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EJERCICIO DE FUERZA, UNA HERRAMIENTA INDISPENSABLE PARA

EVITAR DAÑOS IRREPARABLES.

Nombres:

Paola Alexandra Rojas

Jorge Edicson Chipatecua Suarez

Deison Esteban Hincapie Sabogal

Cesar Augusto Pacheco Londoño

Sergio Andrés Acosta

Programa Educación Física Recreación y Deportes,

UNIMINUTO Virtual y a Distancia

NRC 59708 Fundamentos de investigación

Profesor John Jairo Sierra Salamanca

18 de agosto, 2023
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TABLA DE CONTENIDO

Introducción …………………………………………………………………………. 3

Marco teórico …………………………………………………………………………5

Enfoque ………………………………………………………………………………..9

Conclusiones ………………………………………………………………………….10

Bibliografía …………………………………………………………………………...11
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EJERCICIO DE FUERZA,

UNA HERRAMIENTA INDISPENSABLE PARA EVITAR DAÑOS

IRREPARABLES.

Introducción:

Según el DANE, en Colombia se estima que aproximadamente el 45,5% de las personas

que son adultos mayores de 60 años o más edad, son diagnosticadas de enfermedades crónicas

como la hipertensión, enfermedades cardiovasculares, bronquitis crónica, diabetes, artrosis, se

incluyen la debilidad en masa muscular como la sarcopenia y la debilidad en sistema óseo como

la osteoporosis. La base de estas enfermedades se debe principalmente a la falta de actividad

física, sedentarismo, mala alimentación. Se calcula que las personas de 60 años a 74 años poseen

un nivel regular de salud con el 25,9% en comparación a los demás grupos etarios y las personas

de 75 años o más perciben su estado de salud como bueno con el 51,2% y regular con el 39,8%

en donde la percepción de estado de salud muy bueno ha quedado con un porcentaje muy bajo.

V. Martínez-Calvache y cols, Sarcopenia y fragilidad en adultos mayores hospitalizados en

salas medicina interna, trabajo de investigación Fundación Clínica Valle del Lili, Universidad

ICESI, 2019. Cali (Colombia).

En el transcurso de los últimos 20 años los adultos mayores no han adquirido una base en

su educación en la relación de la salud con el deporte y una alimentación adecuada para prevenir

dichas enfermedades y evitar muertes que generan la omisión de una actividad física adecuada a

tiempo, no se ha resaltado la importancia del trabajo de fuerza el cual conlleva muchos

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beneficios como el fortalecimiento de huesos, prevención de caídas, aumento en sistema

muscular, vitalidad, retrasamiento del envejecimiento, pues en caso de no adquirir un hábito a

tiempo en deporte, se corre el riesgo de sufrir de sarcopenia que es un trastorno del músculo

esquelético que contribuirá a padecer de altos riesgos.

Ahora, esto sucede a nivel mundial, un claro ejemplo se podrá observar en países como

México o Perú los cuales según el censo nacional, tienen una alta tasa de envejecimiento

acompañado de comorbilidades a causa de la debilidad existente en los adultos mayores y esto a

su vez, ha hecho que los centros médicos se vean con un gran número de pacientes

hospitalizados que presentan sintomatologías de discapacidad, lo cual afecta tanto la

disponibilidad de centros de atención como el costo de los mismos.

Este problema que afecta mundialmente a la población, se ha evidenciado con más fuerza

en pacientes de geriátricos o ancianatos debido a que es en estos centros en donde se concentra

un mayor número de personas mayores, dentro de estos pacientes se encuentran personas con

capacidades físicas normales pero también con algún tipo de discapacidad física como verbal,

auditiva o por desgaste en algún miembro del cuerpo, personas que son totalmente dependientes

de un tercero para realizar sus actividades diarias. (Rodríguez Gutiérrez, M., Lozada Martínez, I.,

Moreno López, N., Prevalencia de sarcopenia en adultos mayores de dos hogares geriátricos de

Pereira, Colombia. Revista de la Facultad de Medicina Humana, 2022.)

Estudios realizados en hogares geriátricos de la ciudad de Pereira, Risaralda en el año

2019, mostraron el nivel de sarcopenia en hombres y en mujeres de edades de más de 65 años

por medio de instrumentos de investigación como el índice de Barthel que mide a través de
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encuestas el estado neuromuscular y musculoesquelético del paciente y determina el nivel de

dependencia y el dinamómetro que mide la fuerza, en base a los resultados obtenidos se dedujo

que de 57 personas evaluadas, 18 de ellas presentan independencia y 26 de ellas presentan

dependencia leve, ahora bien, respecto al resultado obtenido en sarcopenia, 35 personas

presentaron un nivel del 61% de sarcopenia, 16 personas presentaron un nivel del 28% de

sarcopenia. El estudio demostró que los adultos mayores que residen en geriátricos presentan

mayor grado de sarcopenia a comparación de personas que en un entorno familiar ya que no

tienen la posibilidad de realizar actividades diarias que les permitan movilidad y adquirir fuerza

corporal y tampoco poseen una buena nutrición. (Rodríguez Gutiérrez, M., Lozada Martínez, I.,

Moreno López, N., Prevalencia de sarcopenia en adultos mayores de dos hogares geriátricos de

Pereira, Colombia. Revista de la Facultad de Medicina Humana, 2022.)

Teniendo en cuenta esto, se evidencia que no se están incluyendo programas deportivos

en hogares geriátricos que ayuden a estimular al adulto mayor muscularmente potenciando en

ellos el índice de dependencia y enfermedades que derivan de la falta de actividad física, no se

hace énfasis en deportes que incluyan un esfuerzo físico con pesas y mucho menos les brindan

una guía sobre nutrición lo cual es relevante para comenzar a educar al adulto mayor para que de

esta forma mejoren su calidad de vida y calidad de vejez a tiempo.

Marco teórico:

La tercera edad abarca una época bastante amplia de la vida de un ser humano, se puede

afirmar que esta etapa inicia a partir de los 60 años. El proceso de envejecimiento depende de la

determinación genética, de los hábitos y del estilo de vida de cada individuo, siendo estos
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factores determinantes en la importancia de la diferenciación de la edad biológica y la edad

cronológica con relación a la calidad de vida. El ser humano evoluciona según la interacción de

los factores biológicos y de los socioambientales, es decir, lo adquirido en el transcurso de la

vida acelera el envejecimiento y lo convierte en un problema de salud pública. (Luz M.

Chalapud, 2017).

La masa corporal se disminuye entre los 35 y los 70 años, sobre todo debido a la pérdida

de masa muscular esquelética y a la progresiva disminución del número y el tamaño de las fibras

musculares. Este proceso se conoce con el nombre de sarcopenia y contribuye de manera

evidente a la pérdida de fuerza y actividad funcional en los ancianos. En la patogenia de la

sarcopenia parecen intervenir varios factores, como la denervación del tejido muscular, los

cambios en el metabolismo proteico o en las concentraciones de diversas hormonas y otros

factores como el déficit de vitamina D. En el presente trabajo revisamos los aspectos patogénicos

que intervienen en la pérdida de masa ósea y muscular que acompaña al proceso de

envejecimiento.

El déficit de calcio y vitamina D constituye probablemente el factor más relevante en los

ancianos. Cuando disminuye el calcio ingerido con la dieta, desciende su absorción y baja la

calcemia, lo que estimula la secreción de parathormona. La acción de esta hormona aumenta la

reabsorción ósea, la reabsorción renal de calcio y la producción renal de calcitriol. De esta

manera, el balance entre entradas y salidas del organismo tiende a ser neutralizado, con

estabilidad de los valores plasmáticos de calcio, pero a expensas de un balance negativo del

mismo en el hueso. Existen otros factores nutricionales que pueden desempeñar un papel en la

pérdida de hueso asociada a la edad, entre los que se encuentra la ingesta proteica y el
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comportamiento alimentario en general. Martínez, O., 2017. Artículo “Envejecimiento del

músculo esquelético”.

Así pues, desde que inicia el proceso de envejecimiento, empieza a disminuir la

funcionalidad del principal sistema del organismo humano, el sistema nervioso central, suceso

que desencadena una pérdida progresiva de las capacidades y habilidades relacionadas a todas

las actividades del individuo en la vida diaria, entre ellas, una de las que más afecta a la

población de la tercera edad es la deambulación, que necesita de fuerza, equilibrio, coordinación

y autonomía. (Luz M. Chalapud, 2017).

Tomado de: Chalapud Narváez, L., Escobar-Almario, A., Revista indexada de carácter

nacional. Actividad física para mejorar fuerza y equilibrio en el adulto mayor. (2016).

Durante los últimos años estudios han demostrado cómo ha disminuido el porcentaje de

adultos mayores en condiciones de salud estables debido a los hábitos que se han ido

construyendo en las recientes generaciones respecto a la inactividad física. (Agur, McLean,

Hunt, Guthrie, y Mercer, 2016). Esto a consecuencia de limitantes como el tiempo, la demanda

en otras tareas diarias, economía, motivación y creencias. (Franco et al., 2015).

Se ha demostrado que el deporte en las personas mayores proporciona energía, fuerza

muscular, independencia, fortalecimiento del sistema óseo, resistencia cardiovascular y un sin

número de beneficios adicionales que permiten que la persona pueda desarrollar actividades

cotidianas de forma autónoma. (Collins, Rooney, Smalley y Havens, 2004). Incluir ejercicios de

fuerza también permite que mejore la flexibilidad, el movimiento, la estabilidad corporal, el

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equilibrio, todo lo anterior evitará un riesgo en caídas, dolores de espalda, lesiones articulares y

demás comorbilidades. (Carneiro et al., 2015).

La inactividad física ya se encuentra considerada por la World Health Organization,

2011, como una de las principales causantes de riesgos en mortalidad a nivel mundial a causa del

sedentarismo, obesidad y debilidad muscular (sarcopenia), además de otras enfermedades que

podrían evitarse como enfermedades mentales, distintos tipos de cáncer ya que el deporte ayuda

a regenerar células y de esta forma reducir riesgos de desarrollar células mortales.

Kendall y Fairman (2014), demuestran que el adulto mayor puede desarrollar actividad

física desde leve o moderada a actividad de alta intensidad a medida que va avanzando ya que se

irá adaptando su sistema muscular y óseo a diferentes tipos de cargas y exigencias que le

permiten adquirir mayor destreza, esto le ayudará a la población mayor a mejorar

cardiovascularmente y metabólicamente.

Diversos estudios evidencian cómo el deporte moderado o de alta intensidad mejoran la

insulina, previenen enfermedades cardiovasculares, disminuye la presión arterial, reduce el

aumento de lípidos en sangre, adicionalmente reduce el riesgo a sufrir de sarcopenia y

osteoporosis. (Lera et. Al., 2015).

Sin embargo, el deporte no solo mejora la capacidad fisiológica de la población, también

se evidencian resultados y efectos del deporte en la salud mental y cognitiva, socialmente

también le permite al adulto mayor interactuar con otros individuos de forma óptima.

Ceballos Gurrola, O., Tristán Rodríguez, J., Rangel Colmenero, B., Libro Actividad

física y deporte, 2019, Bogotá-Colombia.

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Las tensiones que resultan de las cargas mecánicas son un regulador importante de

remodelado en algunas partes del esqueleto. De hecho, parece que los huesos largos y los

cuerpos vertebrales necesitan cargas pequeñas, pero frecuentes, para mantener la masa ósea.

Martínez, O., 2017. Artículo “Envejecimiento del músculo esquelético”.

Trastornos mentales como la ansiedad y la depresión pueden ser también prevenidos a

tiempo o durante el mismo por medio de la actividad física ya que esta permite que

químicamente el organismo estimule de mejor forma los neurotransmisores como la serotonina,

dopamina, oxitocina o endorfinas que ayudan al nacimiento de nuevas células en el cerebro y en

especial en el hipocampo el cual se encarga de almacenar la información actuando sobre la

memoria, además ayudará a estimular la concentración, atención, es decir, el ejercicio regular

prevendrá enfermedades como el Alzheimer y demencia senil.

Enfoque:

En este grupo hemos basado nuestra investigación a través de vivencias con ambientes

naturales como lo son nuestros familiares, allegados y en general adultos mayores en el cual no

se implementaron hábitos tempranos de ejercicios de fortalecimiento muscular y actividad física,

ha sido muy pequeño el grupo de adultos que realizaron dichos ejercicios y que demuestran que

tienen mejor calidad de vida y que no se han visto enfrentados a tantos problemas de salud, de

ahí nace la idea de organizar un programa para los adultos en el cual podamos hacer un incentivo

de su masa muscular con el fin de mejorar y contribuir a que puedan afrontar mejor su vejez y

mejorar su sistema inmune. Además, es importante contribuir al derecho a la actividad física y

promoción de hábitos saludables que posee el adulto mayor. “El ministerio de salud de Colombia
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reitera que los adultos mayores son sujetos de derecho socialmente activo con garantías y

responsabilidades respecto de si mismos, su familia y su sociedad” Ministerio de Salud y

Protección Social, (2015).

Conclusiones:

“Un aspecto fundamental del programa de ejercicios es el fortalecimiento de la

musculatura buscando aumentar la masa muscular y fuerza muscular, evitando así una de las

principales causas de incapacidad y de caídas” Morales (2011), para nosotros es importante

incentivar el fortalecimiento del sistema muscular en el adulto mayor por medio de actividades

deportivas para que de esta manera se logre evitar caídas he incapacidades, “la fuerza en el

adulto mayor es la capacidad disminuida para generar fuerza rápidamente, limita la capacidad de

responder inmediatamente a una pérdida de equilibrio aumentando las posibilidades de caída”

Melian (2016), es decir que a medida que transcurren los años los adultos mayores van perdiendo

fuerza y equilibrio y aumentando riesgos de accidentes, de ahí la importancia de incentivar el

deporte como medio de fortalecimiento muscular y beneficio físico y psicológico. Según

Oswaldo, Álvarez y Medina (2012) argumentan que “la fuerza muscular como una de las

capacidades físicas más importante en los adultos mayores, ya que presenta la potencia

neuromuscular para superar una resistencia externa o interna debido a la contracción muscular”.

La fuerza es un factor importante que influye en la calidad de vida de los adultos mayores que

practican actividad física incrementando su resistencia trayendo beneficios físicos y mentales

que contribuyen al buen funcionamiento corporal. “Proyecto de grado presentado en el 2017 para

la corporación universitaria UNIMINUTO por Carolain Gutiérrez y Jessica Orjuela.”

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Según” García Gil, (2013) “Con el paso de los años se presenta una disminución en los

elementos que componen el sistema locomotor, a nivel óseo se calcula una pérdida del 3% en

hombres y el 8% en mujeres. La pérdida de masa ósea es la característica fundamental, constante

y universal del envejecimiento” Corujo, (s.f) “A nivel muscular se produce una perdida

aproximada del 50% al llegar a los 80 años.

Los estudios han demostrado una asociación entre la debilidad muscular de las

extremidades inferiores en el adulto mayor y su riesgo de caída, las caídas pueden producir

lesiones menores, fracturas, disminución de la movilidad y miedo, todo lo cual a su vez restringe

más todavía la actividad de las personas mayores”. Ortega &Sánchez Pinilla, (1992).

Bibliografía:

- Kendall, K.L., Fairman, C.m. 2014. Women and exercise in aging. Journal of Sport and Health

Science, 3(3), 170-178.

- V. Martínez-Calvache y cols. Sarcopenia y fragilidad en adultos mayores hospitalizados en

salas medicina interna, trabajo de investigación Fundación Clínica Valle del Lili, Universidad

ICESI, 2019. Cali (Colombia).

- Chalapud. N. Luz. M, Escobar. A. Armando (2017) Actividad física para mejorar fuerza y

equilibrio en el adulto mayor. Artículo de revista universidad y salud.

- Martínez, O., 2017. Artículo “Envejecimiento del músculo esquelético”.