El paraiso come destino:
Hacia la antropologia de Juan Escoto (parte II)
Oscar Federico Bauchwite*™
Resumen
Exposicidn de Ios temas centrales de la antropologia de Juan Escoto, el
Eriggena, a partir dl Libro IV del Periphyseon: la interpretacién del creacign
shumanadel Géness. Lanaturalezahumanacomo offcina onium terciusmunds.
Esbienconocidoel papel queccupalacuestiéndelaNadaen lafilosofia
de Juan Escoto, llamado Eridgena. Con ella se pone en evidencia la
necesidad de pensar el protagonismo del ser humano como mediador
centre Dios y sus manifestaciones: en la medida en que Dios permanece
en sf mismo més alla de cualquier limitacién puede ser significado por
el término Nada, y en este sentido, dando vor y forma al silencio divino,
el hombre se constituye en el interlocutor de la Nada por excelencia. La
verdad de esta afirmacién ya se vislumbra en las primeras Ifneas del
Periphyseon, es decir, ya por medio de la diferencia fundamental se
revela el papel del hombre como centro de convergencia de todas las,
creaturas, puesto que es en la palabra que ellas tienen lugar. En este
sentido, el estudio de la naturaleza humana se muestra fundamental, no
s6lo porque atiende a la estructura de un posible comentario a la semana
de la creacién narrada en el Libro del Génesis! sino también porque sin
1 conocimiento de to que es el hombre, es la creacién misma ta que
parece carecer de sentido, es decir, sin una determinada creatura hecha
la imago dei, la Nada permaneceria oculta en el silencio del no ser.2
‘Como veremos, la interpretacién encuentra su fundamentacién en Ia
* Profeser do Programa de Pos Graduagio em Filosofia da UFRN
1Cf.Allad, G. “Toutse pass on effect comme si auteur du De divisione avait voula
borer a large commentated tos chapiues dela Gendze ct nstaure exemple de
{es preéesecurs, son propre Hexemeron™ 47 "On pourrait ie quc le livre IV et ta De
fom. Les quesions gut y sont abordees son toutes elves a création de Thome
‘une jou 381" tut ie la composton du De von ae
en The Mind of riugena (O'Mesra/Bieer, 1973) 17-137
2.7, Benin: "tre aman tans som Gene passage Teer manifest deviem dont
fe miroir de Dieu, et a theophanie constite le len ontologigue care Ia ceature et
Vauto-creation de Diew en ell, par un mouvement dimmavience qui tend Dic
onnsaisable Lui meme et foede leur dépendance rciproguc”308, Les orgies Je
Fhomme chez Jean Scot” en Jean Scot Erigene et 3 Histoie de la Philosophie
(Rogues. 1977),307-314
Prosipios UFRN Natal 7 Bp. SL-67 jane, 200052
sentencia bibtica, "“Faciamus hominem ad imaginem et similitudinem
nostram”, que, amparada en una logica relacién de igualdad entre lo
predicado de una imagen y de su prototipo, exigiré pensar que la
naturaleza humana, como Dios, no puede ser definia y, por tanto, odo
conocimiento acerca de! hombre es indirecto,s6lo puede ser conocido
por lo que no es.
La imposibilidad de una definici6n acerca del hombre muestra el
significadoméselevado que poseelaignorancien afilosofiade riigena
puesto que estdincorporada en la definicién fundamental de lanaturaleza.>
En esta ignorancia de sf mismo, el hombre comparte con Dios la
rmorada de lo infinito y abi entra en conversacién con El. Al clamor
inteligible por ef cual y en el cual Dios da subsistencia a todas las
creaturas, el hombre responde con el conocimiento de lo que viene a ser
enttiempos y lugares, eto es, con lo que viene a ser en él mismo, en las
definiciones que determinanel lugar de cada una deellas. Mostrindose
como palabra, el hombre muestra lo que nies Dias nies él mismo, puesto
ue ambos habitan el silencio de lainfnitud, la Nada por excelencia.
Segin Bridgena, el andlisis de la naturaleza humana podria ser
simbolizada por la mitologica Hidra de los trabajos hercileos; asf como
las cabezas de la eriatura no cesan de reaparecer, la filosofia cuando
trata de pensar en el hombre se encuentra con una fuente multiple de
infinita profundidad y sélo aquellos que, como el héroe. poseen la
virtud, podrn penetra y fbertarse de las innummerables perplejidades
‘que surgen cuando se considera el ser humana
La imagen expuesta al comienzo del Libro1V del Periphyseon, es la
que mejor caracteriza la dificultad con que se encuentra la filosofia
cuando trata de interpretar la naturaleza humana. Recapitulando libros
anteriores y compardndolos entre sf, el Maestro propone una metéfora
extraida de la nayegacién para representa alo que se enfrenta:
3. Periphyseon 44
4. Periphyseon1V.7704;"ut nom immertoassimuletreiberculae ydrae fgmentamculus
‘apitaingusntumtruncentarintantumerescun. humsnamporriaiquans natura, quae
$e. iest fons quidammutiplexestetinfinie profundiats quampractersolumPlerule,
Pocestuutem. quis potest perpicre”™
PrinipiosUFRN Natal v7) 8 BSL 67 janie, 20003
La dificuttad de esta parte de nuestro tema, el conflicto y el
encuentro de diferentes sentidos, lo veo tan formidable que
compatindolo con los tres primeros libros, est0s se parecen aun
mar sereno en el cual, por causa de a trunguilidad de sus olas,
Jos lectores pueden navegar sin miedo del naufragio, navegando
lun curso seguro. Ahora, sin embargo, embareamos en un viaje
dondeelcursohasidoelegidodelamasedetoruosasdigresiones,
donde tendremos que subi los picos de las obscuras doctrina,
‘encontar la region de las Syrtes, es decir, las peligros de las
corrientes de doctrinas desconocidas, siempreconelinmediato
peligro delnaufragiode aobscuridadde as sulescomprensiones,
que, como piedras ocultas, pueden bruscamente partir nuestra
embarcacion
Si bien 1a mesfora puede expresar los or{genes insulares del
{il6sofo,* Io fundamental es evidenciar que la navegacién designa la
bisqueda de si mismo y del Creador; no como si se dirigiera hacia un
puerto ya conocido, como si fuera posible alcanzar una definicién del
hombre que expliquc los designios de las sagradas letras, tal definicién
‘pasa porsu indefinici6n, sino porque identifica la condicién humana ala
incesante procura de la verdad ifinita, esto es: no sélo la navegacién
serena sino también el naufragio aguardan al navegante, asimismo no
s6lo el conocimiento de las definiciones sino también la ignorancia de
aquello que elude toda comprensién, pertenecen al destino humano.
CConocimiento ¢ ignorancia designan en un nivel epistémico la relacién
entre ser yno ser, pues, "conocereignorar, simultineaeinseparablemente,
son siempre inhesentes ab ima humana”.? De este modo, la naturaleza
humana debe ser vista desde una doble perspectiva que también se entiende
deDios,en la medida en que de El seconoce que es, mas se ignora quées,
‘S.IN743D-744B: “Cuiusdificulas diuersorumque seasuum oecursus atque colluctatio
tantum tenor nobis teu in comparaioe iil ues praccedents it instar plot
Pela fluctuumgue serenitateabsque uo nautagio nau qabils,ttum legenubus
feafam pacers pcan pe wero otuonanrachs aus obigue
Sententiarum proc iuus, ractibus sytium (hoe est incognitae ductbus) perilous,
$shultsimorum ale, tar cum atetum eauesoe repent angen
Caliginmostate nua prompts”
6.CF.0'Meaa,J.1:"Iisditicultworesist de thoughtthat this passagestefcts Eriygen’s
fagernsirickroundcoTnsiaing gen Jean Estvan Ai 9B
7.IV.776C: “in supradits quogy
snimae simul tinseparabilter ac
nibs sats inter nos statu haee duo humana
Priocipios UFRN Natal v7 m8 p.S1-67 jane, 2000Las contradicciones y paradojas resultantes de la interpretacién de la
naturaleza humana muestran ser no s6loinevitabes sino que ademés le
convienen pues ponen de manifiesto el sentido dela naturaleza humana
como la nica creatura destinada a un modo de ser que transciende a
todolo creado, y questa transcendenciareflejala misma esenciaivina
entodos sus aspectos, estos que entre el hombre y Dias no hay ninguna
diferencia cuanto a Ios atrbutos que de ambos se pueden predicar. Para
alcanzar una interpretaciGn de la naturafeza humana capaz-de pensar su
posicign dentro de lo creado, como aquella creatura que comparte los
atributos divinos, 1s investigacion tiene como punto de partida el relato
biblico de fa creacién, donde se encuentra delineada la constitucion
fandamental del hombre simbolizada por el paraiso, no como una
condicién perdida, sino como un destino olvidado, como posibilidad a
ser cumplida por cada uno de los hombres.
La tradici6n cristiana ha interpretado el relato de la ereacién
considerando que el hombre fue hecho a la imagen y semejanza de Dios,
una condicién que é1 no sup preservary en funciGn desu desobediencia
fue expulso del paraiso y sometide a vivir asemejéndose a otros
animales. En medio de ambos, estéel episodio que narra la Cafda del
primer hombre, cuando seducido por las delicias sensibles que
representa la mujer, olvida los preceptos establecidos por ef Creador.
De ese modo, el paraiso, el Jardin del Edén, se entiende como una
condicién perdida que s6lo por medio de fa gracia divina es posible
recuperar. La interpretacién de Britigena,influenciado por los padres
sriegos, entiende que 1a condicién paradisiaca del ser humano no es
algo que se haya perdido definitivamente; si ahora aparece como algo
lejacoy dificil de discernir,es0se debe tinicamente al olvido que supone
eleerrory auilizaci6n equivocada de sus capacidades. Eneste sentido,
1a Catda, como simbolo del pecado, noes algo que vino a ocurtr con la
naturalezahumana, como si enalin momento durante algtinintervalo de
tiempo ha llegado a exist un hombre sinel pecado ylaculpa que conlleva
ladesobediencia, sinoquedesignaelserhumanoensuprocesoderealizacicn
‘en cuanto hombre, es decir, no es que el sex humano abandona el parafso
sino mas bien que debe ponerse en camino hacia él el paraiso es su destino.
Segundo Eridégena, la manifestacin de odas ascreaturas que vienen
ser en el mundo son imagenes 0 aspectos de lo que permanece en el
silencio y en la virtualidad de las causas ocultas: on apparentis
!
La idea de que en el hombre est contenida toda lacreacién ya se
hhabfa presentado cuando se considerd queesen las definiciones donde
ls creaturas llegan a ser y, por tanto, es en el alma humano donde se
determina el lugar de cada una de elas. En su realizacién cotidiana el
hombre gesta un mundo que lees propio. Comose dijo, él es la officina
‘omniuum, "enélcrecenjuntas todaslascosas que fueroncreadas por Dios,
produciéndose una harmonfa singular de diversas naturalezas como
de diferentes sonidos”. El hombre retine y expresa por medio de
77 Sobre las congadiiones deexta defini, vase Gass 1" Ontological hanscedation
‘ofthe Relation Between Man and Created nature in Erivgena” Jourmal ofthe History of
Prilosophy, 16, 197, 135-66.
28, 1V.764C: “quomodo in homine omnia creat sunt tin ipso subsistun”
29.1V63CD: "Quis enim cognuit sensum domi? Sed si hoe diner, ingratusfortassis
Silebis, et nas astm iad purum perfectumue dere posse
30. 1V 764A: “Tous iste mundus sensiblisin ipso conditus et. Nulla enim pars cius
inenir sive corpora, sive tncorporea quaeton in homie ereata subsist Seat. Ut,
‘ncoparata
31, 1V.773D: “Vbi enim melius cogntionem suam patiuntr, ib uerius existere
jundicandae sunt
532. 11.5300: “Nulla nim creaura est a summo usque deorsum quae in horine non
‘eperiiu,deoqueoficioaomnium are nominatarIneaiguidem omnia confuunt quae
‘2deo condita sunt unaraquearmoniam cn diuesis natursuelul quibusdam dstanibus
‘oni compununt
Principe UFRN Natl V7 8p S1-67 jan /dez.2000,su palabra lo que de ningdn otro modo alcanzarfa su realizacién, estos,
quello que esté separado por naturaleza, como mundos apartados entre
sf, 10 que es invisible por um lado y lo sensible por otro se encuentran en
el hombre. Erijgena runca abandonaria la idea de que la naturaleza
‘humana es e artifice de su propio mundo, el rercius mundus, o medietas ¥3
entre los extremos de la creacin; en la Homilfa escribe:
Eltercer mundo sel que, como una raz6n mediadora, une en sf
¢l espiritual supzrior y el corporal inferior, haciendo de estos
dos uno, y que seentiende ‘nicamente en el hombre, en quien
todas as creaturas se rednen, Pues consiste de cuerpo y alia,
‘Uniendo el cuerpo deeste mundo y el almade otro mundo, hace
tun cosmos nico. Pues el cuerpo posee toda la naturaleza
corporal ye alma toda naturaleza espiritual: reunidos en una.
unidad constituyen el mundo eésmico del ser humano. Por eso
1 hombre se llama todas las cosas, pues en él, como en una
fica, estn todas las creauras.™
El hecho de que el hombre crea una regién especial en medio de la
creacién se debe a su condicién edénica. Por ello, el Edén designa,
como dice el Maestro, la verdadera plantacién de Dios: el hombre. Con
ello se da paso a un aspecto fundamental dela interpretacién eriugeniana,
el profundo sentido intelectualista que caracteriza toda su filosofia. En
diversos pasajes de su obra el irlandés hace corstar que por medio del
conocimiento el alma humana puede alcanzar y refornar a su condici6n
original. Algo que entiende estar simbolizado por el guardién que Dios
dispone a la entrada del Jardin; el Serafin, dice el Maestro representa la
raz6n yl ntelecto.*5Conello, sinembargo, nose determina unarelacién
43, Par un analisis detallad del én,
‘und Metaper,(Bierwaltes, 1990) 95-107
6, "Medictas chez Kan Scot, en Begrifé
34, Homilia, XIX 294BC: "Terius mundus es, qu rationem medctats habe, ct
Sepertorem sinainm,et inferior corpora ae peo Copuat ctr doshas unas
{aGic tim homin solnteligor im quo Omnis restore ater. Carpe nim const
anima” Corpus de hoc mundo, mam dealtro mando cligens, vou actouatum.
‘tc: qodcm omc corporcam, ana vero one acorpream pst ota
‘Ouse dumcomagine oa conga, me mndanom hom confin omen
Tea nome cet omnis omnis namgoe restura in pro veut mofficza quam
onflatr” SegenJesomens, “ite pos dowteun quem devant es mots coat et
‘mamentum ean Sco sc rfc a sent de Konno’ Vease Homie su Te Promgue d=
‘can, 209 m4 En el Comentario sobre el Evangeio de Tuan esonbe Engen "Coos
‘uippe rece cars prope nerprcatr, aon nnd
235, V.865A: "Semper itague lis Cherubim fammeusque plas ues
‘imac nosuae,ratons dio et intellects, coloctur
Principios, UFRN Natal v7 8p. S1-67—_jansder.2000rmeramente ognoscitivaentreelhombre yelrestode lacreaciénnisiquiera
entre el hombre y Dios. En una filosofia que entiende la naturaleza a
partir de una diferencia fundamental, el conocimiento yel sereoinciden
cen la palabra humana de manera tal que aquello que es conocido rect
al mismo tiempo, sus existencia, y quien Conoce da cabida en sf mismo
a todo lo que conoce.
‘La relacién entre cognoscente y conocido es de una pertenencia
‘mutua, en la medida en que quien conoce define aquello que conoce y
éste por su parte viene a existirproduciendo una verdadera impresién en
la memoria del conotedor. Como dice el Maestro, citando a Méximo,
Confesor: “cualquier cosa jue el intelecto pueda comprender, en aquello
mismo se convierte".% Este aspecto serd determinante en la elaboracin
de lateoria del cielo e inferno y de laidentidad entre el mal y el castigo,
pues aquello que viene a ser en el alma humana, ahi permanece para
siempre. Ahora bien, cuando se dice que todas las creaturas fueron
hhechas en el hombre, se entiende que ellas permanecen en él en cuanto
conocimiento, Admitir otro modo harfa del hombre un rerpissimum
‘monstrum. (IV.765B).
Seguin Eridgena, la figura de Adén, nombrando lo que Dios habia.
creado, quiere sigrificarque él poseiael conocimientodetodasellas, pues
de no tererlo ",c6mo podria llamarlas y gobernarlas correctamente?"3"
A partir de esa imagen, se prepara un camino para evidenciar no s6lola
estrecha relacién de semejanza entre el conocimiento divino y el
hhumano, sino también unzensefanzadecisivacn lafilosofiadelirlandés,
a saber, que las nociones de las cosas son mejores que las Cosas mismas,
«en la medida en que 1 que comprende es mejor que lo que es comprendido.%
‘Algo que se pone de manifiesto a partir del segundo de fos modos de la
diferencia primordial que nombra la naturaleza y qué establece una
Jerarquia cognoscitiva entre as creaturasintelectuales y racionales, de
‘manera que cuanto menos conocido es uno, més elevada muestra ser su
naturaleza. Por una parte, en el hombre se encuentra toda lacreaciénen
cuanto nociones 0 conceptos, que es el verdadero y mas elevado modo
e-ser de la creatura, en la medida en que ellas estén contenidas en una
naturalezaquees superior y que,porellomismo, lascomprende por medio
de su capacidad y de las artes liberales, vrtudes coeternas con la mente
"36. 1449C: “quedunqueintellecius comprehendere potucrtidipsum fit” Paralarelaciva
are Maximo onfesot yEriugena, ease, er." Metaphyscsand Christology in Maximus
{Confessor and Esiogena”-en Eragena East and West (MeGinnyOvten, 1994), 253-270.
37.10.7694: "enim non intelligeret, quoodo rect wocare posse?
38, 1V7668: "Quod enim inteligit meus ese quam quod nteligitur, aio doce
Prinsipios, UFRN Natal v7.8 —p.$4-67 —_jamsdez.2000humana. Por otra parte, la firmacin que las creaturas adquieren una
existencia superior en el conocimiento slo puede signifcar que “Tas
cosas de ls cuales los conceptos son innatos en lanaturaleza humana
subsistenen sus conceptos"#?
En a certeza de que el conocmientoy el modo de adquirilo estin
ctemamenteen él, reside la posbilidad dela curacin del propio hombre.
Enestesenid,spodrfaaceptar un “intelectualismoeriygeniano”sicon
cllose quiere signiicar un pensamiento que aceptando que el conocimiento
esta ene hombre y queen él permanece, sedirige hacia una conclsi¢n
inevitable: el desubrimiento Ges mismo promete se el proprio paraiso.
Un destino que contemplado a partis dela existencia dela naturaleza
tuumana en este mundo, parce leno y poco probable. Sinembargo, 10
aque ahora permanece lo como una posbilidad pare todoslos homes,
debe estar en acto en los hombres elevados;!y, aunque, ahora, la
raturaleza humana page la ena de su transgresién, cuando relormada
porlasreplas de ladocrin, puede descubrirens{ misma asuDiosy ast
misma ya su capacidad ydisciptna ya todas las cosas que naturalmente
enclasubsiten seg araturalera,uminadaporaraiadesredento’
Unavezconsderadoquetodaiacreaciinestaenelhombre,el Maestro
da un paso decisivo para argumentar que larelaciGn que se establece
entre el conccimientodivino y el humano obedece a los cénones que se
entienden de una causa y desu efecto, En a similitud que se entiende
entre ambos consist Ia gloria dela natraleza humana, Todo que Dios
crea ha sido visto por El antes de que sea creado yest “visiGn®divina es
ta verdaderaesenca de o que es creado. Del mismo modo, la sabiduria
creada qu e el hombre, conoce todas ls cosas que fueron hechas en
él, antes que fueran hechas, y este conocimiento es la verdadera e
indestructible esencia de todas las creaturas. La diferencia ene uno y
oo apenas puede ser sefalada, excepto por la condicin propia de cada
tino, es decir, que lasabidurta divin es la esenia primordial y causal de
todo Io creado, mientras que el conocimiento humano es como una
3. aac: cima et semper inmate
essen sds ue scuonsqc™ Eugen ora nwentanme
play ane iter vene VNC
40 1V-774A: “Quapropter et res, quarum notitiae humanae naturae insu in suis
nodonibas subsistere non ncongracnteligustr”
441, 1V778C: “et adhe sla posible tesa in summis hominibs- haber”
42. 1V766C:“doctrnge tamer reguls
et dlsciplinam et omnia quae nur
‘edemploris su grata lununata
frmaa,deum suum et sipsam suige pritiam
ter in ea Subsistunt in selpsa potest reperite
Princpios UFRN Natal 7.8 p.S1-67—_jan/er,2000ssecunda essentia y subsiste como efecto del conosimiento divino. Y, asi
‘como el intelecto divino precede todas las cosas y es todas las cosas,
“el conocimiento intelectual del alma precede todas las cosas que ella
cconoce y es todas las cosas que ella conoce previamente"° Pot tanto,
todas las creaturas subsisten como causas en el conocimiento divino,
{que es la condicién primordial, y como efectos en el conocimiento
hhumano, como en una segunda condicién.s# Con ello no se designa
tuna diferencia entre la esencia que permanece en la Palabra divina y la
esencia que es creada en el hombre; ah no hay lugar para pensar una
diferencia sino que se trata de una tinica y misma esencia que es
contemplada en sus aspectos distintos, ora como causa, ora como efecto,
‘en la Palabra divina en el primer caso, ena mente humana en el segundo. 45
A partir de la exposicién del paraiso como destino a ser cumplido
por la naturaleza humana, la investigacién debe profundizar en la
imagen y semejanza divina que denominan la vaturaleza humana, A
ccontinuacién, veremos cémo Eridgena piensa la relaci6n entre hombre
y Dios a partir de la certeza biblica de que el primero esté hecho a la
imagen y semejanza del segundo.
Abstract
An exposition of some fundamental themes from the Anthropology of John
Scot, called Eriugera, from Book LV of the Periphyseom: the interpretation of
homanCreationin Genests. Humannatureas officinaomniumandierciusmundus.
43. 1V-779BC. “Et quemadmodum diuinusintellectus praccedit ommia et omnia est,
ognotio intellectuals animae praecedit omaia quae cognosclt, & oma. qu
praecognoscit est
“44, Cf. Roques. R “ean Scot place étemelle sctualité def création eta tai des
effects dan Tineligence dvine(causalite) et dans Tinteligenee humaineeffectalter)
{isa des niveaux differents et selon des modalites divetss, font et sont ce ules
‘Somprennent" 194, "Gentsel, 13" ca Libres Senes vers TErigeniste, Bddel/Ateco,
Roma, 1915. Véas también, tcl C humaine lage en pouvan pencuct
essence des choses, les pense (les ec) dans exeriont des accidents Pa eels eles
‘semanifestent” 208 en LHommeetson Univers au Moyen ge 1986 (Actes 0 Vil Congrs
Intemational de Philosophie Medieval) 208-210.
Princpios, UFRN Nal 78.8 51-67 jan/de. 2000