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Rev Cubana Med Gen Integr 2001;17(5):479-82

TRABAJOS DE REVISIÓN
EL PROCESO REPRODUCTIVO. ALGUNAS CONSIDERACIONES
SOBRE EL MATERNAJE

Ignacio González Labrador1

RESUMEN: Se realizaron una serie de consideraciones generales sobre el proceso reproductivo,


y como una consecuencia de él se consolida un proceso llamado maternaje, conceptualizándose
según criterio del autor, cómo puede influir en la vida sexual de la mujer. Se conceptualiza según las
letras que componen la palabra que denomina dicho proceso.

DeCS: REPRODUCCION; RELACIONES FAMILIARES; RELACIONES INTERPERSONALES.

La reproducción, además de un fenó- mujeres de la reproducción, del cuidado de


meno biológico, es una cuestión social y los hijos y las labores del hogar.1
cultural pues el comportamiento de los in-
dividuos está en general determinado por
la sociedad en que viven y sus conductas Desar
Desarrrollo
estarán regidas por determinadas normas.
El embarazo, como evento crucial de Históricamente decir mujeres es aso-
este proceso reproductivo, es enfrentado ciar binomios inseparables: mujer = madre,
de formas diferentes por hombres y muje- mujer = familia. Quizás hasta de forma mítica
res, y puede afectar la vida y la sexualidad adjudicando a ella leyes naturales ligadas a
de diversas maneras según el sexo. determinantes biológicos instintivos, se
En 1700 a.n.e en Mesopotamia aparece empezaron a definir mitos femeninos como
el Código de Hammurabi, que determina- que ser mujer es igual a ser madre, y que el
ba que las mujeres tenían que tener los hi- amor femenino es romántico y debe tener
jos durante su vida fértil y ocuparse de las una pasividad erótica.2
actividades domésticas. Desde ese enton- La maternidad y conyugalidad son es-
ces se estableció una nueva división sexual feras vitales que organizan los modos de
del trabajo, que hacía a los hombres res- vida de la mujer, independiente de cualquier
ponsables de las tareas económicas, y a las condición, y este binomio puede llegar a

1
Especialista de I Grado en Ginecoobstetricia. Profesor Asistente. Máster en Pedagogía Sexual.

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conformar un estereotipo de mujer que se génesis de este proceso reproductivo, de
denomina mujer-madre.2 A las hijas se les ahí la importancia de la incorporación mas-
educa para la casa, para asumir papeles de culina, quizás asistiendo más a las consul-
buena madre y esposa, los que conforman tas de atención prenatal, o participando jun-
el eje de la subjetividad femenina. A la niña to a su mujer en el momento del parto. Si
se le enseña a ser cariñosa, dulce, compren- bien es cierto que hay una alta especializa-
siva, no se le refuerza su autoestima, ni se ción fisiológica del organismo femenino para
le estimula a un disfrute de la sexualidad la gestación, es también posible la incorpo-
igual que al varón. Se le trasmite mayores ración masculina durante la gestación,
limitaciones en su conducta sexual y orientándolo e informándolo más sobre los
reproductiva, se le atemoriza con el emba- aspectos de la sexualidad y subjetividad
razo y se le impone la fidelidad, también se durante el proceso reproductivo de la pare-
hace recaer sobre ella la planificación fami- ja, para así minimizar la influencia que la
liar de la pareja.3 En fin, a la mujer se le pre- gestación pudiera tener en la sexualidad de
para para atender y satisfacer necesidades la pareja humana.
de otros. Es este el proceso interminable del
Al varón en cambio se le prepara para maternaje, para el cual se prepara a la mujer
la convivencia social, sus relaciones con el desde su nacimiento y que toma cuerpo real
afuera y esto incide en su salud sexual y cuando se consolida un embarazo, sobre el
reproductiva. Se magnifica su esteriotipada cual haremos este acercamiento conceptual;
virilidad, se sobreexige un determinado com- conceptualización que se irá haciendo de
portamiento sexual y de género, se le redu- acuerdo con las letras que conforman esta
ce la expresión de sentimientos, se estimula palabra y el posible significado que ellas
su libertad, se refuerza su entrenamiento en pueden tener en el concepto general del tér-
el sexo, pero nunca se reflexiona sobre qué mino maternaje, así como lo que este implica
piensa el varón con la llegada de un hijo. en la vida sexual y personal de la mujer.
Poco se prepara al varón sobre las viven-
cias y responsabilidades de este evento
vital, y se pierde de vista la educación de la MATERNAJE
paternidad responsable.4
Con la llegada del embarazo la mujer M. Miedo al parto
deja de ser tal para convertirse en madre y
muchas pueden apreciar la maternidad Desde la sentencia ancestral de parirás
como conflicto en detrimento de su sexuali- con dolor se generan desde lo personal ex-
dad. Se refuerza el rol materno, en detrimen- pectativas terroríficas del momento del par-
to del rol mujer, y se exacerba entonces el to, además demuestra un gran desconoci-
tradicional binomio mujer = madre. De ahí miento en relación con el acto de parir.
que con la llegada de un embarazo comien- El modelo social de la maternidad es
ce un proceso interminable (una larga ca- igual a sacrificio, angustias y dolor. Hay
dena de sucesos) que solo termina con la modelos maternales que restan o suprimen
vida de la mujer, que es conocido como el placer sexual por modificaciones corpo-
maternaje. rales de la grávida, lo que trae aparejado
Al varón durante la gestación, y aun duelos con el cuerpo por pérdidas de la fi-
después, se le excluye de este proceso, ya gura y el atractivo físico. La maternidad im-
que se le considera como un espacio de plica una responsabilidad gigantesca, gran-
poder femenino, social y familiar, sin tener des exigencias que se le imponen a la mujer
en cuenta que él también formó parte de la desde lo social que llegan a generar miedo.

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A. Acción de criar, aprender a criar R. Relaciones de pareja

Ello genera una carga de trabajo feme- Se ha comprobado que hay una res-
nino en detrimento de su tiempo personal. tricción del espacio, del tiempo, del desa-
Se le considera una actividad propiamente rrollo y placer de la pareja en función de los
hijos. Existe un desdibujamiento del espa-
femenina, y desde las propias actividades
cio de la pareja y se produce una multiplici-
médicas se va supuestamente preparando
dad de roles que tiene que cumplir la mujer.
a la mujer para ello (lactancia materna a libre Tiene que desempeñarse como buena ma-
demanda); son roles reproductivos que dre, lo que implica sobreprotección de los
duran toda la vida, se aprende haciéndolos hijos con un inmenso gasto de energía y
y esto trae un costo femenino en dedica- trabajo; en segundo plano tiene que ser tam-
ción, tiempo y ocupación. bién buena esposa, lo cual a la larga restrin-
Luego surgen también las acciones de ge su propio espacio y tiempo (la mujer siem-
educación durante toda la vida, la crianza pre en función de los otros). Todo esto lo
que trae como consecuencia es un deterio-
durante la infancia, y durante la adolescen-
ro de sus relaciones de pareja.
cia pueden surgir conflictos generacionales,
la elaboración de juicios por los adolescen-
tes con respecto a la acción de su crianza, N. Necesidades propias insatisfechas
etcétera. a favor de los hijos

Las necesidades femeninas de todo


T. Tiempo para criar, trabajo de criar, tipo pasan a un segundo plano, todo en
temor a no saber criar función del bienestar fundamentalmente de
los hijos y después del esposo, todo lo cual
La distribución y limitación del tiempo se traduce en prácticas y estrategias de
de la crianza es diferente en hombres y mu- género caracterizado por posposición de lo
jeres, lo que trae como consecuencias limi- propio por lo de otros. Inclusive la nutri-
tación del tiempo femenino para con ella ción de la mujer es modificada por patrones
misma y para compartir con su pareja. En alimentarios en función de otros (hijos, es-
poso, resto de la familia), y frecuentemente
ella descansa la función de supervisión
aparecen en ellas enfermedades carenciales.
constante, del espacio, las condiciones, el Las necesidades materiales propias de cual-
lugar de la crianza, junto al desconocimien- quier tipo se supeditan a las del resto de la
to de su desempeño y efectividad, lo que familia.
redunda en un trabajo doméstico adicional
que no es igual en hombres y mujeres.
A. Autoestima, ansiedades,
autocuidado
E. Espera
La autoestima es baja por las caracte-
Todo puede esperar, todo pasa a un rísticas de la crianza de los hijos, por las
segundo plano en función de la maternidad ansiedades que genera este trabajo de criar
y los hijos, lo que trae consigo desorgani- y atender a los demás. El autocuidado de la
zación en la vida de la mujer y su pareja. mujer es poco; ¿cuándo dedica cuidados

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para ella, para con su cuerpo, su mente, sus zo hace que haya modificaciones corpora-
afectos, su sexualidad, etc.? Todo esto la les que alteran el atractivo femenino y dis-
hace ser un agente de salud porque se ocu- minuyen la intimidad erótico sexual; se pro-
pa de proporcionar salud a los demás, y no ducen cambios en las posiciones coitales,
se convierte en sujeto de su propia salud. temores a lesionar al feto o a la mujer por la
parte masculina, y va disminuyendo enton-
ces el erotismo dentro de la pareja.
J. Juicios externos En ocasiones desde el punto de vista
médico se prohíben las relaciones sexua-
Estos muchas veces provienen del pa- les, y en otras, se mantienen contactos
dre, el esposo, los demás familiares, o los sexuales en función de los requerimientos
vecinos, que llegan a ser contraproducen- masculinos, lo que puede dejar entrever la
tes en su accionar como madre. No es más posibilidad de la existencia de violencia
que una representación social de su rol de contra la mujer, dadas las posiciones de
madre. Ante todo tiene que ser buena ma- poder que laceran la relación y el erotismo.
dre, y estos juicios forman parte de una En el posparto se evitan manifestaciones eró-
evaluación constante de su actuación que ticas delante del niño, si el bebé duerme en el
pueden lacerar su autoestima y constitu- mismo cuarto es otro factor que mediatiza de
yen una carga más que engendra el proce- forma negativa el erotismo de la pareja.
so de maternaje. Pretendemos que con este acercamien-
to se nos permita entender y atender con
mayor flexibilidad la influencia que el pro-
E. Erotismo ceso reproductivo tiene en la sexualidad
femenina y podamos contribuir todos a ha-
Hay modificaciones también del ero- cer más agradable la vida de la mujer en
tismo a lo largo de este proceso. El embara- esta etapa de su existencia.

SUMMARY: A series of general considerations on the reproductive process as a result of


which the so-called motherhood process is strengthened were presented in this paper. The author
conceptualizes the influence of this process on the woman’s sexual life. The conceptualization is
based on the letters of the word defining such a process.

Subject headings: REPRODUCTION; FAMILY RELATIONS, INTERPERSONAL RELATIONS

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co-Técnica, 2000:152-3.
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La Habana: Editorial Científico-Técnica, La Habana: Editorial Científico-Técnica,
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2000: 41. Dr. Ignacio González Labrador. Calle 66 A # 2905
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