una visién conjunta y completa de todo lo que supone la bibliotecono- mia y ha acontecido desde sus origenes, independientemente de su en- torna geografico o de las diferentes escuelas o tendencias. La labor de sintesis realizada en esta parte del trabajo resulta de gran utilidad para el lector que se enfrenta por primera vez a esta materia, asi como para alguien ya iniciado en ella que desea obtener informaci6n puntual sobre un hecho, acontecimiento o definicién, En la segunda parte, tratamos algunos aspectos centrados en la visién actual de los tres elementos de anilisis, biblioteconomia, biblioteca y bliotecario, y que hemos considerado de interés. Desde el punto de vista de la biblioteconomia como disciplina, desarrollamos el concepto de me- diacién entre biblioteca y usuario, centrandonos en los procesos de comu- nicacién y relacién con la comunidad. Desde el punto de vista de la bibli teca, consideramos los aspectos relacionados con su imagen y proyeccién exterior, realizando un analisis. de los conceptos de marketing o imagen corporativa y su aplicacién practica en estos entomos. Por filtimo, aborda- mos elementos definitorios de nuestra profesién que en la actualidad es- tan cobrando una gran importancia: las habilidades y competencias que conforman el perfil del bibliotecario y la ética y deontotogia profesional; PROLOGO 3 esta ditima, sobre toda, como consecuencia del nuevo modelo de bibliote- ca y la incorporacién de las nuevas tecnologias al ejercicio profesional. Finalmente, queremos expresar nuestro agradecimiento a las personas que nos han ayudado y apoyado, con las que compartimos dia a dia un quehacer y un intercambio de opiniones acerca de lo que creemos y senti- mos como universitarios, y a los alumnos a los que impartimos docencia en esta materia, afio tras afio, quienes son fuente inagotable de ideas, aun prevaleciendo la primera, la que permanece a través del tiempo y nos trans- mitieron los estudiantes salmantinos cuando pronunciaban Nos non scho- lae, sed vitae discimur (No estudiamos para la escuela, sino para la vida)... Margarita Pérez Pulido y José Luis Herrera Morillas PRIMERA PARTE > La BIBLIOTECONOMIA COMO DISCIPLINA Tema | Teoria y concepto LL ie Evolucién histérica de la Biblioteconomia Al abordar la cuesti6n de la evalucién histérica de la Wiblioteconomia como disciplina lo que Pretendemos es ofrecer una visién de |a materia a través del tiempo, cuyo hilo conductor lo constituyen las flaciones que se establecen entre biblioteca, teoria biblioteconémica y bi- bilotecario, considerando que en esta evolucién se encuentran intimamen- fe unidos de acuerdo a la realidad histrica de su entomo. En esta aproximacién de caracter diacrénico, los diferentes autores es. tuidlados coinciden en establecer varias etapas hist6ricas basandose funda- {hentalmente en la consideracin de la Biblioteconomia como arte u oficio, Menica 0 ciencia’. De este modo, existe una etapa inicial denominada Bi- ‘Ala divisién tradicional de Biblioteconomta pre-cientifia y cientifica de los diferentes auto- fe, Molina Campos afade una nueva, Biblioteconomfa protocientifica, basdindose en el Origen 16 ‘TEORIA Y NUEVOS ESCEWARIOS Df LA BistioTecoNoMA blioteconomia Tradicional o Precientifica, dominada por el origen de la dis- ciplina como un arte u oficio de espiritu conservacionista, una Biblioteco- nomia Protocientifica, caracterizada por la creacién de unas técnicas mas 0. menos sofisticadas ante la necesidad de organizar el resultado de una exar- cebada produccién documental, y una etapa posterior denominada Biblia- teconomia Cientifica, que se inicia en el siglo XIX, momento en que es con- siderada una disciplina cientifica, cuestién que perdura hasta nuestros dias, no sin existir algunas opiniones contrarias al respecto. Por nuestra parte estableceremos tres periodos hist6ricos: 1. de los orf- genes hasta el siglo XV, época pre-cientifica de la Biblioteconomla; 2. de los siglos XVI-XVIIl, época protocientifica; 3. del siglo XIX hasta nuestros dias, época cientifica. ada. De los origenes hasta el siglo XV El origen de la Biblioteconomia lo encontramos en el Préximo Oriente, en la antigua Mesopotamia, en donde aparecieron textos en tablillas de arcilla, en escritura cunelforme. Estos documentos, de cardcter ad- ministrativo-comercial, histérico y literario, atestiguan el poder cultural y eco- némico de esta antigua zona, y en concreto, a partir de los hallazgos en Tell Mardikh- Ebla, de un territorio que hoy ocupa a actual Siria, Israel, Libano y Chipre’. La importancia real de este descubrimiento desde el punto de vista bibliotecondmico radica en la existencia de una estancia, la Biblioteca del Pa- lacio Real, en donde las tablillas se encontraban ordenadas de manera siste- matica, clasificadas atendiendo a los tipos de textos y el tema abordado, pa- fa Su conservacién. Hay constancia, ademés, de la existencia de los escribas, unidos a un poder laico, divididos en diferentes categorias acorde a su grado de erudicién: el que conoce, el que ensefia, el que dirige. La obsesién de la antigua Grecia por controlar y difundir la cultura griega (Koiné) originada en las Academias, hizo posible la recopilacién de todos los escritos y su organizacién de acuerdo a una sistematica. En el siglo Ill apare- ce Calimaco de Cirene a cargo de la Biblioteca de Alejandria, cuya obra “Pina- kés” supone un inventario de la produccién intelectual habida hasta ese mo- mento, debidamente catalogada y clasificada por materias, en donde recogia de los principios de la Biblioteconomfa modema. Véase MOLINA CAMPOS, E. “La ensefianza de la Biblioteconomia: historia y estado actual". Boletin de la Asociacién Andaluza de Bibliotecarios, 1990, Abriifiunlo, vot. 6, N° 19, p. 8. 2. SAGREDO, F.; NUNO, M.V. “En los arigenes de la Biblioteconomia y Documentaci6n: Ebla". Bocumentacién de las Ciencias de la Informacién, 1998, NP 17, p. 1239129. La Biblioteconomia como disciptina ¢| nombre del autor, al que afiadia una biografia sucinta, y el titulo de la obra. Por Su parte, Galeno de Pérgamo escribe “De Libris propiis liber” y “De ordi- fe librorum suorum liber", considerados precedentes de los mademos reper- lotios bibliograficas. La Biblioteca de Pérgamo estuvo a la altura, en cuanto a fimero y categoria de escritos, de a Biblioteca de Alejandra, pero dejé de waistir en 133 a.C. fruto del saqueo de los romanos, y sus fondos fueron de- positados en la Biblioteca de Alejandria. Frente al fuerte caracter tedrico y filosdfico que envuelve la recopilacién de los escritos en la antigua Grecia, Roma se muestra mas Practica y de- pendiente de la organizacién del Estado, ya que las obras que posee, en gran medida, son fruto de sus conquistas, y para su depésito y ordenacion fecesita crear bibliotecas. De este modo, Vitruvio, en su obra “De architec- tuna”, dedica un capitulo a la construccién de edificios destinados a biblio- fecas?; Marco Terencio Varrén elabora una obra sobre organizacion de bi- bllotecas, “De bibliothecis III", y el emperador Tiberio crea un cargo admi- fistrativo, denominado precurator bibliothecarum, del que dependerdn to- dos los bibliotecarios a cargo de las diferentes bibliotecas creadas. £1 sentimiento por la cultura en la Edad Media, mondstica fundamental- Mente, se traduce en un espiritu protector y conservacionista hacia el libro, donde adquiere protagonismo la biblioteca como lugar de conservacidn y re- fopilacién de lo escrito, y el catélogo como inventatio de obras. Las érde- fes mondsticas regulan la trascripci6n y copia de los documentos y las con- diciones de préstamo y cesién a otras bibliotecas. Como ejemplo podemos titar a Magno Aurelio Casiodoro, fundador del monasterio de Vivarium en el 550 0.C., en cuyas reglas de administracién incluye principios de funciona- tmiento de la biblioteca y el scriptorium. Su obra “Institutiones divinarum et Secularum litterarum”, constituye un tratado sobre la seleccién de obras que una biblioteca monastica dedicada al estudio debe tener. Como parte de la obra de S, Isidoro de Sevilla, Etimologias, aparece “De libris et officiis eccle- Slasticis", y “De medicina et bibliothecis”, que tratan de las colecciones idé- ‘eas que eclesidsticos y médicas deben conocer. De igual modo, durante la ‘época medieval encontramos tratados que hablan del oficio de bibliatecario ¥ la organizacién de fa biblioteca. La obra de S. Isidoro de Sevilla, “De libra- fils et eorum instrumentis", se considera un tratado de Bibliologia, ya que habla de las técnicas de elaboracién de cédices, el conocimiento del docu- 3, Garcia Valenzuela da noticia de esto y explica algunas consideraciones acerca de las condi- clones de luz y humedad que expone el autor, en su articulo, Una aportacién tedrica a la evo- lucl6n det concepto, término y definicién de Biblicteconomia, Revista General de informacion ¥ Documentaciéa, 1998, vol. 8, N° 1, p. 2. ‘TeoRia Y MUEVOS ESCENARIOS DE LA BiBLIGTECONOMIA mento y la labor erudita del monje, todo ello al servicio de la religion. En el siglo XIll, Richart de Fournival escribe “Biblionomia”, un conjunto de re- glas para la organizacién de una coleccién, y Humberto de Romanis, en 1250, Su “Instructio officialium™, cuyo capitulo titulado “Librarius” puede considerarse el primer tratado de Biblioteconomia. En el siglo XIV, Richard de Bury, fundador de la Biblioteca de Oxford, escribe “Philobiblon”, dedica- da a la exaltacién de los valores del libro y a la descripcién de sus cuida- dos y reglas de préstamo en la biblioteca de la Universidad. Las. universi- dades, cuyos profesores y alumnos debian hacerse de copias privadas pa- fa sus estudios, crean espacios comunes para albergar y consultar los escri- tos, dando origen a las primeras bibliotecas universitarias. la tradici6n bibliéfila se acrecienta en el siguiente siglo propiciada por el Humanismo, época en la que se favorece la produccién de copias para bibliotecas particulares de nobles, como la familia Medici, y poetas o lite- fates, como Pretarca, atendidas por asesores expertos biblidfilos, a los que se les exige dos cualidades fundamentales como bibliotecarios, ser orde- nados y doctes, Su labor consiste en ordenar e inventariar los libros, man- tener las condiciones apropiadas para prevenir la humedad o las plagas y controlar el préstamo’, A finales del siglo XV, la invencién de la imprenta supone una verdade- fa revolucién en {a cultura del libro y, en opinién de Molina Campos®, des- de el punto de vista bibliotecaria, transforma los habitos y convicciones de- bido a la produccién industrial de varios ejemplares del mismo libro, a la transformaci6n del mercade del libro que adquiere un sentido mercantil y universal, y a la creacin de grandes y copiosas bibliotecas. Las consecuen- cias, ademés, de indole intelectual, segiin este autor, suponen la generali- zacién de la cultura, el desarrollo de la critica como actividad intelectual, y el nacimiento de {a tipografia como un nuevo arte y oficio. Los primitives procedimientos de conservacién y ordenacién de las obras ya no son sufi- cientes y han de idearse nuevos modelos. 4, Garcia Valenzuela apunta las publicaciones posteriores de estas obras, de modo que la obra de Romanis fue publicada en 1505, la de Richard de Bury fue impresa en Colonia en 1473 ¥ Biblionamia fue publicada por Léopold Deslile en 1874 en Paris. Véase, GARCIA VALENZUELA, H. Una aportacién tedrica... p. 112-113. 5. Estas cualidades del bibliotecario aparecen mencionadas en él tratade titulado “Ordine et Offieci deta Corte del Serenisimo sig, Duca d'Urbino”, localizado en ol cédice Vaticano Urbinate lat. 1208. Véase ESCOLAR, H. Historia de fas bibliotecas. Salamanca; Madrid: Fundacién German Sanchez Rulpéree; Madrid: Pirdmide, 1985, 1. 205-206. 6. MOLINA CAMPOS, E. Teoria de fa Biblioteconomfa, Granada: Universidad, 1995, p. 22. Primens Parte: La Bibjioteconomia como discipting Baa. Be tos siglos XVI-XVIII Las consecuencias del desarrollo de la imprenta se Moanifiestan en estos siglos en la creacién de grandes bibliotecas de carac- ter enciclopédico. Entre ellas se encuentran la Ambrosiana de Milén, la Wol- fonbittel en Alemania, la de Mazarino en Francia o la del Escorial en Espa- Na, La necesidad de Organizar todo este conocimiento, unida al nuevo sen- fio de la funcién de la biblioteca como transmisora de la ciencia, hacen ‘Aue surjan las grandes clasificaciones y los grandes cataloges. En opinién te Molina Campos? es en este Periodo de tiempo cuando la Bibliotecono- Mle y Bibliografia se separan:con et ‘objeto de convertirse en dos discipli- ‘fie distintas, una dedicada al estudio de la identificacién en la biblioteca 10M0 obra o conjunto de ‘obras, cuya descripcién es genérica y se comple- Micon una designacién Para Su ubicacién fisica, y otra, a la descripcién co- ‘Mo obra especifica, El resultado en el primer caso le corresponde al cata- y en el segundo, al repertorio, De este modo, destacamos la obra de Aldo Manucio, Alejo Venegas o Homando Colén, el cual elabora varios catélogos para su biblioteca de Se- La Biblioteca Bodleiana de Oxford crea el primer Catalogo diccionario, lparecen los primeros catalogs comerciales en la Feria de Frankfurt. ner en su Biblioteca Universalis elabora una clasificacion dividiendo temas en 21 clases, subdivididos en secciones y subsecciones. i ‘En 1627, Gabriel Naudé establece los principios de la ‘Biblioteconomia Maen su obra “Advis pour dresser une bibliothéque™. En ella trata el roy los libros que deben formarla, los servicios, la ubicacién, la co- y las cualidades del bibliotecario. Recoge una icacion sistematica en 12 materias, al igual que lo haran mas tarde W. (13 materias) y Gamier (5 materias), _ Hasta este momento podemos hablar de una Biblioteconomia tradicio- i, custodial, inventarial y erudita, con la que se pretende establecer una de procedimientos normativos para la practica de un oficio. No obs- 4 partir de la obra de Naudé, se Puede hablar de servicio en el sen- 0 de conectar lo que en la biblioteca hay con las necesidades de los usua- facilitando esta mediacién con la seleccién de tecturas, la importancia los catdlogos de autores y materias, y las condiciones ambientales de la iioteca. La Biblioteconomfa camina hacia su etapa cientifica; considera- e% que en estos afios nos encontramos en una etapa protoclentifica de la biden, p. 23. 20 TEORIA Y NUEVOS ESCENARIOS DE LA BIBLIOTECOMOMIA Biblioteconomia®, recogiendo el espiritu de la Ilustracién en la persona de Leibniz, quien considera que la biblioteca debe ser una institucién publica de- dicada a la transmisi6n de la ciencia para el progreso y la mejora de la huma- nidad. Establece de manera muy clara la relacién informacional que existe en- tre el depésito de obras y los usuarios y la importancia de las obras dedica- das a las Ciencias Experimentales, asf como la coleccién de publicaciones pe- riédicas que una biblioteca debe poseer. A mediados del siglo XVII, J.Ch. Koch publica “Schediasma de ordinanda biblioteca...” en la que explica el funciona- miento de la biblioteca atendiendo a dos tipos de tareas, unas de orden ex- temo, referidas a la seleccién y colocacién de libros, y otras de orden interno, relativas a la preparacién de indices y catélogos. Considera que estas dltimas son las puramente bibliotecarias, ya que las primeras pueden ser ejecutadas Por alguien que no necesariamente debe ser un bibliotecario. 1.13. Del siglo XIX hasta nuestros dias El transito hacia la Biblioteconomia cientifica lo cons- tituye la obra de Domenico Rossetti, “Saggio di bibliotattica y Regole di pro- cedura bibliotattica", publicada en 1832, en la que define la Bibliotattica® co- mo “ciencia tépica del sistema de los monumentos graficos” y la considera parte de la Bibliologia. Sostiene que posee un principio fundamental, “la evi- dencia perpetua de una determinada reunién de monumentos Srdficos", del cual nace el sistema “evidencia de la razén y de la coordinacién de los obje- tos reunidos”, y de éste la finalidad de “perpetuacién de los monumentos gré- ficos reunidos dirigida por media de su movimiento y de su conservacién al ail progreso del saber humano”"*. De este modo, |a Biblioteconomia queda definida como una ciencia que se ocupa de la organizacién de una coleccion de objetos graficos reunidos para su conservacién y difusion a la sociedad, Par otra parte, aunque Naudé se refiere a la Biblioteconomia en sus obras, este término se utilizaré de forma explicita en el titulo de una obra de L.A. Constantin, “Bibliothéconomie: instructions sur l'arrangement, la weal a Le ‘8. ORERA ORERA, |. “Reflexiones en torno a la investigacién en Biblioteconomi TRAMU- LLAS SAZ, |. (ed), Tendencias de investigacién en documentacién, Zaragoza: Jess Tramullas, 1996, P. 20. Molina Campos lo traduce por Bibliotaxia basdndose en la informacién aportada por el dice Gonario de Buonacore, que recoge esta voz y afirma que autores como Fumagalli aconsejan adoptarla en ver de Biblioteconomia, aunque él no se decanta por esta opci6n, Véase BUO- NOCORE, D. Diccionario de Bibliologra. Buenos Aires: Marymar, 1976, p. 73. 310. SERRAI, A. In difesa della biblioteconomia: indagine sulla identita, le competenze e le aspi- razioni di una disciplina in cerca de palingenesi, Firenze: Giunta Regionale Toscana, La Nuova Walia, 1981, p. 122-123. Cit. por MOLINA CAMPOS, E. Teoria de Ja... Op. cit., p. 33. Prumiea Parte: La Siblioteconomis como distiplina 2 conservation et l'administration des bibliothéques", publicada en 1839, Sendo la primera vez que un tratado pone acento en cuestiones relaciona- das con la administracién de bibliotecas en cuanto a la gestion de recursos humanos y econémicos, conservacién de la coleccién, cualidades del biblio- fecario y otros detalles administrativos™, No obstante, la aportacién mas significativa a esta fase histdrica de la Bi- biloteconomia {a realiza.el aleman Schrettinger, a principios del siglo XIX, con Ja utilizacién del término Bibliothekswissensnchaft™, que otorga cardcter cien- tifico @ lo que hasta el momento era un conjunta de técnicas y actividades pa- fa hacer posible que una coleccién de obras fuera puesta al servicio de un pii- hileo determinado. A partir de este momento, comienza una divergencia de Opiniones por parte de las diferentes escuelas y vertientes biblioteconémicas, fio 80lo acerca de su cientificidad, sino también respecto de la eleccién del tér- Mino correcto de acuerdo a sus diversos significados. Desde el punto de vista histérico, la Revolucién Francesa supuso un famblo de mentalidad en todos los érdenes de la vida, incluido el mundo de lo educacién y la cultura, y por ende, las bibliotecas, Los filésofos y pen- Sadores franceses inculcan la idea de que la cultura debe ser dominio del fweblo, y éste ha de tener el derecho a la educacion de forma gratuita, que ‘Geberi ser proporcionada y controlada por el Estado. De este modo, las bi- bilotecas privadas (reales, de la nobleza y el clero) pasan a manos del Es- twdo, dando lugara la creaci6n de las grandes bibliotecas nacionales (In- Blaterra, Francia, Alemania, Espafia, Estados Unidos), y surge por primera ver e| concepto de lectura asociativa, como paso previo al de lectura pi- billea, manifestado en el funcionamiento de las denominadas bibliotecas so- tales, clubs de lectura y bibliotecas circulantes, originarias de Inglaterra y (stados Unidos, consideradas precedentes de la biblioteca pdblica. El concepto de lectura pGblica supondra importantes avances para la Bi- Diloteconomia. La aparicion de las bibliotecas sostenidas por fonds pibli- (08, abiertas a todos los ciudadanos, amparandose en el derecho a la edu- fAcidn y otros derechos individuales conquistados durante este periodo his- Hrico, hace que el enfoque de la Biblioteconomia se dirija hacia la conver- ‘Mi Eto obra fue traducida al castellano en el aha 1865, por Dionisio Hidalgo bajo el titulo ‘Wlioteconomia o rvevo manual completo para el arregio, la canservacién y la administracién ile lis Bibliotecas, y publicada en Madrid por la Imprenta de Escuelas Pias, Véase, PACIOS ORANG, A.R. “La administracion de las unidades de informacién: una aproximacién a su con- Eppto y evolucion”, Dacumentacién de Jas Ciencias de la tnformacién, 1997, 20, p. 236. ‘Ma. Cir, SCHRETTINGER, M, Versuch eines voilsiandigen tehrbuchs der Bibtiothekswissenschaft ‘Siler Anleltung zur vollkommenen Geschifisfiiring eines Bibliothekars in wissenschaltlicher form abgefasst. Munich: 1808. Existe una segunda edicién publicada en 1829. 22 ‘TEORIA Y NUEVOS ESCEWARIOS DF LA BiatioTecoNOMiA si6n de ta biblioteca en una institucién educativa, cultural y social. En este sentido, “la biblioteca péblica se identificard con un servicio de lectura co- lectiva, de acceso libre, como una agencia de educacién para las masas, complementaria de la escuela”'3, Como consecuencia de todo ello, apare- cé un interés en desarroliar nuevas técnicas y concepciones que faciliten la recuperacién y difusién de la informacion para el piblico. A la largo de todo el siglo XIX va aumentando el interés de los biblio- tecarios por adoptar técnicas comunes, armonizar la organizacién de servi- cios y el intercambio, ante el incremento de fondos y usuarios y las. dife- rentes necesidades de éstos. Procedentes del 4mbito anglosajén fundamen- talmente, van apareciendo las grandes clasificaciones (Dewey, Bliss, la CDU y la colonada de Ranganathan) y las Primeras regias de catalogacién (Pa- niz2i, Cutter, Anglo-American Cataloguing Rules, AACR, y las ISBD), lo cual implica un interés por la normalizacién de los Procesos técnicos y el esta- blecimiento de sistemas ‘cooperativos para ello. Existe otra serie de factores que, iniciados en el siglo XIX, han contribui- do al desarrollo y evolucién de la Biblioteconomia’s. En 1876 nace la Ame- rican Library Asssociation (ALA), y en 1877, la Library Association (LA). El desarrollo de las asociaciones profesionales en sus inicios fue decisivo en la formacién de los profesionales y en la consideracién de la profesién en la sociedad. En su evolucién a nivel nacional, y con la creacién de IFLA (In- temational Federation of Library Associations) en 1927, trabajan por el de- sarrolla de la doctrina bibliotecaria, la investigacién y especializacion en los diversos campos de la Biblioteconomia, y la representaci6n a nivel interna- ‘clonal ante diferentes organismos pdblicos. Unido a la creacién de las primeras asociaciones como factor decisivo en #t impulso de la Biblioteconomia, se encuentra la institucionalizacién de la en- sefianza, con la aparicién de las primeras escuelas de bibliotecarios. En 1879 Dewey presenta un plan a la ALA para organizar una escuela de bibliotecarios, y en 1887 comienza a funcionar la Columbia School of Library Economy", Los. estudios, en sus inicios vinculados a instituciones. privadas o culturales, han evolucionade hacia su consideracién como disciplina universitaria. El tercer 33. GOMEZ HERNANDEZ, 1A. “La preocupacién por la lectura pablica en Espafia: las bibliote- 2S "populares': De las Contes de Cadiz al plan de bibliotecas de Maria Moliner”. Revista General de tnformacién y Documentacién, 1993, vol. 3 (2), p. 55 4 GARRIDO ARILLA, MLR. Teoria historia de la cetalogacin de documentos. Madrid: Sintesis, 1996, 45. ORERA ORERA, L. Reflexiones en tomo... Op. cit, p. 21-22. 46, KLINDIN, 1: ENGLE, |. Library School Libraries. En: KENT, A DAILY, LE. (ed). Enciclopedia oF Library and Information Science. New York: Marcel Dekker, 1968-1986, val. 16, PL WMKNA PARTE: La Bidlioteconomia como disciplina — 3 ‘Iietor que contribuye a la evolucién de la Biblioteconomia se refiere a la in- igacién y la aparicién de obras especializadas sobre los distintos conoci- ‘Wlentos que configuran ia actual disciptina, lo cual se considera una condicién ‘IWdllspensable para su reconocimiento como ciencia. Sin embargo, la aparicién de la conceptualizacién de una nueva disciplina, Documentacién, en el siglo XX a partir de la obra de Otlet””, supone un en- itamiento entre los partidarios de la Biblioteconomia tradicional y la llama- Biblioteconomia especializada, el cual domina el panorama intemacional tes tipos de documentos en el menor tiempo posible*. _ Lai Biblioteconomia actualmente evoluciona histéricamente hacia la in- inidisciplinariedad como ciencia, la consideracién de la biblioteca como un Mma de informacién y comunicacién social, y el bibtiotecario como un liador entre informacién y sociedad. En cuanto a la organizacién y ad- istracién de las bibliotecas, la aplicacién de la Teoria de Sistemas y la ptacion al concepta de management, permiten lograr una perfecta co- jondencia entre los recursos disponibles y las necesidades de los usua- Finalmente, la aplicacin de las tecnologias de informacion supone una ici6n de la Biblioteconomia a la nueva cultura informativa y educati- ‘Que ha adquirido su maximo desarrollo como consecuencia de la apari- de la llamada Sociedad de la Informacién, Andlisis conceptual de a Biblioteconomia como disciplina Precisiones terminolégicas Al abordar el estudio y analisis del concepto de Biblio- jomia hemos encontrado una denominacién comtn utilizada por los dife- autores, pero también una terminologia propia de acuerdo fundamen- a la evolucin del propio concepto y al area geografica de aplicacién. 10 parte del andlisis del concepto de esta disciplina consideramos esencial —— ‘Mf, Voase, OTLET, P. El tratado de dacumentacién: el libeo sobre el libro. Teoria y préctica. Wai, de M* Dolores Ayuso. Murcia: Universidad, 1996. “WA GARCIA VALENZUELA, H. Una aportacién a la definicién.... Op. cit., p. 118. ‘TEORIA Y NUEVOS ESCEWARIOS DE LA BimLioTECONOMIA, WMIWA PARTE: La Biblioteconomia como disciplina determinar la procedencia etimoldgica 0 de uso de cada una de las acepcio- nes, y precisar su significado. Advertimos las influencias que se producen a lo largo del tiempo entre los diferentes paises de Europa, tales como la influen- cia de Alemania en Italia en el siglo XIX y XX, la influencia francesa en Espa- fia, y de Latinoamérica en Espaiia, en la adopcién del término Bibliotecologia, Procedente, a su vez, de Italia, en el continente americano. El desarrollo de la Biblioteconomia como disciplina se inicia en Europa, don- de encontramos los primeros términos que hallan su dificultad de expresién en la consideracién de la disciplina coma ciencia o técnica. En Alemania, en 1808 ‘Schrettinger habla por primera vez de Bibliothekswissenschaft (proviene de Bi- bliothek=biblioteca y wissenchaft=ciencia) para otorgar categoria cientifica a la actividad y conocimientas sobre bibliotecas. Por su parte, Ebert establece una dis- tincién entre Einrichtungskunde, ocupacién en los catélogos, y Verweltungskun- de, actividades de gestién administrativa. En 1856 Petzholdt establece una nue- va division de esta ciencia en Bibliotheksiehre, referida a la ordenacién y admi- nistracién de bibliotecas, y Bibliothekskunde, historia de las bibliotecas y las co- lecciones, una diferencia que Garcia Valenzuela establece entre Biblioteconomia y Bibliotecografia’®. Un término traducido de forma similar al aleman Bibliotheks- wissenschaft fue el de Bibllothekvidenskab, acufiado por el danés Molbech??. En el ambito anglosaj6n (Reino Unido y Estados Unidos), dos términos, Li- brary Science y Librarianship, son utilizados para designar la Biblioteconomia. El glosario ALA define Library Science como “los conocimientas necesa- rios para seleccionar, adquirir y organizar la informacién registrada, utilizdn- dola para cubrir las necesidades y demandas de los lectores”?*, Estudia los principios y técnicas de los procesos, la organizacién y los sistemas de ac- ceso rapido. El diccionario Harrod's utiliza el término genérico Library and Information Science, y \o define como “el estudio y practica de métodos profesionales en el uso y explota- cién de la informacién, desde una base institucional o no, en bene- ficio de los usuarios. Término genérica, abreviado LIS y utilizado pa- ra cubrir tétminos como library science, librarianship, information science, information work, etc."?, 19. GARCIA VALENZUELA, H. “Terminologfa utilizada en el pasado y presente para expresar el concepto de "Gencia de la Biblioteca™. Boletin de la Asociaciin Andaluza de Bibliotecarios, 1989, Septiembre, p. 7. 20, Para obtener mas informacién acerca de la terminologia alemana, véase MOLINA CAMPOS, E. Teorfa de ta... Op. cit., p. 42-61. 21. Glosaria ALA de Bibliotecologia y ciencias de la informacién. Madrid: Diaz de Santos, 1988, p. 200. 22, Harrod's librarian’s glossary of terms used in documentation and the book crafts and reference book. Aldershot: Gower, 1984, p. 378. Dice textualmente: “the study and practice Con respecto al término utilizado por el Reino Unido, Librarianship, el io ALA to define como, “cargo o funcién del bibliotecaria; profesién del biblictecario; profesién que se ocupa de aplicar el conocimiento de medios y aquellos princi- plos, teorias, técnicas y tecnologfas que contribuyen al establecimien- to, preservacion, organizacién y utilizacién de los fondos de las biblio- tecas y la difusi6n de la informacién a través de los medios indicados para ello”3, Harrod’s afiade: “la profesién de bibliotecario, V. También clencia de la biblioteca”, Aunque aparentemente ambos términos significan lo mismo, en Estados os recibe una orientacién epistemolégica, como ciencia que se ocupa del imiento y estudio del funcionamiento y el todo farmado por la bibliote- mientras que en el Reino Unido el término equivale mas a una Biblioteco- in practica, a la aplicacién profesional de un conocimiento o técnica?s, En }, cabe sefialar el término Library Economy, coma contraposicién al ico Library Science, utilizado por los norteamericanos para referirse a la Bi- economia aplicada y que Buonocore define como “aspecto practico de la teconomia, referido especialmente a la organizacién y administracién de ecas"*, |gualmente existen otros términos relacionados en ambos dic- ios para identificar la administracion y gestién de bibliotecas, tales co- library administration, library management, 0 library service"? [professional methods in the use and exploitation of information, whether from an institutional ‘not, for the benefit of users. An umbrella term, abbreviated LIS, and used to cover terms 8s library science, librarianship, information science, information work, etc.”. Gilosario ALA... Op. cit. p. 197. rarian's glossary... Op. cit. p. 377. Dice textualmente: “the profession of the in este sentide, en la International Enciclopedia of Information and Library Science, aparece librarianship para reterirse a la gestién y administracian de los procesos de la biblioteca & fica ta filosafia de la librarianship con la identification y articulacién de los principios bajo ‘uusles Se sustentan las operaciones practicas de las bibliotecas y servicios de informacién, en ular los relatives a las politicas de coleccién, conservaci6n, acceso, funciones y papel de las -as en la sociedad, Véase, FEATHER, |; STURGES, P. (eds.). intemational Encyclopedia of jon and Library Science. London: Routledge, 2003, B. 371 ¥ 512513. MOLINA CAMPOS, E. “Andlisis del concepto de Biblioteconomia". DocumentaciGn de tas ‘las de la Informacién, 990, N¥ 13, p. 187. Realmente las diferencias que exsten entre todos ios términos son menores. La Library ‘se considera Ia aplicacion préctica de la ciencia de la biblioteca al presupuesta y admi- ‘general y organizacién de una biblioteca, mientras que el Library Management se refie- ‘a las técnicas de organizar, motivar y asegurar recursos y evaluar para obtener eficiencia. La Teoria ¥ nuevos Esce DE LA BiBLIOTECONOMIA En Italia, en 1832 Rossetti acufia el término Bibiiotattica, traducido por Bi- biiotaxia, para referirse a la “ciencia tépica de sistema de los monumentos gré- ficos”, de la ordenacién y clasificacién de los libros. La considera parte de la Bibliologia ya que considera a ésta, doctrina de los monumentos graficos (do- cumentos). Fumagalli, entre otros autores italianos, llego a aconsejar el uso de este término, pero en apinién de Buonocore el término Biblioteconomia expre- saba una mayor generalidad acerca de lo que se pretendia tratar*. Guerrieri, por su parte, utiliza el término Bibliotecologia para referirse a un Conjunto formado por la Biblioteconomia, o conjunto de normas que re- gulan la vida de la biblioteca, y la Bibliotecografia, o codificacion € histo- ria de la Biblioteconomia’®. Esta separacion de términos fue ya realizada por Biagi y Fumagalli en 1894, producto de la traduccién de las obras ale- manas, refiriémdose a “De praecipuis bibliothecis notitia", para la Bibliote- cograffa, y “De ordinanda biblioteca”, para Biblioteconomfa®. Por otra par- te, Fumagalli en su Vocabolario®, registra el término Bibliotecologia como un simple sindnimo de Biblioteconomfa. Para Serrai el empleo del término Biblioteconomia supone la existencia de una ciencia que se ocupa del estudio y funcionamiento de una estructura bi- bliotecaria en cuanto a organizacién de documentos, de acuerdo a unas leyes y unas reglas®, Etimolégicamente, Biblioteconomia se compone de biblion=li- bro, theke=caja, armario y nomos=regla, ley. En el componente nomos, Serrai encuentra dos significados, uso y ley, de lo cual deduce que el término Biblio- teconomia acoge contenidas de tipo teérico (leyes de funcionamiento, proce- dimientos), y de tipo técnico (las practicas bibliotecarias)33, Library Administration es el procedimiento de administracién de una biblioteca, y Library Service se refiere a los servicios organizados para proveer el uso y la difusin de ta infor- macién. Las definiciones textuales que aparecen en el diccionario Harrod’s son las siguien= tes: 1. Library economy, “the practical application of library science to the founding, orga nizing and administering of libraries”, p. 383. 2. Library Management, “the technique of organizing priorities, motivating stafl, securing resources, and evaluating performance in cedee i aoiie Ua ‘optimun efficiency and benefit from a library Service®, p. 384. 3. Library service, “the facilities provided by a library for the use of books and the dissemination of Information®, p. 387. En el Glosatio ALA aparece la voz Library Administration equivalente @ administracién de biblictecas, con ta siguiente definicién: “procedimiento de administra- cién aplicado a una biblioteca, incluyendo el pianeamiento, 1a direcctén y la ejecucién de las operaciones dirigidas a la consecucién de los abjetivos marcados”, p. 197. 28. Véase MOLINA CAMPOS, E. Teoria de... Op. cit., p. 33. 29. GUERRIERI, G. Nuove linge de bibliateconamia e bibliografia, Napoli: Guida, 1982, p. 9. 30. GARCIA VALENZUELA, H. Una aportacidn tedrica.... OD. tit. B. 126, 31. FUMAGALLI, G. Vocabolario bibliografico. Firenze: Olschki, 1940. 32. SERRAI, A. La biblioteconomia come scienza; Introduzione al problemi ed alla metodolo~ Bia: Firenze: Olschki, 1982, p. 2-7. 33. MOLINA CAMPOS, E. Andtisis del concepta... Op. cit. p. 185, RA PaRre: La Bibjioteconomia como disciplina En Francia, se utiliza de manera genérica el término Bibliothéconomie. ‘adici6n arranca en el siglo XVII, cuando Naudé adopta el término por era vez en su “Bibliographia politica", aunque no pademos olvidar que en el siglo Xill Richart de Fournival hablaba de Biblionomia para referir- ‘@ un conjunto de reglas para organizar una coleccién. En el siglo XIX antin sera el primero que utilice esta denominacién en el titulo de un ido, liothéconomie: instruccions sur l'arrangement, la conservation Vadministration des bibliothéques”. Actualmente, la Asociacién de Biblio- os Franceses asocia el término a una concepcién un poco incompleta precisa de la disciplina: “el estudio de técnicas utilizadas en la biblio- ")*. Danis se refiere con ello a la ciencia, técnica y actividades, legisla- y reglamentaciones que envuelven a la biblioteca como un servicio or- izado en relacién con las colecciones y los usuarios**, Al igual que en Francia, en Espaia el término cominmente utilizado. es loteconomia, Carrian Gitiez asi lo expresa textualmente: “la realidad, sobre todo la hist6rica y social... han hecho nacer una nue- ‘va rama del arbol de la ciencia; la ciencia de lo que tienen en comin to- das las bibliotecas. No hay inconveniente alguno en que, conservando un viejo y prestigioso nombre, la llamemos Biblioteconomia”3°. No obstante, algunos autores utilizan este término para designar tan s6- na parte de la que denominan Bibliotecologia como ciencia genérica. Gus. respectives diccionarios, Garcia Ejarque y Martinez de Sousa esta- i una diferencia entre ambos términos?7. Emili Eroles, si do la propuesta de Buonocore, utiliza el término Biblio- jom/a para referirse a la técnica u oficio de conservar, ordenar y adminis- una biblioteca, y concede a la Bibliotecologia la capacidad para expresar | clentifico, “ciencia de Ja biblioteca: tratado sobre ia formacién, la ordena- Le Métier de bibliothécaire: cours éiémentaire de formation professionelle. 9 ed. Paris: lle de ta Librairie, 1992, p. 20. DANIS. A. Petit dictionnaire de l‘apprenti-bibliothécaire ou les documents en tous ses états. rbanne: ENSB, 1984, p. 20. CARRION GUTIEZ, M. Manual de bibliotecas.. Salamanca; Madrid: Fundacion German i Ruipérez: Madrid: Pirdmide. 1987, p. 45. Gorcia Ejarque define la Bibliotecclogia como la disciplina que se ocupa del conjunto de lientos relativos al libro y a la biblioteca, y comprende cinco disciplinas subsidiarias: la gia, la Bibliotecnia, fa Bibliografia, la Biblioteconomla y ta Bibliotecografia, Define igual- {a Bibtioteconomia como la disciplina que se ocupa de la organizacién y funcionamien- de las bibliotecas. Por su parte, Martinez de Sousa considera la Bibliotecologia como “la Que estudia los aspectos biblioldgicos y documentoldgicos de las bibliotecas", y la 28 Tenia ¥ NUEVOS ESCEMARIOS DE LA BIBLIOTECONOMIA ‘Prinitas Paste: La Bibtioteconomia como distiplina 29 cién y la administractén de la biblioteca". Currés diferencia igualmente am- bos términos. Reconoce que la Biblioteconomia presupone una postura esta- tica de {a biblioteca que conlleva una referencia a la conservaci6n, mientras la Bibliotecotogia constituye la parte dindmica de la disciplina, englobando el es- tudio de la biblioteca y sus procesos desde que un documento entra en ella hasta que sale. La Bibliotecologia conformaria una ciencia que a su vez com- Prenderfa la Biblioteconomia, la Bibliografia y la Bibliologfa, todas ellas con el mismo rango y nivel cientifico y metodolégico?”, Molina Campos defiende el término Bibliotecologia frente a Biblioteco- nomia apoyandose en el contenido etimolégico de ambos y en la evoluci6n de su significado. De este modo, opina que el término Biblioteconomia no corresponde al concepto actual de la disciplina, por su relacién con la Bi- blioteconomfa tradicional (precientifica) y por las implicaciones del sufijo nomia=uso, practica, mientras que fogos se. encuentra relacionado con el conocimiento cientifico. Este autor establece una definicién de Bibliotecd- nomia, aunque reconoce su preferencia por utilizar Bibliotecologia para asi definirla correctamente como ciencia y técnica*°. En Latinoamérica, en 1940 Gietz postulaba la palabra Bibliotecologia para designar el nombre de nuestra disciplina*, En estos momentos Bibliotecono- mia y Bibliotecologia se consideraban sinénimos, aunque el primero estaba dotado de un cierto aire de modernidad. Mas tarde, Becerra'y Buonocore rea- lizan un analisis del término mas pormenorizado, aunque dentro de los céno- nes de la Biblioteconomia tradicional. Asi, Becerra define la Bibliotecologia co- mo el tratado de las bibliotecas, y la Biblioteconomia, como una secci6n de esta Gltima, junto a la Bibliotecografia, la Bibliogeografia, entre otras. Buono- core se refiere a la Bibliotecologia como conjunto de conocimientos relativos al libro 'y la biblioteca. Lo que designa como ciencia de las bibliotecas se di- vide a su vez en Biblioteconomfa y Bibliotecografia. Mientras la Bibliotecono- mia estudia la organizaci6n técnica y administrativa de la biblioteca, la Biblio- i * I Gencia de ta ardenacién y clasticaciin de livos Norms que réguan la bibloteca Historie de las biblioteca ‘ografia tiene por objeto describir ia historia y colecciones de la biblioteca y blografias de los bibliotecarios*. Existen nuevos adjetivos a afiadir a la Biblioteconomia o Bibliotecologia — parada o intemacional— utilizados indistintamente en ambos términos pa- designar una divisién de la ciencia de las biblictecas que se ocupa del estu- © Investigacién de la disciplina a nivel intemacional, las relaciones entre pai- ®) en materia de bibliotecas, o estudios de caso en un pais determinado", Bi- ‘cologia internacional y Biblioteconomia intemacional se han utilizado co- @ sindnimos. De este modo, Harvey utiliza el término /ntemational and com- A! igual que otres autores como Krzys. A pesar de haberse utilizado indistinta- \¢ los adjetivos internacional y comparada, Rovelstad afirma que a partir de 77 se crea un encabezamiento independiente en la Library of Congress para Bibliotecologia intemacional4. El esquema de la figura 1.1 contempla de era resumida las precisiones terminolégicas de la disciplina. 1.1. Cuadro resumen de precisiones terminolégicas de ta disciplina. | siaLo xix FAIS/AUTOR/ARO DENOMINACION — | SIGNIFICADO ALEMANIA, pees ee Gestidin administrate Ordenacién y administracién de la biblioteca Historia de la biblioteca Biblicteconomia coma “la ciencia de ta informacién que comprende los conocimientos tedricos y téenicos relatives a fa conservaci6n, organizacién y administracién de una biblioteca®. Véase GARCIA EIARQUE, L. Diccionario del Archivera Bibliotecario: terminologia de la elaboracién, tra- tamiento y utilizacién de los materiales propios de los centros documentates. Gij6n: TREA, 2000, p. 53; y MARTINEZ DE SOUSA, |. Diccionario de bibliologia y ciencias afines, 2* ed, Madrid; Salamanca: Fundacién German Sanchez Ruipérez; Madrid: Pirdmide, 1993, p. 102-103. 38. EROLES, E. Diccionario histénico del libro. Barcelona: Mill, 1981, p. 51. 39. CURRAS, informacién en sus nuevos aspectos: ciencias de la documentacidn. Madrid: Paraninfo, 1988, p. 25. #% NUONOCORE, D. Diccionario... Op. cit. p. 8-89. 40. MOLINA CAMPOS, E. “Propuesta de un esquema definitorio de la Biblioteconomia™. Seguida GARCIA VALENZUELA, H. Una aportacién teérica... Op. cit., p. 120-121. dde una sugerencia, Boletin de la Asociacién Andaluza de Bibliotecarios, 1992, marzo, p. 8-10. A ORERA ORERA, L. *Concepto de Biblioteconomia®. En: ORERA ORERA, L. (ed.). Manual de ‘au GIETZ, €.G. Bibliotecas y elementos bibliogréficos. Buenos Aires: Universidad, 1940, p.3. ‘onomia, Madrid: Sintesis, 2996, g. 26-27, 30 TEORIA ¥ NUEVOS ESCENARIOS OF LA BIBLIOTECONOMIA, SIGLO XX PAIS/AUTOR/ANO DENOMINACION SIGNIFICADO ‘AMBITO ANGLOSAJON ‘ANTE: La Bibtlotecanomia como disciplina Ciencia de les bibiotecas: Aphcacidn de la ciencia ‘Administraciia y gestion de bibleotecas Fumagali- 1940 Bibtioteconomis = Bibéotecolagia, ‘Goernien - 1980 Biblotecoiagia Ciencia Bibioteconamia ‘Normas Sibliotecogralia Historia de tas biblotecas ‘Servai - 1960 Biblicteconamia Ciencia. Teoria y préctica Solimine ~ 1890 Bibliteconoria Ciencia FRANCIA. ANGE, Fichter - 1880 Bibliothdconomie “Técnicas. Danis - 1984 Bibhothéconome Crencia y técnica Giappiconi - 1980 Bibhothéconomie Ciancia y tdenica ESPARA Lasso dela Voga - 1933 | Bibliotecologia Eroles - 1980 ‘Bipliotecologs nC ‘Biblioteconomia Técnica Cumds - 1980 Bibiotacologie Clencias Eibliokeconomia Tecnica Camién- 1980 Bibloteconomia Ciencia ‘Molina Campos - 1890 | Biblioteconomnia Ciencia Bibliotecologia Clencio See ae rea. Bibioteconomia Tence Garcia Vatenzuela, Gomer Hamandes 1990 LATINOAMERICA Geu- 1980 Bithotecaloga = Bibloteconamnia Beceria - 1950 Bibloteeaiegia ‘Ciencia del fibro y las bibllotecas: Buonorare Biblioteconomia Técnicas para administracidn de biblioteca Otias sectiones (biblologs, bibkotecnis, hibkinecograta) Estudio y evolucién del concepto de Biblioteconomia Abordamos el estudio y ta evolucién histérica del con- 10 de Biblioteconomia desde una perspectiva fundamental que permanece jlo largo del tiempo: la consideracién de |a disciplina como ciencia o como a ica. La evolucién del concepto depende igualmente del significado propio Se le otorga a la disciplina en funcién del periodo cronalégico en que se define y del area geografica e infiuencia social de los autores que defien- lon ese significado. Por este motivo, hemos crefdo conveniente estructurar es- ® Spartado de acuerdo a los dos Gitimos criterios mencionados (cronolégico. ografico), sobre un eje comin que incluye el propio concepto y su condi- como disciplina cientifica. belle Alemania El origen de la ciencia de las bibliotecas lo situamos. en Europa, en concreto en Alemania, donde encuentra una cierta resisten- ta la Biblioteconomfa cientifica frente a la Biblioteconomia tradicional, de- ido fundamentaimente a la formacién humanistica de los bibliotecarios y “fla herencia de la consideracién como arte u oficio. Se teme, no obstan- ‘f@, que el nuevo cientifico de las bibliotecas (mediador entre coleccién y ‘tsuarios) disminuya en su prestigio intelectual al convertirse en un técnico _ de organizacién libraria, sustituyendo la figura de bibliotecario erudite (cen- trado en el libro) que prevalecia hasta ese momento. 32 TEORIA Y NUEVOS ESCEMARIOS DE LA BIBLIOTECONOMIA eee Biblloteconomia como disciplina 33 A partir de 1808, la obra de Schrettinger* sienta las bases de lo que co- nocemos hoy como ciencia de las bibliotecas al designar esta disciplina con ‘el término Bibliothekwissenschaft a fin de conseguir un nuevo objetivo ba- sado en satisfacer las exigencias literarias (libros, documentos) de cualquier tipo de usuario, utilizando los procedimientas adecuados para su localiza- cién, recuperacién y puesta a disposicién lo mas répidamente posible. Por lo tanto, plantea una disciplina cientifico-técnica cuyo objeto inicial de es- tudio se centra en el catdlogo. En 1820 Ebert, en la enciclopedia de Ersch y Gruber “Allgemeine Enciclopa- die des Wissenschaft und Kinste™*, define la Bibliothekwissenschaft como “el conjunto de conocimientos y habilidades necesarios para la gestién de una bi- blfoteca”. Duda de la categoria cientifico-técnica de la disciplina, refiriéndose a ella como simplemente la teoria y practica de la actividad bibliotecaria que di- vide en dos partes: Einrichtungskunde, 0 actividad de disposici6n y ordena- cién, relacionada con los catdlogos fundamentalmente, y Verweltungskunde, o actividad administrativa y de gestion, que comprenderfa actividades de adqui- sicién, gestién de personal y funcionamiento general de una biblioteca. Opina que los bibliotecarios deben estar formados en cuestiones administrativas, pe- ro han de contar igualmente con una sélida formacién erudita, siguiendo la tra- dicidn alemana. Por su parte, Zoller en 1846 expone en su obra “Die Bibliot- hekswissenchait im Umrise” su concepcién de la disciplina como ciencia de la ordenacién sistematica y gesti6n de la biblioteca, justificando su cientificidad en el planteamiento dado por Schrettinger de su fundamento y desarrollo |6- gico de sus partes. Ademas de todo ello, Zoller habla por primera vez de la funcién social y educativa de la bibliateca como un servicio pdblico. En 1856 Petzholdt, en la misma linea de Ebert, niega el cardcter cientifico de la Biblioteconomia definiéndola en su “Katechismus der Bibliothekenleh- re"47 como el “ordenamiento sistematico de todos los conocimientos que se refieren a la biblioteca”. Segin él, este ordenamiento sistematico no implica cientificidad por referirse exclusivamente al proceso y la actividad de hacerlo. Divide la disciplina en Bibliothekslehre, administracién de ta biblioteca, que correspanderia al término Biblioteconomia, y Bibliothekskunde, historia y des- cripcién de bibliotecas, relacionado con el de Bibliotecografia. Las nuevas ideas sobre la consideraci6n de la Biblioteconomia nacidas en Alemania ejercen su influencia a lo largo del siglo XIX en otros paises de Eu- |, 80" prevaleciendo la visiGn tradicional de la disciplina. De este modo, el Molbech* publica un manual que sera traducido al aleman, en donde jera las nuevas concepciones de la disciplina de Schrettinger, aunque no de aceptar el cardcter cientifico que éste otorga a la Biblioteconomia. Igual modo, Biagi y Fumagalli#*, en italia, adoptan los términos alemanes hekslehre y Bibliothekskunde de Pezholdt, traduciéndolos por “De ordi- biblioteca" y “De praecipuis bibliotheciis notitia”, aceptando la division {a disciplina en una parte administrativa y otra de descripcién histérica, ne- io de \gual modo su consideracién como disciplina cientifica. Al iniciar el siglo XX, la visién tradicional de la Biblioteconomia impera Alemania y lo continuard haciendo incluso después de la Il Guerra Mun- De este modo, las consideraciones tedricas de la disciplina se centran damentalmente en todo lo relacionado con el libro y lo histérico-litera- fn detrimento de lo cientifico-técnico y otros tipos documentales (Leip- i, Milkau, Leyh), y continda el debate sobre el caracter cientifico de la Iplina en oposicién a un conjunto de practicas repetitivas cuyo apren- Je se basa en la experiencia (Von Harnack, Vorstius). ‘Durante la segunda mitad del sigla XX, Predeek®* se preocupa por el es- académico que la Biblioteconamia debe alcanzar como disciplina, ba- ose en la consideraci6n de que su objetivo consiste en indagar acerca la constitucién, funcionamiento y desarrollo de las. bibliotecas como ins- Jones difusoras de la ciencia, la cultura y la instruccién, participes en atontecimientos sociales, politicos y econémicos de su entomo. Segiin autor, como disciplina comprende una parte teérica y otra practica, am- situadas en un mismo nivel de conocimiento y estudio, aunque trata- de forma diferente de acuerdo al objeto de estudio. De esta manera, tiza la ciencia en lo que él denomina Systematik der Bibliothekswis- ichaft, esquema dividido en seis secciones y 50 especificaciones relati- | concepto, las disciplinas auxiliares, el funcionamiento como institu- © la historia de las bibliotecas. En 1961, Leyh edita por segunda vez “Handbuch der Bibliothekswissenchaft"s*, donde insiste en negar la cien- idad de la Biblioteconomia, apoyandose en colegas suyos precedentes, re la idea de que constituye un oficio cuya practica se aprende con una Versuch eines vollstiindig. lr, MOLBECH, C. Ueber bibliothekswissensaft. Leipzig, 1833. a Peers Cpontenurectakt ea fescr, iss GRUBER, |.G. (eds,). Allgemeine AB Clr, BIAG!, G-; FUMAGALLI, G. Manuale de! bibliotecaria, Milano, 1894. Encyclopadie des Wissenschaft und Kanste. Leiptig, 1923. Sect.a, Th. 10, p. 69-73- Cit. por PREDEEK, A. “Die biblinthekswissenchaft als Disziplin und Universitat-Lehrfach™. En: Aus MOLINA CAMPOS, E. Andilsis del concepto... Op. cit, p.190. Welt des Buches. Festeabe zum 70. Leipzig, 1950. Cit. por MOLINA CAMPOS, E. Teorfa de Te... Op, cit., p52. Br PERE Renee ne se A 1 Cir, LEYH, G. Handbuci der Bibliothekswissenchaft. Wiesbaden, 1961. 34 TEORIA Y NUEVOS ESCENARIOS DE LA BISLIOTECONOMIA HAA PARTE: La Biblioteconomia como disciptina 35 larga experiencia, ignorando ast las corrientes que habian surgido durante e505 afios en el ambito anglosajén. La Convencién de Colonia, en 1969, reabre el debate acerca del concepto de Biblioteconomia y su pasibilidad como disciplina cientifica, y supone el recona- cimiento definitivo de la Biblioteconomia como ciencia. Las aportaciones de Es- tados Unidos y las de los paises del Este de Europa resultan definitivas al reco- nocer en la Biblioteconomia los principios cientificos de orden y seleccién, la aplicacién de las teorias organizativas en lo relativo a la gestion bibliotecaria, su acercamiento a las Ciencias de la Informacion y la Documentacién, por una par te, y a las Ciencias de la Comunicacién y la Sociologia, por otra, en la conside- raci6n de las necesidades del usuario y en su relacin.con la sociedad, Las conclusiones de la Convencién de Colonia enumeradas por Molina Campos® son las siguientes: la Biblioteconomia con las Ciencias de a Comunicacién’s desde la nueva iripectiva del usuario y con la teorfa de la organizacién en cuanto a la iden- cn de la biblioteca como sistema de informacién. Pone especial énfasis I investigacién bibliotecaria, dada su consideracién de ciencia pero también ido a circunstancias evolutivas de la propia disciplina, como el creciente sig- ido de las bibliotecas para la sociedad y la modificacién de las relaciones los usuarios, 0 la complejidad de la estructura bibliotecaria y la automati- #hclon. E| objetivo prioritario de la Biblioteconomia, segtin este autor, es el es- ilo de ia funcién social de la biblioteca como mediadora de informacion, la fuctura de la organizacién bibliotecaria, las necesidades de los usuarios, los lintos saportes, el acceso, la profesién o la evaluacién, ademas de la histo- de las bibliotecas 0 cuestiones relacionadas con la Bibliologia. +2 Los paises del Este de Europa El concepto de Biblioteconomia en los paises del Este Europa a lo largo del siglo XX se encuentra dominado por el area de in- luwnicia de la Unién Soviética y la ideologia marxista-leninista. Partiendo de la manista de ideologia como instrumento de transformacién y poder del bo dominante en un sistema social, unido a la idea de Weber de ideotogia Mo transposicién de la técnica de! poder a fa cultura, el poder soviético en- va en la Biblioteconomia un instrumento de difusién de su ideologia, ba- Mindose en el concepto del libro como vehiculo de tas ideas y las bibliotecas 0 instituciones que encauzan la cultura. De este modo, a partir de 1917, , contando con la colaboracion de su esposa Kriipskaia®, establece una 1, “Es posible una Bibliotecanomia cientifica y su cometido es estu- diar las bibliotecas como instituciones para el servicio biblioteca- rio, como sistemas informativos y como centros de informacién y redes de comunicacién. 2. La biblioteca es analizada con los métodas de la economia industrial. 3. En la sociedad industrial, la biblioteca habra de configurarse y de- sarrollarse coma un especial sistema de informacién y como cen- tra de una red de sistemas de informacién. 4. En la esfera de la ciencia de la comunicacién tiene capital impor- ‘tancia la indagacién de la relaciones biblioteca y sociedad. 5. La Bibliologia y la historia de las bibliotecas siguen siendo una acti- vidad legitima de ta Biblioteconomia, pero ya no estan en el centro de ella, ni mucho menos representan las razones de su cientificidad.” pel social y econémico que desempela la biblioteca como institucién pabli- i, !05 estudios de usuarios, el funcionamiento de ia biblioteca como un pro- educative y de perfeccionamiento del lector, la biblioteca y la informa- clentifica y la organizacién bibliotecaria nacionals’. De acuerdo’a los pa- Bajo la nueva perspectiva de la Convencién de Colonia, se publica en 1976 “Zur Theorie und Praxis des modernen Bibliothekswissenchalt"5?, una obra co- lectiva donde son tratados de manera conjunta aspectos sociales, administra: tivos y tecnolégicos de la Biblioteconomia. En una parte de ella, Sauppe® iden- fista consideracin de Sauppe se encuentra apoyada iguaimente por Kluth quien, en una a realizada para la Convencién de Colonia, expone su postura acerca de la definicién 52. MOLINA CAMPOS, E. Teorfa de la... Op. cit., p. 58. } la Biblicteconomia desde ta Perspectiva de las ciencias de la comunicacién. Véase, 53. Clr. KEHR, W.; NEUBAUER, KW; STOLTZENBURG, |. (eds.). Zur Theorie und Praxis des ibliotheswissenchaft. Versuch einer Gegriffsbestimmung in Referaten und Diskussionen bel modemen Bibtiothekswissenchaft. Minchen: Saur, 1976. Molina Campos opina que esta obra diner Kolloquium, Kiln, 1970, B. 109-130, trata de contrapesar el contenido histérico-cultural y la actitud tradicional de la $4 Para profundizar en et papel ejercido por la esposa de Lenin en el desarrollo de la Biblioteconomia presentada por Leyh en su Handbuch der Bibllothekswie: ofreciendo. jteconomia rusa hasta su muerte en 1939, vSase la obra, SIMSOVA, §, (ed). Lenin, tina perspectiva ablertamente documentalista e informacional, pakaia and libraries. Handen (C hon Books, 1968, 54 Cir. SAUPPE, E. “Bibliothekswissenchaft und bibliotheksforschung™. En: KEHR, W.: NEU CHUBARIAN, 0.5. “La Biblioteconomia en el ‘sistema de las ciencias”. Batetin de la ANABA, BAUER, K:W.s STOLTZENBURG, |, (eds.). Zur Theavie... Op. eit. p. 87. © XK), niimero 2, p. 70-75. Jha PARTE: La Bibliotecanamia como disciplina 7 36 ‘TEORIA ¥ NUEVOS ESCENARIOS OE LA BIBLIOTECONOMIA (4 |0% disciplinas bibliotecondmicas de acuerdo a la consideracién del li- el lector y la biblioteca desde sus diferentes perspectivas. El esquema Servicio bibliotecario seria, pues, un tridngulo en cuyo centro se encuen- | lector y en cada uno de los vértices las adquisiciones, los catélogos facilidades de uso. El polaco Glombiowski®, que participa junto a Dri- en la |i Conferencia de Escuelas e Institutos de investigacién de Biblio- nomla de los paises socialistas celebrada en Leipzig en 1962, inserta la joteconomia en una disciplina general de la ciencia del libro y a ésta 0 parte de las Ciencias Sociales. 1) yugoslavo Rojnich resume su consideracién de la Biblioteconomia en planteamiento de tres problemas que presenta como disciplina: la dico- la clencia-practica, el contraste con tespecto a la tipolagia de bibliote- flemana (cientificas, académicas y pGblicas) y anglosajona (biblioteca lien) y lo que ello representa en la jerarquia y nivel de operatividad cien- de unas sobre otras, y la profesionalidad del bibliotecario y su forma- Unitatia de caracter cultural y biblioteconémico®, rametros ideolégicos exigidas, los puntos principales de su programa se ba- san en dos principios fundamentales: la educacién y culturizacién de los tra- bajadores y el adoctrinamiento politico, materializandose en el control ejerci- do por el Partido de los medios de comunicacién y las bibliotecas como par- te de ellos, la funcién de la biblioteca como transmisora del pensamiento mar- xista-leninista y el libro como propaganda de comunicaci6n, ta formacién de las-colecciones de acuerdo a este principio propagandistico y al de alfabetiza- cién y formacién técnica de los trabajadores, los catalogos y bibliografias. co- mo gulas de lectura buena o mala, y la literatura infantil como elemento esen- cial de iniciacién en los valores comunistas*, Las ideas de Krdspskaia tuvieron eco en el | Congreso Soviético de Tra- bajadores de Bibliotecas, celebrado en Moscii en 1927, en donde se consi- deré como elemento decisivo de la practica biblioteconémica la correcta se- leccién y distribucién de fondos para los obreros, el papel del bibliotecario como trabajador cultural a fin de conseguir usuarios activos, y su adecua- da formacién como agente intermediario. En Alemania del Este, Kunze® establece como meta de la Bibliotecono- mia las tarees culturales y pedag6gices de Is biblioteca, y como actividades = ee dronite apainesiie esenciales de los bibliotecarios, mantener una estrecha relaci6n con los lec- tores y encaminar su trabajo a la formacién de adultos y la educacién po- pular, enmarcando la disciplina en el campo de las Ciencias Sociales. Kun- ze se pronuncia con respecto a la relacién de la Biblioteconomia con la Do- cumentacién, manifestando la ventaja de la primera en su propio retraso respecto de los nuevos problemas de la indizacién y mediacién. El checostovaco Dritina®, en la misma linea de Kunze, afirma que la Bi- blioteconomfa no puede limitarse al campo organizativo y de la gestién si no que debe ampliarse al campo de la educacion y formacién, entrando a formar parte de las Ciencias Sociales. Desde su punto de vista, la Bibliote- conomia, para ser ciencia, ha de edificar un sistema unitario con las disci- plinas afines, debe verificar las transiciones entre ellas y determinar su po- sicion en el sistema general de las ciencias. Sobre el principio fundamental de la Biblioteconomia como investigacién de la funcién social del libro, cla- Si el paradigma de los pafses del Este de Europa fue | funcién social del libro y las biblictecas como instrumento de adoctrina- ito politico, en el Ambito anglosaj6n seré igualmente la funci6n social, mentada esta vez en la lectura piblica, aunque con diferentes concep- 6 en Estados Unidos y Gran Bretafia y su drea de influencia, f| modelo de lectura americano parte del habito lector y la difusi6n de la ym en una sociedad democratica y la consideracién de la biblioteca como de la ensefianza. La concepcién americana de la Biblioteconomia va a # como consecuencia una serie de cambios de tipo funcional, como el {i- acceso, una nueva disposicién de espacios, o la relacién de la biblioteca ‘Su entomo mas préximo, y cambios de tipo profesional, bibliotecarios mas iS, aplicacién de las técnicas de marketing y planificacién y nuevas ense- 5 como disciplina. Estas ideas influiran en Latinoamérica y, a partir de afios 50, en Alemania, provocando una reaccion contra la tradicién erudi- y la relaci6n entre Biblioteconomia cientifica y biblioteca publica. Por otra parte, el Reino Unido desde el siglo XVIII mantiene una pastura tra- jal Con respecto a la lectura piblica, caracterizada por un fuerte sentido lizante y reservada solamente a ciertas clases sociales, hasta la promulga- 5B. RAYMOND, B. Kripskaia and soviet russian librarianship, 1917-2939. Metuchen (NYJ: Scarecrow Press, 1979. 59-MENESES TELLO, F. Ledn Trotsky en el vértice bibllotecoidgico [En nea] httpsffwwew.ms -unammx/ust~humanidades/202/COLUMNAS {consultada 21/8/04). 60. Cir. KUNZE, H. Grundziige der Bibtiothekslehre. Leipzig: VEB became a MOLINA CAMPOS, E. “ideologies A Biblioteconomfa". Revista General de Informactén y jentaci6n, 1993, vol. 3, N° 2, p. 42. MOLINA CAMPOS, E Teoria de la Op. cl, Bi 65-66. Bibifothekswissench! Hochschuldisziplin, Leipzip, 1963, Cit. por MOLINA CAMPOS, E. ‘ot de Ia... Op. cit., p. 64.

También podría gustarte