Está en la página 1de 10

La corporalidad de la mujer

Palabras clave: Reconocer, visibilizar, conecta, cuerpo, corporalidad, identidad,


patriarcado, objeto, sujeto

1. Significado del cuerpo en la sociedad contemporánea:

Que es lo que ha significado el cuerpo a lo largo de cierto rango del tiempo en la


historia

Revisar pagina 21-23 deseo del cuerpo

Edad media- no está dividido entre alma y cuerpo

De como el cuerpo ha ido transformándose en cierto momento a significar anatomía


debido al surgimiento de la medicina, debido a la creación de ciertos materiales
tecnológicos como el microscopio tambien porque cada vez las personas han querido
saber qué es lo que hay dentro de cada cosa cada vez las personas quieren conocer más,
pero encuentran cosas tangibles hasta ahora el alma no se ha sacado

-Como el cuerpo ha recibido el concepto de anatomía

-El concepto de maquina el cuerpo- es observado como un material técnico una persona
que trabaja, no importa tu mundo emocional, te tratan como una maquina tienes que
hacer una cosa efectiva.

Y luego el cuerpo como un material plastificado, este tizado en la edad contemporánea


surge todo un culto hacia el cuerpo, el mundo moderno nos ha alejado de nuestro cuerpo
y es el momento de cuidarlo, surge este paradigma del cuidado del cuerpo surge una
medicina las cirugías estéticas, las cirugías ya existían para corregir cosas, pero surge
una cirugía para la estética, surgen los gimnasios porque la gente tiene que ponerse bella
se tiene miedo hacer viejo, ha tener imperfecciones en el cuerpo como que se borran
lunares operar la nariz, la gente ya no quiere envejecer en el mundo contemporáneo,
tiene miedo a la muerte.

De como en la edad media el cuerpo de alguna manera participaba en la sociedad


íntegramente el goce corporal

El cuerpo en la contemporaneidad
Cuáles han sido los significados que ha ido heredando históricamente el cuerpo con las
sociedades que le han ido encarnizando

Para no utilizar la palabra cuerpo yo debo tener una oposición en tu trabajo se tesis se
tiene que entender porque no quieres hablar de cuerpo sino de corporalidad tienes que
tomar una posición frente a esto.

SIGUIENTE PARTE

Hemos estado hablando del cuerpo en singular y, además, sin pensar en un género
en específico. Sin embargo, hay que ser conscientes de que reflexionar en torno a
cuerpo es, fácticamente, tratar con pluralidades y particularidades: el cuerpo de un
hombre no es igual al de una mujer, desde lo físico (biológico) hasta lo histórico-social,
no es lo mismo definitivamente. Desarrollar el deseo y el placer teniendo un pene es
radicalmente distinto del teniendo una vagina, ser más propensa a la flacidez por la
mayor cantidad de lípidos en la composición anatómica femenina del estar más cercano
a la tonicidad de músculos en el cuerpo varonil, o incluso el convivir con cabellera larga
desde muy pequeña. Todo esto suma y, inevitablemente, determina.

2. El cuerpo de la mujer en la sociedad contemporánea: Objetivización del cuerpo de


la mujer

En esa lógica, durante el presente segundo apartado –y porque tiene efecto


determinante en el principal interés de mi actual proyecto de investigación- desarrollaré
brevemente los significados más repetitivos que la sociedad contemporánea ha atribuido
al cuerpo de la mujer construyéndole una definición cargada de estigmas patriarcales o
machistas, además del estigma de anatomía, máquina y estética que explique
anteriormente.

EXPLICAR LA CITA SIGUIENTE

Para las mujeres, representa una superficie destinada a los otros, ausente de materialidad,
pero aun así escenario de una vivencia problemática. En contraste, los hombres lo asumen
como un organismo pleno de materialidad, vinculado por lo tanto a los sentidos, la
sexualidad y el goce. (Kogan, 2010, p. 37)

Eran los hombres quienes participaban en el mundo exterior, sustentando a la familia


materialmente y desarrollando capacidades técnicas, habilidades profesionales y lazos
de sociabilidad.
La mujer sólo como objeto sexual se somete a la visión que el hombre desea tener de
ella: es bonita y deseable para otro, no para ella misma. Predomina la visión patriarcal y
machista que relega a la mujer al mundo “interior”: la esfera doméstica, la procreación y
la crianza. Se presenta a la mujer como un objeto proveedor de servicios domésticos y
sexuales. *Profundizar más

Tabi Jackson Gee (0000) señala:

Antes de que las mujeres pudieran trabajar en la esfera pública en puestos de trabajo
(razonablemente) bien pagados, dependían de sus padres o maridos para que las sostuvieran
económicamente. Muchas mujeres creen que su futuro implica encontrar un hombre con el
que vivir, contraer matrimonio y tener hijos. Hacerse con un hombre se presenta como un
objetivo casi inalcanzable, pero tambien fundamental. Está vinculado a un elemento de
pánico. Se transmiten de diversas formas a las mujeres que están compitiendo entre sí por
ese recurso escaso pero esencial, por lo que deben tomar la delantera en la carrera por la
belleza y simultáneamente degradar a otras mujeres, en especial en lo relativo a cualquier
pifia en rutina de belleza. (Jackson p.163)

Tabi Jackson afirma que la sociedad conduce a la mujer a observarse como un


objeto, que puede convertirse en la protagonista de un proyecto de mejora personal.
Se trata de un proyecto que necesariamente dura toda una vida, porque ninguna
mujer alcanzará jamás el “ideal” digital impuesto por los medios de comunicación
como la publicidad y revistas que están dentro del paradigma patriarcal por lo que
siempre sentirá que le falta algo: en el aspecto, el atractivo, la determinación o el
control y, por ende, el vinculo con el éxito, la inteligencia y la fuerza de voluntad.

Su autoestima y confianza se desplomarán porque, la feminidad en si misma


está ahora ligada a este ideal. Si por ejemplo no consigues estar delgada, no
consigues ser femenina y no consigues ser deseable por lo tanto te sientes
despreciable. Esto genera una represión en la mujer de pensamiento, emoción y
deseo de poder ser ella misma.

¡Cómo la mujer empieza a sexualizar su cuerpo, su mirada hacia la vagina?

El patriarcado necesita encontrar formas para mantener a las mujeres “en su


lugar” de maneras muy específicas. En este espacio-tiempo el cuerpo de la mujer es
tomado bajo una mirada violenta y machista, volviéndose una superficie sin
órganos: la vagina sólo existe como canal del semen-fluido soberano para la
reproducción. Por ende, el cuerpo de la mujer se toma por máquina orgánica
generadora de vida, la cual debe someterse a normas reguladoras.

Entonces se construyen saberes hegemónicos a partir del cuerpo de la mujer que


la mantienen como objeto pasivo, sus órganos genitales por ejemplo pasan de ser
nulos a ser regulados por instituciones y medios que fabrican saberes para beneficio
de un estado que busca garantizar su crecimiento.

Es así como todos los individuos somos resultado de mecanismos que


controlan cuerpos y subjetividades, mecanismos que establecen de qué maneras
hay que vestir, en que peso o medida debe estar el cuerpo o cuales son las vías
para alcanzar el clímax sexual y el placer.

Según Norma Fuller en su libro Dilemas de la femineidad menciona:

Las definiciones de femineidad y masculinidad vigentes no son simplemente los saberes que
dicha cultura ha acumulado al respecto sino agencias productoras de identidad. Ellas
informan a los miembros de cada sociedad sobre quiénes son, cuál es su lugar en el mundo
y cómo relacionarse con los demás. El ser humano interpreta sus acciones y emociones, a
los otros y al mundo, siguiendo los patrones y definiciones que le han sido transmitidos en
su medio. Al internalizarlos como su propia verdad, dichas definiciones se convierten en
parte de sí mismo. No se trata de instancias que reflejen una realidad preexistente, sino que
constituyen la materia prima con la que se elaboran las identidades. (Fuller, 1998, pp.18)

Fuller afirma que son estos constructos tradicionalistas de lo masculino y femenino


que la misma sociedad normaliza y que las personas identifican como parte de su
identidad. Como sabemos la sociedad separa estos sexos por roles y representaciones
mostrando una superioridad del género masculino.

En el caso de las mujeres el camino al estatus de ciudadana es más difícil porque,


debido a su identificación con la esfera doméstica se la adscribe al orden de lo natural y de
lo privado. La identidad femenina se define por su lugar en la familia y no por su desarrollo
individual. Si los hombres, como género, fueron empujados a una progresiva individuación,
este proceso es detenido en el género femenino. (Fuller,1998, pp.26)

Los hábitos y costumbres de una sociedad determinan la identidad individual y los


roles que los individuos asumen. De este modo es como la mujer se ve impuesta a
cumplir determinados roles, debido a la ideología que es construida a partir de la
sociedad en la que nace.
Estos roles que son marcados para etiquetar a las mujeres son realizados sin
importar si hay una superioridad de esta en factores sociales, morales o educativo, no
llega a formarse una nueva imagen o idea de la mujer, por el contrario, es subordinada
al estilo de vida a la cual es impuesta por la sociedad patriarcal.

En consecuencia, este constructo de la sociedad se debe a la dominación masculina que


tambien forma parte de la violencia simbólica el cual construye un mundo para y por el
hombre dejando que el género femenino esté bajo la subordinación y limitación de la
libertad de expresión.

¿A qué situaciones te refieres que llegan hasta este punto? ¿Pasa esto en todo lo que la mujer
afronta?
¿Dónde se ubican tus construcciones de cuerpo e intimidad en estas ideas?

Según Roselló Soberón en su libro enfermar y curar: Historias cotidianas de cuerpos e


identidades femeninas en la nueva España dice:

Históricamente, las mujeres han curado, primero, en los espacios domésticos. Las
madres y las esposas se han ocupado de atender a sus hijos y a sus maridos en tiempos de
enfermedad o en situaciones difíciles relacionadas con accidentes y heridas. Al asumir el rol de
curanderas domésticas, las mujeres han ejercido capacidades y habilidades relacionadas con la
feminidad tales como nutrir, alimentar, contener, cuidar. (Roselló,2017, p.23)

Roselló afirma que la mujer era un ser capaz de consolar, ayudar,


sacrificarse y acompañar, un sujeto que debía tocar las heridas, las llagas y las
úlceras de los enfermos, una persona dedicada a cubrir y descubrir a quienes así lo
necesitaban. En pocas palabras la mujer, la buena esposa cristiana, mas
propiamente, era un ser que debía servir amorosamente a sus prójimos en aras de
su capacidad para conseguir el alivio y la curación de los demás. Es decir, curar
era un rango asociado a la naturaleza femenina y, sobre todo, con la capacidad que
tenían las mujeres de reconfortar mediante el amor.

*Resaltar estas ideas como la mujer para la curación y atención de otros


pero no de sí misma.

La ausencia de control que tiene la mujer sobre su cuerpo no le permite la igualdad


dentro de la sociedad, como consecuencia su objetivización: ser para otros o ser de
otros. Entonces el cuerpo de la mujer se desarrolla bajo una condición que se rige a
partir de la obediencia y dependencia, generando lo menciona marcela lagarde (2011)
llama servidumbre voluntaria. Esta interiorización tiene lugar gracias a una cultura
patriarcal y capitalista, la cual quita derechos a las mujeres como ciudadanas y las
cosifican, manteniendo así latente la discriminación y la violencia sexual para ejercer la
dominación en base a normas que atribuyen características genéricas al cuerpo de la
mujer.

La mujer es percibida y reducida a su materialidad, a un objeto, tiene como


característica ser inanimada y de fácil manipulación desencadenado una percepción de
propiedad.

Al decir objeto me refiero a una representación reducida a su materialidad, es decir,


un cuerpo que puede ser manipulado sin el consentimiento de la persona. Sin embargo,
esta materialidad puede cobrar múltiples significados que incluso alcanzan la dimensión
sagrada, donde la representación de la mujer se articula a significados del mundo
inmaterial y al cual José Rosario García Ortega en su libro “Compilación sobre
género y violencia” (2008) en el capítulo 4, “Las mujeres y la apropiación de su
cuerpo” menciona:

En las culturas patriarcales y androcéntricas, como las nuestras, al cuerpo femenino se le ha


significado con esta polaridad, puede inspirar, por un lado, los más grandes odios y, por el otro,
las más elevadas adoraciones, situaciones que van desde las blasfemias contra el cuerpo de las
mujeres, hasta la veneración de este. Pero aún dentro de estos dos polos, el cuerpo de las
mujeres sólo ha sido descifrado, por decirlo así, por los hombres, en tanto que las mujeres han
sido expropiadas de su cuerpo, de su sexualidad y de su subjetividad por la ideología de este
ancestral sistema llamado patriarcado, y sus múltiples claves, signos, artificios, trampas,
costumbres, prácticas, creencias y complicidades, que nos han determinado y significado.
(García,2008, pp.44)

*Incluirlo en el parrofo

La opresión está en nosotras cuando nuestro cautiverio cuenta con nuestro más firme apoyo, y
cuando aprender, atreverse y experimentar, son acciones que parecen imposibles. Lo es también
cuando mantenemos intocadas las normas de nuestra cultura confrontadas con experiencias
vividas que no tienen en ella explicación o son reprobables. Más allá de nuestra conciencia, las
mujeres estamos oprimidas cuando, en cumplimiento del mandato patriarcal, nos esforzamos
por despojar de sentido propio a nuestras vidas y por encontrar un sentido más allá de nuestras
desdibujadas fronteras corporales. De esta manera, ser mujeres adecuadas significa invisibilizar
nuestros haceres y nuestro ser para exaltar a los otros en reverencia sacrificial, es decir, para
magnificarlos como parte indivisible de nuestro ser y de nuestra existencia. (Lagarde, 2005,
p.18) *Incluirlo en el párrafo de la servidumbre

-Diferenciar el cuerpo de la mujer es un objeto y yo antes voy a explicar, desarrollar


porque ha sido tratado como un objeto y no como sujeto, tengo que decir que es un
sujeto como un subtitulo, poner ejemplos algunos.

-Entonces explico de qué manera la mujer, en qué momento o si siempre ha sido así

El cuerpo de la mujer en la sociedad siempre ha estado como muy opacado,


relegado muy suprimido el rol de la mujer a pesar de que la mujer se le ha relegado a la
cocina es el espacio de la mujer donde ha reivindicado su libertad y es importante la
cocina, la producción de alimentos porque si no la sociedad no come.

Entonces en este paradigma patriarcal, el cuerpo de la mujer ha sido sometido al


deseo de otro cuerpo, como que al cuerpo de la mujer se la ceñido únicamente para no
desear, al cuerpo de la mujer se la ha prohibido desear, tener voluntad, autonomía
independencia, identidad porque tiene que ver con su identidad como la única manera
en que ha sido tratada como un objeto de utilidad, un objeto que se puede desear
sexualmente, que se puede poseer sexualmente cuando se quiera, que se puede tocar,
mañosear, ultrajar, violentar porque en la sociedad patriarcal no le reconoce una
voluntad, una consciencia, una dignidad y por lo tanto una identidad a la mujer no la
plantea como sujeto sino como un objeto.

Un objeto no tiene voluntad, un objeto se posee, un objeto muerto en cuanto a


voluntad y conciencia. Eso es la objetivización del cuerpo de la mujer porque no
solamente es del deseo sexual, sino cuando se le objetiviza a la mujer se le está
quitando la voluntad, la conciencia para poder decidir.

Que hace a un sujeto un sujeto: un sujeto tiene una subjetividad, conciencia voluntad
y decide, eso es un sujeto quien ejerce su libertad, quien ejerce su voluntad y es
consciente y medita sus deseos y es capaz de desear.
El cuerpo de la mujer se le ha prohibido desear, que tenga una voluntad para desear
no solamente sexualmente, sino desear estudiar algo, desear algo, entonces siempre
ha estado a la servidumbre del deseo de otras personas (desarrollar)

Definir que es un sujeto, que hace un sujeto ser sujeto subtítulos

La diferencia de sujeto con objeto: el objeto siempre es receptor es pasivo y el sujeto


es activo

-Es por eso por lo que en este capítulo planteo que el significado del cuerpo es un
concepto una realidad que ha sufrido cada vez una desajenación, se le ha
desapropiado de una voluntad de complejidad, de una identidad, se le ha quitado
reconocimiento a su significado histórico, social, político, particular, sexual y ético.
En mi tesis yo planteo utilizar otro concepto para volver a reconocerle, reivindicarle
al cuerpo eso que se le ha ido desapropiando, que es la identidad.

3. la corporalidad de la mujer: cuerpo con identidad

Definir que es la corporalidad que es un cuerpo con identidad

La corporalidad estoy planteándola como un concepto en el que se evidencie un aspecto


de identidad al cuerpo. En el artículo de Montenegro Medina (2006). CUERPO Y
CORPORACIÓN DESDE LA EXPERIENCIA FEMENINA define la corporalidad
como:

La corporalidad consiste en hacer referencia a la realidad subjetiva, vivenciada o


experiencia da; por ello está en la intencionalidad de la vida psíquica. es historia vital interna,
madura hacia la diferenciación; en tanto cada cual tiene su propia historia individual y no se
limita al volumen del cuerpo, es capaz de extenderse e incluso tomar posesión de los objetos del
espacio. (Montenegro,2006, p.166-167)

Por lo tanto, dentro de mi propuesta performática en base a la definición de la


corporalidad que es una realidad vivenciada es que estoy construyendo y creando una
realidad subjetiva a raíz de mis vivencias-experiencias.

A que se refiere una realidad vivenciada, una realidad experimentada, cuando decimos
que un objeto está siendo experiencial, experimentado es porque alguien puede
experienciar. Pero si esta realidad dice que es vivenciada, es consecuente o es razonable
que nos preguntemos que hay alguien que puede vivenciar, es un sujeto que puede
experimentar esta corporalidad, existe una consciencia, una voluntad, una identidad que
puede ser capaz de experienciar, de hacer esta corporalidad.

Hoy los cuerpos se han convertido en un locus privilegiado de construcción de identidad puesto
que los rituales y las ideologías han cedido su predominio a los estilos de vida y las practicas de
consumo en la tarea de asignar sentido a la acción humana. En el presente, nos vemos urgidos a
gestionar los cuerpos de cara a las modas, sus inscripciones y mandatos culturales, a fin de
elegir e interiorizar un estilo de vida que otorgue significado a nuestra existencia. Para las
generaciones más jóvenes, el cuerpo constituye una materialidad que administrar con esmero:
dime cómo es tu cuerpo y te diré quién eres. (Kogan, p.43)

La identidad de un yo se convierte en un problema en cuanto es necesario dotar de sentido a la


experiencia personal continua y genéricamente por medio de la autocontemplación en un
entorno plural de vida. La memoria se convierte en un eje central del reconocimiento de si
mismo. El cuerpo, en tanto asociado a la identidad, empieza a cobrar centralidad y densidad en
este contexto donde la vida cotidiana se vuelve un referente en la construcción de sentido
desplazando los arquetipos que proponía a tradición. (Kogan, p.75)
LAGARDE, Marcela 2011 [1990] Los cautiverios de las mujeres: Madresposas, monjas, putas,
presas y locas. Madrid: horas y HORAS la editorial feminista.

También podría gustarte