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Universidad Galileo

Licenciatura en administración de empresas


Curso: Globalización
Análisis de caso

El 'caso Madoff' - Un fraude gigantesco


150 años de cárcel para el mayor estafador de la historia

El ex gurú de Wall Street defraudó a miles de personas por más de US$ 50 mil millones.
El ex inversor estadounidense y gurú de Wall Street, Bernard Madoff, fue condenado ayer a
150 años de prisión en una corte de Nueva York por haber llevado a cabo la mayor estafa
financiera de la historia."Viviré con este dolor, con este tormento, el resto de mi vida",
lamentó Madoff ante un puñado de sus víctimas que asistió al tribunal.
Cumpliendo con el pedido de la Fiscalía, el juez Denny Chin dictaminó la máxima pena
posible para Madoff. El magistrado se refirió a un fraude "sin precedentes en este siglo" y
consideró necesaria una pena "con carácter ejemplar". El caso no tiene precedentes. Ayer,
tras escuchar la sentencia, quien fuera uno de los hombres más respetados de Wall Street no
encontraba las palabras para disculparse con las miles de víctimas a las que estafó, en un
fraude de 50.000 millones de dólares.
"Lo siento, aunque sé que eso no les ayuda en nada", dijo Madoff dirigiéndose a los afectados
presentes en la sala. "Cometí un terrible error. No puedo pedir perdón por mi
comportamiento. ¿Cómo pide perdón quien ha engañado a quien ha sido su esposa durante
50 años? ¿Cómo pide perdón quien ha engañado a cientos de empleados?", dijo el financiero.
Madoff, de 71 años, buscaba a sus víctimas en el club de golf de Florida o en actos de
beneficencia. Ellos le confiaban su dinero, algunos millones o más, y él se ocupaba de
procurar intereses increíbles y estables. Considerado un genio de Wall Street, encontrar
clientes le era fácil. Pero la promesa de hacerlos ricos era una defraudación: según los
investigadores, Madoff no realizó ninguna inversión. Con el dinero de nuevas víctimas
pagaba las ganancias de quienes le habían confiado su dinero antes. La crisis financiera
derrumbó el castillo de naipes, cuando los inversores comenzaron a retirar importantes
montos.
La estafa se reveló el 12 de diciembre, cuando la tapa del Wall Street Journal denunció los
delitos de Madoff, denunciados por sus hijos Mark y Andrew.
Madoff, ex director de la Bolsa de Valores tecnológica, el panel Nasdaq, fue arrestado y
liberado con una caución de 10 millones de dólares, hasta que fue procesado y llevado al
juicio que concluyó ayer. "No puedo ofrecer una excusa por mi comportamiento", dijo ayer
con voz calmada. "¿Cómo pedir perdón por traicionar a miles de inversores que me confiaron
sus ahorros de toda la vida?", agregó.
El ex inversionista se declaró culpable de los 11 cargos que le imputaban por la estafa
piramidal que dejó afectados en todo el mundo.
Nueve víctimas, en representación de todas, tomaron la palabra durante la sesión de ayer,
dando rienda suelta a todo su odio. Calificaron a Madoff de "bestia" y "monstruo". Resulta
difícil que recuperen su dinero. Se considera que la mayor parte de los fondos se perdió.
Además, la condena de ayer no resuelve la situación de las víctimas que siguen esperando
recuperar algo. La familia de Madoff no compareció ante el tribunal. Sus dos hijos no cruzan
palabra con él desde diciembre. Ellos también trabajaban en la compañía de su padre y junto
con Ruth, la esposa de Madoff, estaban al margen de sus procedimientos, lo mismo que el
resto de los empleados. Tras la sentencia, Ruth Madoff, rompió el silencio: "Como todos, me
siento estafada", escribió en una declaración. "El hombre que cometió este horrible defalco
no es el hombre a quien conocí durante todos estos años", subrayó.
La familia llevaba una vida lujosa en un penthouse de Manhattan, en palacetes y lujosas
embarcaciones, algunas valuadas en más de 80 millones de dólares. A la esposa de Madoff
se le permitió conservar 2,5 millones de dólares, pero la vida que solía llevar entre la alta
clase neoyorquina se ha terminado.
¿En qué estribó la genialidad de Bernie Madoff? En ocasiones parece que tenía que ver con
la técnica financiera: “En realidad, el fraude no era tan evidente. Muchos inversores
competentes y profesionales han perdido dinero en ese caso, y es demasiado fácil decir que
son todos unos ineptos, incompetentes, o corruptos”. Pero no se trata de eso, se trata de creer.
El mecanismo de Madoff era una pirámide de Ponzi, donde la rentabilidad es pagada no por
los activos en que se invierte sino por los aportantes al fondo (como la Seguridad Social, por
cierto). La técnica no era financiera sino personal: mentir y ser creído. Esto es lo que hacía
Madoff con mucha destreza, como lo prueban los interesantes relatos de inversores que se
relacionaron personalmente con él.
Además de su larga experiencia, impecables antecedentes, cuidada vida social y copiosas
donaciones benéficas, Bernard Madoff pagaba a sus inversores todos los años una
rentabilidad no espectacular (lo que habría levantado sospechas mucho tiempo antes) pero sí
respetable y sobre todo estable. En eso radicó el genio malévolo de Madoff, en un atractivo
punto medio entre dos pasiones naturales de los inversores: la esperanza de ganar y el temor
a perder: “Por un lado, despertó lo suficiente el deseo de beneficio de sus clientes para
atraerles con un rendimiento anual superior al diez por ciento. Sin embargo, y al contario que
el resto de defraudadores, lo hizo sin proponer un rendimiento demasiado alto como para
despertar el miedo ante el riesgo”. El mérito de El Caso Madoff. Los secretos de la estafa del
siglo no es tanto su andamiaje teórico, insatisfactorio e ingenuo en ocasiones, como su
aproximación a la persona de Madoff, a su vida y a los testimonios de quienes le conocieron.
Todo esto es mucho más importante para entender el fraude que la supuesta sofisticación de
la estafa, que en realidad no existió: todo es muy fácil de entender si se logra superar la
verdadera traba que explicaba todo el sistema: la mentira. En el libro de Amir Weitmann se
incluyen unas notables páginas en el Anexo con la fría confesión del propio Bernard Madoff
ante el juez que finalmente lo condenó a morir en la cárcel: “cuando empecé a establecer el
esquema de Ponzi creía que sería por un corto periodo de tiempo y que conseguiría salir de
él y sacar a mis clientes del sistema. Sin embargo, resultó difícil y al final imposible, y con
el paso de los años comprendí que mi arresto y este mismo día tenían que llegar sin remedio”.

En base a la lectura realizada analice y responda las siguientes interrogantes:


1. ¿Cuáles son los valores Individuales que se violaron en este caso?
2. ¿Cuáles elementos de control no se aplicaron en el caso y por qué?
3. ¿Analice y determine si otras empresas o instituciones están involucradas en este caso?
4. ¿Qué sanciones deberían recibir los responsables de este caso?
5. ¿Es justificada la remuneración económica para la esposa del responsable?
6. ¿Qué procedimientos se deberían de establecer para evitar futuros casos similares?

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