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Esencia
Esencia
Todos los días al despertar, nos levantamos y preparamos aquello que más nos gusta,
como por ejemplo: “tomarnos un café”, no solamente nos ayuda a despertar, sino que
también cambia el aroma de la casa y su olor anuncia que es hora de comenzar nuestro
día.
Asimismo, para la mayoría de los seres humanos hay aromas que se vuelven
indispensables como lo es un perfume.
A todos nos gusta oler bien para deleite propio, pero también para beneficio de los
demás.
El término aroma:
Hacer referencia a los olores o esencias que pueden ser detectadas tanto por
hombres, como por animales a través del sentido olfativo.
2 Corintios 2:14-16
14 Así que, ¡gracias a Dios!, quien nos ha hecho sus cautivos y siempre nos
lleva en triunfo en el desfile victorioso de Cristo. Ahora nos usa para difundir
el conocimiento de Cristo por todas partes como un fragante perfume. 15
Nuestras vidas son la fragancia de Cristo que sube hasta Dios, pero
esta fragancia se percibe de una manera diferente por los que se salvan y los
que se pierden. 16 Para los que se pierden, somos un espantoso olor de
muerte y condenación, pero para aquellos que se salvan, somos un
perfume que da vida…
Cuando compramos un perfume, una crema, o una esencia para nuestro hogar lo
primero que hacemos es olerlo, y escogemos el aroma que más nos gusta.
“Olor de Vida”
¿qué significa olor de vida? Somos portadores de vida por medio de Jesucristo que
vive en nuestro corazón y Él es suficiente para cambiarlo todo por completo.
Romanos 8:11
El Espíritu de Dios, quien levantó a Jesús de los muertos, vive en ustedes…
Las moscas son insectos invasores, los cuales no respetan posición o lugar, hasta en la
mansión más lujosa si encuentran espacio entran.
También hay cosas al igual que las moscas, son lanzadas a nuestra vida para hacernos
daño.
El libro de Gálatas cap. 5 nos da una lista de las obras de la carne que muchas veces
vienen a ser como una mosca, se manifiestan sin pedir permiso tales como: celos,
envidia, chismes, contiendas, ira, críticas, entre otros; y el pueblo de Dios no es la
excepción.
Debemos bloquearle el paso a aquellas cosas que nos hacen lucir y oler mal delante de
Dios, nuestras palabras deben ser las adecuadas, nuestras acciones tienen que ser
buenas, nuestro corazón debe estar lleno de amor y respeto hacia nuestro prójimo.
Vale la pena luchar para que no nos falten, sin uno de ellos no oleríamos bien delante de
Dios ni tampoco delante de los hombres.
no olvides el perfume más caro que existe eres tú mismo, valora y cuida tu vida “Para
Dios Somos Olor Grato”.