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Clase 1 ANUDAR NUCLEAR DE LAS NEUROSIS, ENTO COMPLEJO DE EDIPO paral -COMPLEJO DE prewalente del padre en el complejo de Eedipo el deseo * Kalo: articulador entre complejo de E:ipo y complejo de castracion Disimetria en el pasaje por la trama + Tres salidas en la mujer * Contrapunto Edipo-narcisismo re prohibida como referente de Edipo-castracin en los varones y en las mujeres Para Freud, el complejo de Edipo fue su méxima produccién y su maximo descubrimiento. Aunque hay Conceptos tanto o mas impor- tantes, este se encuentra en el mticleo de su obra. No se puede hablar de psicoanalisis si no se habla del Edipo. Dicho concepto esti tomado de la saga griega de Sofocles Edipo rey y da cuenta, en principio, de dos deseos: el incestuoso y el parricida. Ya hemos diferenciado la doble serie de los objetos: el objeto de la pulsin parcial y el objeto total del narcisismo, ambos objetos de la tra- ma infantil, de la infancia. Nos proponemos ahora trabajar lo referido a las figuras del Edipo. En el Edipo como tal, tiene un lugar predominante la posicién del padre. Es un modo -no el tinico, pero si el primero— en el que Freud introduce la cuestién del padre a nivel de la estructura. Al referirse al padre, no se refiere a las figuras, a las personas, sino a la funcién légica que tiene el padre. Esta funcin ldgica de la estructura psiquica que lamamos padre, opera ordenando las significaciones del sujeto } modos de satisfaccién pulsional. Estamos hablando de la neurosis -y también de la perversiGn, con una variante que después vamos a tocar-, ya que en la psicosis esa funcién no opera. El padre como funcién depende también de la madre, dado que esa funcién implica tomar a una mujer como causa de deseo y hacerla madre de los hijos. Una ma- dre es un objeto incestuoso, una referencia del deseo incoscente, no “in rasgo especial, sino solo porque esti vedada; pa: I fecal dene conicion dela eles del obj amore 39 estd rohibida. ‘A su vez, la operacién patern; ‘a Orden; 3 log en tanto que modos de satis Llamamos ecuencia ¢ pulsional. ujeto cuya funcién padre Se cfectia, | deseo jncestuoso Y el deseo os cuenci f,que ela prohibicion lo que Particida estén py aterno. Les recomiendo Ia lectura de la tragedia grin al to “Lecturas de Edipo rey’ dela ee Pai rofesorg como ast también el tex! por la cdtedra. También les r : ‘ecomiendo ¢ Tope Friedenthal, editado ‘er Paolo Pasolini, Edipo rey. scdlente filme de Pier Seqin el complejo de Edipo, ta figura i jo | » predomi dre jes madre participa como objeto prohibido. inate 8 Ia dp ‘cl complejo de castraci6n, la referencia sera la madre ee hablamos tieando la castracién de la gat ladre, castrada, y ubicamos al padre noml Estos dos complejos s¢ anudan; no se puede hablar de un 0 sin hablar del otro, al punto que algunos han Il I otro, A legado a decir ee ple. Para Freud, e articulan a través Piste cnt lemento: el falo como premisa universal. faccion curdtico a un § en const hibidos. Complejo de fet castracion Falo Es por eso madre, hij que en el complejo de . , hijo). Hi complejo de Edi madre hijo, ae disimetria porque pe ne hay tres lugares (padre, als i filo S tata de una atculacs cuatro los lugares: padre a lectura se la debemos a O ee y no ternarit. scar Masotta. Cuando Freud habla del desarrollo libidinal, se refiere a las fases oral, anal y falica. No dice genital, sino filica, Se trata de un problema logicn que tiene que ver con que, apoyado sobre un drgano del cuerpo <1 pene-, se establece una ligica de presencia ausencia, A nivel ligicn, simbolico, quiere decir que todo se juega en torno a la presencia tener o no tener falo. La diferenciacién sexuada sera entre Jos que tienen y los que no tienen falo. Esto en términos simbélicos, porque desde el punto de vista biolég auseneia ‘0 a las mujeres no les falta nada. En el campo de la biologia, no es que los varones tienen y las mujeres no tienen. Para la medicina, los varones tienen pene —fijense que no digo “falo”- y las mujeres tienen vagina. Aqui se trata de una logica simbolica. El ordenamiento de presencia-ausencia que marca el encuentro con la castracién es, para Freud, la premisa universal del falo. Dice Freud que el nifio cree que todos tienen: hombres, mujeres, perros, gatos, pajaritos, mesas, sillas. .. EI pene no es el falo. Las mujeres pueden creer en algiin momento que el pene es el falo para alcanzar su satisfaccién, 0 pueden sentirse en inferioridad de condiciones porque el varén tiene pene, tiene falo, © pueden fingir tenerlo, Entonces, habré cuatro posibilidades para las mujeres: o sentirse inferiores porque no lo tienen; o atacarlo; 0 usarlo para hacerse un hijo; o lo disfrutan. Por eso hablo de las tres salidas freudianas de la feminidad. Agrego, ademds, una cuestién central. El varén puede pensar que tiene el falo, pero es una impostura: ambos estan castrados. Tenemos una estructura cuaternaria: padre, madre, hijo, falo. Re- cuerden que cuando trabajamos el narcisismo indicabamos su surgi- miento y deciamos que no se nace biolégicamente con narcisismo, sino que depende de la investidura libidinal que la mujer, en cuanto madre, le da a ese crio recién nacido. Por lo tanto, el narcisismo es un efecto de todo lo que una madre deposita de magnifico en ese nuevo ser. Freud dice que las mujeres més frias al amor del hombre, sin embar- go, adquieren el amor de objeto en un hijo, depositan todo en él, es lo maximo de su interés libidinal. Bee Respecto al encuentro con la castracién, como no hay inscripeién simbélica del érgano genital femenino, la oposicién sera: se tiene 0 no s¢ tiene falo, hay 0 no hay falo. Y esto vale tanto para hombres como para mujeres. El encuentro con la castracién en la mujer implicari que una de las respuestas sea la maternidad: como no tengo ¢! falo, deseo tener un equivalente: el hijo. El hijo es el equivalente filico. En el mejor de los casos, todos nacemos como falo materno. En el peor de a EscanendoconCamscaner osis, O sea que, a partir del encue, ve, ce dard una p! » posicidn castrada, una de os case jan y la sohacién de Ta etre ee sanac cx la maternidad. / fs una posicién ante la castracién an rio viene al ngar de ser el falo que ny Jar diferentes posibilidades trend Partimos de ubica Ja maternidad, el h c 4, se pueden ¢ tae hioldgicamente, porque se adviene hombre es el pasaje por la trama Edipo en,” 6 rae n serd varén o mujer, Se ed le partir de ah ale arg machos vy hembras mujer de acuerdo a cémo : cyan: ahi es donde se define si algui Hern " cer biokigicamente un vardn, pero a nivel de la posicién sexuada ger vom mjres fo que Hamarnos comple de Edipoinvertid el vag vn ver de tener al padre como objeto de rivalidad, el misino pass ter el abjeto amado, teniendo como posible consecuencia la hong. sexualidad masculina. Ahora bien, hay una disimetria en el pasaje por la trama Edipo- castracion en los varones y en las mujeres. Freud sostiene que el nig varon abandona, reprime su interés incestuoso por la amenaza de castracion; que el interés narcisista por sus genitales hace que Teprima su deseo incestuoso. Entonces, el Edipo masculino implica que, bajo la amenaza de castracién, se abandone ese objeto primero. Tanto para varones como para mujeres, el objeto primero es la madre, y vamos avanzando asi en el texto “El sepultamiento del complejo de Edipo” 1924). El varon resuelve la amenaza de castracién debido a su interés incestuoso, abandonando, reprimiendo el objeto amoroso materno ¢ sdentificindose con la posicién viril paterna. Freud dira que el heredero del complejo de Edipo es el supery6; es decir, que el nifio se identifica con la posicion viril paterna y, a la vez, introyecta la ley paterna: “la ma- dre no, si otras mujeres”, “I acceso de una hembra al lugar de la mujer es més complica- do, no es tan directo. La hembra también nace como falo, siempre dentro de la neurosis. Su primer objeto de amor también es la tmadre y, ante el encuentro con la castracién en la fase falicg, Freud dice que la nifia le recrimina a la madre no haberla hecha provista de falo, haberla hecha castrada, Estan, al mismo tiempo, el amor i la madre como primer objeto amoroso y la querella por haberla hecha sin i ha sin el instrumento falico. La nit , entonces, hace una doble ‘enunca: al primer objeto (la ma por la vagina. La nina renuncia a la madre porque no le puede dar el comer e) Eetabe Ys luego, se ditige al padre para que le dé un hijo “auivalente fico. Cambia el objeto amoroso, de la madre 42 Escaneado conCamscaner al padre. En este cambio se abre una suerte de renuncia que no lo es, una renuncia a tener el falo pero qui no lo es tampoco, ya que tener un hijo da cuenta del equivalente. Renuncia al objeto y renuncia al clitoris por la vagina Entonces, el nifio, por el complejo de eastracién, sale del comple jo de Faipo; ante la amenaza de castracién sale, reprime, y la madre pasa a ser cl referente para los objetos amorosos en sustitucién. Fl complejo de castracién en el varén, lo hace abandonar el Edipo co mo sepultamiento, como final, como ide instaura ficacién con la ley, como ién del superyé en la estructura psiquica. Por el momento, cl superys es sinénimo de ley paterna; ley paterna que se introyecta y que es sinénimo de la ley que rige el “no” al incesto y al parricidio. La nifa, por cl complejo de castracién entra al Edipo; 0 sea que por el complejo de castracién abandona el objeto preedipico (la madre) En cl vardn, el objeto preedipico y el objeto edipico es el mismo: la madre. En cambio, en la nifia el objeto preedipico es la madre y el objeto edipico es el padre; hay un cambio de objeto. La vagina no esta preparada a nivel del organismo, de las fibras nerviosas, para la satisfaccién. Podemos decir que es un lugar ausente de sensibilidad organica, porque hay una carencia de fibras nerviosas. Por lo tanto, que una mujer tenga satisfaccién en relacién con esa nueva zona erégena es gracias al poder del simbolo, no al poder de las fibras nerviosas. Ese es el punto ideal ~dice Freud del final del complejo de Edipo, porque el objeto materno en verdad esta reprimido, por lo tanto, en la nifia persiste el objeto preedipico y el edipico. A tal punto es asi que Freud sostiene, en textos posteriores, que siempre el segundo matrimonio es el més feliz, porque el primero es con la madre, el referente es el otro materno. Entonces dice que las mujeres se casan primero con un referente materno y luego con un referente paterno. No hay que tomarlo literalmente. Freud también decia que es posible hacer ese cambio con una misma persona. La cuestin de la zona erégena aparece como una problematica en las mujeres, si pueden o no tener una satisfaccién més alla del clitoris, si pueden o no tener satisfaccién de acuerdo a ese cambio de zona, Ademas, tenemos las cuestiones del Edipo invertido, que es la iden- tificacién con la posicién sexuada del progenitor del mismo sexo. Asi, en el caso del varén, el nifto sale del complejo de Edipo por el a de castracién, amenaza de castra- interés narcisista, por la amen: a cidn paterna. En las mujeres ¢s al revés, como efecto del encuentro con la castracién ingresan al complejo de Edipo. 43 Escanendo conCamscanner Complejo de Edipo S : ~ ‘ Nita y Varén x ; Complejo de castracién {Cémo sale la mujer del Edipo?

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