Contienen disulfuro de carbono (CS2), en las diversas partes del proceso, principalmente
en la formación del xantato y luego en viscosa. En general, se producen hidrocarburos
volátiles, provenientes de los solventes utilizados en la producción de los diferentes tipos de resinas y plásticos. Enorme consumo de agua y elevadas cargas contaminantes (sal de cobre y amoniaco). El daño ecológico que los procesos de tratamiento de blanqueado, tintado, estampación y acabado producen en el entorno son muy graves. Generan residuos y no tienen capacidad de biodegradarse, puesto que son subproductos del petróleo, y se descomponen muy lentamente.