Está en la página 1de 21

ORÍGENES DE LA

PSICOLOGÍA
COMUNITARIA
INTRODUCCIÓN

El origen de la psicología comunitaria hay que situarlo bajo


un contexto histórico y social amplio. En él intervienen
eventos políticos, movimientos sociales y el propio desarrollo
de la psicología
ANTECEDENTES
La psicología comunitaria emerge a mediados de los años 60 tras un periodo de
gran efervescencia en toda la sociedad. Ésta nace en un momento en el que se
producen cambios importantes dentro de muchas instituciones de la sociedad y
el concepto de Estado de Bienestar está en pleno apogeo.
El movimiento de reforma social de los años sesenta incrementó la conciencia de
la sociedad acerca de los problemas sociales y la discriminación. Se trata de una
sociedad que aspira a una mejora de la calidad de vida y en la que la salud ocupa
un lugar central. Se produce un aumento del interés social y legislativo por los
problemas de salud mental, crece la idea de que el tratamiento temprano debe
prestarse lo antes posible. La forma en que están organizados y administrados
los servicios de salud fueron también objeto de críticas, se vio la necesidad de
prestar ayuda a las personas en su propia comunidad y de distribuir los servicios
de forma más equitativa.
Algunos estudios de la época (v.g., Hollingshead y Redlich, 1958)
mostraron que los servicios de salud estaban desigualmente distribuidos
y que existía una importante relación entre clase social y enfermedad
mental: las clases sociales bajas cuentan con menos recursos y
manifiestan más problemas de salud. Hay una clara evidencia de que el
modelo de prestación de servicios es inadecuado, un modelo basado
en la espera y en el tratamiento individualizado resulta insuficiente para
cubrir todas las necesidades relacionadas con la salud.
Así en 1963 el Presidente J. F. Kennedy firma el Acta de Creación de los
Centros de Salud Mental.

El objetivo principal de estos centros era crear un nuevo sistema de


distribución de servicios de salud mental en la comunidad local para
asegurar la intervención temprana. La psicología comunitaria y el
movimiento de salud mental comunitaria comparten su desarrollo
histórico. Se va perfilando un nuevo concepto de salud del que la
psicología comunitaria se hace partícipe, se prefieren métodos preventivos
para abordar la solución de los problemas a gran escala en la comunidad,
se tiende hacia un concepto de salud positiva y se asume la influencia
directa del contexto en la aparición de los problemas de salud.
Otro de los acontecimientos que se consideran claves para el nacimiento de
la psicología comunitaria tiene que ver con el desarrollo de teorías que
incorporan el ambiente como elemento fundamental para explicar el
comportamiento humano.

Un ejemplo lo constituyen las teorías del estrés, cuyo concepto está incluido
en modelos explicativos de la psicología comunitaria y relacionado con
otros conceptos tan importantes como el apoyo social. También en la
psicología social numerosas concepciones han ayudado al desarrollo de la
psicología comunitaria, entre las que cabe destacar los trabajos de Asch
(1956) sobre los efectos de la presión grupal, los trabajos de Tajfel (1959)
sobre identidad social o la concepción gestáltica de Lewin (1946, 1947).
Durante la década de los 60 se comienza a gestar dentro de la psicología
social una gran preocupación por la relevancia social de los estudios. Esta
preocupación de la psicología social por lo aplicado favorece el desarrollo de
áreas de conocimiento que parten de un interés por los problemas y las
necesidades sociales.

La psicología comunitaria nace con una vocación aplicada e intenta


garantizar la relevancia del conocimiento a través de la unión entre el
conocimiento práctico-teórico y el conocimiento básico-aplicado. En este
sentido, la obra de Lewin (1988) es fundamental para el desarrollo de la
disciplina ya que desde esta perspectiva la teoría, la investigación y la
práctica deben mantener una continua interrelación. Es por ello, que la
psicología comunitaria se plantea entre sus principales objetivos la relevancia
social de sus estudios y la promoción de la calidad de vida.
La Conferencia de Boston En mayo de 1965 una treintena de psicólogos
se reunió en Swampscott (Boston) para tratar el papel del psicólogo en la
comunidad y como consecuencia definieron el área de actuación de la
psicología comunitaria.

La Conferencia de Boston supuso un avance importante de la disciplina,


se produjo el cambio de denominación, se perfilaron algunas líneas de
actuación y se abordó el tema de la formación del psicólogo comunitario
que desde un principio ponía el acento en la formación interdisciplinar.

Algunas de las conclusiones más relevantes fueron:


1. La psicología comunitaria va más allá de la salud mental por tanto
se acuña el término de psicología comunitaria en sustitución del
término de salud mental comunitaria. De ahí que se le atribuya a la
Conferencia de Boston el acontecimiento en el que tiene lugar el
nacimiento formal de la psicología comunitaria.

2. La psicología social contribuye al desarrollo de la psicología


comunitaria pues de ella arrancan los principales presupuestos que
sustentarán a la disciplina. La psicología comunitaria hay que
entenderla como un área dentro de la psicología social que además
supone una ampliación de su campo profesional.
3. Se aboga por un modelo de formación donde se conjuga la
investigación con la preparación profesional. El psicólogo comunitario
debe conjugar teoría y praxis. Desde la psicología comunitaria se
pretende contribuir científicamente al desarrollo de un conocimiento que
incorpore actuaciones en el orden teórico-práctico y que busque
soluciones a los problemas sociales sin olvidar la perspectiva científica.

4. La psicología comunitaria debe inclinarse hacia la prevención y el


fomento de la calidad de vida, por tanto debe potenciar el desarrollo de
las capacidades y competencias a través de una acción social planificada.
5. El psicólogo comunitario se define como agente de cambio social y
analista de sistemas sociales, por ello se inclina hacia el estudio de
temas relevantes socialmente para que el conocimiento generado
pueda ser utilizado en pro del bienestar social.

6. La investigación en psicología comunitaria debe abordarse desde una


perspectiva ecológica que incorpore la importancia de las condiciones
ambientales y socioculturales sobre el comportamiento y que se centre
en la interacción entre personas y ambientes.
1.2. Características de la intervención comunitaria
¿Qué hacen los psicólogos comunitarios?

Principales características:

- La psicología comunitaria amplía su ámbito de intervención más allá de la salud


mental e intenta situar la intervención en el desarrollo de modelos de cambio social;
está interesada en el cambio de sistemas sociales y quiere que la intervención se
dirija a múltiples niveles para asegurar el impacto social, por lo que la intervención se
sitúa preferentemente en los niveles organizacionales, institucionales y comunitarios.

- Las ciencias sociales (como instrumento de cambio) han de perseguir el desafío


social y proporcionar una guía en la búsqueda de nuevas soluciones personales y
sociales. La psicología comunitaria tiene una vocación aplicada, de compromiso
social y de búsqueda del bienestar.
- La relevancia social de los estudios y la contribución que los psicólogos
comunitarios pueden hacer para promover el bienestar social se convierten
en aspectos de sumo interés que va acompañado de un desarrollo teórico
y metodológico acorde con los objetivos de la investigación. La
preocupación por la relevancia social y el desarrollo conceptual se intentan
garantizar a través de la unión de lo práctico y lo teórico. La investigación
evalúa y redirige la teoría y la práctica. La práctica nos pone en contacto
con la realidad social y conecta claramente la disciplina con la mejora del
bienestar humano. (investigación-acción),
- La psicología comunitaria se plantea el problema de los valores en la ciencia
social, es la conciencia social de la psicología. La responsabilidad social es
un aspecto clave, la intervención comunitaria prefiere centrarse sobre las
comunidades más marginadas socialmente para proporcionarles los
recursos más adecuados. La necesidad de dar respuesta a los problemas
sociales y el compromiso social caracterizan la actuación de la psicología
comunitaria, que hace que ésta se plantee como objetivo indiscutible el
cambio social e institucional.

- Es una psicología de la innovación y el cambio social. Por tanto, se trata de


un cambio positivo y de búsqueda de las innovaciones que hagan posible el
progreso.
- La intervención en la comunidad requiere un acercamiento del psicólogo
que abandona el rol de “experto” para analizar las características y
demandas de la comunidad. El psicólogo debe encontrar la mejor forma
de dar su conocimiento, convirtiéndose en un transmisor de habilidades y
estrategias para solucionar los problemas que afectan a la comunidad. Se
utilizan equipos interdisciplinares para contemplar diferentes análisis y
puntos de vista ante los problemas existentes.

- Se requiere que el psicólogo promueva la participación de la comunidad


en la planificación y desarrollo de la intervención. Sin su participación
directa, no habría conseguido uno de sus objetivos primordiales: actuar
conforme a las necesidades de la comunidad para mejorar la calidad de
vida. El individuo y la comunidad se interrelacionan y dependen el uno del
otro para su existencia
- Su misión es ayudar a crear organizaciones más efectivas, procurar
una prestación de servicios acordes con las necesidades sociales y
proporcionar las bases para el desarrollo comunitario. La primera
cuestión que plantean es el excesivo “centraje en la víctima ”,
tradicionalmente la definición del problema se ha centrado en la
persona, lo que conlleva el inmediato etiquetado y la dependencia de
los sujetos. Como alternativa, una adecuada intervención se dirige
hacia el análisis del contexto y las necesidades de los individuos. Los
sujetos deberán desarrollar aquellas habilidades que les hagan
poseedores del control de sus propios recursos y solo así se evitará
dar una solución paternalista a los problemas
- La construcción de comunidades competentes es una respuesta de la teoría
ante la desigualdad social, la dependencia, la indefensión y la falta de
participación (Reiff, 1966). Las estrategias son: el desarrollo de la comunidad y el
cambio social. El desarrollo comunitario es un proceso diseñado para crear las
condiciones sociales más adecuadas con la participación de toda la comunidad.
Las estrategias básicas de acción se dirigen a buscar la participación de los
ciudadanos, la cooperación de voluntarios, la creación de grupos de autoayuda
y la formación de líderes de la comunidad. El papel del profesional se encamina
a facilitar el proceso de solución de problemas, generar nuevos entornos de
ayuda, aumentar la responsabilidad e implicación entre las personas, facilitar el
contacto interpersonal, la disponibilidad de apoyo, la creación de nuevas redes
sociales, etc. El cambio social sólo se produce si existe un verdadero interés y
motivación entre los individuos por hacer prosperar y desarrollar su propia
comunidad.
- Se utiliza un modelo proactivo de intervención. Es esencial la
preparación anticipada y el desarrollo de estrategias que permitan
inhibir o afrontar situaciones problemáticas. Se sustituye el modelo
de espera por un modelo de búsqueda caracterizado por una
intervención anticipada.
- Adopta una perspectiva ecológica. La interrelación del ambiente y el
comportamiento ofrecen numerosos datos de interés al psicólogo
comunitario, que se preocupa especialmente por conocer el
funcionamiento de los sistemas sociales donde intervienen en mutua
interdependencia el ambiente y los organismos. El análisis de
numerosos factores sociales como el nivel económico, las
características del entorno o la clase social, han revelado la existencia
de grandes diferencias comportamentales que han dado lugar a la
existencia de grupos de riesgo, de poblaciones marginadas, etc., e
indican al psicólogo comunitario el camino a seguir.
Cuadro 1.1. Resumen de las principales características de
la intervención comunitaria
CONCLUSIONES

La psicología comunitaria es una disciplina formal que se caracteriza por una forma
de abordar los problemas que refleja ciertos valores, entre ellos, hacer una
psicología del interés público, que actúa en consonancia con las necesidades
sociales y nunca de espaldas a la comunidad. Se plantea una unión indisoluble entre
lo básico y aplicado y su objetivo es la promoción de la calidad de vida. Por ello, hay
un carácter psicosocial. Los estudios se realizan en contextos naturales, utilizando
una metodología acorde con los objetivos de la investigación. En definitiva, la
psicología comunitaria puede definirse como el campo de la ciencia psicológica que
estudia las transacciones entre sistemas sociales, poblaciones e individuos; que
desarrolla y evalúa métodos de intervención que propician las adaptaciones entre
las personas y sus ambientes; que diseña y evalúa nuevos sistemas sociales; y que a
partir de dicho conocimiento y cambio pretende incrementar la cantidad de
recursos psicológicos que se ofrecen al individuo y a la comunidad.

También podría gustarte