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La producción en danza teatro

Pina Bausch: Producción y contexto social

Emiliana Baer Savio


Diseño de indumentaria
0122877

Teatro 1
Prof. Andrea Mardikian
2023 - 1er cuatrimestre
PROYECTO DE GRADUACIÓN
TRABAJO FINAL DE GRADO
CUERPO

El

La producción en danza teatro

Pina Bausch: Producción y contexto social

Emiliana Baer Savio


0122877

Diseño de indumentaria

Facultad ele DiHfto


y Corrur.lc • olón
Emiliana
BAER SAVIO
emi_savio@hotmail.com

3885006236
ESTUDIANTE DE DISEÑO Portfolio web:
https://ebaer3c69.myportfolio.com/
DE INDUMENTARIA

EXPERIENCIA LABORAL

CURSOS Óptica Savio (2020 - 2021)


• Control de redes sociales
• ADOBE ILLUSTRATOR / • Gestión de cuentas
FICHAS TECNICAS • Atención al cliente
2020 - 2021 • Control de stock

• ADOBE PHOTOSHOP
2021 - 2022
FORMACIÓN EDUCATIVA

Colegio secundario (completo)


2014 - 2019 - Colegio del Salvador - Jujuy
HABILIDADES
Grado de derecho (incompleto)
Resolución de problemas 2020 - 2021 - UBA

Grado de diseño de indumentaria


Proactividad
(actualmente)
Creatividad 2021 - Actualidad - Universidad de Palermo

Edición
Español
Versatilidad Inglés
DECLARACIÓN JURADA DE AUTORÍA

A: Facultad de Diseño y Comunicación. Universidad de Palermo.

Por la presente dejo constancia de ser el autor del Proyecto de Graduación titulado

"La producción en la Danza teatro. Pina Bausch: Producción y contexto social" que

presento para la asignatura Teatro I dictada por el/la profesor/a Andrea Mardikian.

Dejo constancia que el uso de marcos, inclusión de opiniones, citas e imágenes es de

mi absoluta responsabilidad, quedando la UP exenta de toda obligación al respecto.

Autorizo, en forma gratuita, a la UP a utilizar este material para concursos,

publicaciones y aplicaciones didácticas dado que constituyen ejercicios académicos de

uso interno sin fines comerciales.

Emiliana Baer Savio


11 / 06 / 2023
Fecha Firma y aclaración

Facultad de DIMño
y Comunlcadón

-
ffl::I
PROYECTO DE GRADUACIÓN
TRABAJO FINAL DE GRADO
CUERPO

La producción en danza teatro

Pina Bausch: Producción y contexto social

Emiliana Baer Savio


0122877

Diseño de indumentaria

Facuttad de Dia.ño
y Com'-"CacJón
La producción en danza teatro
Pina Bausch: Producción y contexto social
Emiliana Baer Savio, diseño de indumentaria
Teatro 1, profesora Andrea Mardikian

“El teatro es eso: el arte de vernos a nosotros mismos, el arte de vernos viéndonos”
(Augusto Boal, 2009)

Abstract

En el presente ensayo, se abordará la obra de danza teatro “Café Müller” dirigida por Pina
Bausch desde un análisis que tiene como punto de referencia a los signos del teatro
posdramático, para de esta manera corroborar la hipotesis de que dentro de esta obra existió
cierta visibilización del contexto social que se experimentaba en Europa, particularmente en
Alemania de 1970, es decir del momento en el que Bausch da sus primeros pasos con lo que
actualmente llamamos danza teatro.

1
Índice

1. Introducción………………………………………………………………………………...3
2. Introducción a la Danza Teatro y el Teatro Posdramático………………………………….4
2.1 La danza teatro…………………………………………………………………………….4
2.2 El teatro posdramático……………………………………………………………………..4
3. Signos del Teatro Posdramático…………………………………………………………….4
4. Análisis de “Cafe Müller”......................................................................................................5
4.1 Abandono de la síntesis……………………………………………………………………5
4.2 Juego con la densidad de los signos……………………………………………………….5
4.3 Estética de velocidad………………………………………………………………………6
4.4 Corporalidad……………………………………………………………………………….6
4.5 Los gestos………………………………………………………………………………….7
4.6 Calidez y frialdad………………………………………………………………………….7
4.7 Escenografía……………………………………………………………………………….7
5. Contexto social y relevancia de los signos en la obra de Pina Bausch……………………..8
6. Conclusión………………………………………………………………………………….9
7. Bibliografía………………………………………………………………………………...11

2
Introducción

Dentro del presente ensayo, se propone llevar al lector al análisis de la danza teatro y que
pueda establecer una relación entre este tipo de teatro con el posdramático, para luego poder
establecer como mediante signos posdramáticos, “Café Müller” llegó a reflejar sentimientos
dentro de la sociedad post segunda guerra mundial en Alemania, que es el contexto en el
que surgen las primeras obras de Bausch.
De esta manera el principal objetivo general se tratará de proponer la interrelación de la
producción de la danza teatro con el teatro posdramático; al igual que poder ahondar en la
conceptualización de los signos y en el contexto social en el que la danza teatro de Bausch
surge. Por otro lado los objetivos específicos, se tratarán de, por un lado a partir de la
visualización de la obra “Café Müller” poder establecer cuales son los signos posdramáticos
que se encuentran en ella para luego desencadenar en su relación con el contexto social.
Por lo que el ensayo pretende mostrar la hipótesis de que mediante los signos
posdramáticos, es posible la observación del reflejo de la Alemania de 1970, donde
comienzan a surgir las obras de danza teatro de Pina Bausch.
De esta manera en cada capítulo particularmente a todas las aristas mencionadas,
comenzando con la conceptualización inicial de la danza teatro y la del teatro posdramático,
para entablar la relación que estos poseen; en el capítulo siguiente se definirán a los signos
posdramáticos, para poder observarlos dentro de la obra “Café Müller”, por lo que en este
análisis se verán signos como el “abandono de la síntesis”, la “corporalidad”, “los gestos”,
entre otros, con sus respectivos significados o formas de implementación.
Luego, se ahondará en el contexto de la Alemania post segunda guerra mundial, que es el
contexto en el que surge la danza teatro de Bausch y se observa como los sentimientos como
la frialdad y el distanciamiento se ven representados mediante los signos en la obra.

Palabras clave: Danza teatro - Teatro posdramático - Pina Bausch - Cafe Müller - contexto
social.

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Introducción a la Danza Teatro y el Teatro Posdramático
La danza teatro

La danza teatro, es un movimiento en el que comienza a percibirse la combinación o el


adentramiento entre elementos teatrales y de danza contemporánea, ballet y diferentes tipos
de danzas con la finalidad de transmitir mensajes emocionales. Es así que Lehman (1999, pp
166) describe que la “Tanztheater” está sostenida tanto por el ritmo, música y corporalidad,
pero combinado con la semántica del teatro hablado y es por esto que lo considera una
variante del teatro posdramático.

El teatro posdramático

Siendo que el teatro posdramático puede leerse de diferentes maneras, dependiendo las
culturas y tradiciones; algunas de estas posturas proponen a este, como crítica al teatro
dominante en Europa, otros, lo plantean como una poética de los nuevos idiomas teatrales,
incluso se formuló la idea de teatro posdramático como la búsqueda de una teoría política del
teatro. Así lo definía Lehmann (1999, pp 14 - 18) y aclaraba que el teatro posdramático no es
un teatro sin drama, sino uno que pone de relieve un conflicto con el concepto burgués de
teatro.

Signos del Teatro Posdramático

De esta manera es posible definir algunos de los signos del teatro posdramático, que según
Lehmann (1999) tratan de:
“una corporalidad llamativa, un estilo gestual o una disposición de los elementos en la
escena, que sin significar, están presentes (o se presentan) con un cierto énfasis, pueden ser
recibidos como signos en el sentido de una muy evidente manifestación o gesticulación que
reclama atención y que tiene sentido gracias al marco de intensidad de la realizacion escenica
sin que por ello puedan ser fijados conceptualmente” (pp 143)

Es necesario indagar sobre cuáles son estos signos, para así, luego analizarlos dentro de la
obra “Café Müller” de Pina Bausch.

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Análisis de “Cafe Müller”

El primer signo que se abordará se trata del “abandono de la síntesis”, que Lehmann
propone que se trata de una ruptura con la estructura de narrativa tradicional y por lo tanto, la
búsqueda de una forma teatral más fragmentada. En lugar de seguir una secuencia de eventos
o una trama dramática convencional tiende a presentar múltiples elementos y secuencias que
no se conectan necesariamente de manera lineal. Esto se puede observar como la
fragmentación de la acción, la yuxtaposición de escenas y la falta de una trama lineal
tradicional y tiene mucho que ver con la conceptualización de los pensamientos oníricos,
siendo que “conforman una textura que se asemeja al collage, al montaje y al fragmento y no
al desarrollo de acontecimientos lógicamente estructurados” (Lehmann 1999, pp 146).

En el caso de “Cafe Müller”, existen diversos elementos que nos marcan que esta obra no
posee una narración lineal, es decir, no nos encontramos con una obra en la que una escena
debe ocurrir para que suceda la siguiente, simplemente la obra pretende transmitir un
sentimiento en su totalidad sin necesidad de una trama lineal o lógica. Por otro lado, es
posible observar la fragmentación, donde un elemento muy importante va a ser la música, que
por momentos invade a toda la escena y repentinamente calla, por lo que esto nos marca un
corte; también, si nos adentramos dentro de los movimientos, el pasaje de movimientos
tensos a movimientos fluidos nos marcan ciertos cortes en la puesta, al igual que la aparición
de personajes, siendo que el observador no posee conocimiento de la relación entre estos
personajes, que se presentan y salen de escena continuamente.

Otro signo, esencial para el análisis de la obra, se trata de lo que Lehman describe como el
“juego con la densidad de los signos”, sobre la cual Lehmann propone que el teatro
posdramático comienza a economizarlos, es decir, reduce la cantidad de signos mediante la
repetición y la duración.

En la obra “Café Müller”, es evidente como la repetición se vuelve un punto muy grande de
atención dentro de la obra, escenas como en la que una mujer se abraza con un hombre y otro
los acomoda, la sostiene en brazos y cae al piso, esta acción vuelve a repetirse durante tantas
ocasiones, de manera que el espectador no tiene otra alternativa que poner foco en dicha

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acción. Al igual que esta escena, cuentan con reiterados momentos de repetición, en las que
un elemento en el que se pone mucho foco es en la caída de los personajes al suelo.

La “estética de velocidad”, se trata según Lehmann de la tentativa de asimilar o incluso


lograr la velocidad de los medios de comunicación y propone que se apoya en la estética del
videoclip, planteando como ejemplos la mezcla de presencia en vivo y grabaciones. Al
mismo tiempo también menciona que la simultaneidad de la acción escénica produce
velocidad.

En “Cafe Müller”, no se da este hibrido entre los personajes en vivo y las grabaciones, pero
es perceptible un cambio de velocidades en los movimientos de los personajes que se
menciono en principio, pero si la simultaneidad de acciones que producen el efecto de
velocidad, así lo podemos notar con la diferencia entre la velocidad en la que los personajes
de vestidos blancos (entre los que se encuentra Pina Bausch), son lentos, mientras que por el
contrario la mujer con tapado negro recorre todo el lugar con pequeños pasos muy veloces.
Esto mismo pasa con la velocidad que se va acrecentando en la escena del abrazo descrita
anteriormente.

El signo anteriormente mencionado tiene una relación muy estrecha con el de la


“corporalidad”, que Lhemman la explica que en el teatro posdramático, el cuerpo se
convierte en el centro, los actores pasan a encarnar los movimientos de sus personajes,
generando en los espectadores la percepción de que no tienen el control de sus movimientos.
A su vez menciona, que puntualmente dentro de la danza teatro, “intensifica, desvía e inventa
impulsos de movimiento y gestos corporales y recuerda así posibilidades latentes, olvidadas y
reprimidas del lenguaje del cuerpo” (1999, pp 166)

En la obra de Pina Bausch, esto se pone en evidencia con cada uno de los movimientos de
los personajes, siendo que no se presenta en ningún momento el diálogo y por lo tanto la
corporalidad ocupa el rol central dentro de la obra y dentro de cada uno de los movimientos,
se percibe esta sensación de poco control de los movimientos, como si el movimiento fuese el
que guía al personaje y no de manera contraria; siendo, además que no puede percibirse un
“sentido” a dichos movimientos. Como mencionaba anteriormente, tiene una estrecha
relación con la densidad de los signos en el que observamos la repetición, siendo que estas

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repeticiones de movimientos también dan a entender que el adentramiento del personaje es tal
que el cuerpo es el que lo domina.

Este signo descrito, tiene mucha relación con el signo de “los gestos”, los cuales Lehman
define como la presentación de una inmediatez, el medio hecho visible como tal; en lugar de
ser un mero vehículo para transmitir un significado o una acción dramática, el gesto se
destaca como una expresión en sí misma, que puede tener un impacto directo en el
espectador. Podemos observar gestos como los ojos cerrados dentro de los personajes
vestidos de blanco dentro de la obra, que nos muestran que existe una diferencia entre estos y
quienes se encuentran de negro, al igual que sucede con la velocidad de sus movimientos.
También la escena del abrazo, mencionada con anterioridad es un gesto, que sin poseer un fin
es una expresión en sí misma posee un impacto en sus observadores (también, producto de su
repetición)

También podemos encontrar el signo de “calidez y frialdad”, donde el público se ha


acostumbrado a consumir a un teatro “cálido”, en el que se representa a las experiencias
humanas y psicológicas, a personas de carne y hueso les dirá Lehmann (1999) y es entonces
que la “frialdad” que se presenta dentro del teatro posdramático, resulta difícil de soportar.

Dentro de “Cafe Müller”, se observa esta frialdad continuamente, muchas veces se


encuentran personajes dentro de la misma escena y mientras uno realiza una acción, otro
puede encontrarse realizando otra totalmente indiferente con la acción que su compañero está
realizando; por ejemplo, en un momento uno de los personajes se quita su vestido y se tiende
sobre la mesa de espalda al público, mientras tanto siguen produciéndose movimientos entre
el resto de los personajes.

Por otra parte la “escenografía”, se torna en un signo importante, Lehmann propone que el
teatro posdramático le pondrá en un papel dominante a lo visual por sobre la palabra o el
texto.

En el caso de cafe müller, no existe siquiera la palabra, es decir diálogos, por lo que todo
aspecto visual es de total relevancia; la escenografía en este caso, trata de elementos de una
confitería, se encuentran mesas y sillas, pero que no cumplen estrictamente con el rol para los

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que están fabricados, sus ubicaciones interrumpen los pasos de los actore que avanzan con
sus ojos cerrados y chocan contra ellas, generando tanto sonidos que dan cuenta de muchos
elementos que se mencionaron anteriormente, como la corporalidad en la que el actor se
adentra de tal manera que el movimiento parece no tener control y esto también se refleja en
la escenografía, donde las sillas en el suelo van dejando el rastro de todos los recorridos de
movimiento.

Contexto social y relevancia de los signos en la obra de Pina Bausch

Es posible, hacer un análisis de cómo mediante estos elementos o signos, se proponía


reflejar el contexto social, en el que Pina Bausch incursiona dentro de lo que actualmente se
denomina danza teatro. Para esto es necesario hacer mención de dicho contexto:

Godinez Rivas (2014) comenta dentro de su investigación que Pina Bausch (bailarina y
coreógrafa), presentó sus primeras obras en el año 1970, con su compañía Tanztheater
Wuppertal, siendo ella de Alemania. En esta época historiadores como Hobsbaw (1994),
describen que Europa y puntualmente Alemania, se encontraba en un momento de
transformación social, teniendo en cuenta que estamos hablando de una Alemania marcada
por su división en “dos Alemanias” producto de la finalización de la Segunda Guerra
Mundial, la muestra más clara de esta división se trató de el muro de Berlín, donde se
evidenciaba la represión política.

Siendo este el contexto, en el que Pina Bausch comenzó a incursionar dentro de la danza
teatro, es que se pueden evidenciar mediante los signos que implementa lo que transcurre en
la sociedad.

En la obra de “Cafe Müller”, puede proponerse que se refleja esta sociedad fragmentada,
pudiéndose visualizar un espacio escénico minimalista y repetitivo, que se trata de “la
densidad de los signos” donde los personajes parecen atrapados en sus propios
comportamientos automáticos e incapaces de conectarse con los demás. Y que mediante “la
corporalidad” los bailarines se adentran en sus movimientos, produciendolos dentro de un
espacio reducido, chocando contra las sillas y las mesas como si fueran obstáculos, en un
intento de conectar con sus propias emociones. Es así que el crítico de danza, John Rockwell

8
(2001), ha descrito la obra como “una imagen de la modernidad y su deshumanización: los
personajes de la obra parecen estar atrapados en su propio automatismo, incapaces de
conectarse con los demás o con sus propios sentimientos”. Otro de los signos, que puede
analizarse es “la frialdad”, donde como se describió al analizar dicho signo, los personajes
pueden accionar sin que esto repercuta o sea atendido por el resto de los personajes,
marcando el distanciamiento, que tiene correlación con la sociedad descrita.

Además, Godinez Rivas (2014) también menciona que Bausch hacía que los bailarines se
introduzcan en los procesos de creación colectiva, en los cuales, los animaba a aportar sus
propias experiencias y perspectivas personales a la pieza; proponía que los bailarines se
involucraran personalmente y se cuestionen sobre ciertos temas y es esto lo que genera que
dentro de “Cafe Müller” la “corporalidad” sea un signo muy presente, donde los personajes
se adentran en los movimientos, siendo que al saber de este trabajo previo, sienten lo que los
personajes y esto parece apoderarse de sus movimientos.

Por otro lado, también es necesario mencionar que las obras de danza teatro de Pina Bausch,
al contar con los elementos que fueron mencionados a lo largo del ensayo, se enfrentaba a
una serie de métodos o modelos de teatro y danzas que estaban implantados, es decir de
alguna manera, al acostumbramiento del público a un teatro dramático, así Godinez R.
(2014, pp 199) menciona que “En los primeros años como coreógrafa Pina Bausch se
enfrentó a un público acostumbrado a los ballets clásicos, en sus estrenos en Wuppertal
alguna gente se salía del teatro irritada por no entender aquello que se les ofrecía”.

Conclusión

De esta manera cabe concluir, que los métodos que implementó Pina Bausch en la danza
teatro, más puntualmente en “Café Müller” fue rupturista al incorporar signos del teatro
posdramático, enfrentados de alguna manera al drama que estaba tan implantado en los
espectadores de la época. Y, además de esto, a pesar de que no se pueda proponer que dentro
de su obra realizó alusiones explícitas al contexto social de la segunda guerra mundial, si es
posible afirmar que dentro de esta se encuentran ,
entre otros, que si se presentaban en la sociedad de los setentas. Con el fin de simplemente
transmitir sentimientos sin necesidad de una narración lineal, con el propósito de que los

9
espectadores al salir de la obra reflexionen acerca de las acciones que apreciaron dentro de la
sala.

10
Bibliografía:

● Godinez Rivas, G. (2014) Cuerpo: efectos escénicos y literarios. Pina Bausch


● Hobsbawm, E. (1994) Historia del siglo XX.
● Lehmann, Hans-Thies (1999) Teatro Posdramático

Obra teatral:

● Cafe Muller (1978) https://www.dailymotion.com/video/xl42oi

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