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Desarrollo 2do Parcial
Desarrollo 2do Parcial
El juego es una pieza clase para el desarrollo integral porque a través de él, el niño desarrollo la creatividad, la
resolución de problemas, el aprendizaje de papeles sociales, aprende a controlar los movimientos de su cuerpo, a
regular su conducta y sus emociones. (Garalgordobil).
En esa línea, Tonucci plantea que en el juego el niño vive una experiencia de enfrentarse por si mismo con el mundo
y su complejidad. los adultos tienen la función de dejar hacer, dejar jugar, dejar perderse en el tiempo, dejar que el
niño como individualidad logre encontrarse con el mundo.
Por su parte, Vigotsky dice que el juego es la realidad cambiante e impulsora del desarrollo mental del niño.
Recordar y memorizar reglar son operaciones mentales que en el juego se hacen sin ninguna dificultad y de un modo
placentero y divertido. A su vez, jugando con otros aumentan su capacidad de comprender la realidad del entorno
social donde se encuentra.
El juego es un derecho que tiene el niño y es lo ue enlaza todos los aspectos de su desarrollo integral. Así, en la
transición del periodo preescolar al escolar ‘’la edad de los juegos’’ comenzaran a aparecer los juegos de regla.
Nuevas formas de pensar y pensarse junto a otros. También aparecen los juegos que implican competencia, por
ejemplo: lanzar más lejos la pelota.
Piaget plantea que entre los 4 y 7 años el juego simbólico del niño comienza a declinar el carácter egocéntrico, y se
transforma el juego en una representación imitativa de la realidad. Entre los 7 y 12 años las construcciones
simbólicas se vuelven cada vez más cercanas a la realidad y en lugar de asimilarla a su ‘’Yo’’ se somete a ella
progresivamente.
Los juegos de regla son juegos de combinaciones sensorio-motoras con competencia de los individuos y regulados
por un código transmitido de generación en generación o por acuerdos improvisador. En este momento del
desarrollo se produce cambios en la moral: dejan de lado la moral heterónoma para comenzar a instaurar la moral
autónoma, es decir, la comprensión de lo posible y de lo prohibido en relación con las pautas acordadas en el grupo.
2.1SIGMUND FREUD: si bien no propuso una teoría específica sobre juego infantil, realizo aportes para comprender
su naturaleza.
En 190 observa a su nieto de 18 meses y a partir de esto plantea que el juego del carretel es el modo que utiliza el
niño para dominar su angustia frente a la separación de su madre simbolizada en el carretel. Asi, jugando con el
carrete de hilo puede separarse de la madre sin el peligro de perderla, ya que el carretel vuelve cuando el lo desea y
de ese modo descarga sus fantasías agresivas y de amor dirigida hacia su madre sin consecuencias en la realidad.
Es a partir de este juego que el niño puede simbolizar una situación traumática y con esa repetición simbólica se va
haciendo dueño de la situación.
El niño no juega solamente a lo que es placentero sino que también repite situaciones dolorosas y displacenteras,
experiencias traumáticas o acontecimientos de la vida que le causaron impresión y que al jugar logra elaborar
haciéndose dueños de la situación, es por ello que tiene un carácter elaborativo. El niño elabora lo que ha sufrido
pasivamente al repetirlo simbólicamente. El contenido de los símbolos aparece porque se halla reprimido en el
inconsciente.
En el juego existe una tendencia al placer, el niño repite como juego una impresión desagradable ligada a la
consecución de placer.
El juego es el disfraz de la libido, es un realizador de deseos y una vía de descarga pulsional. Y el motor del juego es
el deseo del niño de ser mayor.
DONALD WINNICOTT si bien no elaboro una teoría específica sobre juego, en sus observaciones clínicas recogió
importantes aspectos del mismo e hizo importantes aportes, entre ellos:
El concepto de objeto transicional: lo define como la primera posesión Yo- No Yo que tiende a favorecer el proceso
de individualización y de discriminación entre el mundo interno y mundo externo. Entonces, el espacio transicional
es una zona de experiencias neutral o intermedia entre la subjetividad y la objetividad necesaria para una relación
entre el niño y el mundo externo y que se da gracias a un buen maternaje (la madre suficientemente buena). En este
espacio intermedio se dan los fenómenos y objetos transicionales.
A su vez, llama fenómenos transicionales al conjunto de conductas que se da en dicho espacio transicional, tales
como él bebe jugando con saliva o balbuceando para dormirse, él bebe chupando al objeto transicional. Estos
fenómenos dan inicio a la existencia de una tercer área que asegura la transición entre el niño unido simbólicamente
a la madre y una situación de individuación progresiva.
Suelen aparecer ente los 4 meses y el primer año de vida. Este objeto constituye para el bebe una defensa contra la
ansiedad ante la separación de la madre (los padres reconocen esto y lo llevan a todas partes incluso cuando viajan).
El bebe implica la primera utilización de un símbolo de unión entre él y su mama. En este espacio simbólico, la madre
y el niño se separan y se unen, posibilitando una progresiva discriminación del yo.
- El juego como espacio simbólico o intermedio de experiencias entre el mundo interior y el mundo exterior
- El valor terapéutico del juego: el juego es terapéutico, favorece el crecimiento y estimula as relaciones grupales.
Constituye también una forma de comunicación en psicoterapia
- El juego en el origen de la experiencia cultural : la experiencia cultural surge a partir de la zona intermedia de
experiencias que existe entre el individuo y su ambiente.
JEAN CHATEAU: el juego como autoafirmación de la personalidad infantil, la afirmación del Yo. Se relaciona con el
afán del niño de perfeccionamiento y superación de dificultades. Esta afirmación del si mismo se manifiesta en el
juego de dos formas:
- La atracción del mayor: cuando juega el niño sueña con ser adulto.
- El gusto por e orden: en esta necesidad del niño por el orden se halla el origen del gusto por la regla. En la regla
el niño encuentra un instrumento mas seguro de afirmación de sí mismo. Sin embargo, el egocentrismo y su
incapacidad de ponerse en el lugar del otro son aspectos que obstaculizan el logro de la disciplina de reglas.
El juego como fuente de actividades superiores al hombre, como fuente de la cultura, de la ciencia, del arte, de
la religión. Muchas creaciones estuvieron inspiradas en juegos de niños, por ejemplo los fuegos artificiales o las
poesías o cuentos. De este modo, el juego se trata de una actividad de gran significación humanizadora. Por el
juego comienza el pensamiento humano.
El juego como medio de observación de la personalidad infantil: es un medio de análisis ya que sostiene que la
entrega total del niño al juego revela su vida moral, afectiva, motriz y social. Es donde muestra su inteligencia,
su voluntad, su carácter y personalidad. Como también reflejara en el sus deseos y sentimientos.
Algunos nuevos estudios contradicen un aspecto de su teoría, a saber las descripciones de las capacidades cognitivas
de los bebes y de los niños pequeños. El trabajo de Baillargeon, Cohen y Cashon, y otros, muestra que aspectos de
conceptos como la permanencia del objeto y la conservación aparecen mucho antes de los propuestos por Piaget.
Aunque las observaciones de Piaget reflejan una tendencia a subestimar la edad en que aparecen. La delimitación
clara entre las etapas es otro aspecto de la teoría que no ha sido apoyado por completo por estudios más recientes.
Respecto de las tareas de conservación más avanzadas, mientras las formas características de razonamiento se han
asociado con estrechos rangos específicos de edad, las edades en las que se resuelven problemas determinados
tienden a variar más de lo sugerido por el trabajo de Piaget. Algunas investigaciones sugieren que los niños pueden
aprender más de lo que Piaget suponía, dependiendo de la tarea y de la naturaleza de la instrucción que se les
proporcione.
La investigación también sugiere que los estudiantes de bachillerato en la actualidad quizá no demuestren las
habilidades de pensamientos operacional formal comparables con aquello mencionado por Piaget. Pero si se les
proporciona entrenamiento en estas habilidades, los estudiantes alcanzaran niveles más altos de razonamiento a
una velocidad más rápida que la establecida por Piaget.
Por último, se le ha criticado a Piaget por no considerar la influencia de la cultura sobre el desarrollo, ya que esta
tiene efecto dominante sobre el lenguaje, la experiencia y las interacciones de los niños. La teoría de Vygotsky
compensa esto con su acentuado énfasis en los factores culturales. La teoría de Piaget nos proporciona una
perspectiva general clara de cómo piensan los niños.
Lev Vygotsky estudio el desarrollo del pensamiento de los niños desde 1920 hasta el día de su muerte en 1937. El
propuso que los adultos contribuyen al desarrollo cognitivos de los niños al ayudarles a llevar a cabo tareas
desafiantes y hablar con ellos sobre esas experiencias. Vygotsky enfatizo la importancia de la sociedad y la cultura en
la promoción del crecimiento cognitivo de los niños, por lo que su teoría es considerada una perspectiva
sociocultural.
Vygotsky propuso que la interacción social con adultos, como padres y profesores, es la manera en que los niños
aprenden sobre los significados y las interpretaciones culturales asociadas con los objetos, los eventos y las
experiencias. El lenguaje, hablando o escrito, es lo que media entre las situaciones que se experimentan y los
significados que estas transmiten, pero también la música, el arte o varios tipos de símbolos pueden desempeñar ese
papel. Esto se considera construcción social (o construcción conjunta) de significados y representa el fundamento
del enfoque de Vygotsky.
Además del aprendizaje de significado, las herramientas cognitivas para la adquisición del significado también
provienen del proceso de interacción social, por medio de la internalización. Y como resultado de esta
internalización los niños comienzan a darse a sí mismos las instrucciones para guiar sus conductas, que hasta
entonces les daban otras personas. El pensamiento y el lenguaje inician como funciones independientes en los niños
pequeños; pero, finalmente se entrelazan. Lo que empieza como un discurso social (hablar a otras personas) se
transforma en discurso personal o discurso privado (hablar en voz baja con uno mismo) y por último, en discurso
interno (hablar con uno mismo mentalmente, en lugar de hacerlo en voz alta).
La conducta humana se ve afectada por la cultura. La cultura proporciona herramientas culturales, que incluye
herramientas técnicas (actúan sobre el ambiente) y herramientas psicológicas (facilitan el pensamiento) que se
transmiten de una generación a otra. Las herramientas culturales ayudan a los niños a dar sentido al mundo. Una
herramienta cultural importante propuesta por Vygotsky es el lenguaje, que los niños pueden usar para efectuar una
variedad de funciones mentales como la regulación de la conducta. El lenguaje en particular cuando se hablan a sí
mismos, brinda a los niños un medio para reflexionar sobre su propio pensamiento. Vygotsky afirmo que el
momento en que el lenguaje y la acción se integran es el más importante en el trascurso del desarrollo intelectual.
Zona de desarrollo próximo y andamiaje el papel de los demás en la facilitación del desempeño independiente.
Vygotsky distinguió entre el nivel de tareas que los niños pueden desempeñar sin ayuda (desarrollo real) y el nivel
de tareas que son capaces de desempeñar con la ayuda de otra persona más competente, por ejemplo algún adulto
o compañera (desarrollo potencial). Vygotsky llamo zona de desarrollo próximo al rango de tareas que se extienden
entre esos dos niveles. La base misma del desarrollo cognitivo, es la colaboración social entre los adultos y los niños
o entre los niños y otros compañeros más competentes con el fin de permitir a los niños completar con éxito las
tareas que se encuentran dentro de su zona de desarrollo próximo.
Lo que permite a los niños transitar de manera continua por su zona de desarrollo próximo, es la ayuda que brinda
otras personas, es decir, adultos como profesores o compañeros más competentes. Dicha ayuda con frecuencia se
proporciona mediante una técnica que se conoce como andamiaje.
Técnicas para enseñanza y el trabajo con niños y adolescentes a partir de las ideas de Vygotsky:
Proporcionar a los estudiantes tareas desafiantes: los estudiantes no entraran en una zona de desarrollo
próximo, ni será posible el andamiaje, si no se les confronta con tareas cuyo desempeño al principio requiere
asistencia.
Hacer que los estudiantes trabajan de manera cooperativa en las tareas: los compañeros más competentes
serás capaces de ayudar aquellos menos competentes.
Proporcionar modelos cognitivos a los estudiantes: estos modelos pueden ser profesores o compañeros a
quienes se los observa realizando tareas dando instrucciones verbales.
Proporcionar a los estudiantes oportunidades probables que experimenten en el mundo real: ayudan a los
aprendices a relacionar lo aprendido en la escuela con situaciones de la vida real.
Relacionar su estilo de instrucción con los antecedentes culturales de los estudiantes: Vygotsky enfatiza la
importancia del contexto cultural de los estudiantes, ya que el aprendizaje no ocurre aislado de aquel.
UNA TEORIA.
Piaget quiere proporcionar una explicación de la estructura y de los mecanismos ocultos que regulan las acciones del
niño, describiendo la evolución de sus procesos cognitivos. Dichos procesos tienen lugar en la mente del individuo
para adquirir información sobre el mundo y crear conocimientos.
Piaget por una parte se niega a aceptar que las estructuras de la mente simplemente se pueden heredar y transmitir
de un individuo a otro como si fuera algo innato e inalterable. También rechaza la posibilidad de que la mente y los
conocimientos contenidos se produzcan exclusivamente del entorno externo. Propone una teoría llamada
“organicista” en la que son importantes tanto las aportaciones internas como externas. El niño es un ser activo
porque explora el mundo que lo rodea y entra en contacto con un intercambio justo y enriquecedor: la persona
cambia el mundo tanto como el mundo cambia la persona.
El entorno y las características innatas se vuelven fundamentales en el desarrollo de la mente del individuo; según
Piaget, el niño nace con un patrimonio básico que le permite entrar en contacto con el mundo externo. Y el entorno
tiene el potencial de influir en el desarrollo del sujeto, porque cada acción que este cumple tiene un impacto en el
mundo que lo rodea. Nos encontramos frente a un elaborado proceso que se desarrolla durante el crecimiento, en
un entrelazado continuo y fértil entre el entorno y el individuo.
Las capacidades sensorio-motrices de cada persona y como tal innata, son el instrumento principal para comunicarse
con el entorno. El desarrollo mental va de la mano con el desarrollo físico: mente y cuerpo se influyen mutuamente,
por ejemplo: el niño empieza a conocer el mundo llevándoselo todo a la boca. Si el niño estuviese inmóvil y pasivo
no tendría manera de comunicarse con el mundo y no lo conocería. Esta teoría que explica la evolución y la
formación del conocimiento en un juego de intercambios entre individuo y entorno adquiere el nombre de
epistemología genética.La epistemología genética, fundada por Piaget, se centra en el estudio de origen y del
desarrollo de la mente y de los conocimientos. En esta teoría el niño entra en contacto con el entorno gracias a sus
propias estructuras mentales “primitivas” y a las capacidades sensorio-motrices que posee, en un intercambio que
permite el desarrollo de la mente, de los conocimientos y por lo tanto, de la inteligencia.
¿QUE ES LA INTELIGENCIA?
Los trabajos de Piaget empiezan en la observación en la familia (sus tres hijos), en donde además desarrolla su
método clínico, el cual consiste en una entrevista y en una observación estructurada del niño por parte del
investigador. Se le hace preguntas simples, aparentemente insignificantes, sobre como este capta algunos aspectos
de la realidad, por ejemplo: “¿Por qué se mueven las nubes?”. Se trata de deducir el funcionamiento de la mente a
través de las respuestas, logrando de esta manera de intuir el grado de desarrollo del pensamiento y de las
capacidades de razonamiento.
En la teoría piagetiana, la evolución constante de la mente del niño se corresponde con el desarrollo de su
inteligencia. Su teoría del desarrollo cognitivo es solo la explicación de cómo evoluciona la inteligencia, pasando a
través de varias etapas: desde los modos de pensamientos “mágicos” e irracionales típicos del niño, a los más lógicos
del adulto. Piaget considera que el desarrollo de la mente es solamente otra forma de adaptarse al entorno. La
inteligencia humana es una manifestación, entre las más nobles e importantes, de la adaptación biológica para
sobrevivir en el entorno.
Piaget traza un recorrido “universal” que todos los seres humanos recorren durante su crecimiento. Según él existe
un único orden posible, un único camino a recorrer. El recorrido que el niño cumple está constituido por escalones,
entre ellos estrictamente coherente pero profundamente diferentes el uno del otro. Cada etapa o estadio como lo
llama Piaget, tiene su origen en la etapa anterior. Los estadios son ventana temporal, un momento particular del
desarrollo, caracterizado por modos específicos de funcionamiento mental con los que el niño se acerca, actúa y
entiende la realidad. Se distingue claramente porque cada una está organizada según un modo de pensamientos y
conocimiento únicos e irrepetibles.
Cada recorre, sin duda con sus tiempos pero de una manera no modificable en el orden, las diferentes etapas del
desarrollo. ¿Por qué se caracteriza esta tendencia inusual, al mismo tiempo continuo y discontinuo? Según el
investigador la explicación se encuentra principalmente en la búsqueda natural de equilibrio que se pone en
movimientos en el organismo, que Piaget define como “equilibración”. El desarrollo mental es un “camino hacia el
equilibrio”. Para sobrevivir a estas demandas tiene que conseguir adaptarse al entorno, organizándose cada vez de
una manera diferente. El equilibrio siempre es temporal. El niño cambia el mundo que lo rodea, por eso el “orden”
de un periodo anterior no funciona para la etapa siguiente. Cada vez que se produce un cambio, el niño tiene que
volver a negociar con el entorno, para intentar alcanzar nuevas soluciones de supervivencia y un nuevo equilibrio.
Piaget imagina que existen funciones “invariables”, es decir, mecanismos generales de funcionamiento de la mente
presentes en cada etapa de desarrollo. Estas funciones le permiten al organismo adaptarse de una manera flexible a
los nuevos cambios, para que así el niño pueda conseguir alcanzar un equilibrio temporal y adecuado para la
situación en la que se encuentra. El investigador individualizada estos instrumentos en la capacidad de asimilación y
en la acomodación.
LA ASIMILACION
Proceso que permite llevar nuevos datos en el sujeto, colocándolos y organizándolos de acuerdo a las reglas de
funcionamiento mental del determinado estadio en el que se encuentra en ese momento. Gracias a la asimilación,
las informaciones y los conocimientos nuevos aprenden y se reordenan de acuerdo a los principios organizativos de
nuestras estructuras mentales. Esto significa que en este intercambio la estructura de la mente permanece
invariable, mientras que son las nuevas informaciones asimiladas las que se tienen que modificar para adaptarse a
los modos de funcionamiento del individuo. Con la asimilación, la tendencia es la del mantenimiento y la
conservación.
Piaget identifica dentro de este “mecanismo” diferentes tipologías de asimilación:
Asimilación genética: cuando estamos frente a un esquema “innato” que se ha revelado funcional y que se ha
transmitido de generación en generación.
Asimilación funcional: favorece la repetición de un determinado comportamiento en el momento en el que nos
damos cuenta de que de esto extraemos estímulos placenteros.
Asimilación generalizada: cuando aumenta los objetos con los que interactuar a través del mismo enfoque.
Asimilación recognitiva: aplicar un determinado esquema de comportamiento modificándolo parcialmente en
base al tipo de objeto que tenemos enfrente, para aumentar el control que estamos ejerciendo.
Asimilación reciproca de los esquemas: se reduce progresivamente la tendencia a la repetición de los
comportamientos, que aparecen gradualmente más complejos.
LA ACOMODACION
Al proceso con el cual las estructuras de la mente se modifican para dar cabida a nuevas informaciones externas. Con
la exposición a nuevas situaciones, a nuevos estímulos, la mente se encuentra obligada a cambiar para lograr
conocer y aprender mejor estas novedades. Las estructuras mentales que han organizado la mente del niño se
vuelven inadecuadas en un cierto punto para afrontar nuevos desafíos y nuevos cambios. Al crecer, el niño ya no
podrá limitarse a conocer los objetos “catalogándolos” en los esquemas que posee y en sus variables. Es el momento
de reorganizarse, de crear nuevas estructuras capaces de hacerlas saber y comprender mejor el mundo que les
rodea. Con la acomodación es la mente la que cambia para adaptarse a su entorno.
La acomodación es el proceso que impulsa hacia el cambio y la evolución. De esta manera la mente procede hacia
organizaciones cada vez más ricas y complejas, capaces de llegar a las formas de pensamiento y razonamiento más
refinadas de la edad adulta. Son los esfuerzos constantes para mantener el tan buscando equilibrio. Un equilibrio
justo de asimilación y acomodación es el instrumento que el individuo tiene a disposición para afrontar la situación
en la se encuentra. Estos dos mecanismos se activan durante todo el periodo de la existencia.
Piaget prevé etapas (llamadas estadios) que el niño atraviesa en su proceso de crecimiento, lo que siempre le
permite una mayor comprensión del mundo. Atravesar estas etapas significa alcanzar poco a poco una especie de
nuevo equilibrio precario.
cada una de estas etapas está dotada de su propia estructura, bien definida y delimitada por reglas de
funcionamiento y organización que son diferentes a las de los otros estadios, aunque presentan algunas
características comunes. Todos son sistemas bien estructurados, coherentes y unitarios en su interior.
Esta diferencia estructural hace que los estadios sean diferentes entre ellos: no solo cuantitativamente sino
también cualitativamente. El niño sabe más cosas durante el crecimiento, y además las conoce de una
manera nueva, más rica y más compleja. Los estadios de desarrollo no difieren por el número de nociones
que se asimilan, sino por los diferentes modos de funcionamiento y de organización de la mente.
Los estadios del desarrollo se integran jerárquicamente. Cada estadio engloba al anterior. Las adquisiciones
que el niño ha realizado en el estadio anterior no se pierden obligatoriamente, sino que se guardan y se
incorporan en el nuevo estadio en el que contribuyen a crear estructuras mentales más complejas y
evolucionadas. Aprende a conocer las cosas de una manera más profunda, entendiendo que se puede
interactuar de una manera diferente y más fructífera.
Los estadios del desarrollo se presentan con un orden universal e invariable en todos los sujetos. Piaget
sostiene que el desarrollo de la mente y de la inteligencia solo puede tener lugar en una única dirección,
atravesando determinadas etapas de exploración y de descubrimiento.
En esta etapa hay una ausencia de ideas de tiempo, espacio y realidad externa. El niño no tiene conciencia de
existencia, de ser algo único e irrepetible. Él vive momento a momento y en su mente no existe ni pasado ni futuro,
sino solo el presente, el momento único. El niño no es capaz de crear en su mente plano o proyectos a futuro.
Todavía no es capaz de decir cuando le gustaría volver a comer que juego preferiría jugar, para él solo existe el
momento presente. Y se centra solo en él mismo y sus sensaciones.
Cuando desaparece de su campo de visión, para el corresponde a un “cese de su existencia”. En su mente todavía no
están a disposición las palabras para pensar en las cosas en las personas. Los objetos llenan la mente de manera
temporal, después se desvanecen y se olvidan. Esta forma primitiva de inteligencia está constituida por esquemas de
acción, que corresponde a acciones muy simples y elementales. Acercándose a los dos años, estas acciones se
volverán cada vez más complejas y coordinadas. El niño aprende a mejorar su capacidad de hacer cosas prácticas,
actuar inmediatamente en la realidad que lo rodea, conociéndola de una manera elemental. Además también
aprende a familiarizarse con el pasado del tiempo y con las características del mundo en el que vive.
1° Subetapa el uso de los reflejos innatos: se corresponde con el primer mes de vida y en esta etapa, las
acciones que el niño ejerce en el entorno que le rodea están limitadas al uso de reflejos. El lactante pone en
práctica todos los modos de reacción que ha heredado al nacer para comunicarse con el entorno que le rodea.
Son reacciones innatas. Cada estimulo que proviene de fuera o del interior, impulsan al lactante a una reacción
espontánea y natural de respuesta. El niño empieza inmediatamente a ampliar su campo de acción. Trata de
aplicar cosas que sabe hacer en más ocasiones posibles y es así como conoce al mundo. El lactante aprende a
modificar los esquemas de acción que conoce para adaptarse mejor a los cambios. Por lo tanto, los reflejos se
tiene que probar varias veces para conseguir adaptarse realmente al entorno. Esto se puede considerar como
las primeras formas de asimilación y acomodación. Esta subetapa se caracteriza por la completa ignorancia del
mundo que lo rodea, el niño vive en un egocentrismo radical, en donde hay una falta de conciencia de sí mismo
y de los demás, solo se centra en sus necesidades y en sus sensaciones.
2° Subetapa repetir los descubrimientos interesantes: ocurre entre el primer y cuarto mes. El niño al crecer
descubre por casualidad comportamientos que generan consecuencias positivas e interesantes en él. Después
del descubrimiento de un efecto placentero, el niño tendera a repetir esa acción para obtener esas sensaciones.
El descubrimiento que el niño efectúa en esta etapa concierne a todas las acciones que suceden en su cuerpo y
es por ello que son primarias. Todavía se encuentra centrado en sus sensaciones y no tiene muy en cuenta el
entorno que lo rodea. Sin embargo ha podido mejorar sus acciones porque ha aprendido que el mundo exterior
constantemente le pone adelante situaciones nuevas. La oportunidad de ejercitarse en el uso de los reflejos es
lo que le permite mejorar. Al tener la oportunidad de actuar, el niño perfecciona cada vez más su control en los
movimientos y en los comportamientos, adquiriendo, con la práctica cada vez más dominio sobre las acciones
que tiene que hacer para proceder de una manera satisfactoria y convirtiéndose en dueño de sus propios
comportamientos, con el fin de coordinarlos y regularlos a su voluntad.
3° Subetapa se amplía el espacio para nuevos descubrimientos: entre los cuatro y ocho meses de vida, el niño
empieza a mostrar interés por el mundo que lo rodea. Continúa su trabajo de experimentación y de
conocimiento, pero ya no se centra de manera exclusiva en su cuerpo, sino que amplía su entorno. Por
casualidad es el niño que logra los comportamientos que traen nuevos resultados interesantes y agradables. Y
trata de repetirlo de manera regular. Esta subetapa es secundaria debido a que el interés se encuentra en el
exterior. Los objetos ya no se utiliza para crear consecuencias en sí mismo sino en el entorno: sacudo, lanzo,
tiro, etc. Se trata de esquemas primordiales de comportamiento que el niño descubre, construye, ejerce y
mejora con el tiempo. Todavía no se puede hablar de acciones guiadas por voluntad, sino que por casualidad se
lanza o se desplaza y se produce ese sonido agradable que se trata de repetir. El niño amplio el campo de
descubrimiento de su propio cuerpo al mundo que le rodea porque obtiene un mayor dominio de sus propios
movimientos. Consigue gestionar cada vez mejor sus propios intentos de aferrar e interactuar con los objetos
4° Subetapa hacer las cosas que conozco en situaciones nuevas: se da entre los ocho y doce meses. El niño
consigue recurrir a todas aquellas prácticas que ha adquirido y las pone en práctica crenado estrategias para
“superar” situaciones nuevas. Las capacidades que ya posee, como la de aferrar y lanzar un objeto, vuelven a
ser útiles. El niño ha conseguido entender que, juntando más esquemas de comportamiento, puede lograr
objetivos más complejos. Ha descubierto la “relación medios y finalidades”, logrando entender que puede
utilizar una determinada acción como instrumento, o como un medio para lograr un fin. En estos
comportamientos se empieza a vislumbrar una primera intención que cada vez actúa menos por casualidad.
También es capaz de referirse a acontecimientos del mundo exterior para imaginarse lo que sucederá.
5° Subetapa el descubrimiento de nuevos medios, divirtiéndose experimentando: entre el año y el año y medio
el niño se enfrenta a diversas novedades. El niño ansia experimentar situaciones nuevas y encuentra
instrumentos y comportamientos igualmente innovadores. El niño se encuentra con nuevos posibles esquemas
de comportamiento que se consideran interesantes, y que no solo intentara repetirlos sino también
modificarlos para entender lo que ocurre. Él experimenta de manera activa nuevos comportamientos o nuevas
soluciones para todas las situaciones en las que se encuentra. El niño dirige los experimentos, comprobando si y
como se modifican los nuevos comportamientos. Se aportan modificaciones y cambios en la acción que se ha
descubierto. Hay tres instrumentos de relación con el mundo:
Conducta de soporte: el niño acerca un objeto que le interesa tirando hacia él el soporte en el que está situado.
Conducta de la cuerda: el niño toma y tira de un cable o de una cuerda que esta enganchada en el extremo de
un objeto que desea para poder tomarlo.
Conducta del palo: el niño utiliza otro objeto como una extensión de su mano para alcanzar algo que está lejos.
6° Subetapa inventar medios nuevos pensando: entre los dieciocho y veinticuatro meses, el niño continúa
incesantemente sus actividades de experimentación de la realidad. Lo que cambia es la manera en la lo hace.
Piensa que comportamientos es mejor para determinada circunstancia: se imagina mentalmente la escena y
decide que hacer. Proyecta y después actúa. Deja de ser un investigador para convertirse en un creador. El niño
es capaz de imaginar y anticipar los resultados de sus comportamientos y, por lo tanto, de asumir un fracaso o
éxito. Poder imaginar y anticipar los acontecimientos significa que en la mente del niño ahora existe un
recuerdo de los diferentes comportamientos. Una vez imaginados, se pueden recordar, pensar y aprovecha
para elaborar planes e intentos a nivel teórico. Ahora tiene los instrumentos para poder inventar un nuevo
esquema de comportamientos, sin la necesidad de practicar entrenar concretamente en el entorno, sino que
puede lograr la solución en los primeros intentos.
Hasta los dos años, el niño no conoce las propiedades del mundo real, no sabe cuáles son las características propias
de los objetos y de las personas. El niño aprende todas estas informaciones a través de la experiencia, viviendo y
conociendo el mundo. Durante el estadio sensorio-motriz, el niño adquiere gradualmente todos los conocimientos
relacionados con las características del mundo exterior. En particular, el concepto de permanencia del objeto (los
objetos continúan existiendo aunque no se puedan ver). Esta adquisición se produce a través de una serie de pasos
iguales para cada uno:
Desde los 0 a hasta los 4 meses, el niño sigue el objeto hasta que es capaz de verlo, entonces pierde el interés y
no lo busca. Luego se limita a observar durante más tiempo y espero en donde el objeto ha desaparecido.
Desde los 4 hasta los 8 meses, el niño es más activo y capaz, logra alcanzar un objeto y buscarlo si está
escondido y se adapta para superar obstáculos. Todavía no es capaz de buscar objetos en diferentes lugares
desde donde se ha escondido.
Desde los 12 hasta los 18 meses, el niño ya es capaz de buscar un objeto en su último escondite. Tiene que
atender a todos los movimientos del objeto.
Desde los 18 hasta los 24 meses, el niño ya es capaz de buscar objetos también en escondites que no ha visto,
sino solo intuido.
Es solo alrededor de los dos años que el niño por fin entiende que en la realidad existen personas y objetos con un
cuerpo que ocupa un espacio y que duran en el tiempo. Entiende que estas características básicas del entorno que le
rodea se aplican siempre, no solo a los objetos y personas que ve. También empieza a entender que las cosas no
siempre están vinculadas a él, es decir, que la realidad no es consecuencia exclusiva de sus acciones.
EL ESTADIO PREOPERATORIO
Este estadio se da, según Piaget desde los 2 a 6-7 años de vida, el periodo preescolar, cuando el niño logra imaginar
la realidad en su mente. Lo que indica el paso a esta etapa es el es la conquista de los conocimientos básicos de los
objetos, lo que le permite al niño el contacto con el mundo. La resolución de los problemas, los juegos (cabalgar sin
encontrarse montando) y las imitaciones (alguien pasando la aspiradora) los obtiene pensando e imaginando, es
decir, actuar no solo físicamente, sino también mentalmente.
La estructura mental que le permitirá conocer el mundo es EL ESQUEMA MENTAL: estructura cognitiva, modo de
organización y funcionamiento de la mente que le permite al niño imaginar y actuar, no solo físicamente, sino
también con el pensamiento y la imaginación, estos instrumentos le permiten representar dentro de sí mismo la
realidad. Este estadio del desarrollo incluye los siguientes potenciales:
EL JUEGO SIMBOLICO: Alrededor de los dos años los niños comienzan a utilizar cualquier objeto para
inventar juegos fantasiosos. Ej: una escoba se convierte en un caballo. El niño es capaz de jugar utilizando
símbolos, el niño se olvida de la función real de ese objeto y lo transforma en otra cosa, que sea útil para el
juego, que se adapte a lo que esta imaginando en su mente, aunque ignore la verdadera función del objeto.
LA IMITACION DIFERIDA: a partir de los dos años, el niño puede imitar las acciones típicas del adulto, por
ejemplo: prepararse para ir a trabajar o regañar al perro. Esta, es la capacidad de copiar un comportamiento,
no en el momento en el que lo ve, sino mas adelante en le tiempo, esta es muy importante para el
aprendizaje, antes de esta etapa, el niño imita como i fuera un espejo, con un molde delante.
El LENGUAJE: Otro logro fundamental de esta etapa, como consecuencia de la evolución del pensamiento, y
como herramienta para expresar el mismo. Capacidad de utilizar las palabras, símbolos, pensar e imaginar
para contarse y contar el mundo que nos rodea. Este le permitirá pedir lo que desea, recordar realidades no
presentes y los juegos que ha visto y que desea. Al principio, el lenguaje no será utilizado para comunicarse
con los demás, sino que el niño hablara solo para si, como en un monologo, con el tiempo, su habla se ira
pareciendo al de los adultos.
EL NIÑO EN EL CENTRO DEL MUNDO: El niño está interesada en el mundo que lo rodea, juega, corre, imita y
habla.En esta etapa predomina el EGOCENTRISMO CULTURAL: en esta epata, el niño todavía este concentrado
en sí mismo, esto es la falta de conciencia de la existencia de los puntos de vista diferentes de los propios.
Considera su propia manera de ver e imaginar la realidad y cree que esta es siempre la misma. Según el
investigador, esto es consecuencia del funcionamiento primitivo de la mente del niño, todavía incapaz de
considerar mas de un pensamiento a la vez. Por ejemplo, incapacidad de pensar en querer salir al jardín, sin
considerar que hay una tormenta que lo impide.
EL EXPERIMENTO DE LAS TRES MONTAÑAS: Jean Piaget empleo el experimento de las tres montañas para
comprobar si los niños eran egocéntricos.El niño se sienta al frente de una mesa, en la cual hay tres montañas. Cada
una de las montañas es diferente, una tiene nieve, otra tiene una choza en la cima y la ultima una cruz roja encima.
Al niño se le permitió caminar alrededor del modelo, mirarlo y luego se sienta a un lado. A continuación, se coloca un
muñec en varias posiciones de la mesa.
A continuación, se muestra al niño fotografías de las montañas tomadas desde diferentes posiciones y se les pide
que indique cuál muestra la perspectiva de las muñecas.
Los niños de los 2 a 6 años seleccionaron una imagen que representaba lo que ellos mismos podían ver y no
mostraban ninguna conciencia de que la visión que tendría el muñeco. Cuanto un niño tiene una perspectiva
egocéntrica asume que las demás personas verán la misma vista de las tres montañas que ellos tienen. La
explicación de Piaget es que los niños a esta edad no consiguen imaginar la perspectiva de los demás.
Solo a los 8 o 9 años, el pensamiento ya no es egocéntrico, puesto que el niño ya es capaz de ver más allá de su
propio punto de vista, e indicar cual es la fotografía correcta desde la posición del muñeco.
EL PENSAMIENTO PREOPERATORIO
Esta etapa, y a diferencia de la anterior, rl pequeño esta menos vinculado a las cosas que ve y percibe, pero todavía
esta dotado de un pensamiento intuitivo y carece de sentido lógico, a pesar de los logros obtenidos, todavía esta
muy lejos del adulto. El pensamiento es pre lógico e intuitivo, es un pensamiento que viene antes de la lógica, como
si las respuestas se diesen siguiendo el instinto y la poca experiencia en el mundo, no es capaz de reconocer por
ejemplo que, si ponemos en 4 macetas, 1 margarita, y luego agrupamos en un ramo las mismas, sigue habiendo
tantas margaritas como macetas, no es capaz de reconocer un conjunto de varios elementos.
El esquema mental, es decir, la organización y el pensamiento de la mente en este periodo es rígido y poco flexible,
cada pensamiento esta separado de los demás y se caracteriza por la irreversibilidad. El pensamiento no opera
lógicamente y no puede pensar en lo que sucedió antes, de esta manera cada pensamiento se aísla y se desconecta
de los demás.
Son Pequeñas pruebas que estudio Piaget para mostrarEsta incapacidad del pensamiento de volver sobre sus
propios pasos y los pasos lógicos de una determinada situación. Problemas elementales con el objetivo de:
Probar la edad en la que el niño deja de esta caracterizado por la irreversibilidad, y empieza a tener
consideración (conservación) las transformaciones que puede hacer frente a la realidad.
Esta adquisición depende del modo en que el niño consigue conectar los pensamientos y las imágenes mentales
entre ellos. Por lo general, los niños del pensamiento preoperatorio, no consiguen responder de manera correcta a
las preguntas que se plantean en esta tarea de conservación. Esto es señal de un pensamiento rigido y poco flexible,
influenciado por las informaciones visuales. Solo el pensamiento flexible y evolucionado del estadio de las
operaciones concretas le permitirán resolver estos problemas.
ANIMISMO: al comparar los objetos que lo rodean, el niño preoperatorio pone en práctica una tendencia a
atribuirle un alma a los objetos, con pensamientos y pensamientos humanos. Entre los 2 y los 6 años, los niños
no entienden la deferencia entre las personas y los objetos inanimados.
ARTIFICIALISMO: la convicción de que todas las cosas que ven en el mundo, tanto objetos, como elementos
naturales, las ha creado el hombre. (casas, montañas, lagos, animales, astros)
FINALISMO: el niño cree que todas las cosas en el mundo ocurren por una razón, siempre tiene que haber un
motivo del porque de las situaciones y de los comportamientos de los objetos y de las personas. A menudo
buscan explicaciones fantásticas y surrealistas, (la pelota que pego en la pared le quería hacer daño)
Estos se funden en el discurso del niño y son pensamientos característicos del pensamiento preoperatorio.
REVERSIBILIDAD: permite hacer razonamientos lógicos, consiste en un razonamiento, de que para cada acción
también existe un contrario, que le permite volver a la situación inicial metal o físicamente. Esto es lo que
transforma el pensamiento del niño, preoperatorio, mágico en el pensamiento lógico de las operaciones concretas.
La reversibilidad, ha sido estudiada por Piaget, a través de las tareas de conservación.
Tareas de conservación
Alrededor de los 9-2 años, hacia el final del periodo de las operaciones concretas, responden bien a las preguntas,
pudiendo razonar sobre las situaciones que le presentan. Obviamente que cada niño lograra desarrollar el
razonamiento correcto a su momento, o en diferentes edades gracias a sus características personales y las
experiencias que haya tenido. A esto lo llamo Decalages: adquisición en distintos momentos de algunos conceptos,
competencias y nociones, aunque se regulen en el mismo funcionamiento mental que caracteriza la etapa del
desarrollo en la que se encuentra. Por ej: el concepto de número se adquirirá antes que el de longitud.
SERIACION Y CLASIFICACION:
En este estadio, el pensamiento es capaz de comparar y organizar elementos del mundo en diferentes grupos y
subgrupos de objetos y organizarlos de acuerdo con características particulares. Por ejemplo: que cranes y pastas
son alimentos, comparar las alturas y decir que Marco es más alto que Luca. Piaget habla de clasificación (capacidad
para organizar, clasificar) el mundo en agrupaciones de objetos que comparten características parecidas y las
relaciones que existen entre ellos; y seriación: (capacidad de organizar los objetos en base a ciertas características:
longitud, peso, altura y velocidad), a través de esta, es posible poner en orden, del mas bajo al mas alto en los
alumnos de la clase.
El investigador le muestra al niño palitos de madera con longitudes diferentes y le pides que los ordene del más bajo
al más alto.
Niños del estadio Preoperatorio: no se consigue una secuencia, porque el niño no se da cuenta de la diferencia de
alturas, solo la hace de a dos palitos, uno mas largo y otro mas corto.
Niños en el final del estadio Preoperatorio: hacia los 6 años, comienzan a alinear los palitos del más alto al más
bajo, procediendo por intentos, toman 2 o 3 y si no sigue la secuencia, vuelven a empezar.
Niños del estadio de las Operaciones Concretas: el niño es capaz de ordenar todos los palitos, desde el más corto, al
más largo, desde una verdadera secuencia ordenada y puede añadir palitos a la secuencia. Este resultado es posible,
gracias a un pensamiento más flexible y evolucionado.
EL NUMERO: La nueva capacidad para ordenar el mundo, también le permite entender mejor el significado del
número. Puede contar de manera correcta un grupo de elementos y conoce la secuencia de los números, además,
con el tiempo puede hacer operaciones matemáticas básicas. Entiende que el número es inventado por el hombre
para organizar el mundo, dividiéndolo, ordenándolo y cuantificándolo.
EL ESPACIO Y EL TIEMPO: los niños adquieren de manera completa el significado y la noción de tiempo y espacio y
velocidad, estos son conocimientos que el sujeto construye con el tiempo, a través de su capacidad de explorar y las
experiencias que el mundo le presenta, a través de mecanismos de asimilación y acomodación que le permiten
pensar y razonar en el espacio (fuera, dentro, arriba, abajo), y el tiempo (antes, después, el orden de los
acontecimientos, etc).
Fase oral: (desde el nacimiento hasta el año o año y medio). La libido se organiza bajo la zona erógena de la
boca y de los labios. Esta zona no solo brinda la satisfacción de alimentarse sino también el placer que conlleva el
movimiento de succión en sí, que es estimulado por el pezón, el chupete, la mamadera y el dedo del bebé.
La succión es de gran importancia ya que es el lanzamiento de la vida sexual y el ideal de toda satisfacción sexual
ulterior. El pecho materno se constituye como el primer objeto de impulso sexual.
Tanto la función alimenticia como la actividad sexual, poseen un similar objetivo: la asimilación del objeto, base de lo
que luego será el modelo para los procesos de identificación e introyección.
Fase anal: (entre el año y medio y los tres años). La libido se organiza en función de la zona erógena del ano.
El placer está relacionado con la expulsión y la retención de las heces.
Karl Abraham establece que el erotismo anal se liga al sadismo de destruir al objeto o de controlarlo y dominarlo, es
el momento del desarrollo psicosexual en el cual las niñas y niños ofrecen o niegas sus heces al otro, en tanto
simbolizan regalo.
En esta fase los niños intercambian el placer pulsional por la dignidad social, esto es, el otro, habitualmente la
madre, decide que comiencen a controlar sus esfínteres, ante lo cual se produce la renuncia a la satisfacción
pulsional con la intención de conservar el amor materno.
Fase fálica: (3 a 5 años). Las pulsiones parciales comienzan un proceso de unificación bajo la primacía de los
órganos genitales. Se produce el descubrimiento del placer que generan los órganos genitales a partir de su
manipulación, el niño valora al pene como símbolo de poder.
Los niños empiezan a interesarse por cuestiones acerca de la diferencia de los sexos y el nacimiento de los seres
humanos, recurriendo a diversas teorías para dar respuesta a este enigma.
En esta fase, el niño sostiene que todas las personas poseen o deberían poseer un falo, la diferencia de los sexos se
asienta en la diferenciación entre quienes tienen y quienes no (castrados). A partir de aquí da comienzo al Complejo
de Edipo, en el caso de los varones, el objeto de pulsión es la madre, este manifiesta deseos incestuosos hacia ella,
deseos irrealizables por la intervención del padre en tanto representante de la norma cultural. Frente al padre, el
niño suprime sus impulsos incestuosos por medio de una identificación con él, abriendo la posibilidad de encontrar
un futuro fuera del entorno familiar.
En el caso de las mujeres, el objeto de pulsión es la madre en un primer tiempo y posteriormente el padre, la
decepción que le produce comprobar que no posee el ansiado falo dará paso a la envidia del mismo. La envidia fálica
dará lugar al deseo de tener un hijo del padre, al no ser esto posible por la imposición de la ley de prohibición del
incesto, este deseo se transformará en deseo de un hijo de un hombre elegido por fuera de los límites endogámicos.
El tránsito por el complejo de Edipo será crucial para la identidad sexual adulta, pero diferirá en el acceso y salida del
mismo, el varón sale del complejo por medio de la angustia de castración, en cambio la mujer ingresa al complejo
sintiéndose castrada y la salida lo hará por medio de la envidia y la angustia de perder el falo que es el amor del ser
amado.