Está en la página 1de 3

UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR

FACULTAD DE JURSIPRUDENCIA, CIENCIAS POLITICAS Y SOCIALES


ARGUMENTACIÓN JURÍDICA

Nombre: Angie Jacqueline Fuertes Mejía Curso: Noveno Semestre “D”


Docente: Dr. Juan Andrés González Fecha: 16-06-2020

¿Qué es
Argumentar??
Lo propuesto por Manuel Atienza, define que el Derecho es un fenómeno
complejo, reconoce su realización desde diversos enfoques ya sea estructuralista,
funcional o valorativo. La concepción moderna del Derecho hace posible su
comprensión y operatividad desde una perspectiva práctica.

El Derecho como argumentación, ya no se trata de la pura concepción


normativa que limitaba el Derecho a su plano legal, al mundo de las normas jurídicas
como expresión de la voluntad del legislador en las que nace, desarrolla y agota el
Derecho; tampoco, la visión axiológica que devela los valores y fines perseguidos
por el ordenamiento jurídico en la vida de sociedad, y que sirven de soportes
ideológicos al Derecho y la Ley.

Según Manuel Atienza, para abordar la compleja pregunta de ¿Qué es


argumentar? Es necesario distinguir entre el concepto de argumentación y las
concepciones de la argumentación. El concepto de argumentación se configura, en
opinión de Atienza, a partir de los siguientes cuatro elementos.

1) Argumentar es una acción relativa a un lenguaje. Se argumenta cuando se


defiende o se combate una tesis y se dan razones para ello. Un corolario que podría
extraerse de esta primera nota es que sin lenguaje no hay argumentación.

2) Una argumentación presupone siempre un problema, una cuestión cuya


respuesta tiene que basarse en razones apropiadas al tipo de problema. ¿Cuáles
son los tipos de problemas relevantes en términos argumentativos? Enseguida lo
veremos.

3) Toda argumentación supone tanto un proceso, una actividad, como un


producto, un resultado. Como actividad, la argumentación es todo lo que ocurre
entre el planteamiento del problema y la solución del mismo. Como resultado, en la
argumentación cabe siempre distinguir estos tres elementos: premisas, conclusión e
inferencia.

4) Argumentar -sostiene Atienza- es una actividad racional, y lo es en un


doble entendimiento. Por un lado, porque argumentar es una actividad dotada de un
sentido, es decir, una actividad que está orientada a un fin; y, por otro, porque
existen criterios para evaluar la calidad de las diferentes argumentaciones, es decir,
las argumentaciones pueden calificarse como válidas o falaces, buenas o malas,
correctas o incorrectas, mejores o peores, etc. Estos cuatro elementos componen el
concepto de argumentación.

Ahora bien, según Atienza, estos elementos son articulables de maneras


diferentes. En su opinión, hay tres formas típicas o características de armar estos
cuatro elementos que dan lugar a tres grandes concepciones de la argumentación:
la concepción formal de la argumentación, el material y la pragmática.

El siguiente cuadro trata de mostrar de manera muy sucinta y resumida el


planteamiento de Atienza a propósito de la distinción entre el concepto y las
concepciones de la argumentación. Es decir, recoge las diferentes propiedades del
concepto “argumentación” interpretadas desde las diferentes concepciones de la
argumentación.

Finalmente, dada la complejidad, profundidad e implicaciones del tema de la


argumentación jurídica, habría que advertir que el propósito de alcanzar en el corto
plazo una teoría total de la argumentación jurídica en buena medida resulta utópico.

En su lugar, resulta preferible y viable, comenzar a cimentar las bases


fundamentales de una propuesta alternativa con pretensiones más modestas y
realistas que considere no sólo el objeto de la empresa, sino la necesidad de dotar a
la comunidad jurídica de sensibilidad suficiente para comprender y aprehender una
conciencia auténtica sobre los peligros que para la práctica del derecho, implica las
argumentaciones jurídicas asistemáticas, distorsionadas o rupestres, que con harta
frecuencia destacan en el foro judicial, restándole valor a lo que es una actividad
fundamental y necesaria en la ingente tarea de comprender el derecho, para así
pedir y administrar justicia. estudiantes y teóricos del derecho; pero, sobre todo, la
sociedad, que vera en mejor y mayor medida atendidas sus demandas de justicia.

También podría gustarte