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INFLUENCIAS DEL MEDIO SOCIAL EN LA EDUCACION

Por Neiva Chaparro

La influencia del medio social sobre el individuo está mediatizada por la personalidad de este,
en cuya constitución participan de un lado los elementos hereditarios o congénitos y del otro
los influjos ambientales, estando ellos compuestos por: el medio físico, el medio cultural, social
y los grupos en los cuales el individuo interviene como elemento constitutivo de él.

Todo esto lleva al individuo a una socialización para poder cumplir su obra de trasmisión de
modelos, valores y símbolos.

La personalidad es el término con el que se designa lo que, de único, singular tiene un individuo
y las características que lo diferencian de los demás.

La personalidad está influenciada tanto por aspectos biológicos como ambientales dados en la
crianza y en la interacción con el medio. La personalidad de una persona aparece de la mezcla
de lo genético y su entorno. Los rasgos de la personalidad se empiezan a formar desde la infancia
y las etapas anteriores a la adultez.

Los determinantes biológicos de la personalidad es toda la información genética del individuo.

Los determinantes sociales son todas aquellas conductas aprendidas del entorno ya sea que se
incorpora por medio del aprendizaje o el reforzamiento a los patrones genéticos existentes.

CIRCUNSTANCIAS AMBIENTALES EN EDUCACION

Las acciones de un individuo en un ambiente social responden a expectativas propias de ese


medio.

Nos encontramos en un mundo global en el que se enfrentan profundos y rápidos cambios la


sociedad acorde a las situaciones que se van presentando, por lo tanto el sistema educativo
debe de evolucionar, por lo tanto “los cambios en la sociedad requieren cambios en la
educación”.

El ambiente rural: los niños y adultos de las áreas rurales, la mayoría son pobres, tienen muy
limitadas las oportunidades de obtener una educación básica que los ayude a romper el ciclo de
la pobreza. Los niños de las áreas rurales generalmente tienen menos...

Influencia social en la educación:

El ser humano construye realidades sociales, desde el punto de vista de cada sujeto y a través
de las interacciones va creando interpretaciones sobre lo que es real o no, o más importante
aún y fundamental para cada individuo como es la realidad.
Esta realidad social nos genera formas de actuar, de relacionarnos y conocer. Puedo señalar que
la procedencia social y cultural influye sobre la EDUCACIÓN y por ello también sobre el
funcionamiento INTELECTUAL. Al hablar de sociedad, en como ésta influye sobrela educación,
llegamos al tema del mundo que el niño crea, conoce o simplemente las prácticas educativas
que el sujeto ha tenido antes de entrar a la escuela, estas prácticas marcan la diferencia de
manera significativa y refuerzan la desigualdad en el sistema educativo. Prácticas educativas las
cuales son fundamentales en la educación, estas restringen el acceso al conocimiento a las
distintas clases sociales más bajas existentes en el mundo.

La influencia del medio social sobre el individuo está mediatizada por la personalidad de este,
en cuya constitución participan de un lado los elementos hereditarios o congénitos y del otro
los influjos ambientales, estando ellos compuestos por: el medio físico, el medio cultural, social
y los grupos en los cuales el individuo interviene como elemento constitutivo de él.

Todo esto lleva al individuo a una socialización para poder cumplir su obra de trasmisión de
modelos, valores y símbolos.

La personalidad es el término con el que se designa lo que de único, singular tiene un individuo
y las características que lo diferencian de los demás.

La personalidad está influenciada tanto por aspectos biológicos como ambientales...

REPERCUSIÓN DE LAS CIRCUNSTANCIAS AMBIENTALES EN LA EDUCACIÓN.

Conocemos por "ambiente" al conjunto de estímulos culturales no directamente


educativos con los que entra en contacto la persona por el hecho de estar en un lugar y tiempo,
de abrirse a la vida (GARCÍA YAGÜE y LÁZARO, 1971: 15 en QUINTANA CABANAS, 1990: 111)

a) El contexto social como determinante de los sistemas educacionales.


Es bien patente el influjo que ejerce el medio social en los individuos, y, por tanto, en su
educación. Un análisis diacrónico de las formas educacionales de cada lugar, época o
pueblo nos lleva a la conclusión de que aquellas están determinadas por las
circunstancias sociales correspondientes. Cada cultura ha creado su propio sistema
educativo, adecuado a las necesidades sociales que le eran propias. Lauwerys habla de
cuatro momentos histórico culturales y Max Weber estableció la original tesis que unía
a la educación de la Reforma con la economía capitalista a través de un estilo de vida:
trabajo asiduo y metódico, templanza, frugalidad... (QUINTANA CABANAS,
1990:12_113).

Pero cuando cotejemos dos tipos extremos de educación, observamos que:

Las viejas sociedades eran estáticas, tradicionales, conservadoras. En ellas la tarea de


educar era simple, y se reducía a transmitir dogmáticamente una sabiduría ya hecha
generalmente humanística; así como a inculcar unas normas y unos valores preestablecidos. Los
métodos eran autoritarios y del educando se esperaba pasividad. Por el contrario, las sociedades
modernas y tecnificadas presentan un carácter básicamente dinámico y pluralista. Se valora,
especialmente, lo individual; se pretende formar el espíritu crítico del individuo, su uso de la
libertad y su capacidad para el cambio. Los contenidos ponen el énfasis en la cultura científico
empírica, en la especialización y en su aplicación a la producción.

b) La educación en el medio rural y en el medio urbano.


Ambos medios, como ambientes distintos, determinan formas y resultados diversos en
la educación. La impronta que los ambientes de hábitat producen en los sujetos es real,
y a la larga, profunda. El campo y la ciudad constituyen dos sistemas ecológicos de los
que nacen posibilidades diversas: en el campo está más arraigada la tradición
(autoritarismo, uniformidad de ideas y actitudes, el conservadurismo...), el ámbito
urbano es, por el contrario, democrático, secularizado, materialista, contribuye a la
deshumanización del individuo y a su estrés. Los suburbios constituyen un ambiente
muy peculiar por las perspectivas formadoras/deformadoras que ofrecen para la
juventud (por ejemplo, la predisposición a la delincuencia...). No podemos olvidar que
el incremento de la población urbana ha producido el desarraigo, la despersonalización,
la soledad...
Desde las primeras edades pueden observarse diferencias en los distintos hábitats; que
afectan al desarrollo físico del niño, a su forma de vida, al conocimiento de las cosas, a
su desarrollo del lenguaje, a su C.I. y a su misma estructura cognitiva.
Desde el punto de vista educacional el rendimiento de los alumnos rurales es más
estable que el de los niños de la ciudad, y aumenta con una progresión más constante.
Este hecho parece guardar relación con la menor agitación mental y, por ende, una
mejor maduración intelectual, aspecto limitado, sin embargo por un menor desarrollo
del lenguaje. (socialización más lenta, vida familiar más monótona y pobreza de
estímulos.)
En el niño urbano ve reducida las posibilidades de contactar con sus iguales (factor
educativo de primer orden): los lugares de educación y juego quedan reducidos a la
vivienda, su habitación y zona verde. El niño de pueblo, con mayor vida de calle, tiene
un intenso contacto con sus compañeros. Las ciudades poseen muchos más medios de
formación pedagógica, tales como museos, ocio o escultismo. La vida social monótona
del ambiente rural genera en el niño una personalidad coherente, pero de crecimiento
lento y aspiraciones restringidas. Este hecho, bastante estudiado, hace concluir a
Quintana (1989) que, junto al origen social, el origen regional de un alumno ejerce una
gran influencia en las oportunidades educativas.
Pero no solo la educación parasistemática posee una manifiesta superioridad en el
hábitat urbano. El propio sistema formal está en desventaja en el medio rural
(especialmente el diseminado y peor comunicado) y en la periferia de las urbes. La
escuela unitaria, la menor oportunidad de acceso a los Centros y otras desventajas
escolares se constituyen otros tantos elementos que conducen a un retraso escolar
(MONREAL, 1982: 31, en QUINTANA, 1990: 117). Esta circunstancia, que podríamos
calificar de casi universal, afecta también a los maestros. Aunque oriundos de ése
medio, poseen un bajo nivel de integración rural. Situados como "hombres rurales
urbanizados", difícilmente asumen su status como integrantes de esa comunidad
(intereses y problemática) actuando con el status de funcionario independiente. Un
claro indicador de éste hecho es su movilidad (¿desarraigo?).

INFLUENCIA DE LOS GRUPOS SOCIALES EN LA EDUCACIÓN.

El individuo vive en grupos, este es su modo de pertenecer a la sociedad (conjunto de


los grupos humanos, -no de individuos-). El individuo tiene contacto con la sociedad sólo a través
de los grupos (en varios simultáneamente), y hay interacción entre él y la sociedad únicamente
por las agrupaciones en que se integra. Pero esta interacción no es igualmente intensa en ambos
sentidos. La Dinámica de Grupos ha puesto de manifiesto que la acción de los grupos sobre el
individuo es mucho mayor que la del individuo sobre el grupo.

La influencia de la sociedad en los individuos se ejerce a través de los grupos. El grupo


moldea psicológicamente a sus miembros, pero antes la comunidad ha moldeado
sociológicamente (culturalmente) a los grupos. Este poder moldeador _educador_ del grupo se
conoce por paidocenosis (GARCÍA HOZ, 1978).

En esta dinámica hay que destacar el papel de los grupos primarios y secundarios. Todo
individuo se halla inserto en un grupo primario (familia, amigos, vecindad) que actúa sobre él
de una manera inmediata y personal. Pero lo que estos grupos dan a sus miembros lo han
tomado de los grupos secundarios en los que, a su vez, se hallan integrados. (escuela, centros
cívicos, clubes, grupos de trabajo, etc.) La subcultura que les es característica a ellos es inoculada
a los grupos primarios y por estos a los individuos. Es así como los grandes contenidos culturales
de la sociedad global se van filtrando, (desde los MCM, el arte, las Instituciones, las costumbres,
etc.), a través de sucesivas decantaciones, hasta llegar a cada individuo.

Entre estos grupos secundarios ejercen un especial influjo educador: LA ESCUELA, EL


ESTADO, LA IGLESIA y otros grupos sociales con fines y actividad directamente educativos
(escultismo, centros de actividades de ocio, etc.) A nivel de escuela resulta innecesario insistir
en la influencia que ejerce esta como grupo secundario, puesta de manifiesta _muy
especialmente_ en los casos negativos. Un ejemplo, al respecto, ha sido destacado por la
etnometodología; hablamos de la Labeling theorie.

La familia y el poder modelador sobre los hijos

De todos los grupos sociales ninguno es capaz de un influjo tan definitivo como el ejercido por
la familia _especialmente por los padres. En la raíz de este influjo está la sugestibilidad infantil,
en ser el momento de formación de sus capacidades, en la naturaleza afectiva de las relaciones,
en el carácter personal y frecuencia de las mismas, así como la tendencia a la imitación. Por si
fueran poco estos resortes psicológicos, se dan una serie de circunstancias sociales que hacen
de la familia una verdadera escuela: derecho a educar de los padres, el poder educador de la
relación entre hermanos, la actitud educadora de los padres (intencional) y la misma vida
familiar con sus conversaciones, ritos, objetos de la casa, etc.

Algunos aspectos de ese influjo:


a) La familia condiciona la formación intelectual de los hijos.
El desarrollo de la inteligencia infantil necesita estímulos y contenidos por parte del
ambiente. Las posibilidades que la familia le ofrezcan, al respecto, son determinantes.
En el fenómeno de enculturación familiar, no solo es importante la cantidad y calidad
de los conocimientos culturales que se transmiten, sino la selección, interpretación y
valoración de ese saber.
Especial mención merecen las actitudes que provocan en los hijos respecto de los
estudios. Para FRAZER constituyen el factor más fuerte de la motivación de los hijos. El
nivel de aspiración de los niños está en estrecha relación con el nivel de expectación de
los padres. Este factor, que diferencia las clases sociales, ejerce un gran peso en la
desigualdad de oportunidades al constatarse que en la clase obrera y rural abunda una
actitud desfavorable hacia la educación. El Plowden Report (1967) concluyó que la
privación educacional no es fundamentalmente efecto de la pobreza; influyen en ella
más la actitud de los padres y el tipo de cuidados maternales que la falta de recursos
materiales.
Otros factores familiares determinantes, considerados clásicos, son: los ingresos
económicos, las perturbaciones emocionales y la fratría (número y distribución de
hermanos), esta última influyendo, además, a través del C.I.

b) Efectos de la actitud de los padres. (Nivel de currículum oculto)


Los ambientes familiares que hacen hincapié en la confianza, la libertad de expresión y
el poder o la autoridad compartidos entre los progenitores y los hijos fomentan
autoconfianza más positiva, control del medio y habilidades de adaptación en el
estudiante. (EPSTEIN y McPARTLAND, 1976: 34ss.).
El mejor resultado educativo ocurre cuando el padre trabaja, los dos están presentes en
la formación. No influye si trabaja o no la madre. Contrariamente de la falta de solicitud
paterna es posible que se deriven consecuencias negativas: (constituye una gran
desventaja el padre que está presente y no trabaja, el padre enfermo o fallecido, el
alcoholismo, los problemas de personalidad y conflictos del "yo" de alguno de los
padres, etc.). No olvidemos que las familias monoparentales están en aumento. En USA
un 15% de los hijos vive sólo con un progenitor.
Por último, merece destacarse el papel que juega la coherencia de las familias respecto
a unas normas al educar, en cuanto generadoras de mayor conformismo en los hijos,
menos agresividad, aunque también menor creatividad. La falta de normas, el "salirse
con la suya", etc. origina inseguridad, deseos de auto-afirmación y tiranía en el niño.

c) Peculiaridades educacionales de las familias numerosas/reducidas.


Si bien muchos autores sostienen que el rendimiento escolar es menor en las familias
numerosas, los efectos educacionales de la fratría reducida/amplia se proyectan en
otros muchos ámbitos.
Así en las familias numerosas los miembros aprenden muy pronto a aceptar las
realidades diarias, dan una primacía al grupo sobre el individuo, desarrollan entre sus
miembros una peculiar conciencia familiar de grupo, su estructura es algo autoritaria,
se incuba la virtud de la cooperación y un espíritu de equipo, hay cierta disciplina
implícita, se da una diferenciación de funciones y roles entre los miembros, una mayor
interacción familiar y un menor proteccionismo hacia los hijos.
A medida que aumenta el número de hijos en la familia aumenta el interés de los padres
por asignarles tareas y responsabilidades, aumenta el ejercicio racional de la autoridad
y la opinión de que los hijos deben participar en las decisiones que afecten a la familia.
También es mayor la flexibilidad en cambiar planes, en atención a las circunstancias, y
la mayor preocupación por el control de movimientos de los hijos, así como, la mayor
resistencia ante sus peticiones.

Otros influjos ambientales

El tipo de VIVIENDA en que el niño crece constituye un ambiente físico y cultural que limita o
posibilita sus actividades, las coarta o estimula. (dimensión, acogida, belleza, espacio vital). El
niño es quien más sufre el influjo de las dimensiones de la vivienda, de su situación y estructura
(GARCÍA YAGÜE_LÁZARO, 1971: 98ss). Se han hecho estudios interesantes que correlacionan
nivel de gritos, rendimiento escolar y espacio físico.

El INTERNADO: puede ser una experiencia muy educativa en la formación del niño, durante
algún periodo, por los valores pedagógicos que puede aportar (compañerismo, responsabilidad
en las cosas personales, método...). En casos normales no se da ningún efecto negativo; no
obstante, cabe señalar tendencias del internamiento, sobre todo cuando se lleva a cabo en
circunstancias poco deseables (mucho tiempo, pocas salidas, disciplina severa, poca atención
personal, masificación o gregarismo). En la segunda infancia, el internado, puede generar
regresión e infantilismo, pasividad personal y atonía, así como mayor tendencia al fracaso en
diversas competiciones. En conclusión, el internado puede generar una inadaptación social
desencadenando evasión, oposicionismo, fanfarronadas, desdén, pesimismo, desconfianza, etc.
y a veces alteraciones emotivas o instintivas como tendencias homosexuales pasajeras.

EL BILINGÜISMO: Se suele denominar con tal nombre a la convivencia en el mismo espacio social
de dos lenguas en igualdad de condiciones. La desigualdad de uso se conoce con el nombre de
disglosia. El bilingüismo puede presentarse en un abanico de circunstancias y, ciñéndonos al
ámbito infantil, se ha discutido mucho sobre sus efectos en el desarrollo intelectual. Hoy se es
más optimista, al respecto, considerando que la variable edad de interferencias lingüísticas es
un factor muy importante a tener en cuenta; no obstante, se han observado rendimientos
menores en vocabulario, fluidez sintáctica y ortografía.

LA INMIGRACIÓN: Siendo un fenómeno sociológico tan importante en el mundo actual se hace


necesario destacar las consecuencias en el proceso de aprendizaje infantil. Como factores
concretos de las dificultades discentes encontramos: el bilingüismo, la inestabilidad social de la
familia, la inseguridad profesional del padre, así como las características culturales de privadas
de la capa social a la que pertenece.

1. Educación y control social

La historia de la educación escolar de occidente forma parte de la historia del control social
ejercido por quienes han detentado el poder político y económico. Eso explica por qué, por
ejemplo, a cada giro en el modelo de producción, corresponde un movimiento de reforma
educativa; y cada cambio político-ideológico, va acompañado de un replanteamiento de las
políticas educativas. Es fácil encontrar en cada proyecto educativo nacional, el rastro de los
grupos de poder que más inciden en la vida nacional. Esa incidencia está orientada al control
social y se expresa a veces con manifestaciones que son muy visibles y, en la mayoría de los
casos, de formas muy sutiles.

Fuerza armada o escuela

En 1934, el filósofo argentino Aníbal Ponce citaba a Eumenes para describir la forma en que el
emperador Romano Valentiniano, en el siglo IV, escogía a los maestros: “como si se tratase de
proveer de jefe a un escuadrón de caballería o a una cohorte pretoriana”. Y comenta Ponce:
“Apenas ha aparecido en la historia la enseñanza oficial y ya ha asomado en seguida la inevitable
comparación con el ejército. El cuerpo de profesores es un regimiento que defiende como el
otro los intereses del Estado y que marcha con el mismo paso”.

Ponce cita también a Plutarco, quien ha contado con qué habilidad se sirvieron de la educación
para habituar a los habitantes de lo que hoy es España a vivir en paz con los romanos: “Las armas
no los habrían sometido sino imperfectamente; es la educación la que los ha domado”

En Costa Rica, país que nunca tuvo un ejército numeroso y fuerte y que no lo tiene del todo
desde 1949, fue muy común la alusión al Ejército de Maestros. Esa metáfora no se refería sólo
a los numerosos y beneméritos maestros que gastaron sus energías al servicio de la educación,
ni a inversión en educación –mayor que en el resto de la región, al menos en las décadas
pasadas- sino también –según el autor costarricense Claudio Bogantes- al papel que ha
desempañado la educación en ese país, sustituyendo literalmente al ejército. Según Bogantes
“la oligarquía cafetalera costarricense, para llevar adelante su proyecto no echó mano, con
contadas excepciones, de las fuerzas militares, sino que organizó en su lugar, bastante pronto,
un sistema escolar, el cual se mostraría muy eficaz en la imposición suave y pacífica de su
proyecto y de su hegemonía”. La educación, entonces, cumplió en Costa Rica, desde la segunda
mitad del siglo XIX, la misma función que cumplió el ejército salvadoreño en ese mismo tiempo:
ser un eficaz mecanismo de control y de sumisión al servicio de los intereses de una poderosa
oligarquía cafetalera. Tanto el ejército de soldados salvadoreños como el ejército de maestros
costarricenses, fueron utilizados para servir a los intereses de los grupos con mayor poder
económico de nuestros países.

Sin embargo, hay que reconocer que también en El Salvador la educación ha jugado un papel
determinante en la configuración social: el 3 de diciembre de 1974 (hace ya 32 años), el X
Congreso del sindicado de educadores ANDES 21 de Junio señalaba las dos siguientes
características de la educación salvadoreña: “a) La minoría que detenta el poder económico y
político impone sus objetivos, fines y estrategias. Por eso es que la educación no responde a la
realidad y necesidades del pueblo; b) La educación se utiliza para formar un hombre para la
competencia, individualista, que aspire a un mejor ‘nivel de vida’ (para él, no para otros), a un
hombre obediente, conforme con el tipo de sociedad en la cual se desenvuelve, una sociedad
donde triunfe el individualismo y se frustren o estrellen los esfuerzos colectivos de un pueblo”.
La educación ha jugado, entonces, junto a otras mediaciones institucionales, una importante
tarea de control social y conservación. Esa tarea ha incluido al menos dos funciones que son
aparentemente antagónicas: la homogenización y la consolidación de las diferencias.

El control social y tarea conservadora de la educación.

La educación, en todos los tiempos, ha tenido una función prioritariamente conservadora.

El control social es, precisamente, una estrategia para conservar: se conserva controlando, y se
controla homogenizando y diferenciando a la vez. El sociólogo de la educación Juan José
Sánchez, afirma que “los sistemas y las instituciones tienen una existencia homeostática y de
conservación; si bien la propia subsistencia lleva consigo una innovación necesaria y una cierta
movilidad”.

En esa misma línea, según Sánchez, “la escuela hace propia la cultura particular de las clases
dominantes, enmascara su naturaleza social y la presenta como cultura objetiva, indiscutible,
rechazando al mismo tiempo las culturas de otros grupos sociales”. Para vencer las resistencias
de las formas culturales antagónicas sigue diciendo Sánchez-, “el sistema escolar recurre a la
violencia simbólica, que puede tomar formas muy diversas e incluso extraordinariamente
refinadas, y por lo tanto difícilmente aprehensibles, pero que tienen siempre como efecto la
desvalorización de toda otra forma cultural y la sumisión de sus portadores”.

Francisco Gutiérrez, en su libro Educación como praxis política, desarrolla ampliamente la idea
de control social. Según él, la educación es tanto un medio de socialización como de control
social. Se trata de dos funciones netamente políticas: ambas funciones son reflejo de la ideología
de quienes gobiernan y consecuencia de las demandas socioeconómicas de una determinada
sociedad. Según Gutiérrez, “así como el sistema educativo es un producto de una concreta y
determinada sociedad, de idéntica manera la sociedad encuentra en el sistema educativo la
forma más natural para perpetuarse y reproducirse”.

Precisamente por eso este autor centroamericano insiste en presentar la educación como hecho
político: “la función prioritaria de la escuela es su función político-social”. Juan José Sánchez, por
su parte, distingue las siguientes funciones de la educación: función conservadora, función
motora, función política, función económica, función de selección y asignación social y función
mistificadora. Y en el análisis que este autor hace de cada una de esas funciones reaparece
siempre el acento sobre el carácter conservador de la educación. Sin embargo, como tendremos
ocasión de ver más adelante, Sánchez no niega que la educación pueda tener cierta autonomía
desde la cual se puedan proponer incluso alternativas sociales. El control social se refiere lo que
Popkewitz llama “administración social del niño”, “gobierno del alma” y “administración social
de la libertad”. Analizando las reformas educativas de Estados Unidos, este autor advierte que
“la reforma del Estado y del individuo están unidos como un proyecto social. El progreso es
producido y razonado, no sólo a través de los cambios institucionales, sino también a través de
los cambios de las capacidades internas del individuo, de manera que la persona actúa como un
ciudadano auto-responsable y auto-motivado, lo que más tarde llamaré gobierno del alma. La
administración social del alma está profundamente incluida en la pedagogía escolar”
Michel Foucault es uno de los pensadores que más puede ayudarnos a entender el control social
que occidente ha ejercido desde la escuela. Uno de sus aportes fundamentales es haber
evidenciado la relación estrecha que existe entre poder, discursos, prácticas y configuración de
sujetos en algunas instituciones que occidente inventó en los siglos XVII y XVIII, como la escuela,
la fábrica, el manicomio, la prisión. Todas estas instituciones tienen en común que buscan la
fabricación de sujetos económicamente productivos y políticamente debilitados. Desde la
década de los setenta, en América Latina podemos reconocer una muy estrecha relación entre
el modelo económico neoliberal –motor de la actual estrategia de globalización– y las reformas
educativas impulsadas por iniciativa de los diversos gobiernos de la región, asesoradas por
instituciones financieras internacionales. En este contexto, podemos reconocer también dos
tendencias distintas: por una lado, la presiones relacionadas con las condiciones de austeridad
impuestas desde fuera (por ejemplo, como una condición para los préstamos del FMI) han
conducido a reducciones significativas en el gasto en educación y por lo tanto a formas distintas
–a veces camufladas- de privatización; por otro lado, el deseo de incrementar la productividad
y la competitividad económica han conducido –en algunos países– al aumento del gasto público
en educación.

En todo caso, podemos hablar de una relación variable entre la educación y el Estado: mientras
el neoliberalismo aboga por disminuir el rol de Estado, éste ha permanecido clave en la
articulación de los intereses y la representación de algunos grupos y clases.

2. Repercusiones del ambiente en la educación

El medio social influye y determina el desarrollo del individuo. Tradicionalmente se han señalado
varias teorías al respecto:

1º.- Herencialista: todo desarrollo personal procede de factores congénitos.

2º.- Ambientalista: las circunstancias ambientales operan con carácter decisivo.

3º.- Personalista: el desarrollo de la personalidad del individuo depende de las dos anteriores.

La educación no se centra exclusivamente en la relación profesor-alumno, sino que intervienen


otros elementos como:

 La familia.
 La sociedad: a través de la escuela.

Durkheim fue el primero en plantear que toda sociedad instrumenta mecanismos de


transmisión para adaptar las nuevas generaciones a las costumbres, valores, creencias, pautas
de comportamiento, etc.… valorados y permitidos socialmente. La educación y, en concreto, la
escuela cumple para este autor la función de integrar a la vida social, a partir de la
homogenización y de la transmisión de valores universales y válidos para todos los miembros de
la sociedad. Esta función inicial fue ampliándose en la medida que las sociedades se fueron
volviendo más complejas y la división del trabajo más especializada.

La educación dejó de ser sólo transmisora o socializadora para convertirse años más tarde, en la
encargada de asignar posiciones sociales. Posteriormente para algunos sociólogos, influidos por
el marxismo y por Weber, la educación cumple una función de reproducción de las relaciones
de producción presentes en la sociedad.

La educación, como reproductora o transformadora de las relaciones sociales, será una


constante en los estudios sobre educación y sociedad.

Actualmente estamos asistiendo a un cambio social. Sobre la base de los pilares educativos,
(sociedad, familia e instituciones educativas) encontramos otros elementos de cambio social
como:

- Internet: proporcionando información de cualquier tipo a cualquier usuario sin filtros

- Profesores: tienen asignados papeles nuevos que no les corresponden. Suplen la función de los
padres.

Los principales elementos de cambio social en el sistema escolar podemos sintetizarlos en los
siguientes:

1º.- Utopía, expectativas de la sociedad y aumento de exigencias sobre los profesores.


Actualmente los profesores llevan a cabo la función de padres trasmitiendo valores que
deberían desarrollarse en el ámbito familiar. La sociedad no se plantea la responsabilidad
colectiva. En el momento actual un profesor de Física no enseña sólo Física. Se ha generalizado
la petición de que se interese por el equilibrio psicológico del alumno, su sentido crítico, su
formación cívica etc.

2º.- Inhibición educativa de otros agentes de socialización: las funciones socializadoras de la


familia se reducen.

3º.- Ruptura del consenso social sobre la educación: es decir, qué se debe enseñar y cómo
enseñarlo. La escolarización del 100% de nuestra población infantil supone la incorporación de
alumnos con sensibilidades culturales muy distintas y una educación familiar de base que ha
fomentado valores muy distintos.

4º.- Cambios de expectativas respecto al sistema educativo. Actualmente no todos los títulos
académicos son sinónimo de un trabajo seguro.

5º.- Modificación del apoyo de la sociedad al sistema educativo. Se abandona la idea de la


educación como promesa de un futuro mejor.

6º.- Descenso de la valoración social del profesor. Nuestra sociedad tiende a establecer el status
social en función al nivel de ingresos. Las ideas de saber, abnegación y vocación han caído en
picado.

7º.- Aumento de las contradicciones en el ejercicio de la docencia. El profesor siempre puede


verse contestado y criticado por quienes defienden otros modelos educativos.

8º.- Cambio de los contenidos curriculares, debido al avance de las nuevas tecnologías y a la
ampliación de los instrumentos en el manejo de la información.
9º.- Desarrollo de fuentes de información alternativas a la escuela, REDES o internet. Las redes
sociales: han sustituido a los padres, maestros y a los libros para tratar temas como la vida, la
muerte, la dignidad, la crueldad o el sexo. La “identidad infantil” (la inocencia) consistía en
ignorar esos conceptos o no manejar sino fábulas acerca de ellos. Los adultos poseían y
administraban las claves de esos secretos. Las redes ofrecen modelos de vida, ejemplos y
contraejemplos, reproduce mecanismos de socialización primaria empleados por la familia y lo
hace sin trámites pedagógicos.

Las nuevas tecnologías son una de las principales bases de la comunicación universal hoy día. A
través de ellas podemos tener acceso a la última información de más actualidad casi a tiempo
real. Todo ello ha influido en la educación, tanto a nivel escolar como familiar, existiendo
cambios metodológicos en los procesos de enseñanza-aprendizaje puestos en prácticas en las
aulas y en el ámbito familiar. Todos sabemos que hoy saber usar el ordenador es tan importante
como escribir y leer, destrezas básicas de nuestra cultura.

10º.- Escasez de recursos materiales y deficientes condiciones de trabajo.

11º.- Cambio en la relación profesor-alumno. Las agresiones a los profesores se dan con mayor
frecuencia en la enseñanza secundaria que en la primaria. El alumno puede permitirse con
impunidad agresiones físicas o verbales a sus compañeros o a los profesores.

12º.- Fragmentación del trabajo del profesor, normalmente sobrecargados de trabajo y


debiendo atender no solo la formación del alumnado sino desarrollar tareas de investigación,
reciclaje, actividades extraescolares etc.

Según Francisco Michavila en su artículo para el mundo “Más educación, mejor futuro”, dice lo
siguiente: …” entre las lecciones principales que pueden extraerse del actual tiempo de
dificultades económicas y del aumento del paro está que el conocimiento y la innovación deben
ser la base del nuevo modelo de crecimiento económico y social sostenible. Es tiempo para el
coraje y para las nuevas ideas.”

A su vez deben contemplarse cambios necesarios como las causas del fracaso escolar, las
estrategias para aminorar sus efectos, la reforma urgente de la Formación profesional o la
extensión de la educación infantil.

En esta última todos los estudios sobre rendimiento escolar indican que los alumnos que
comienzan antes su escolarización obtienen mejores resultados académicos en las etapas
formativas posteriores.

3. La educación como controladora social

El control social es el conjunto de prácticas, actitudes y valores destinados a mantener el orden


establecido en las sociedades.

La educación es definida como un proceso de integración del individuo en sociedad. Participan


siempre un educador (integrado en una cultura y una sociedad determinada) y un educando (el
niño, objeto de la educación). Por otro lado, la educación se desarrollará en un contexto
histórico y social determinando por lo que, su contenido se verá enmarcado directamente, en
ese contexto. Por ello, la educación, se convierte en instrumento del estado para “formar” a los
futuros individuos sobre las bases ideológicas, políticas y culturales de esa sociedad.

En el ambiente escolar es muy importante, puesto que éste es uno de los mundos de vida en
que el niño interioriza muchas de las normas y valores de convivencia social que empleará a lo
largo de toda su vida, y lo que es más importante tener en cuenta, es que si los educadores no
conocen bien sus procesos, las normas y valores que interioricen pueden ser contrarias a la
moral de la sociedad en que se inserta la unidad escolar.

Desde el punto de vista de la educación el control Social es “una extensión del proceso de
socialización”.

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