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LECTURAS SUBVERSIVAS

Prácticas culturales desarrolladas en torno al mundo de la lectura


entre los anarquistas de principios del siglo XX en Chile

por Ignotus (Manuel Lagos Mieres)

...Sin gobierno salisteis del vientre de vuestra madre...


y sin gobierno os iréis, u os llevarán a la sepultura...
Don Quijote de la Mancha (parte II, capítulo 5)

Este libro se terminó de imprimir en el


Taller de imprenta Autogestionado para la Difusión de las Ideas Anarquistas
del Centro de Estudios Sociales Inocencio Pellegrini Lombardozzi
Contacto: ceslombardozzi@hotmail.com

Enero 2014
ÍNDICE

02. Introducción: La lectura: pilar fundamental para la formación militante


08. 1) Lecturas subversivas: Clasificación
09. 2) Bibliotecas libertarias
15. 3) Una construcción solidaria
23. 4) Producciones de los grupos locales
36. 5) Distribución
39. 6) Algunas conclusiones
39. Notas

INTRODUCCIÓN: LA LECTURA, PILAR FUNDAMENTAL PARA LA FORMACIÓN DEL


MILITANTE

Era cuestión bien arraigada en el mundo de la sociabilidad obrera (y más ampliamente


del mundo "progresista") la convicción de que la lectura constituía uno de los medios de
mayor eficacia para acabar con la ignorancia y a la vez estimular la emancipación social
y cultural de las clases populares.

En este sentido, era rara la sociedad obrera (de la tendencia que fuera) que, de una u
otra forma, no estimulara a la práctica de la lectura, poniendo en escena diversidad de
mecanismos: puesta en circulación de folletos baratos, salones de lectura, permanentes
comentarios bibliográficos, conformación de Bibliotecas, etc. En esta cruzada estaban
unidas todas las sociedades, desde las mutuales y mancomunales, pasando por los
Concejos de la FOCH, las agrupaciones demócratas y socialistas, a los centros de
estudios sociales anarquistas y las sociedades de resistencia.

"...mano al folleto, periódicos y todas las obras de sociología -se señalaba en La


Batalla- que son las únicas que os guían por el sendero de la libertad i concluir la
esclavitud de la sociedad actual" (1)

Pero había en ello no sólo amplios deseos de acabar con la ignorancia y estimular de ese
modo la emancipación social, pues también era muy importante una selección de las
lecturas. La lectura constituía una vía fundamental para la formación ideológica y su
utilidad al momento de aclarar dudas y confusiones para perfilarse de lleno por la senda
libertaria, queda bien clara si seguimos los recuerdos de Escobar y Carvallo.

Refiriéndose al segundo semestre de 1897 y verano del año siguiente, señalaría:

"Durante esa primavera y el verano siguiente, leímos mucho".

El contacto con el socialista José Ingenieros, permitía al grupo proveerse de

"libros de doctrina, diarios, revistas y folletos de estudios".

Se trataba de literatura ampliamente social, más que específicamente "socialista". El


mismo Escobar y Carvallo, señala que

"entre los nuevos envíos, recibimos una revista de Sociología y Economía titulada "La
Cuestión Social", editada en Buenos Aires por el avanzado publicista Rafael Farga
Pellicer. Si bien no calzaba en los puntos literario-filosóficos de La Montaña,
contenía en cambio, notables estudios científicos e históricos sobre asuntos
económicos y luchas sociales. Era un género diferente de literatura, pues no se refería
ni mencionaba siquiera al parlamentarismo y la política. Su lectura nos abrió nuevas
perspectivas y nos dimos a estudiar las obras anunciadas por la revista. La primera
"La Conquista del Pan" de Pedro Kropotkine. La deslumbrante filosofía del gran
revolucionario ruso no llegó a trastornarme, pero tuvo en mí el efecto de mostrarme
el amplio e infinito horizonte de la vida humana, más allá de todo convencionalismo
formal de leyes, gobiernos y mecanismos políticos transitorios..." (2)

Las lecturas se complementaban con las conversaciones respecto de las mismas, que
realizaban los integrantes del grupo.

"De nuestras largas conversaciones, los tres amigos llegamos a la conclusión lógica
de que el socialismo no era ni podía ser un partido, de modo semejante a como la
iglesia no es tampoco la religión. En efecto, en uno y otro caso, la vida no se deja
aprisionar por el estrecho cauce de las "canalizaciones" ideadas por la pequeñez de
espíritu para arrebañar a los individuos. Comprendíamos la necesidad de agrupar a
los hombres para instruirlos y asociarlos en la persecución de un ideal común; pero
todo ello en conjunto, sólo como un movimiento de las masas orientado hacia el
camino infinito de la Igualdad, la Libertad y la Fraternidad" (3)

No por nada también, hacia 1915, en Valparaíso, la recién organizada Federación


Obrera Metalúrgica, acordaría, como una de sus primeras medidas,

"empezar a imprimir un folleto cuyo estudio se hizo con calma y concienzudamente.


El gasto de dicho folleto lo harán un grupo de compañeros que están ya bastante
convencidos de que la solidaridad obrera no será un hecho mientras los proletarios no
estén bien capacitados intelectualmente". (4)

También se acordaría

"comprar una partida de libros escrito por los mejores filósofos de la época, para cuyo
objeto quedó nombrada una comisión y aprobada la cantidad de dinero que debe
gastarse en dicha adquisición". (5)

Muchos individuos eran anexados a la causa a través del acto de la lectura,


principalmente algún periódico que un compañero de trabajo llevaba a las faenas,

"... algunas veces me traía al trabajo un periódico que se llamaba La Protesta. Allí se
hablaba de la explotación y las injusticias de la que eran presa los obreros, y
entonces bien se generaban los primeros lazos de identificación". (6)

Esta confianza en el poder de la lectura, se evidencia bien en este artículo. La lectura


constituía un instrumento de primer orden en el aparataje propagandístico anarquista.
Muchos anarquistas pasarían a formar las huestes libertarias a partir del acto de la
lectura. Varios ejemplos podemos citar al respecto... Hacia marzo de 1905, un obrero
pampino residente en Pozo Almonte (de seudónimo Justo Rebelde) declaraba haber
enterrado para siempre su vieja simpatía por los demócratas, adhiriendo ahora a las
filas anarquistas, después de haber leído algunos libros que le había facilitado uno de
sus compañeros de trabajo. A continuación daba cuenta de estas obras:

El Dolor Universal, de S. Faure


Filosofía del anarquismo, C. Malato
Dios y el Estado, Bakunin
Evolución y Revolución, Reclus
La Aurora Social y El Hombre Libre, Tolstoi
La Sociedad Moribunda y la Anarquía, y, La Sociedad Futura, Grave
La Conquista del Pan, Palabras de un Rebelde, y Campos, Fábricas y Talleres, de
Kropotkin. (...) (7)
Las mismas convicciones y confianza en el poder de las lecturas manifestaba Juan
Aguilera hacia 1913 en La Batalla:

"Es necesario compañeros de miserias, que despertéis de ese aletargado sueño en


que la burguesía despótica y tirana os ha mantenido tantos y tantos tiempos.
Es la hora ya, que os entreguéis de lleno al estudio leyendo las obras de Kropotkin,
Juan Grave, Carlos Malato y tantos otros grandes maestros que nos han enseñado
el progreso infinito, cual es la anarquía, ahí veréis como se nos señala un gran mundo
nuevo en que no habrá más lágrimas ni sufrimientos, donde los hombres no sepan
más que darse el dulce nombre de hermano" (8)

La lectura, decía Triviño,

"es el único alimento para nuestras mentes ignorantes preñadas de prejuicios, asilo
de fanatismos, pastos de injusticias y de atropellos, donde nuestros amos nos
pisotean y nos colocan de pedestal y sobre nosotros se yerguen ebrios de hipocresía,
de lujo, sedientos de sangre y poderío..." (9)

Era la lectura la vía más recurrida por los anarquistas para su autoformación, y donde el
autodidactismo tenía un peso importante.

"La universidad del obrero está en el libro, en el periódico, en los centros de


reuniones sociales que funcionan con este fin, ya sea por medio de conferencias,
veladas, etc., que levantando el nivel moral de los individuos, los conduce a la
perfección",

señalaba hacia 1911 Ramón Contreras. (10)

La lectura debía acompañar también el proceso de aprendizaje y formación en las ideas


anarquistas, y en consecuencia, de la lectura de los periódicos, muchos derivaban a
lectura de las obras teóricas del anarquismo. Para referirse a la formación autodidacta
de Pancho Pezoa, señalaría Manuel Rojas en La Oscura Vida Radiante,

"las fuentes de aquellas ideas y de aquellos sentimientos eran libros de bajo precio,
empastados a la rústica, que ni había que comprar, pues los compraban otros obreros
calificados, más dispendiosos o más anhelosos de saber, y los compraban y los leían y
los prestaban y se los devolvían o no se los devolvían, pero pasaban a otras
anhelosas manos que también los leían y los prestaban y se los devolvían o no se los
devolvían, hasta que ya no era posible prestarlos ni devolverlos, de despedazados que
estaban, pues sus lectores, siempre o casi siempre asalariados, los doblaban por
donde caía y de cualquier modo, metiéndolos a empujones en los bolsillos de sus
chaquetas, desbocando así los bolsillos y pelando el lomo de los libros, que después
de varios prestamos empezaban a mostrar los cuadernillos y sus costuras,
desencuadernándose luego de heroica y fecunda vida; y Pancho leyó a fondo todo lo
que podían prestarle y lo que pudo comprar, y como todo le pareció poco -no eran
muchos, por otra parte, los libros traducidos al español-, aprendió italiano y aprendió
francés para leer otros libros y los periódicos que a veces solían llegar de Europa..."
(11)

"Me sumí en el fondo de las bibliotecas -recordaría Pedro Ortúzar poco tiempo antes
de su muerte-. Supe de Server y su sacrificio. Comprendí a Lutero. Me emocioné
con Spartacus, sentí horror por la ejecutoria sangrienta de Nerón y Calígula,
interpreté la concordancia clasista de Jesús, Severine me impresionó hasta las
lágrimas, supe de Bakunin, de la Internacional, de Ferrer."... (12)
Al calor de las lecturas se iban generando en los hombres reflexiones y pensamientos,
recobrando la humanidad perdida en la barbarie de la explotación y la miseria. La
lectura por lo demás, posibilitaba el cultivo espiritual y reflexión en el obrero,

"Alguien ha dicho que el libro es el pan del espíritu. Es esta una verdad axiomática
confirmada a cada instante. Así como el cuerpo necesita bueno y abundante alimento
para nutrirse y adquirir las fuerzas para soportar la lucha por la vida, el espíritu
necesita también nutrirse con nuevos conocimientos adquiridos en el estudio" (13)

Un ejemplo claro, Manuel Antonio Silva,

"Él y sus compinches -según González Vera- consumían una damajuana en pocas
horas. Cuando el vino les rebasaba la garganta, echábanse el resto en los bolsillos, se
restregaban la cara con él, hacían locuras; pero alguien debió decirle que este vicio
degrada al hombre. Manuel Antonio Silva cambió el vino por el agua y comenzó a
leer "La Conquista del Pan". Aunque su naturaleza fuera ruda, fue dulcificándose por
obra del pensamiento..." (14)

En su obra, Camarada, Sepúlveda Leyton relata la historia de Pedro Navarrete,


quien se hizo militante de la IWW en Valparaíso llevado a ello por las lecturas, que le
hicieron pensar, cuestionarse la miseria, alejarse incluso de su pareja,

"Pedro aprendió toda la vida en los libros, y en el muelle".


"Leyó. Aprendió a leer. Sintió. Comenzó a angustiarse. Las latas de la casucha, el
basural de la quebrada, y todas las casuchas y todos los basurales; y Rosa, tan
pasiva, y todas las mujeres, tan pasivas... balancear a un hombre, estrujarlo un poco,
dejarlo tranquilo por una noche, y después lo mismo, y toda la vida lo mismo,
miseria, miseria... no; la vida es otra cosa. Es noble. Hay que ennoblecerla. El destino
del hombre es más alto. Que no todo sea dejarse rascar la cabeza, y ovillarse, dar
resoplidos todas las noches en el mismo asunto, ya sin gracia para uno, ya en espera
de otro, soñando con otro, en el mismo momento que suspira con uno..." (15)

La afición de algunos anarquistas por la lectura era profunda, y muchas veces invertían
lo poco que tenían en la adquisición de libros. González Vera, recordando a los
anarquistas que frecuentaban el Centro de Estudios Sociales Ferrer, destacaría la
personalidad de Teófilo Dúctil:

"Si no estaba discutiendo ardorosamente, veíasele solitario con un libro montado en


su nariz."...
Leyó todas las obras editadas por Sempere y cuantas publicara la editorial Razón y
Fuerza, fuera de algunos centenares de otros libros. Sabía de todo...

Agregaría Manuel Rojas:

"...no era ningún sabio, no quería serlo, sólo quería leer


No ambicionaba nada como ropa, dinero, automóviles o mujeres, y si tenía dinero, lo
invertía en comprar libros... (16)

Varios anarquistas lograban conformar sus bibliotecas personales, siendo esto su mayor
tesoro. Con dolor la familia de Magno Espinosa, ante la precaria situación en que se
encontraba tras su deceso en 1906, ponía a la venta la biblioteca del luchador. (17)

La lectura era una cuestión imprescindible para los cuadros anarquistas, encontrándose
estrechamente asociada a la militancia: era imprescindible que el cuadro anarquista
supiera leer, y más aún, que estuviera familiarizado, iniciado, en las lecturas de la
doctrina anarquista, tanto en cuanto a las ideas como en cuanto a las estrategias. Y
desde luego, mientras más acabada fuera su lectura y conocimientos, mayor era la
posición que ocupaba en la militancia ácrata o en el movimiento. Era claro que lo que se
valoraba en este ámbito eran las ideas y conocimientos, y ello bien llevaría a quien los
tuviera, por ejemplo, a publicarlos en algún periódico anarquista, inscribiéndose pronto
como uno de sus redactores.

Por todo ello, podemos decir, era la lectura un pilar fundamental para la formación
anarquista. Pero más aún: en torno a ésta se generaba toda una serie de relaciones y
prácticas colectivas, que podían ser formales o informales. La lectura superaba el plano
individual y ello bien se aprecia en la circulación de libros, los préstamos entre
compañeros, los comentarios de las lecturas, las recomendaciones, etc.

Son sugerentes respecto de la lectura como práctica colectiva informal, los "Recuerdos
de Pedro Godoy", que el zapatero Augusto Pinto plasmaría por escrito. Señala en uno
de sus pasajes, recordando a Godoy:

"Sentado ante mi banca de zapatero, batiendo la suela, torciendo los hilos, atento a
mis consejos en calidad de aprendiz. No se producía mucha obra, es cierto, y a
menudo maestro y discípulo olvidaban los zapatos por un capítulo de Kropotkin"
(18)

Similares prácticas tenían lugar en los talleres de los carpinteros porteños,


(conformantes del grupo Máximo Gorki hacia 1907 en Valparaíso) Rafael Tenajo,
Ernesto Serrano y Rodolfo Faúndez, quienes a la vez que trabajaban, se daban un
espacio para escuchar la lectura de algunos pasajes de las obras de Kropotkin, que uno
de los tres realizaba. El esquema se repite entre los carpinteros Adolfo Hernández,
Manuel Zamorano Trincado, Amaro Castro. Y algo similar ocurría en el taller de
zapatero de Manuel Antonio Silva o en la "Peluquería del Pueblo", de Teodoro Brown
y Víctor Garrido. Brown acostumbraba a amenizar su trabajo con monólogos
inspirados en los libros de la entrada, que aplicaba a los hechos presentes. Era un
espacio en el cual se hablaba de anarquismo cuando llegaban las personas indicadas,
que siempre eran obreros modestos que se abandonaban a sus manos.

"-Ya se declaró otra huelga... La deja el trabajo porque le pagan poco. Y los patrones
pagan poco porque necesitan ganar el máximo. La gente no sabe vivir. Es lo que digo
y redigo. Los que ganan menos son los más numerosos. ¿Recuerda usted a
Galvarino? ¡Era un indio muy advertido! Cuando quisieron obligarle a trabajar huyó,
y de lejos, luego de cortarse una mano, la mandó al godo para que la hiciera trabajar
¿Qué le parece el indiecito?-. Sus saltos de una idea a otra aumentábales el mutismo
a los que estaban bajo su navaja" (19)

La misma madre de Teodoro, en declaraciones ante el juez por el caso de las bombas
en el Convento Carmelitas Descalzos, el 21 de diciembre de 1911, declararía que a
Brown

"le gustaba mucho la lectura, y frecuentemente compraba libros..." (20)

La misma Librería Ibérica, de Manuel Peña, señala el abogado Vicuña Fuentes, se


había hecho

"paulatinamente el centro de los intelectuales de Iquique: abogados, periodistas y


propagandistas sociales, literatos, se juntaban frente a su mostrador a charlar de
Kropotkine y de Ibsen, de Bakunine y de Marx. Él escuchaba embelesado y de
pura gratitud dejaba que los contertulios hojeasen en su mostrador y aún leyesen sus
libros nuevos" (21)
Respecto de las prácticas formales, eran frecuentes en los centros de estudios
sociales o bibliotecas populares, las "lecturas comentadas". La lectura
comentada fue otra de las tácticas practicada con frecuencia por los anarquistas, un
"dispositivo" esencial para la "formación de la conciencia contestataria" (22)

Se trataba de sesiones en las cuales se leía en voz alta alguna obra avisada con
anticipación, y luego era comentada, analizada, discutida, criticada. Se trata ésta de una
práctica fuertemente arraigada en la sociabilidad obrera, y que también se encuentra
presente entre las prácticas de la elite ilustrada desde los primeros años del siglo XIX.
(23)

Evidentemente, las lecturas que más atención suscitaban eran las de las obras clásicas
del anarquismo, como "La Conquista del Pan", "La Propiedad es un robo" de Proudhon,
algunas obras de Reclus, de Faure, etc. Aunque en ocasiones también se comentaban
obras de carácter científico. El Centro de Estudios Sociales "Redención", por
ejemplo, hacia febrero de 1923, anunciaba:

"Hoy en Antonio Varas nª 23, reunión de todos los afiliados y familias que se
interesen por la lectura comentada. Esta noche a las 8 pm, "Los enigmas del
universo", entrada libre" (24)

Por su parte, hacia octubre de 1922, el CES Hijos del Pueblo, anunciaba

"Hoy a las 7,30 pm habrá una interesante charla cultural y se leerá la obra de E.
Zola "Trabajo" que tanto éxito ha tenido en el cine.
Mañana a las 10 se celebrará importante asamblea en su local social, Av. Italia 1136,
Barrio Santa Isabel" (25)

La modalidad de la lectura comentada permitía integrarse a quienes (como Pichard,


en una primera época) no sabían leer. Recordaría, por ejemplo, el zapatero Augusto
Pinto a Pichard:

"No podré olvidar el bondadoso Pichard, el carpintero francés, que sin saber leer ni
escribir era uno de los propagandistas más estimados. Todo lo había aprendido
conversando y haciéndose leer. Cuando Godoy nos tradujo de "El Hombre que Ríe" el
discurso de Guenphalin, las lágrimas llenaban sus ojos azules". (26)

Efectivamente, estas lecturas colectivas tomaban muchas veces caracteres emotivos y


plasmados de una unción religiosa:

"...el lector de las obras anarquistas, obrero por punto general, no tiene biblioteca, ni
compra los libros para sí sólo. El firmante de este artículo ha presenciado la lectura de
"La Conquista del Pan" en una casa obrera. En un cuarto que alumbraba quedamente
una vela, se reunían todas las noches del invierno hasta catorce obreros. Leía uno de
ellos trabajosamente, escuchaban los otros: cuando el lector hacía punto, sólo el
chisporroteo de la vela interrumpía el silencio. También ha presenciado la lectura de
la Biblia en una familia puritana...La sensación ha sido idéntica en uno y otro caso"
(27).

Con ello, el acto de la lectura se tornaba también como una práctica colectiva, en torno
a la cual se gestaban una serie de relaciones, afectos, valores, identidad, formación.

1) LECTURAS SUBVERSIVAS. CLASIFICACIÓN


Navarro refiriéndose a las lecturas obreras a principios del siglo XX en España, señala
que la diversidad y el eclecticismo eran sus rasgos característicos, destacando que
muchas de estas obras estaban escritas por autores que no pertenecían al mundo del
proletariado y sí al mundo burgués o pequeño burgués, pero que sin embargo, pese a su
diverso origen

"les unía su común apuesta por el progreso, la emancipación humana y la lucha


contra la ignorancia" (28)

José Álvarez Junco por su parte señala que

"cualquier autor que de algún modo propagase una visión racionalista del mundo,
pusiese en la picota algún "prejuicio" o contribuyese a elevar el nivel cultural de la
masa trabajadora, merecía ser difundido, pues, en definitiva, acabaría por servir a la
causa de la toma de conciencia popular... En la amplitud de la selección de autores e
incluso de campos, los anarquistas se alejaron radicalmente de la rigidez doctrinaria
marxista, que limitó la actividad editorial a autores políticos y, dentro de éstos, a los
que fuesen radicales y fácilmente asimilables" (29)

El anarquismo integró a su bagaje cultural todo aquello que supusiera una crítica feroz a
la autoridad y al capital, de ahí que en toda biblioteca anarquista no faltaran las obras
de Herbert Spencer, Max Nordau, Henry Georges, el teatro de Ibsen o la poesía de
los simbolistas franceses, entre otras. Desde luego, obras imprescindibles eran las de
sus principales pensadores, Proudhon, Bakunin, Kropotkin, Reclus, Malatesta,
entre otros.

Contribuían a esta amplitud cultural existente en las lecturas anarquistas editoriales


como Sempere, de Valencia, que contemplaba colecciones cuyos fines eran

"divulgar los perfiles esenciales de una cultura progresista, laica científica, que
abarcaba a autores como Buchner o Darwin, escritores como Hugo, Zola,
Dostoievski, ilustrados como Voltaire o Diderot, o representantes del pensamiento
político social avanzado como Marx o Kropotkin".

Sus colecciones llegaban a bajo costo, como veremos (30)

De acuerdo a su temática, entre las lecturas anarquistas del periodo, podemos clasificar
varios grupos:

• Lecturas de temática político-social: destacaban desde luego las obras de


pensadores y ensayistas anarquistas (Kropotkin, Proudhon, Bakunin, Tolstoi,
Reclus, Malatesta, Faure, Grave, Anselmo Lorenzo, Prat, Federico Urales,
Ricardo Mella. Con posterioridad, Rocker, Nettlau, el francés Han Ryner pero
también las obras de Marx, Engels y Rosa Luxemburgo.
• Lecturas de obras literarias: de autores que de una u otra manera trataban las
miserias de la vida y sus virtudes; autores tan diversos como Zola, Pío Baroja,
Cervantes, Azorín, Vargas Vila, Blasco Ibáñez, Higinio Noja Ruíz, Ghiraldo,
González Pacheco, Florencio Sánchez, autores locales, como Baldomero Lillo,
posteriormente, González Vera y Manuel Rojas, entre otros; poesías
anarquistas; obras de teatro, etc. Predominaba desde luego la literatura rusa:
especialmente Tolstoi, Gorki, Dostoievski. Del mismo modo, Mirbeau, Sue,
Hugo, Stendhal. Posteriormente, escritores sociales de entreguerras, como R.
Rolland y Henri Barbusse.
• Entre las obras filosóficas: eran bien leídos Nietzche, "Así habló Zarathustra", y
Stirner, "El único y sus propiedad". Uno de los preferidos era Guyau y su "Ensayo
de una moral sin obligación ni sanción"
• Eran devoradas también obras sociológicas (estudios referidos a la Cuestión
Social, a los movimientos sociales u obreros, etc.) Así por ejemplo, folletos
dedicados a la "La Revolución Rusa", o "Los Asesinatos de Montjuich", etc. En la
medida en que el movimiento anarquista local iba adquiriendo experiencias,
también estas eran motivo de reflexión por parte de los anarquistas, y muchas de
éstas eran a su vez publicadas en la forma de folletos, con lo cual se iban
diversificando las ediciones.
• Obras relacionadas con salud, higiene, neomaltusianismo, etc. Aquí encontramos
las obras de Paul Robin, Luís Bulffi de Quintana por ejemplo, pero también las
obras de Hardy y Marestan.
• Obras científicas, de autores positivistas o progresistas: Spencer, Max Nordau,
Darwin, etc.
• Obras de educación (racionalista, integral, se incluyen acá las de enseñanza,
como gramática, lectura racional, historia universal, todas muy útiles para realizar
una buena clase en la escuela nocturna o racionalista)
• A todo ello habría que sumar los Almanaques del anarquismo y los infaltables
cancioneros, muchos editados en Argentina y España.
• También tenían buena circulación algunas obras abocadas a la vida de algún
mártir o pensador anarquista. Así circulaban por ejemplo biografías sobre
Ravachol o Caserío, de Bakunin, Luisa Michel, Ferrer, etc. De los locales,
destacamos folletos sobre la vida de Plaza Olmedo, de Gómez Rojas, de
Rebosio.

Hemos intentado hacer una clasificación de las obras de acuerdo a los catálogos
presentas en las distintas bibliotecas obreras. Especialmente resultan sugerentes las
colecciones exhibidas por la revista iquiqueña El Sembrador, dirigida por Celedonio
Arenas desde 1922. También nos hemos basado en las lecturas y artículos presentes
en los distintos periódicos, pero también en los canjes, y correspondencias de los grupos
con sus similares de otras regiones del mundo, especialmente, con la región del Río de
la Plata, Perú, España, Estado Unidos, Francia e Italia.

2) BIBLIOTECAS LIBERTARIAS

Según Juan Suriano,

"los anarquistas pretendían convertir el acto de la lectura de material doctrinario en


un hecho público al alcance de todos los activistas y la mayor parte posible de los
trabajadores" (31)

Para ello, las bibliotecas constituían uno de los pilares fundamentales en el aparataje
infraestructural anarquista. No bastaba que existiera un lugar físico en el cual realizar
reuniones, un salón y espacio en donde reunir a los obreros y organizar la propaganda.
Era fundamental, además, que dicho recinto contara con una biblioteca social, en donde
se encontraran obras destinadas a instruir y concienciar a los obreros. Desde este punto
de vista, la biblioteca constituía un lugar estratégico para la labor de formación
anarquista, a través ella, se podía fomentar el cultivo de la lectura pertinente, y
realizarse una labor de capacitación y educación de los afiliados. Esto es lo que parece
desprenderse de esta declaración del bibliotecario de la Federación de Zapateros de
Santiago, hacia 1919:
"...comprendiendo que el individuo, para ser útil en la colmena social es menester
que, al tiempo de buscar el ensanchamiento económico para poder hacer frente al
gran problema de la subsistencia, ante todo está el nutrimiento cerebral, con lo cual
el individuo sabrá lo que es él en la gran masa productora; cuál será su actividad y su
deber en la gran máquina evolutiva que la humanidad tiene hoy a su vista; donde no
sólo el obrero debe buscar las mejoras económicas que sólo satisfacen las
necesidades del momento, sino que también debe mirar en la amplitud de las fases
cómo se desenvuelven los pueblos, sus organizaciones y la mejor manera como
ordenar la gran desigualdad existente y amoldada sólo en beneficio de unos cuantos
acaparadores del producto ajeno.
Por eso nuestra Biblioteca batallará, contra toda inercia de los trabajadores, hasta
llegar a hacer al individuo apto, y un ser pensante, conocedor de sus deberes y
derechos" (32)

No por nada la formación de una Biblioteca sociológica era uno de los primeros objetivos
de todos los grupos específicos anarquistas, pero también de buena parte de las
sociedades de resistencia, y obreras en general, porque,

"toda institución que se precia de progresista, trata de ilustrar a sus asociados y la


mejor manera de conseguirla es tener una bien surtida biblioteca" (33)

"La biblioteca sociológica (se señalaba en órgano libertario hacia 1905) es el


primer deber social que debe cumplir conscientemente toda asociación de
trabajadores que aspiren a su emancipación integral.
Sin el libro emancipador de prejuicios y fanatismos que aprisionan la libertad del
pensamiento, y el periódico revolucionario, que enciende el valor moral, la clase
trabajadora sería totalmente esclavizada por la explotación capitalista, y la tiranía
franca o embozada de cualquier gobierno demócrata o socialista" (34)

El Obrero Metalúrgico, órgano de la Unión de Obreros Metalúrgicos, se


preguntaba, a propósito de los objetivos de su nuevo salón social, hacia 1924:

"¿Cuál será la labor que nos proponemos desarrollar una vez que tengamos un local
adecuado? Sencillamente, llenar un vacío, creando una biblioteca, donde no falten las
obras de todos los autores y escuelas, una sala de lectura para que todos los
metalúrgicos y sus hijos puedan nutrirse de ideas, de verdades, de energías nuevas y
propulsoras" (35)

Pero la Biblioteca constituía también una entidad de sociabilidad, de reunión y


encuentro, y en el cual no sólo se buscaba la instrucción o ideologización, sino la simple
sociabilidad y el encuentro agradable, compartir. Señala Navarro, la biblioteca o salón
de lectura era una especie de centro neurálgico de las sociedades, una especie de
Sancta Sanctorum o espacio simbólico reservado para las charlas formativas, serias,

"funcionaba, en definitiva, como reverso del bar o la cafetería" (36)


"¡Que linda es la sociabilidad! ¡qué instructivo es cambiar ideas con los compañeros y
compañeras de lucha!
¡Ahí! Mi vida, mi templo, lo que más amo, está dentro del Salón Social! ¡Cuántas
decepciones, cuántos sinsabores, cuántas amarguras y desengaños se pasan! Pero
todo esto viene a confortar más el espíritu por un momento abatido (...)
Veo el movimiento que se nota en la sala, unos escriben, otros leen, allá discuten, acá
se ríen, acullá se arreglan los tinos de la Imprenta. Otras compañeritas estudian su
libro de música y las más recitan una comedia o poesía... Que hermoso momento he
pasado contemplando por un lado la obra de Homero, y por otro, a los hombres y
corazones de acero (...)” (37)

La biblioteca entonces no era sólo un lugar en donde se iba a leer o a buscar algún
volumen; era también un lugar de reunión, de encuentro y conversación entre obreros,
en que se podía compartir alguna taza de té o café, y comentar la situación del gremio,
algún libro que se esté leyendo, o alguna situación social diversa.

Estas bibliotecas populares conformaron uno de los ámbitos específicos en los cuales se
construyó, desplegó y reprodujo una la cultura libertaria; allí se fomentaban una serie
de prácticas culturales reforzándose de esta manera una cultura militante, en tanto la
amalgama de cosas que allí ocurrían, se decían o se leían, se discutían y planificaban
generaban un tejido de interrelaciones que daban lugar a la profundización de una
cultura militante.

En las mismas reuniones en las bibliotecas muchas veces se realizaban repartos de


folletos y hojas, con las cuáles se desarrollaban conversaciones. Al respecto, la Unión i
Resistencia de Zapateros de Valparaíso, por ejemplo, hacia 1915, solicitaba el envío
de estos folletos, con la finalidad de que

"sean repartidos entre los asistentes en las sesiones". Dirección postal: Colón nª 30
Valparaíso a nombre de la Federación de Zapateros (Luís Castro) nota:
preferimos periódicos extranjeros" (38)

De la diversidad de actividades de la biblioteca de la Federación de Zapateros de


Santiago, señalaba su bibliotecario,

"Celebrará ateneos en los que se disertará sobre temas científicos de sociología y


organización obrera; abrirá concursos literarios, designará días especiales para
conversaciones y juicios sobre trabajos literarios, también editará folletos y todo lo
que sea necesario para la cultura de los trabajadores." (39)

Generalmente la iniciativa de formar la biblioteca tenía su origen en la voluntad de


algún grupo, era este grupo el que asumía su organización y todo el trabajo que ello
implicaba. La Biblioteca Pública "Julio Rebosio" del Barrio Yungay, por ejemplo, se
había formado en el seno de la Unión de Laboradores en Madera, realizando algunos
beneficios para organizar un local, sin embargo, desaparecida esta entidad gremial, el
grupo impulsor de la Biblioteca, proseguiría su labor, esta vez, con el Centro de
Estudios Sociales "Julio Rebosio". Para 1924, nuevamente la biblioteca se
encontraba sin local, solicitando el grupo original,

"a los nuevos elementos que hoy surgen cooperar en la medida que puedan para
terminar la obra, y si el ambiente es propicio y previo acuerdo de las instituciones que
por esto se interesen, efectuaremos un beneficio. Por de pronto, pedimos a los
periódicos del interior y exterior nos remitan un ejemplar para nuestra mesa de
lectura, solicitamos al mismo tiempo el envío de folletos y libros para incremento de
la biblioteca.
Toda remisión hágase a nombre de la Biblioteca a casilla..., correo 4 Stgo, o al local,
Maipú 840" (40)

La mayoría de las veces quienes estaban a cargo de la biblioteca, era un grupo de


afinidad o comisión encargada. Era este grupo o comisión el encargado de llevar a cabo
la labor de atender la biblioteca, poner los horarios de atención, de prestar los libros,
etc.
Generalmente se ponía un horario en el cual el público (vecinos del barrio,
simpatizantes, etc.) podía visitar esta biblioteca. Se trataba de horarios accesibles para
los obreros, que tenían tiempo libre generalmente después de las 6 de la tarde, o los
días domingos. Por ejemplo, la Biblioteca del Centro de Estudios Sociales, inaugurado
formalmente a fines de 1902 en Santiago, se encontraba abierta

"todas las noches de 7 i media a 10" (41)

La Unión Local de la IWW en Santiago mantenía su salón de lectura funcionando

"todas las noches, acudiendo una infinidad de obreros". (42)

Hacia 1913, la Biblioteca de la Agrupación El Productor, por ejemplo, avisaba que

"los compañeros y amigos que deseen leer algún libro de esa biblioteca, lo pueden
solicitar al compañero Lezama los días domingos de entre 10 y 11 a.m. en el local de
nuestras reunión, Tocornal # 638". (43)

Algunas bibliotecas prestaban los libros a domicilio a sus afiliados. De la Biblioteca


"Los Andrajosos" (que funcionaba en Valparaíso durante 1908, a iniciativa de Luís A.
Simonetti) se señalaba en La Protesta:

"Ponemos esta Biblioteca Sociológica a disposición de los trabajadores y jóvenes


que comprenden en toda su hermosa magnitud el irresistible poder de avance de los
buenos libros, los compañeros más fieles del hombre...
Su función se reduce exclusivamente a prestar libros a domicilio, gratuitamente, sin
gravamen alguno para los lectores. Dirigirse: Subida de la Palma, 14. Este domicilio
es provisorio" (44)

Debido a esta modalidad, basada en la sola confianza, muchos libros se demoraban en


llegar o simplemente se perdían para siempre. Así por ejemplo, la Biblioteca La
Agitación hacia 1903 ponía el siguiente aviso:

"...se ruega al compañero que tiene el libro "Expresión del Rostro" por Luís Kuhne,
pase a dejarlo a casa de T. Osses, pasaje Lira 32" (45)

Lo mismo el Grupo Regeneración:

"Se ruega a los compañeros que tienen en su poder libros del Grupo
Regeneración, se sirvan devolverlos a la brevedad posible, pues se ha acordado dar
otros jiro a la biblioteca del grupo" (46)

A fin de combatir este problema, algunas Bibliotecas, además de prestar libros a


domicilio, se encargaban de dejar los libros en el domicilio del lector, ello, a manera de
facilitar su recuperación en caso de que el lector no lo devolviera a tiempo. Era el caso
de la biblioteca del Centro de Ilustración Amor i Libertad, que

"presta para su lectura, encargándose de llevarlas i mandarlas a buscar al domicilio...,


los pedidos de provincia se atienden por el correo. El plazo para devolver los libros
será fijado por el lector. Pídase catálogo de las obras a la casilla 988" (47)

Era común la realización de veladas a fin de reunir fondos pro biblioteca, ya fuera para
adquirir libros, arrendar un local o adquirir otros implementos necesarios. Así por
ejemplo, hacia noviembre de 1918, Verba Roja, en un artículo titulado, "Labrando
estatua" destacaba que,
"Los muchachos del Eliseo Reclus..., acaban de organizar para el viernes una lírica
jornada para adquirir fondos que demanda la adquisición de una biblioteca que se
pondrá a disposición popular.
Y esto, amigos, es levantar una estatua de amor, de verdad, de luz en el corazón del
pueblo. Es ponerle entre las manos las armas y las herramientas para que pelée su
pan y trabaje su libertad.
Esto es afirmarse, engramparse en las entrañas de la vida para ser más tarde árbol
que dará sombra al viajero, fuente que brindará agua al sediento, nido que dará
dulces tibiezas a los amantes que vienen: ¡nuestros hijos, compañeros!.
El programa es prometedor de momentos y emoción, de alegría, de luz. El cuadro
filodramático "Juventud", pondrá en escena "Los Mártires", varios compañeros y
compañeras declamarán poesías, otros cantarán nuestras canciones y Rebosio y
Pardo hablarán nuestras cosas. (lugar: Federación Carpinteros, en San Ignacio,
109, a las 20,30 hrs.) Terminará la velada con una baile familiar" (48)

Tanta importancia tenía la formación de esta biblioteca, que incluso desde la cárcel
Julio Rebosio azuzaría a sus compañeros para la aceleración de las actividades pro
biblioteca. (49)

Hacia 1922, la Unión en Resistencia de Tejedores, en Santiago, para la


conformación de una Biblioteca en la comuna de Quinta Normal "para el elemento
obrero", anunciaba a través de las páginas de La Federación Obrera la realización de
una "Grandiosa velada". Esta "función a beneficio para la fundación de dicha obra" se
llevaría a cabo

"en el Teatro Selecta, de calle Chacabuco esquina Mapocho, donde tomarán parte
artistas como los señores Lucho Barra, Manuel Vaché y varios otros..." (50)

Estos beneficios posibilitaba la obtención de libros de bajo costo, como los editados por
la editorial valenciana Sempere o Maucci, de Barcelona, que contemplaban colecciones
de bolsillo baratas. Armando Donoso, recordando sus propias ideas politico-sociales a
comienzos del siglo xx, señalaría:

"me hice socialista con dos o tres muchachos de mi curso (en un liceo talquino), por
directa y perentoria influencia de la Biblioteca Sempere (por tres o cuatro pesos,
¿quién no se convierte?)...leía..., a Kropotkin, Darwin, Engels, Reclus, Renán,
George... (51)
Del mismo modo, Ernesto Montenegro en "Memorias de un desmemoriado",
señalaría la importancia de la misma fuente, las cuales se vendían a peseta el tomo
(52)

Aunque llegaban con menos frecuencia, también se encontraban en las librerías obras
editadas por el Centro editorial La Presa, de Barcelona, que tenía una colección
llamada "Los pequeños grandes libros" que contaba con obras de Kropotkin, Reclus,
Bakunin y otros, a 25 y 50 céntimos el tomo (hay varios de estos ejemplares en la
Biblioteca Nacional). Eran tan baratas y diversas como las de Sempere y Maucci.

Para la formación de su biblioteca sociológica solicitaba la Agrupación El Productor


hacia enero de 1913:

"...a los centros editores de folletos, revistas o periódicos, nos envíen algunos
ejemplares; así mismo solicitamos de todos los amantes de la verdadera instrucción
del proletario, la donación de libros pasa para la biblioteca" (53)
Por su parte, la Biblioteca La Antorcha avisaba, hacia 1913:

"a todos los compañeros que nos donan libros, se abstengan de mandar manuscritos
entre los volúmenes porque en el correo abren los paquetes, multándonos como si
fueran cartas, lo cual no corresponde al valor de los libros. El Bibliotecario" (54)

En tanto la FOIC, de Valparaíso, con idénticos fines, señalaba hacia 1926:

"La sección Valparaíso de la FOIC, desea y quiere que sus miembros se ilustren para
obtener su mejoramiento moral.
Si Ud., está animado de estos mismos propósitos, obsequie un libro, y como en el
rejistro figuran de 1,500 federados, al cabo de algún tiempo contaremos con una gran
Biblioteca" (55)

Por su parte, con la misma finalidad de conformar una biblioteca, el bibliotecario de la


Federación de Zapateros, llamaba hacia 1919, a colaborar a todos para la realización
de la obra, ya que

"para el mayor éxito de esta gran obra es necesario que todos los obreros y los
hombres altruistas que aman la cultura del pueblo expongan un pequeño esfuerzo
ayudando, ya sea con un libro o algún objeto que sea necesario para el
establecimiento de nuestra Biblioteca. No dejéis el tiempo pasar y poner manos a la
obra..." (56)

Las donaciones siempre eran bienvenidas, y ellas podían venir de distintas tendencias de
la sociabilidad obrera y escenario cultural alternativo: demócratas, socialistas,
librepensadores, naturistas, positivistas, teosofistas, etc. Así por ejemplo, El Ácrata
manifestaba hacia julio del 1900 haber recibido una donación para su biblioteca de parte
de "don Valentín Letelier". Este folleto llevaba por título "La religión de la humanidad"
escrito por el positivista Juan Enrique Lagarrigue. (57)

Otras donaciones especialmente importantes provendrían de los librepensadores,


considerando que algunos anarquistas participaban a la vez en espacios del
librepensamiento, aunque también en espacios naturistas, teosofistas, feministas.

La modalidad del intercambio de material era frecuente entre los anarquistas. Ello se
realizaba tanto de forma individual como a nivel de grupos o entidades gremiales y
ciertamente, era fundamental para enriquecer las bibliotecas. Avisos referentes a ello
eran recurrentes en las páginas de los distintos órganos libertarios.

En las páginas de La Luz, podemos leer:

"Con el fin de formar una biblioteca destinada al pueblo trabajador escaso de saber,
avisamos a las personas interesadas en estudiar La Cuestión Social, o que se
interesen por la instrucción del pueblo, que el Centro de Ilustración Amor i
Libertad, compra, vende i cambia toda clase de libros de arte, ciencias i sociología"
(58)
"Un compañero desea adquirir ejemplares de los n° 1, 2 y 4 de La Agitación. Ofrece
dos ejemplares del folleto "Patria" de A. Hamon por cada número que se le envíe".
(59)

Desde luego también se daba el intercambio de material entre los grupos locales, y no
necesariamente de la misma tendencia. Así por ejemplo, se recibían los órganos
editados por las Mancomunales, los periódicos editados por los socialistas, demócratas o
mutualistas. Del mismo modo, en el terreno de las ideas, eran frecuentes los
intercambios con los librepensadores, feministas, naturistas, teosofistas, esperantistas,
etc. Todos ellos participaban de las "nuevas ideas", y tenían algunos puntos en común
con los anarquistas.

De modo que quien asistiera a aquellas bibliotecas podía recibir no sólo información y
conocimientos del terreno sindical o de las luchas sociales, sino más ampliamente,
recibir una cultura integral de la humanidad, perfilada por la senda del progresismo, el
laicismo y las ideologías de avanzada.

Nos hemos referido al intercambio de material, muy buena expresión del tejido de
relaciones que generaba la lectura. Vamos a concentrarnos específicamente en el
intercambio y sistema de relaciones que se generaba especialmente entre los grupos
anarquistas, ya que era éste esencial, no sólo para conformar las bibliotecas, sino
también para estrechar lazos de fraternidad y solidaridad entre los grupos anarquistas
del mundo entero, pero además, reforzar ideas, convicciones, disipar dudas, construir
identidad.

3) CONSTRUCCIÓN SOLIDARIA

Por lejos, la fuente principal de material para la implementación de una Biblioteca


Anarquista, se encontraba en la puesta en marcha de un sistema de relaciones
basadas en la reciprocidad que se expresaba en el sistema de canjes. Como quedó en
evidencia al abocarnos a los grupos de afinidad, una de las primeras tareas de los
libertarios era poner en circulación algún material escrito (periódico o folleto) en el que
se dieran a conocer sus ideas, el cual, era fundamental, su envío a los demás grupos
anarquistas, a modo de entablar a través de ello, una serie de relaciones que
comenzaban con la retribución por parte del grupo receptor del material enviado, del
periódico, folleto, o simple carta. Así se comenzaba a tejer todo un sistema de
relaciones que muchas veces terminaba en giras de propaganda y otras influencias,
como veremos.

Para las bibliotecas, entrar en este sistema de relaciones y comunicacional, era


fundamental. De otra forma no se explica la riqueza del material del que muchas
bibliotecas anarquistas disponían. No por nada, cada grupo con anhelos de conformación
de alguna biblioteca, publicaba avisos como estos:

"Grupo de Estudio y Propaganda "Regeneración". Pedimos a los compañeros i


grupos editores nos envíen toda clase de impresos sobre sociología -Dirección:
Agustín Saavedra G. -Correo núm. 4, Santiago de Chile. (60)

Grupo Libertario "Caballeros de la Vida". Este centro de estudios sociales solicita


el envío de periódicos y folletos de propaganda libertaria. Dirección Juan D. Figueroa,
correo nª 2 Valparaíso (61)

De Buenos Aires el Grupo "Los Malhechores Honrados" pide se le envíen toda


clase de periódicos sociológicos. Dirección: O. García, casilla 402, Buenos Aires." (62)

Ello era igualmente válido para los grupos nacidos de las sociedades gremiales. Así por
ejemplo, El Vaporino, de la Unión de Tripulantes Marítimos, solicitaba hacia 1903:

"a todas las publicaciones que enviamos El Vaporino, rogamos se nos retribuya el
canje para poder fundar una biblioteca de lectura para obreros" (63)

La Unión i Resistencia de Zapateros de Valparaíso, hacia 1915, ponía


"en conocimiento del gremio en general" la labor emprendida en cuanto a la
organización de su "Biblioteca Sociológica",

la que, por la vía del canje y la solidaridad, ya contaba

"con 60 volúmenes entre folletos y libros científicos".


"Con esto pedimos a los amantes de la instrucción se dignen enviarnos periódicos que
sean repartidos entre los asistentes en las sesiones. Dirección postal: Colón nª 30
Valparaíso a nombre de la Federación de Zapateros - Luís Castro

-nota: preferimos periódicos extranjeros" (64)

Se trataba de una vía alternativa a las establecidas. En ella se ponían en evidencia


fuertes expresiones identitarias del anarquismo, a saber, su internacionalismo (al
recibirse material de grupos de distintas partes del mundo), la solidaridad, la
reciprocidad entre los grupos, las redes de apoyo, etc. Dijimos que lejos era la vía más
utilizada por los anarquistas para conformar sus bibliotecas alternativas. A pesar de las
restricciones impuestas por los Estados para adquirir libros o folletos, de parte de los
grupos y sociedades libertarias, se imponía la solidaridad, logrando hacer circular una
importante cantidad de publicaciones, especialmente periódicos, llegados todos por la
vía del canje. Se recibían publicaciones de distintas partes del mundo: Argentina,
Uruguay, Perú, España, Francia, Estados Unidos, Italia, Portugal, Bélgica, incluso China,
escrito en esperanto. (65)

Con todo el material recibido por esta vía el grupo El Ácrata tenía la idea de "instalar"
una biblioteca sociológica,

"que estará a disposición del público. Pronto anunciaremos el local i horas en que
pueden concurrir las personas estudiosas de la sociología a leer obras morales i
útiles". (66)

La forma en que estas bibliotecas se conformaban pone en evidencia un sistema de


relaciones muy distinto al practicado en el sistema capitalista. No hacía falta dinero, o al
menos no era el elemento fundamental. Importaba ante todo, poner en funcionamiento
las redes libertarias, vitales al momento de poner en funcionamiento todo un sistema
basado en la solidaridad y ayuda mutua entre los libertarios, que superaba las
estructuras impuestas por los Estados. Desde luego no hablamos de que las bibliotecas
de hayan formado exclusivamente por esta vía solidaria (como veremos en las
correspondencias de los grupos, muchos materiales se enviaban previo estar suscrito y
haber enviado el jiro correspondiente), pero sí, podemos afirmar, que la inmensa
mayoría de las publicaciones, lo hacían por la vía solidaria y del intercambio recíproco.

En el cuadro que sigue he realizado un seguimiento del material recibido por los
distintos grupos anarquistas, centrándome en los periódicos y hojas de propaganda. Por
su importancia durante los primeros años de propaganda anarquista, he trabajado con
los Grupos El Ácrata, La Campaña, La Agitación, La Luz, Regeneración, Jerminal!
y La Agitación (Estación Dolores). Con ello, tratamos las publicaciones recibidas entre
1899 y 1905

PROCEDENCIA TÍTULO FORMATO


Revista Trae artículos inéditos de los mejores i más
España La Revista Blanca
inteligentes intelectuales libertarios de Europa
Francia Les Temps Nouveaux Revista
Buenos Aires La Protesta Humana Periódico
Francia La Hoja del Soldado Hoja de propaganda Antimilitarista
Egipto, Alejandría La Tribuna Libera Diario escrito en italiano i francés
Chicago La Protesta Umana Periódico anarquista escrito en italiano
Paterson (EEUU) Germinal Periódico anarquista escrito en italiano
Buenos Aires El Rebelde Periódico anarquista, antiorganizador
Chicago El Resistente Periódico anarquista
Mahon, Islas Baleares, España El Porvenir del Obrero Periódico anarquista
Barcelona Tierra y Libertad Periódico anarquista
Barcelona La Huelga General Periódico anarquista
Buenos Aires El Sol Revista, dirigida por Ghiraldo
Rosario Solidaridad Periódico anarquista
Montevideo La Rebelión Periódico anarquista
Cádiz El Proletario Periódico anarquista
San Pablo, Brasil La Voz del destierro Hoja de los deportados de Argentina
Buenos Aires “La Voz de la Mujer” Periódico Anárquico-Comunista
semanario satírico, humorístico y anticlerical que se
Buenos Aires “El Infierno”
publica en Buenos Aires
Madrid La Voz del Cantero
Murcia El Obrero Moderno
Publicación anarquista, que se publicaba en Italiano y
Suiza Le Riveil
en Francés
Italia Il Grito della Folla, Milano
Messina L’ Avenire Sociale
Trampa, Florida (Estados
El Federal
Unidos)
Londres Freedom Publicación anarquista
Paris L’ Humanité Nouvelle Publicación anarquista
Publicación anarquista que aboga por el neo-
París La Regeneration maltusianismo; próximamente nos ocuparemos de
esta importante revista.
Buenos Aires L’ Avenire Publicación anarquista en italiano
“que publica nuestro valiente compañero Sebastián
(Mahon, España) El Libre Concurso
Souñé”
La Habana, Cuba
Nuevo Ideal redactado por Palmiro de Lidia...
San Pablo, Brasil O Amigo do Povo
órgano del gremio de cocheros de Buenos Aires,
Buenos Aires El Gremio
Corrientes 989
Buenos Aires, Rivadavia 224 El Combate
“que se preocupa mucho de los frailes y de la tiranía
de que son objeto...como si en el Perú fuesen sólo
Lima El Libre Pensamiento
los frailes hechos para esquilmar al pueblo”

A Obra.
Portugal importante semanario
El Boletín de la Escuela “Todo lo que podríamos decir sobre esta publicación
España
Moderna sería inferior a la verdad”
Barcelona El Productor Publicación anarquista
Sevilla La Aurora
Bélgica
Le Rebeil de Traballeurez
Bélgica
Rue des Glasis Liege
“valiente semanario que todos los compañeros de
Italia Il Grito della Follo lengua italiana debieran leer. Correo caselle Postal
309, Milan”
Buenos Aires. El Obrero
Buenos Aires. La Nuova Civiltá
Montevideo La Tribuna Libertaria redactado por Pascual Guaglianone
Nueva York El Despertar periódico anarquista, se publica en New York
Nueva York Volné Lisly
Paterson. La Questione Sociale
Paterson L’ Aurora Publicación anarquista
Tampa, Florida La Federación
Tampa, Florida La Voz del Esclavo. Publicación anarquista
Brasil El Diritto
Brasil Palestra Social
Revista mensual de sociología, artes i letras. Se
publica en Buenos Aires. Con colaboraciones de
Ciencia Social Kropotkin, Reclus, Grave, Malatesta, Gori, Hamon,
Buenos Aires
Mella, etc. Ilustrada con bellos fotograbados de los
más ilustres pensadores del anarquismo.
Administrador, Fortunato Serantoni, Corrientes 2041.
Almanaque Ilustrado de la con efemérides históricas, artículos de sociología,
Buenos Aires Questione Sociale, para bocetos literarios, poemas i canciones libertarias i
1899. una variedad de grabados mui hermosos...,
Rosario El Trabajo
Cilio Esperantista órgano de la lengua Internacional Esperanto, el n° 7
viene en esta lengua y castellano, y trae 6 pájinas de
lectura
Trujillo, Perú La Antorcha “que dirije don Julio Reynaga”
Barcelona Natura Publicación anarquista
La Coruña Prácticas Modernas
Buenos Aires La vida natural
Buenos Aires La Internacional
París La Huelga General Publicación anarquista
Barcelona Salud y Fuerza Publicación anarquista
Barcelona Tribuna Ferroviaria
Madrid La Federación
La Coruña Germinal Publicación anarquista
Mataró El Nuevo Ideal Publicación anarquista
Jaén Látigo Obrero Publicación anarquista
Murcia El Obrero
Berlín Der Anarchist Publicación anarquista
San Francisco de California La Protesta Humana Publicación anarquista
Unión Obrera y Obrero
Puerto Rico
Libre
La Habana Tierra! Publicación anarquista
Montevideo El Obrero
Buenos Aires La Organización Obrera De la FORA
Buenos Aires El Gráfico
Rosario de Santa Fe Aurora Social Publicación anarquista
Lima Los Párias Publicación anarquista
Sullana (Perú) Los Oprimidos Publicación anarquista
La Coruña El Corsario Publicación anarquista

Debemos hacer una distinción entre aquellas publicaciones que mantenían cierta
constancia en el envío de material, y aquellas publicaciones esporádicas, que no siempre
visitaban los salones de las Bibliotecas locales, o que desaparecían al poco tiempo. Al
respecto, debemos señalar que uno de los periódicos de mayor constancia durante estos
años, fue La Protesta de Buenos Aires. Del mismo modo, los Boletines de la Escuela
Moderna y La Revista Blanca.

Con posterioridad, La Batalla sería la agrupación que revelaría mayor cantidad de


contactos, como bien se desprende de esta lista de periódicos recibidos entre 1912 y
1916.

Es elocuente lo que señala González Vera para referirse a los periódicos que recibía La
Batalla:

"agradábame sobremanera ver un periódico anarquista de Pekín, escrito en chino y


esperanto" (67)

No obstante, este contacto al parecer no incursionaría más allá del intercambio de


material cultural, en este caso, de periódicos, siendo los contactos más importantes de
La Batalla, los cultivados con algunos grupos trasandinos (especialmente con el grupo
La Protesta y la FORA), Perú (La Protesta y la FORP), Panamá (Agrupación
anarcoindividualista), de España (especialmente con El Libertario, de Gijón),
Uruguay, Estados Unidos y Canadá. La lista siguiente, muestra algunos folletos y libros
recibidos durante los primeros años del siglo XX por los grupos locales.

PERIÓDICO PROCEDENCIA COMENTARIO


El Libertario Gijón
Tierra y Libertad Barcelona
La Unión Ferroviaria Barcelona
Acracia (spl Tierra y Libertad) Barcelona
El Porvenir Obrero Mahon
Salud i Fuerza Barcelona revista neomalthusiana. Su material de lectura como siempre interesante.
El Combate Chacabuco Florencio González
El Manifiesto Buenos Aires Antillí y Pacheco
La Anarquía Buenos Aires CORA
El Pintor Buenos Aires
A Prepararse Buenos Aires
El Obrero Panadero Buenos Aires
La Rebelión Rosario
Revista Estudios Rosario Enrique Nido
Nuevos Rumbos Mendoza
Libre Exámen Bolívar, Argentina
Buena Semilla Buenos Aires
Ciencia Social Buenos Aires
Revista Ideas y
Buenos Aires
Figuras
La Escuela Popular Buenos Aires
Alba Libertaria Bahía Blanca
¡Odios! Tucumán dirigido por Juan Giovetti
El Obrero Entrerriano Paraná
Les Temps Nouveaux París
Le Libertaire París
La Buena Senda Montevideo
El Anarquista Montevideo
El Cocinero Montevideo
El Libertario Montevideo
Nuevos Rumbos Montevideo
Liga de Educación Integral. Interesante revista de educación científica que
Revista Infancia Montevideo
se publica en el Uruguay...
Anarko Montevideo
Tierra Libre Paraguay
Tierra! La Habana
Fiat Lux La Habana
Regeneración México
Fuerza Conciente California, EEUU.
“portavoz de los obreros industriales del mundo con buenos artículos
Cultura Obrera Nueva York
educativos de propaganda y organización”
Il Libertario Speza, Italia
Volontá Ancona
Freedom Londres
La Protesta Lima
La Protesta Buenos Aires
El Jornalero Trujillo, Perú
Luz i Vida Antofagasta
La Protesta Santiago
El Productor Santiago
La Gran Federación Obrera Santiago
El Gallo Santiago Librepensadores
Mar i Tierra Valparaíso
El Martillo Antofagasta
Luz i Defensa Santiago Gremio de zapateros
El Paladín Santiago Neomalthusianista, naturista, Librepensador, Abel Cuadra Silva
El Maletín Santiago
La Nueva Aurora Santiago
El Proletario Santiago Segundo Tello
Acción Obrera Antofagasta
El Socialista Santiago
El Despertar de los
Curicó
Trabajadores de Curicó.

La lista siguiente, muestra algunos folletos y libros recibidos durante los primeros años
del siglo XX por los grupos locales:
OBRA AUTOR PROCEDENCIA
La Sociedad Moribunda Grave Librería Sociológica, Bs. As.
Memorándum Esteves Librería Sociológica, Bs. As.
Entre Campesinos Malatesta Librería Sociológica, Bs. As.
La Religión y la Cuestión Social Altair (Mariano Cortés) Librería Sociológica, Bs. As.
El Amor Libre C. Albert Librería Sociológica, Bs. As.
Cancionero Revolucionario
Librería Sociológica, Bs. As.
Ilustrado
¿Dónde está Dios? Librería Sociológica, Bs. As.
Perche sismo anarchici
S. Merlino Librería Sociológica, Bs. As.
Conferencias sociológicas Pellicer Paraire Librería Sociológica, Bs. As.
Sobre Ciencia Social Félix Basterra La Protesta Humana, Bs. As.
Cancionero revolucionario Librería Sociológica, Bs. As.
La Anarquía ante los tribunales Gori Librería Sociológica, Bs. As.
El Primero de Mayo Gori Librería Sociológica, Bs. As.
Educación y autoridad paternal A. Gerard Los Ácratas, Barracas, Bs. As.
La Ley y la Autoridad Kropotkin Los Ácratas, Barracas, Bs. As.
La Anarquía se impone Palmiro de Lidia Los Ácratas, Barracas, Bs. As.
En tiempo de elecciones Malatesta Los Ácratas, Barracas, Bs. As.
Psicología del Socialista
Hamon Grupo Ciencia y Progreso, Rosario.
anarquista
La esclavitud antigua y la
E. Z. Arana Grupo Ciencia y Progreso, Rosario.
moderna
Círculo Internacional de Estudios Sociales,
Fundamentos Elementales de
E. Milano Montevideo
la anarquía
Círculo Internacional de
Los objetivos de la sociedad teosófica Arnaldo Mateos Estudios Sociales, Montevideo

Círculo Internacional de
Utopía E. Bianchi
Estudios Sociales, Montevideo
La Familia Merlino El Obrero Panadero, Bs. As.
Lo que quieren los anarquistas Henri Dhorr El Obrero Panadero, Bs. As.
El Obrero Panadero, Bs. As.
Socialismo y Anarquismo Grave
Crítica al Proyecto González J. Alberto Castro y C. Balsas Grupo La Aurora, Bs. As.
La Moral Anarquista Kropotkin La Protesta Humana
Clariá
El Porqué de la Huelga general Huelga General, Barcelona
Fundamento y
lenguaje de la Altair Librería Sociológica, Bs. As.
doctrina anarquista
La sociedad, su pasado, su Ciencia y Progreso, Rosario
E. Z. Arana
presente y su porvenir
La Protesta Humana
Elementos de anarquía Clemens
Dolor Universal Faure, S. Librería Sociológica, Bs. As
La sociedad futura Grave Librería Sociológica, Bs. As
Palabras de un rebelde Kropotkin Librería Sociológica, Bs. As
La conquista del pan Kropotkin Librería Sociológica, Bs. As
Los Nuevos Caminos Ghiraldo El Sol
Ni dios ni patria B. Mota El Rebelde, Bs As.
Hacia la dicha Faure Librería Sociológica, Bs. As
El problema de la población Faure
El ideal del siglo xx Palmiro de Lidia Escuela moderna
El obrero moderno Anselmo Lorenzo Escuela moderna
La sociología en la escuela Clemencia Jacquinet Escuela moderna
La política y sus prejuicios J. Prat
La responsabilidad y la
Nettlau
solidaridad en la lucha obrera
Los orígenes del cristianismo Escuela Moderna
La anarquía y la iglesia P. Robin Escuela Moderna
Compendio razonado de Gramática Española Fabian Falosi; Escuela moderna
Historia Universal Clemencia Jacquinet Escuela moderna
Silabario, método
Celso Gomis Escuela moderna
racional de lectura progresista
Las aventuras de Nono Grave Escuela moderna
Resumen de Historia de España Nicolás Estévanez Escuela moderna
El Hombre y la Tierra Reclus Escuela moderna
Filosofía del Anarquismo por C. Malato.
Campos, Fábricas y Talleres Kropotkin
La jornada de Trabajo José Ingenieros

Generalmente las bibliotecas libertarias se componían de folletos y periódicos


enviados desde distintas zonas del mundo. Desde luego tampoco faltaban algunos
libros, pero éstos se enviaban excepcionalmente siendo los periódicos y folletos los que,
por esta vía, tenían mayor circulación.

Si revisamos algunas correspondencias de los mismos grupos ya señalados, podemos


comprobar el prolífico "trafico" de material cultural establecido, especialmente con los
grupos del la región del Río de la Plata, de España, Estados Unidos. No en vano ya hacia
1896 se señalaba en El Grito del Pueblo:

"Las ideas para esparcirse no respetan nada. Atraviesan el Atlántico para llegar a la
cosmopolita Buenos Aires y encontrar adeptos por miles. Atraviesan la Cordillera de
los Andes para establecerse en el indolente Chile y convertir a los hijos del pueblo,
acostumbrados a besar la mano del verdugo que los azota, en hombres libres que
luchan por emanciparse de la tutela burguesa. Las ideas redentoras del socialismo,
después de haberse enraizado profundamente en el proletariado argentino, penetran
en Chile y comienzan su obra benéfica. El Centro Social Obrero, se funda bajo esta
bandera" (68)

El ejercicio nos servirá además para enterarnos de las obras que componían las
bibliotecas anarquistas y enterarnos un poco más de sus contenidos. Además, de
este modo, podemos conocer más a fondo quienes en definitiva eran los agentes que
enviaban este material. Tanto para los grupos El Ácrata, La Luz, La Agitación y
Regeneración se repiten contactos como, por ejemplo, E. Z. de Arana, del grupo
Ciencia y Progreso, de Rosario, Santiago Locaccio (autor de "Rasgos Sociales",
1899, quien además enviaría al grupo El Ácrata algunas cartas), Francisco Berri (R.
Osita), del Obrero Panadero y por entonces administrador de La Protesta Humana.
Del mismo modo, el Director de este órgano, Gregorio Inglán Lafarga, y uno de los
redactores, el catalán José Prat (quien a fines del siglo XIX se establecía un tiempo en
Argentina, para posteriormente regresar a España). A. Scopetani, era director Nuova
Civilità. Manuel Reguera (J. Mayorka), quien dirigía el órgano de tendencia
antiorganizadora, El Rebelde. Por su puesto era importantísimo el contacto con
Fortunato Serantoni (ex El Perseguido), quien en 1897 editaría la revista Ciencia
Social "revista mensual. Sociología, artes y letras" (que toma el nombre de una famosa
publicación anarquista de Barcelona). Por esta misma época Serantoni emprende la
formación de la Librería Sociológica, (ubicada en Corrientes, 2039-2041) de gran
acción propagandística, gran foco de difusión de las ideas, no sólo por encontrarse allí
publicaciones de la diversidad de grupos anarquistas porteños, sino por su acción en
cuanto a edición de folletos.

Vale destacar, que todos estos grupos estaban a favor de la organización, en contraste
con los grupos "antiorganizacionales" trasandinos de fines del siglo XIX.

En Montevideo era el Círculo Internacional de Estudios Sociales el que


fundamentalmente se mostraba en contacto con los grupos locales, además Pascual
Guaglianone, director de Tribuna Libertaria, en Montevideo (previo paso por Buenos
Aires).

Más débiles resultan los contactos con los grupos de España (Revista Blanca, de
Madrid, El Trabajo, de Cádiz) y Estados Unidos. El grupo que mayor contacto
expresaba tener con grupos residentes en EEUU era La Luz, que (además de acusar
recibo de una amplia gama de material cultural, entre periódicos, folletos y libros, de
Buenos Aires, Bahía Blanca -F. Germonetto-), manifestaba mayor dinamismo con
grupos como La Protesta Humana, de Chicago (importante revista dirigida por el
inmigrante italiano Ciancabilla), pero también con La Escuela Moderna, de Barcelona
e I. Clariá, director de La Huelga General, periódico de la misma ciudad.

Las publicaciones locales a su vez eran recibidas en otras partes del mundo. Nos fue
muy grato, por ejemplo, ver entre las colecciones de publicaciones anarquistas de viejos
compañeros residentes en Buenos Aires, algunas ediciones de La Agitación o La
Batalla, o folletos de la editorial LUX o Rebelión de Santiago. Además, ello se puede
comprobar al revisar las correspondencias de algunos grupos de Buenos Aires.

En Ciencia Social (revista mensual de sociología, artes y letras, administrada por


Fortunato Serantoni en Buenos Aires), hacia 1899, señalaban haber recibido del
"Esterior" La Antorcha, que

"en marzo último comenzó a publicarse en Valparaíso (Chile) una revista mensual de
sociología, arte, ciencia, filosofía y variedades"
"El primer número llegado a nuestro poder trae selecto material de lectura, abonado
por conocidas firmas. Sus directores Carlos Garrido Merino y Francisco Garfias.
Las comunicaciones todas deben dirigirse a casilla 2034 Valparaíso. Al enviarle
nuestro saludo deseándole mucho éxito en la empresa" (69)

En el número siguiente Ciencia Social había recibido: The Workens Friends, de


Londres; El Nuevo Ideal, de la Habana; Free Society, San Francisco, Estados Unidos;
Freedom, Londres; El Rebelde, Santiago de Chile; La Questione Sociale de
Paterson, Estados Unidos. Reciben también La Campaña, (70)

En La Protesta Humana (a partir del 7 de noviembre de 1903, pasa a llamarse La


Protesta), de Buenos Aires, hacia fines de mayo de 1902 encontramos:

"Con el título de El Martillo ha comenzado a publicarse en Valparaíso otra hoja de


propaganda anarquista, redactada por nuestro compañero Magno Espinosa.
Bienvenida y prolífica propaganda. Dirijirse a la casilla correo 788 para la
correspondencia" (71)

Magno Espinosa, mantenía vínculos importantes con los anarquistas trasandinos.


Además de ser corresponsal para La Protesta (junto a Lombardozzi) y de mantener
contactos con grupos libertarios de Mendoza, los libertarios de allende los Andes le
confiaban sus relaciones con los demás grupos del mundo. Así en La Protesta de
Buenos Aires encontramos:

"A los periódicos, grupos y compañeros del mundo.


Habiendo en el correo de esta capital secuestrado la expedición del folleto "Nuestro
Ideal" de Pedro Cabezón, que hice el año pasado, advierto a los periódicos, grupos y
compañeros del mundo entero, hagan sus pedidos a Magno Espinosa, correo 3
Santiago, para mandarles en paquetes certificados y eviten de esta manera se
pierdan en el correo. Se admiten canjes" (72)

El mismo órgano acusaba recibo de:

"El Proletario. Con el rubro que encabeza estas líneas, acaba de aparecer en
Valparaíso un nuevo órgano defensor de la clase obrera. Nuestro saludo.
La Protesta del Panadero. En Santiago de Chile aparece desde poco tiempo atrás
este colega revolucionario, cuyo número 5 tenemos a la vista.
El Vaporino. De Valparaíso, hemos recibido el número 1" (73)

Hacia mediados de 1904 el mismo periódico acusaba recibo desde Chile de:

"Luz. Tal se titula un nuevo colega aparecido en Concepción, órgano del Hogar
Armonista "Eliseo Reclus" fundado en Chile.
Los Parías, de Chile, recibimos el número 4". (74)

Por su parte, como consecuencia de los contactos de Lombardozzi (75), hacia 1905
también se habían agilizado los contactos con grupos de Bahía Blanca.

El 18 de mayo de 1905 L' Agitatore había recibido:

"Panthesis, revista mensual de sociología, arte, etc... Dirección Santiago de Chile


correo central, casilla 2262”.

Y tiempo después acusaba recibo


"dal Chile- "La Agitación", Estación Dolores Tarapacá" y "Panthesis", rivista mensile di
sociología, art, etc., de Santiago de Chile"

A su vez, en su sección Comunicado, se señalaba de un libro que sería editado en Chile,


llamado "Veinte siglos de lucha",

"próximamente entrará en prensa la última edición de esta importante obra, que


constará de un tomo de 500 pájinas. En ninguna casa debe faltar este libro.
Las personas que deseen ser agentes en cualquier punto de América o España pueden
pedir los prospectos que les mandarán gratuitamente a vuelta de correo.
Alguien ha dicho: "Leed y seréis grande y sabio" y esta es una gran verdad.
Dirección: Santiago de Chile, correo casilla 10-76 A. E. Schideck. i. s." (76)

En su sección, Piccola Posta denotaba estar en contacto aún con Lombardozzi, el cual,
después de ser expulsado de Chile hacia 1904, se encontraba en Perú:

"Perú y Lombardozzi- Ricevuto giornali, grazie, continua a mandare carta saluti"


(77)

4) PRODUCCIONES DE LOS GRUPOS LOCALES

Sin embargo, acompañando esta vía del canje para la formación de bibliotecas, estaba
el permanente trabajo de edición, de periódicos, pero también de folletos de
propaganda. El folleto sería al respecto el formato más utilizado por los anarquistas.
Había en ello, desde luego, una cuestión de economía, pero también de comodidad y
fácil circulación, una cuestión práctica. Pero también incidía el hecho de que muchas de
las obras anarquistas que se seleccionaban para su reproducción eran breves, y ello
debido a que se esperaba que cumplieran un rol práctico, dinámico, que se leyeran y
que luego corrieran de mano en mano, y que el lector no se complicara leyendo una
obra difícil de entender. De hecho, al momento de explicar las razones de que con tan
pocos recursos se haya logrado una difusión tan intensa, debemos acudir a esta
explicación: hacia octubre de 1911, en carta del anarquista boliviano Miguel Esprella
(del Centro Instructivo Luz i Vida de Antofagasta) a Teodoro Brown, de la
Sociedad de Resistencia Oficios Varios, de Santiago, Esprella felicita a Brown la
iniciativa de editar folletos, y a la vez manifiesta la eficiencia de la propaganda por esta
vía.

"Enterado de vuestra carta cábeme, en primer término, felicitaros por la iniciativa que
habéis tomado de propagar nuestro ideal por medio del folleto, que es, según la
práctica lo ha demostrado, el mejor medio de propaganda, a cuyo efecto habéis
editado "A los jóvenes" fragmento de "Palabras de un rebelde" de P. Kropotkine.
Nosotros deseamos que nos mandéis un cierto de estos folletos, cuyo valor os
remitiréis a vuelta de correo.
Sino tenéis inconveniente, mandadnos todos los folletos que ha editado el grupo "Los
Precursores", uno de cada folleto, para escoger de ellos los que nos parezcan
mejores.
Os saluda a nombre del Grupo.
Salud y fraternidad
Miguel Esprella". (78)
Varios grupos se especializarían en la edición de folletos. Es el caso, por ejemplo, en
Santiago, del Grupo que daba vida durante los primeros años del siglo XX a la "Casa
Editora La Educación Libertaria", iniciativa de Nicolás del C. Orellana. Entre 1901
y 1902 este grupo había logrado editar una serie de folletos, que lucían en las distintas
Bibliotecas anarquistas de entonces.

TÍTULO AUTOR
“Patria” Hamon
“El Primero de Mayo” Nicolás del Carmen Orellana
“A los jóvenes” Kropotkin,
“Los males sociales, su único remedio” Emilio Z. Arana.
“Los crímenes de Dios” S. Faure
“Santos Caserío” P. Gori

La imprenta que los sacaba a luz, era la misma que durante buen tiempo sacaría el
periódico La Agitación, es decir, la Imprenta "El Sol", calle Serrano 322 (79)

Al respecto se señalaba en el primer número de La Agitación:

"llamamos la atención de los compañeros, hacia la necesidad de adquirir estos


folletos, tanto para hacer una buena propaganda en el país, como también para
estimular a los sostenedores de la casa editora para que puedan seguir con la
publicación de otros buenos trabajos" (80)

Una labor similar emprendía por entonces la Biblioteca El Martillo, de Valparaíso, por
la cual se editarían folletos como Nuestro Ideal,

"escrito por nuestro compañero Pedro Cabezón" y A mi hermano campesino, de


Eliseo Reclus.” (81)

Tiempo después, hacia 1904, surgirían los folletos del Centro de Ilustración Amor i
Libertad. La iniciativa partiría del zapatero Policarpo Solís Rojas, quien,
anteriormente, había habilitado en su taller "Los Mártires de Chicago" un espacio para
una biblioteca. Con el tiempo, su colección de libros iría en aumento, y decidiría abrir
una biblioteca. (82)

"La Peste Religiosa", "este el nombre de un folleto con que el Centro de Ilustración
"Amor y Libertad", de Santiago inicia una serie que seguirá dando a luz para formar
su biblioteca social.

“Estos folletos están dirigidos principalmente al pueblo, a la clase trabajadora. Quien


desee obtenerlo puede dirigirse al mencionado Centro: correo central, casilla 988,
Santiago".

Se trataba de una obra original de Juan Most hecha a la versión castellana por Ross y
editado por el Centro de Ilustración Amor i Libertad. (Tierra y Libertad, de
Casablanca (83)

Formaban parte de esta colección también la recopilación, hecha por el mismo


Policarpo Solís Rojas de "Poesías Ácratas" (2 vol.), editadas por la Biblioteca
Económica del Ateneo Obrero.

Al parecer este mismo Centro fue el responsable de la edición del folleto de Marcial
Lisperguer, por entonces obrero tipógrafo, y gran luchador por la causa: "Hacia la
Redención Humana. Productores, Zánganos y Parásitos", editado en 1904 por la
Imprenta Internacional, la misma (al parecer) que desde junio de 1902, editaría La
Agitación.

En la contratapa de esta obra se advierte:


"el autor de este folleto, rompiendo con todo exclusivismo, declara que la obra no
tiene propiedad, pudiendo de esta suerte imprimirla quien quiera, sea por vía de lucro
o de propaganda" (84)

Este folleto cruzaría el Atlántico, siendo enviado a los grupos residentes en la región
española. Sobreviviendo hasta el día de hoy, en que las investigaciones de Lily Litvak y
Javier Navarro han comenzado a escarbar estas viejas ediciones. En Santiago, en la
Biblioteca Nacional, aún sobrevive también un hermoso ejemplar.

Algunos otros folletos editados por estos años fueron: La Cuestión Social, Víctor Soto
Román,

“en él se desarrollarán dos interesantes temas: "El principio de autoridad" i el


"Derecho a la propiedad". Vendrá precedido de un prólogo de Escobar i Carvallo.
Esperamos que los compañeros i obreros estudiosos ayudarán esta obra que está
llamada a desenmascarar estos dos tópicos que sirven de base a la actual sociedad
capitalista.
Los que deseen obtener este folleto deben dirijirse a Alejandro Escobar i Carvallo
casilla 1306 correo, Santiago, acompañando su valor, 20 centavos, en estampillas de
correo." (85)
"es el segundo que sobre la materia se publica en Chile, i está escrito con un estilo
sencillo i original que lo hace comprensible a todas las inteligencias. Creemos demás
recomendar su lectura, pues él se impondrá por sí sólo entre los que se interesan por
conocer nuestros ideales" (86)

El mismo Víctor Soto Román, escribiría el folleto "La Mentira Cristiana", también de
amplia difusión entre los círculos obreros y espacios culturales alternativos de estos
años.

Los distintos grupos anarquistas se encargarían de editar constantemente folletos de


propaganda. Algunos de ellos, cumplían una función práctica, especialmente cuando se
trataba de organizar sociedades de resistencia. Así por ejemplo, como forma de
incentivar a la organización de resistencia, con el título de "Defensa contra la
esplotación capitalista" la Unión Mártires del Trabajo de Zapateros de Valparaíso
(grupo de afinidad y resistencia), había publicado hacia 1906 "un folleto de 15 pájinas".

"En estilo sencillo i conciso están expuestos en este folleto aquellos


conocimientos tan elementales que necesita estudiar el obrero para luchar por
su emancipación económica" (87)

Hacia el mismo año, labor importante también en cuanto a la edición de folletos la


cumplía el grupo El Oprimido.

Hacia septiembre de 1906 solicitaba ayuda para publicar "A mi hermano el campesino",
de Reclus,

"será un tiraje de 20,000 ejemplares, para satisfacer los pedidos que nos hagan al
por mayor"

En tanto que ya estaba en circulación "El primer problema social" y "Emancipación


económica". (88)
Pero entre los anarquistas no circulaban solamente ediciones realizadas por ellos. Los
mismos demócratas realizaban también un intenso trabajo de ediciones en formato
folleto. Muchos de los cuales, también formaban parte de las bibliotecas. El diario
demócrata La Reforma, por ejemplo, hacia 1907, señalaba que

"dentro de pocos días empezaremos a editar folletos para destinarlos a la propaganda


y cuya venta se procurará hacerla en las mejores condiciones.
Pedimos la cooperación de todos los grupos de propaganda que son los llamados a
introducir en todos los centros obreros los folletos que lleven educación e ideas de
asociación a los obreros. (...)
Tenemos ya en prensa:
La Pampa Esclava, poesías, de Alejandro Escobar i Carvallo.
Dios i el Herrero, diálogo, por Alejandro Parra.
Homoliber, biografía alegórica, por Alejandro Escobar i Carvallo. (89)

En el seno de la Mancomunal de Valparaíso, los demócratas editarían hacia 1907 un


folleto con la vida de E. Dubois, quien, encontraría las simpatías del pueblo porteño,
cuestión que se aprecia hasta el día de hoy, siendo su tumba una de las más visitadas
del cementerio en Playa Ancha.

Con motivo de la Matanza de Santa María de Iquique, distintos grupos obreros, se


editarían buena cantidad de recopilaciones de poemas, "estudios sociológicos",
cancioneros, casi todos en formato de folleto. (90)

Del mismo, era prolífica la labor editorial realizada por los librepensadores, feministas,
socialistas, naturistas, etc. todos los cuales participaban del ámbito de las "nuevas
ideas", y del mundo de la sociabilidad obrera.

Desde 1910, importante labor en la producción de folletos cumplirían la Biblioteca Luz


i Vida en Santiago, y el Grupo La Protesta, ambos realizaban sus impresos en la
imprenta Franklin.

Es el caso de "Trabajador, no votes; Soldado, no mates", por


Girault, folleto de 29 páginas, editado en 1911 por la Biblioteca
Luz i Vida en Santiago. En su interior encontramos dos diálogos.
El primero, entre un elector y un anarquista, en el cual este último
expone las razones por las cuales no se debe votar.

Un trozo de este diálogo señala:

-Elector: ...es necesario enviar compañeros a las Cámaras, y


cuando sean mayoría, haremos lo que tú dices, estos es, la
revolución.
-Anarquista: podría probarte que eso es una utopía, pues cuando
los individuos se hallan en condiciones que les reportan todas las
ventajas i todas las preponderancias, no quieren ya cambiar esas
condiciones. La política hace vivir a tus expensas a hombres
inútiles i explotadores; los políticos no matarán nunca su gallina de
los huevos de oro.
-E: efecto, no ha mejorado mucho mi suerte, pero, ¿qué quieres?,
no veo por el momento otra arma que el sufragio universal.
A: ¿Tú no ves otra? Pues bien, voi a indicarte una mucho más poderosa...
¡La Huelga General!"
Al reverso de esta publicación se recomendaba la lectura de los otros folletos editados
por esta Biblioteca:

"A los jóvenes", de Kropotkin e "Individualidad", de Ingersoll.

Además señalaba que estaba en prensa "Bases del Sindicalismo", y que próximamente
aparecería "El Porvenir de nuestros hijos", de Reclus y "Organización". Los pedidos
debían hacerse a Ramón Muñoz C., Esmeralda 757, Santiago. (91)

Por la misma imprenta Franklin, hacia 1911, Ramón Muñoz editaría un folleto
titulado: "La Influencia de la lucha sindicalista"

Editado por La Batalla en 1915, el folleto, "La Guerra, sus causas y sus males" tuvo
amplia difusión entre los anarquistas. Su autor era Juan F. Barrera (anarquista de
amplio activismo durante el periodo en estudio), de una conferencia leída el 31 de
agosto de 1914 en el local de la Federación Obrera de Magallanes. Fue publicado
también por parte en el mismo órgano La Batalla durante 1915.

"El camarada Barrera, durante el tiempo escaso que la propaganda y el trabajo por
el sustento diario le dejan libre, ha podido nutriendo su cerebro en obras de
sociología, ciencia, filosofía, y sobre todo en el estudio de la naturaleza fuente única
de toda la verdad y sabiduría, formarse una personalidad, un concepto claro, propio,
independiente de toda regla política y de todo necio chovinismo patriotero -ideas que
han hecho raigambre y de que está impregnado el ambiente chileno, mironeista y
ramplón por excelencia- y por lo mismo, sustraerse a ese conservado elemento que
se aferra a la política como medio de reivindicación...

El folleto se vendía a 10 centavos el ejemplar, y sus beneficios iban destinados al

"sostenimiento de nuestro periódico, que atraviesa por una situación por demás
estrecha" (92)

La masificación de la cultura anarquista vía material impreso vendría de la mano tanto


de los contactos internacionales y solidarios, como de la acción constante y tesonera de
los grupos locales. Debemos destacar, respecto de esto último que, sobre todo, a partir
de 1918, esta labor se intensificaría como nunca antes, generándose una serie de
grupos especializados en la propaganda de edición de material "subversivo",
acompañado de la proliferación de una diversidad de grupos de afinidad que se
abocarían igualmente a su distribución. Ello sin duda iba de la mano con el incremento
en la sociabilidad obrera y la germinación de nuevos grupos de propaganda y sindicatos.

Hacia enero de 1920 el Intendente de Santiago se manifestaba preocupado por la gran


cantidad de "literatura anarquista" que circulaba en la ciudad. Preocupado por entonces
de esta literatura que invadía las calles de la ciudad, señalaba:

"La ley de propiedad literaria en el artículo 13 dispone:


"todo impresor deberá también depositar en la Biblioteca dos ejemplares de cada
papel periódico o suelto que imprima, y pasar uno al Ministerio del Interior y otro a
cada fiscal"
"Ocurre en la práctica (señalaba el Intendente), que con rara excepción de algunos de
los diarios de la capital, se omite el cumplimiento de esta ley.
El gran desarrollo de las publicaciones que se imprimen y circulan en esta ciudad,
tanto en forma de diarios, periódicos como revistas, libros, han preocupado
últimamente a la autoridad a la judicial como a la administrativa, ya que, en muchos
casos se trata de publicaciones subversivas o bien contrarias a la moral, las que en
forma de propaganda, producen verdadera alarma social" (93)

Preocupación similar se manifestaba por entonces en Valparaíso, culpándose a esta


literatura de ser la culpable de la conflictividad existente: La "Literatura anarquista", "los
literatos anarquistas", "editores de los diversos panfletos más o menos incendiarios",
que "con llamativos títulos se publican clandestinamente en varias de nuestras
ciudades", esa literatura "no puede ser más perjudicial al elemento obrero".

"Estamos verdaderamente admirados (señalaba por entonces Las Últimas Noticias


bajo el título de "Las Publicaciones Anarquistas") No podemos entender cómo han
podido permitirse durante meses la circulación de periódicos destinados a desquiciar
nuestras instituciones democráticas, a desprestigiar los poderes públicos y a producir
lo que se denomina revolución social.
Ya se ha descubierto el origen de los recursos que permitían esa amplia propaganda,
pero la gran mayoría ignoraba los extremos hasta los cuales habían llegado las
publicaciones subversivas”. (94)

A pesar de que estas preocupaciones de la oligarquía respecto de la prensa anarquista


se dieron a lo largo de todo el periodo en estudio, fue a partir de 1918 (ante el auge de
los movimientos sociales y la organización obrera, sumado a un contexto internacional
preocupante para la oligarquía, producto de la revolución rusa) cuando estas se hicieron
más intensas, traduciéndose en medidas de mayor envergadura.

De importante labor en este plano sería el Grupo LUX (formado por estudiantes, a
mediados de 1921), y que se haría un espacio en el ámbito de la sociabilidad obrera y
específicamente anarquista.

Ya para 1922 el grupo contaba con buena parte de folletos editados, llegando estos a los
distintos grupos específicos y sindicales que surgían a lo largo de la región:

· El Cancionero Revolucionario, recopilación a cargo de Armando Triviño


(agotado preparándose la 2° edición).
· Voces de liberación, recopilación de los mejores artículos, arengas y manifiestos
de Rosa Luxemburgo, Emma Goldman, María Álvarez, Isolina Bórquez, etc.
Este es el mejor folleto de propaganda revolucionaria para el sexo femenino.
· Entre Campesinos, por Enrique Malatesta, con un prólogo y un epílogo, es la
más sencilla exposición del comunismo libertario que se ha escrito y que está al
alcance de todas las inteligencias y culturas.
· El Sindicalismo Libertario, por Ánjel Pestaña y Salvador Seguí, con una
biografía y un retrato de Pestaña, dos conferencias de divulgación de los
sindicatos únicos de España, que llaman la atención por la sencillez y concisión en
que resuelve el problema de la organización obrera por industrias.

Además por entonces el grupo tenía contemplada una edición del libro de Gómez
Rojas, Rebeldías Líricas. En El Proletario de Talca (órgano de la Unión Local de la
IWW) se señalaba que esta editorial

"no ha querido dejar por más tiempo inéditas las poesías del estudiante Gómez
Rojas que asesinaron los verdugos de la burguesía chilena por sus ideas
emancipadoras",
publicando nuevamente sus Rebeldías Líricas.

"La edición está ya en prensa y contendrá las mejores poesías y llevará por título el
nombre del primero y único libro que publicara en vida, y que destacó a Gómez como
un inspirado poeta y un altivo revolucionario.
"La edición ostentará una hermosa portada y un magnífico retrato debido a la pluma
del pintor Nicanor Vergara, prologa la obra el poeta Roberto Meza Fuentes.
"En esta edición va una selección de las arengas de Rebeldías Líricas, su único libro
que publicara en 1913, una selección de los poemas que publicara después, incluso
un fragmento del Poema Hereje, y casi todas las poesías que escribiera en la cárcel"

Se recomendaban estas ediciones a las Bibliotecas, Consejos Federales, Uniones Locales,

"y en general a quien se interese por los problemas sociales" (95)

Hacia mediados de 1922 se daba aviso

"A las organizaciones anarquistas, a los Centros de Estudios Sociales y


organizaciones obreras, la Editorial LUX que, mediante constancia y decisión ha
logrado editar 7 folletos”

A los ya nombrados se sumaban: El Comunismo en América y Organización y


Revolución, fruto de

"dos conferencias de la compañerita Luisa Arratia (dictadas en el Ateneo de la


I.W.W. y en el Centro de Estudios Sociales de la FOI.) dada la aceptación que
tuvieron dichas conferencias, está demás recomendar la lectura del folleto" (96)

Se sumaban además, del anarquista Manuel Márquez, "Mi


palabra Anarquista" (posteriormente, de este autor, aunque al
parecer por otra editorial: "Palabras a las mujeres")

Además, se había propuesto editar

"la conocida obra de P. Kropotkin, La Conquista del Pan, en una


edición económica" (97)

Un año después, editarían Arengas, de Triviño, con prólogo de


Juan Gandulfo. Se trataba de una recopilación de artículos de
Triviño escritos en la prensa obrera. Hacia 1924, se sumaría,
"Mis proclamas", de Juana Rouco:

"Es un canto rebelión. De sus páginas fluye el verbo que redime y el apóstrofe que
hiere, la sentencia que demuele prejuicios y el concepto que crea nuevos valores.
"Mis Proclamas" es el eco de una voz de mujer que ama intensamente a la
humanidad, que pelea apasionadamente por la libertad y la liberación integral de los
seres humanos" (98)

El grupo Rebelión, hacia 1923, también se constituiría como un grupo editorial. La


iniciativa había partido de Julio Navarrete, profesor primario, anarquista, y como tal,
también impedido de hacer clases en establecimientos del Estado (junto con Manuel
Márquez)
"Esta nuevo editorial desea ayudar a la redención obrera. Con el objeto se ha
propuesto editar una serie de folletos que por su precio y claridad pueden servir a los
explotados.
El asalariado al comprar y propagar nuestras publicaciones determinará el éxito de
nuestros esfuerzos está en prensa el folleto "Hacia la Anarquía" de Julio Navarrete.
Ejemplar: $ 0,50. Por un pedido que no baje lo 10 y no pase de cien ejemplares, se
hará un descuento de $ 0,10 en cada ejemplar. Las compras superiores a 100
ejemplares, tendrán una rebaja de $ 0,20 por cada uno. Pedidos a Julio Navarrete,
Santiago, correo n° 2" (99)

Durante este periodo aparecieron una serie de estos folletos que bien contribuyeron a
dinamizar la propaganda. Ya fuera obras de conocidos pensadores anarquistas, como
Kropotkin, Malatesta, y otros, como folletos realizados por autores locales, como
Rebosio quien ya el 29 de octubre de 1916, publicara en Iquique sus "Nociones del
Sindicalismo Revolucionario". Ya hemos visto también las publicaciones, por el grupo
Lux, de obras de Triviño, Manuel Márquez, Gómez Rojas, a lo que habría que sumar
a Juan Gandulfo, Manuel J. Montenegro, Julio Navarrete y otros. Muchas de estos
folletos, originalmente habían sido conferencias dadas por los autores en diversos
centros obreros. Era el caso, por ejemplo, de "El Crimen Maximalista", conferencia leída
en el Ateneo de la Juventud Obrera por Juan Pueblo y escrita por Juan Prisionero
(100) o de "Sindicalismo y Organización Industrial" por M. J. Montenegro y Juan
Gandulfo, o también del folleto, editado por la Agrupación La Batalla de Santiago,
hacia 1918: "Lo que oyó y dijo Juan Pueblo", también de Triviño.

"El folleto en cuestión es el fiel exponente de las monsergas que nos obsequian los
audaces saltimbanquis de la política en todos los periodos electorales, y es a la vez,
una acerba crítica razonada al engranaje gubernativo, y un acopio de argumentación
aplastante para los que creen sinceramente en la virtualidad de los poderes
constituidos, tomando la política como un medio de emancipación social" (101)

Del mismo Triviño, tiempo después (1925), el grupo Lux, editaría: "La IWW en la
Teoría y en la Práctica".

Además se integraron folletos nacidos al calor e la evolución del movimiento local. Así
por ejemplo, con motivo de la huelga de los arrendatarios en 1925, circularía un folleto
llamado ¡ARRENDATRIO! ¡ALERTA!, folleto,

"Contra el proyecto de la junta central de arrendatarios". Este folleto que tiene gran
importancia para todos arrendatario, y que debe tenerlo cada uno en su poder, a fin
de que se oriente y conozca su bondad en el asunto, y las macanas de la ley 261,
puede pedirse a Nataniel 1057, al precio de $ 0, 30 a la comuna 0,20...”

Así mismo, con motivo de la muerte de Rebosio, se editaría folleto de su vida. Lo


mismo realizaría Federico Serrano, con motivo de la muerte de Efraín Plaza Olmedo.

Lista de algunos folletos editados a iniciativa de distintos grupos locales entre 1915 y
1926

INICIATIVA AUTOR OBRA


Lux A. Triviño El Cancionero Revolucionario
Lux Voces de Liberación
Lux E. Malatesta Entre Campesinos
Lux Ángel Pestaña y Salvador Seguí El Sindicalismo Libertario
Lux J.D. Gómez Rojas Rebeldías Líricas
Lux Luisa Arratia (Angelina, peruana) Comunismo en América
Lux Organización y Revolución
Lux P. Kropotkin La Conquista del Pan
Lux A. Triviño Arengas
Lux Juana Rouco Mis proclamas
Lux M. J. Montenegro, Juan Gandulfo Sindicalismo y Organización Industrial
Lux A. Triviño La IWW en la Teoría y en la Práctica
Lux Manuel Márquez Mi palabra Anarquista
Lux Figuras de Agitadores
La Batalla (Santiago) Juan F. Barrera La Guerra, sus causas y sus males
La Batalla A. Triviño Lo que oyó y dijo Juan Pueblo
La Batalla E. Malatesta En el Café
La Batalla J. Rebosio Nociones del Sindicalismo Revolucionario
La Batalla S. Faure Hacia la dicha (1920)
Federación Obrera Metalúrgica S Faure Hacia la dicha (1915)
La Batalla Luís Jara Cancionero Revolucionario
Centro Anárquico La Brecha J. Rebosio Nociones del Sindicalismo Revolucionario
Fuerza Conciente (Antofagasta) Cancionero Revolucionario
Luz y Libertad F. Merlino Por qué somos anarquistas
Luz y Libertad A. Triviño El Crimen Maximalista
Federico Serrano Lo que dijeron las espigas
Rebelión Julio Navarrete Hacia la Anarquía
Rebelión Manuel Márquez Palabras a las mujeres
FOM Solano Palacio Punta Arenas
El Sembrador Franz Sutor Generación Consciente
El Sembrador Luís Bulffi Huelga de Vientres!
Más Allá Hamon Patria
Más Allá Clemens Elementos de Anarquía
Luz y Acción Guerra a la Guerra
IWW/Liga Arrendatarios Federico Serrano V.? ¡ARRENDATRIO! ¡ALERTA!
IWW Federico Serrano V. Odisea de un luchador
Federico Serrano V. El juicio final (novela)

Toda esta proliferación de ediciones de los grupos locales, vendría de la mano de un


repunte en el plano organizacional, lo cual también se manifestaba en nuevos grupos, lo
que también se expresaba en nuevas imprentas, independientes, y comprometidas con
la causa libertaria, y más ampliamente obrera.

Destacamos la labor de la Imprenta La Batalla, en Valparaíso (Garibaldi # 170), que


además de editar el periódico del mismo nombre, editaba en sus talleres, Mar i Tierra,
El Obrero Metalúrgico, La Voz del Pueblo, de la Federación de Carpinteros,
Verdad, y otras tantas hojas...

Pero además, una serie de folletos, como, "Hacia la dicha" de Faure; "Nociones del
Sindicalismo Revolucionario", de Rebosio (1920); cancionero revolucionario, por Luís
Jara; "En el café", interesante folleto escrito por Malatesta,

"Basadas estas páginas sobre una sólida tesis relativa al comunismo, su lectura y
difusión en la hora presente no puede ser de más indispensable necesidad., ya que en
ellas, una vez más, viene a probar hasta la evidencia que la actual sociedad, tal cual
está constituida es un contrasentido verticalmente opuesto a los sentimientos de
humanidad..." (102)

Palabras de reconocimiento para la cultura obrera libre, también debiéramos tener para
la Imprenta de la Federación Obrera, que en Santiago no sólo editaba el periódico
del mismo nombre, sino una serie de hojas de propaganda, tanto anarquista como
socialista, diversidad de folletos, incluso libros. Sin duda, una de la Imprentas obreras
de mayor importancia en Chile

Talleres Gráficos de la Federación Obrera (Sucesos nº 1161, 25 de diciembre 1924)

Seríamos realmente injustos sino reconociéramos la labor colosal de Imprentas obreras


creadas por los socialistas, como, de la misma ciudad de Iquique, El Despertar de los
Trabajadores en Iquique, La Comuna, en Viña del Mar, El Socialista, en Antofagasta,
La Jornada en Lota, entre otras.

La imprenta Numen sería de vital importancia en Santiago. La Imprenta Numen, que


editaba una revista del mismo nombre a cargo de los estudiantes Santiago Labarca y
Juan Egaña, sin duda pasaría a la historia, producto de ardua labor propagandística. En
sus talleres se editaban, además de la revista Numen, Verba Roja, Acción Directa, y
otras hojas gremiales, además de propaganda alessandrista. En sus talleres trabajó de
linotipista el mismo Manuel Rojas, quien luego relataría en La Oscura Vida

“Radiante los momentos en que este taller, que tanto había costado parar al obrero
tipógrafo Julio Valiente, sería destruido por la masa burda e inconsciente afanada en
las ideas patrióticas en el marco de la "Guerra de don Ladislao" hacia julio de 1920”
(103)

Julio Valiente sería encerrado acusado de "subversivo". Interrogado el 29 de julio de


1920, sobre las ediciones "subversivas" diría:

"el folleto titulado "Por qué somos Anarquistas" se publicó en mis talleres en la
cantidad de 2000 ejemplares a petición de Armando Triviño y aún no me ha pagado
su precio; el titulado "Ocaso del Capitalismo" se publicó también en mis talleres en
cantidad de mil ejemplares a pedido del señor García Burr, que creo, es corredor de
comercio; los demás manuscritos son originales, son modelos a borradores de
publicaciones ya hechas en los talleres y los demás libros estaban en el
establecimiento pero no han sido publicados en dichos talleres" (104)
No obstante, estos impresos no eran los más cuestionados por la "justicia". Desde
luego, estaban Verba Roja, Acción Directa, y otras hojas de menor tiraje, y más aún,
los "Estatutos de la IWW".

Una vez terminado este proceso contra Valiente, éste volvería a la carga, esta vez, con
otra Imprenta, COSMOS, de "Julio Valiente y Cía IMPRESORES" ubicada en calle
Tenderini 151. Hacia 1923 editaría por primera vez los Carteles de González Pacheco,
escrito en el que relataba su experiencia en gira de propaganda por Chile.

Algunos otros folletos editados por esta editorial fueron Vidas Mínimas de González
Vera y Figuras de Agitadores, de Santiago Labarca.

El grupo "Más allá" se había constituido hacia mediados de 1924 en Santiago, a


iniciativa de Manuel Márquez y Julio Navarrete,

"este grupo, entre otros actos, dará conferencias y editará periódicamente esta hoja".

En una de estas hojas, editarían "Patria" de Hamon, en 5000


ejemplares (por la Imprenta Av Matta), y de repartición
gratuita.

"PATRIA. Tal es el nombre del primer folleto que el grupo


MÁS ALLÁ se ha propuesto editar. Es una obra por demás
interesante para la propaganda antimilitarista. Hamon, el
nombre de su autor, nos evita mayor recomendación.
Este folleto aparecerá de 16 páginas y será distribuido gratis,
por esta razón se pide la ayuda de todos los compañeros que
se interesen por tan importante trabajo, para este objeto
pueden verse con el compañero M. Montoya, Cuevas 1021, o
con A. Silva, Copiapó 729"

Posteriormente, se trasladarían a Valparaíso, instalando la


Imprenta Más Allá en esa ciudad, en Av. Colón nª 1032.

Tiempo después editarían su primer folleto de propaganda,


"Elementos de Anarquía" de Clemens.

"En él se analizan las causas que enjendran la explotación y


dominación del hombre sobre el hombre. En una palabra, es
una exposición clara i concisa de las ideas anarquistas,
accesible hasta la mentalidad más rudimentaria..., consta de
68 páginas Precio: 0, 60 ejemplar, y a las organizaciones y
paqueteros 10% de descuento. Pídalo a Editorial "Más Allá",
Av. Colón 1032, casilla 4048, correo 2, Valparaíso" (105)

Por esta misma Imprenta, hacia estos años aparecerían una serie de hojas anarquistas y
anarcosindicalistas, como La Unión Sindical, (1925, órgano de las organizaciones
autónomas de Valparaíso); Trabajo, (1925, órgano de la Unión de Obreros
Carpinteros, Mueblistas i Anexos, dirigido por Emilio Meza); El Obrero
Metalúrgico (1924-1926, de la Unión de Obreros Metalúrgicos), entre otras.

La Imprenta El Progreso, de Iquique (perteneciente al Centro de Estudios Sociales


La Brecha -formado el 17 de noviembre de 1915 por el obrero tipógrafo Enrique
Celedonio Arenas Robles y Julio Rebosio, entre otros-), constituía uno de los focos
de generación de propaganda escrita más importantes de la región chilena. Esta
imprenta al parecer habría pertenecido antes al grupo Luz i Vida de Antofagasta, al
cual los integrantes del grupo la Brecha (luego de 3 años de recaudación de fondos)
habrían comprado esta prensa (Luz i Vida, mayo 1916).

Esta imprenta no solamente sería responsable de la


impresión de El Surco (a partir de 1917), El Sembrador,
(a partir de 1922) sino que además, de una serie de hojas
de emancipación social en esa ciudad, y folletos de
propaganda.

En varias ocasiones esta imprenta sería objeto de la


represión.

En el marco de la "Guerra de don Ladislao" hacia 1920, la


imprenta seria destruida por las hordas patrióticas. A
pesar de ello, hacia 1922, emprendería una nueva
aventura al dar a luz la revista El Sembrador.

Su principal impulsor, Celedonio Arenas R.


seguiría en permanente contacto con los
gremios (especialmente el Sindicato de
Cargadores) imprimiendo sus volantes y
demandas, cuestión que (en el marco de una
huelga general) costaría un nuevo ataque por
parte del Estado a los talleres de la Imprenta.
Así, el 4 de octubre de 1923 la policía
allanaría el local del Sindicato de
Cargadores, espacio en el que se
encontraba la prensita. Una vez más, ésta
sería destruida y sus encargados detenidos.
Saqueo a Imprenta El Sembrador, octubre 1923
"Eran más o menos las 9.30 de la noche del
día jueves 4, y en ambos locales, el de la
IWW y el del gremio de Jornaleros que
están casi al frente el uno del otro, se
encontraban charlando varios compañeros,
cuando intempestivamente, sin presentar la
orden y sin leerla como es de rigor en estos
casos, penetró una horda de forajidos
capitaneada por el prefecto Souper,
mientras por otro lado un pelotón de policías
armados de carabinas y desplegados en
línea de tiradores, apuntaban a la cabeza de
los indefensos obreros (...) Se hizo un
prolijo registro en todos los departamentos
en busca de la misteriosa dinamita, y con el pretexto éste se llevaron toda la
literatura que había, los papeles y los libros de la biblioteca. Lo que no quisieron llevar
lo destrozaron. Cuando las hordas llegaron a la pieza donde se encuentra el pequeño
tallercito de imprenta, un grito de júbilo salió del hocico de las fieras: el cuarto poder
del Estado estaba bajo sus garras. Fue este, quizás, el hecho mas culminante. El
prefecto reclamó su puesto de honor, y él, personalmente, se encargó de la obra
CIVILIZADORA (sic) de empastar la imprenta, ensañándose con satisfacción felina,
con los tipos, las cajas y los tarros de tinta, formando todo, un montón de despojos,
restos de lo que momentos antes era un pequeño tallercito de imprenta, montado
penosamente por un puñado de hombres" (El Sembrador, Iquique, 20 de octubre de
1923)
Hacia comienzos de 1924, no obstante, ya la prensa parecía no resistir, y el grupo
iniciaría, con apoyo de algunos compañeros de Argentina, la campaña pro Imprenta El
Sembrador.

Algunos grupos de esa región habían donado "retratos de los prominentes pensadores
anarquistas" (para ser rifados), realizando Pic-nic (organizado por Víctor Marín en
Mendoza pro imprenta), donando además libros y periódicos para las rifas y venta.
(106)

La Biblioteca Acracia de Tarragona, en tanto, también contribuiría a esta importante


labor.

Acracia, hacia fines de 1923, había donado al Grupo El Sembrador, buena cantidad
de "folletos i postales", los que habían sido vendidos para reunir fondos para una
imprenta propia (futura Imprenta El Sembrador, de Valparaíso)

Escribía hacia 1923 al grupo El Sembrador, la Biblioteca Acracia, de Tarragona:

"camaradas de El Sembrador
Iquique.
Estimados compañeros: Salud!
Adjunto os enviamos una pequeña partida de folletos, del producto de la venta de los
cuales podéis destinar a Pro Imprenta de vuestro periódico. Nos hemos enterados de
la hazaña cometida por los sicarios de vuestro pueblo, que en nada se diferencian de
los de todos los pueblos...” (107)

Algunos de estos folletos eran: Aurorita (cuento infantil); El Absurdo político; Redención
del Campesino; ¿Dónde está Dios?; La mujer esclava; El leñador i el niño; La pedagogía
de F. Ferrer; Nuevas canciones rebeldes; Floreal i Margarita; El ideal del siglo XX, entre
otros.

Las postales eran: "Alcoholismo", colección de 10; "Pensadores", colección de 8 a 2


tintas; retratos de Ferrer, Lorenzo, Kropotkin, Bakounine, Reclus, Salvochea,
"tamaño grande"

Al poco tiempo, el grupo daba a entender que no podría continuar con la edición de esta
revista, en vista del precario estado en el que se encontraba su prensa (Imprenta El
Progreso).

"Nuestra prensita"
Esa minúscula prensita que nuestros lectores conocen por el clisé que publicamos
después del asalto y empastelamiento que la policía hizo de nuestra imprenta, ha
terminado su servicio, pues ha roto totalmente y en ella no puede ya imprimirse
nuestro semanario.
Con la quebradura de la prensa, hemos perdido el más poderoso instrumento
revolucionario.
¿Seguirá saliendo El Sembrador? Quién sabe. No lo afirmamos. Este número nos
cuesta ingentes sacrificios; ha salido a empellones, pero aunque sea a empujones,
veremos modo de sacar otros y otros....hasta que agotados, rendidos, exhaustos, nos
quebremos, como se partieron los fierros de nuestra prensita.
Aunque los gastos de impresión son equitativos, no podremos hacer frente a este
nuevo desembolso y la marcha del semanario se resentirá inevitablemente, si es que
n desaparece.
La única esperanza que tenemos es que los anarquistas de Antofagasta nos faciliten
la prensa que ellos tienen allí de lujo, que no presta ningún servicio a la revolución ni
a la anarquía (al parecer se refería al centro Rebelión, que editaba Ideas)
Si los anarquistas de Antofagasta se niegan a poner la prensa al servicio de nuestro
ideal, El Sembrador, por muchos esfuerzos i sacrificios que hagamos, no logrará
sobrevivir" (108)

La Imprenta El Progreso, no obstante, años después, volvería a


funcionar, volviéndose a editar El Surco, hacia 1926 en Iquique, a
cargo de quienes seguirían en esa ciudad, los integrantes del grupo
La Brecha, con José F. Cortés a la cabeza. Hacia fines de 1924,
con muchas dificultades en vista del precario estado de la prensa,
volverían a editar El Surco, imprimiendo además un aserie de hojas
gremiales, como El Obrero Marítimo.

Pero en tanto el grupo El Sembrador, de Celedonio Arenas, decidiría emprender


rumbo al sur, realizando una intensa gira de propaganda por los distintos pueblos y
oficinas salitreras. Llegando a Santiago, apoyarían la idea de los sindicatos autónomos
de fundar la Federación Obrera Regional Chilena, definida como "federalista" en
contraposición a lo que ellos denominaban "centralismo" de la IWW.

Hacia 1925, vemos al grupo definitivamente instalado en Valparaíso, en donde, se haría


realidad el sueño de una Imprenta propia, llamada El Sembrador, en la cual se
imprimiría el periódico El Sembrador, además de una serie de otras hojas, como La
Aguja (del gremio de sastres de Valparaíso, 1924-1925), El Obrero Gráfico (de la
Federación de Obreros de Imprenta, Valparaíso, 1926-1927), entre otras. Incluso
colaboraría con el grupo, Juan Onofre Chamorro, al parecer, ya fuera de la IWW.
(109)

El Grupo El Sembrador, en estos talleres reproduciría los folletos de Luís Bulffi,


"Generación Consciente" y "¡Huelga de Vientres!", que serían censuradas por las
autoridades (110)

Hacia 1925, la IWW, también adquiriría una imprenta propia, Libertad, ubicada en
calle Nataniel 1057. A través de la cual saldrían varios folletos, y se editarían varios
periódicos, entre ellos, desde luego, Acción Directa, Verba Roja, algunos números de
Tribuna Libertaria, Hoja Sanitaria, La Conquista, de Talca, etc.

Se trataba de la culminación de una larga campaña iniciada por Verba Roja y la


Agrupación Anarquista de Santiago, hacia 1922.

5) DISTRIBUCIÓN

Distintos espacios sirvieron como centros distribuidores de este material. Partiendo por
los mismos centros sociales y gremiales, en donde siempre estaban presentes en las
mesas del salón social estos periódicos y folletos. Pero también otros espacios. Los
lugares de trabajo por ejemplo, la zapatería de Manuel Antonio Silva, o la "Peluquería
del Pueblo" de Teodoro Brown en donde en la puerta colgaba un muestrario de libros
baratos: "Soldado, no mates", "Trabajador, no votes", "Evolución i Revolución", "La
Conquista del Pan", "En el café", etc. (111)
Servían estos espacios también como focos de sociabilidad y distribución de este
material. Algo así sucedería con la librería de Manuel Peña, en Iquique. Peña, español,
sería expulsado del país en 1920, tras ver las autoridades en su librería un foco de
difusión de ideas "subversivas"

Habíamos dicho que en la


librería de Peña con frecuencia
tenían lugar conversaciones
sobre temas sociales y
anarquismo, pronto Peña
adheriría "a un anarquismo
idealista y fraternal", animado
de un "soplo de amor generoso
por el pueblo explotado". Los
grupos anarquistas de Santiago
y otras ciudades le enviaban
sus ediciones, que Peña
distribuía, muchas veces
regalaba.

Especialmente de España,
llegaban a su librería,
principalmente traducciones de
obras francesas y rusas...su
librería abierta hasta las 10 de
la noche, centro de charlas de
los más notorios subversivos de
Iquique, le atrajo el odio de la
autoridad... (112)

"Para Instruirse" El Surco


recomendaba hacia octubre de
1919 "a todos los obreros en
general" las siguientes lecturas
que se encontraban a precios
"muy baratos en la Librería
Ibérica de Manuel Peña, en
calle Tarapacá nª 430":

"La Anarquía ante la civilización", "Memorias de un revolucionario", "Amor y Libertad",


"Bohemia Revolucionaria", "La Moral Anarquista", "Apóstoles Rebeldes", "El Estado",
"Orden y Libertad", "El despotismo del oro", "Palabras de un Rebelde", "La Guerra y
la Paz", "La muerte de los dioses", "La Resurrección de los Dioses", "La Emancipación
de la Mujer", "La Revolución y los Revolucionarios", "La Guerra de los Dioses", "La
muerte y el diablo", "El Catolicismo y sus luchas en el Estado", "El Origen del
Hombre", "Las grandes ideas modernas", "Nuevas Orientaciones", "El Derecho a la
vida", "Conservación y Revolución", "Enfermedades del sentimiento religioso"

Destacaba, "El Hombre y la Tierra", obra de Reclus, por cuadernillos a 80 centavos


cada uno, y el infaltable

"¿Por qué somos Anarquistas?", "folleto recientemente editado, a 20 ctvos" (113)


Después de que Peña fuera expulsado del país, hacia de 1920, asumiría la labor de
distribución en Iquique, el Centro Anárquico La Brecha y la Agrupación El
Sembrador, que daba nombre a la revista dirigida por Celedonio Arenas desde 1922.

El Sembrador, primero en Iquique (editado luego, desde 1925, en Valparaíso),


mantenía estrechos contactos con los anarquistas trasandinos. Cuando el Grupo se
encontraba en Iquique, constituía una especie de puente entre los grupos de Argentina
y los establecidos en Perú y Bolivia, encargándose de distribuir el material editado en
Buenos Aires, y las ciudades del centro de Chile.

"Avisamos a los compañeros de Chile, Perú y Bolivia, que los libros que editan
Argonauta como La Protesta, se piden directamente a El Sembrador" (114)

Para mediados de 1923 contaba con las siguientes obras para la venta y su difusión,
muchas de ellas editadas por La Protesta y Argonauta. Otros tantos, editados por los
grupos de Santiago y Valparaíso, y otros por las españolas, Acracia, de Tarragona, y
Generación Consciente, de Alcoy:

· La Revolución en Italia, Malatesta


· Doctrina y Combate, R. Mella
· Contra Todo y Todos, L. Zoais
· Más allá de la política, A. Medina
· El Sindicalismo frente a la política, Valentín de Pedro
· Frente a la Dictadura, Ballester
· La Guerra y la Escuela, Albano Rosell
· Criterio Libertario, A. Lorenzo
· Reseña Histórica del Movimiento Obrero Internacional, M. Pommercy
· Primero de Mayo, Gori
· El Arte y la Rebeldía, F. Pelloutieur
· De la Patria, Hamon
· República y Anarquía, Dr. N. Converti
· Necesidad de la Asociación, J. Prat
· La Ley y la Autoridad, Kropotkin
· ¿Herejías?, Foward
· A la Lucha!, A. J. Torres
· A los Jóvenes, Kropotkin
· Contestación a una Creyente, Faure
· La Anarquía ante los Tribunales, Gori
· Abriendo Surco, Flores Magón

Tiempo después, se agregaban a la lista:

· Cartas a una mujer sobre Anarquía, Fabbri


· Vidas Mínimas, González Vera
· Carteles de Chile, González Pacheco
· La Sociedad Comunista Libertaria, Faure
· El imperio de la fuerza (teatro), Eugenio Navas
· Técnica Social, J.T.Tibió
· El leñador y el niño, Barthé
· Criterio Libertario, A. Lorenzo
· El Ideal del Siglo, Palmiro de Lidia
· Los Abnegados y Autonomía y Federalismo, ambos de R. Magre Riera
· Teatro, de González Pacheco
· Los Hijos del Amor, Urales
· El Proceso de Cristo, F.P. y Arsuaga
A través de este foco, las ediciones del Grupo Lux, La Batalla, Verba Roja, Numen,
Claridad eran distribuidas a otros lugares de América del Sur, las que a su vez,
enviaban su material a este centro. A su vez, grupos de Perú, Bolivia, Asunción, norte
de Argentina también enviaban sus ediciones y colaboraciones.

Una vez trasladados a Valparaíso, el Grupo El Sembrador, seguiría con su labor de


distribución, manteniendo sus relaciones con los grupos argentinos y españoles,
sumándose además una amplia gama de ediciones locales.

6) ALGUNAS CONCLUSIONES

Hemos visto que la lectura constituía un pilar fundamental para la propaganda


anarquista. Muchos anarquistas llegaban a ser tales a través de la lectura, y ello toma
aún más importancia si consideramos el lugar de privilegio que en la cultura anarquista
posee el autodidactismo.

Considerando esta importancia de la lectura en el mundo de la cultura anarquista, no


resulta raro que éstos se hayan preocupado tanto de poner al alcance de los
trabajadores -y oprimidos en general-, las ideas por escrito, esforzándose para ello,
agilizando la circulación de la misma, abaratando costos, poniendo en circulación hojas
de fácil circulación y folletos y libros a bajo costo; estableciendo también focos de
distribución en espacios culturales esencialmente culturales, aunque también en los
mismos lugares de trabajo o talleres.

Sin duda no fue menor la generación de material a través de imprentas propias,


cuestión para la cual realizaban arduas campañas "pro imprenta", fracasando muchas
veces, aunque en otras (como el caso de la Imprenta El Progreso, de Iquique o
libertad, de la IWW en Santiago), ello tendría hermosos triunfos, a pesar de las
constantes amenazas de las autoridades.

Importante es destacar que dicho material de lectura no primaban solamente aquellas


lecturas netamente anarquistas o escritas por autores ácratas, sino más bien se trataba
de lecturas "progresistas", cuyos sellos eran la razón, la ciencia, pero también las ideas
modernas en general, el naturismo, el librepensamiento, la liberación de la mujer, etc.

Notas:

001. La Batalla, nº 12, 1ª 15ª agosto 1913


002. Inquietudes políticas y gremiales, op. cit., p. 11
003. Ibidem
004. La Batalla, nª 48, 1ª 15ª enero 1915. El folleto en cuestión era el titulado Hacia la Dicha de Sebastián Faure, anunciando
que "pronto pondremos otros en prensa para continuar esta hermosa obra de reconstrucción social", ver La Batalla, nª 52, 1º 15º
Marzo de 1915
005. La Batalla, nª 50, 1º 15º febrero de 1915
006. La Batalla, 2ª 15ª de septiembre 1913: para el 18 entre amigos
007. La Agitación, Estación Dolores, marzo de 1905.
008. La Batalla, 2° 15° de enero de 1913
009. La Batalla, nª 48, 1ª 15ª enero 1915
010. La Protesta, 1911
011. Manuel Rojas, La Oscura Vida Radiante, op. cit.
012. La Voz del Gráfico, órgano oficial de la FOI, nª 76, marzo de 1945: Escribe Rocafuerte (Nolasco Arratia)
013. El Metalúrgico, n° 19, Santiago, diciembre 1923
014. Cuando era Muchacho, op. cit.
015. Sepúlveda Leyton, Camarada, Nascimento, 1938
016. Cuando era Muchacho, op. cit.; Manuel Rojas, Sombras contra el muro, op. cit., p. 48
017. ver avisos de La Reforma, octubre 1906
018. Augusto Pinto, Recuerdos de Pedro Godoy...op.cit.
019. Cuando era Muchacho, p. 137
020. AHN, Fondo Judicial, Santiago, legajo 1675
021. La Tiranía en Chile, op. cit.
022. D. Barrancos: "Lecturas comentadas: un dispositivo para la formación de la conciencia contestataria entre 1914-1930" en
Boletín CEIL, nª 16, Bs. As., 1987
023. ver algunos capítulos de la obra dirigida por M. Agulhon: Formas de Sociabilidad en Chile, 1840-1940". Editorial Vivaria.
Santiago, 1992.
024. La Federación Obrera, 23 febrero 1923
025. La Federación Obrera, 22 de octubre 1922
026. Augusto Pinto, Recuerdos de Pedro Godoy...op.cit.
027. Ramiro de Maeztu, Artículos Desconocidos, aparecidas en El Imparcial, 1901, Cit por Litvak, Musa Libertaria, op. cit. pp.
176-178
028. Navarro, A la Revolución por la Cultura..., p. 158
029. La Ideología política... (1991), p. 77.
030. Navarro, A la Revolución por la Cultura..., p. 157
031. Suriano, op. cit., p. 114
032. El Obrero en Calzado, órgano de la Federación de Zapateros y Aparadoras, Santiago, 1° de Mayo de 1919
033. El Obrero Gráfico, Valparaíso, n° 20, 1° de mayo de 1926
034. La Agitación, Dolores, nª 15, 9 de septiembre de 1905
035. El Obrero Metalúrgico, Valparaíso, 28 de diciembre de 1924
036. Navarro, A la Revolución por la Cultura...,p. 180
037. El Trabajo, Confederación Mancomunal de Trabajadores (Valparaíso), n° 6, 2 de febrero de 1905, "En mi mesita de estudio"
038. La Batalla, Nª 52, 1ª 15ª marzo 1915
039. El Obrero en Calzado, órgano de la Federación de Zapateros y Aparadoras, Santiago, 1° de Mayo de 1919
040. Tribuna Libertaria, n° 10, 1° 15° febrero 1924
041. La Agitación, n° 27, 26 de noviembre de 1903
042. Acción Directa, nº 18, 1ª 15ª de noviembre de 1922
043. El Productor, nª 13 de enero de 1913
044. La Protesta, diciembre de 1908
045. La Agitación, n°24, 10 de junio de 1903
046. La Agitación, n°12, 21 de junio de 1902
047. La Luz, n°1, 6 de enero de 1904
048. Verba Roja, noviembre 1918.
049. El Surco, 10 de noviembre de 1919 entrevista con Violeta del Valle
050. La Federación Obrera, 8 de diciembre de 1922
051. en Guillermo Feliú, "Armando Donoso y su tiempo, Primera Parte, III, P. 22; Vial, vol 3, p. 169, nota 31
052. Ernesto Montenegro en "Memorias de un desmemoriado", V, pp. 52-53.
053. El Productor, nª 13 de enero de 1913
054. El Productor, nª 19, Julio 1913
055. El Obrero Gráfico, Valparaíso, n° 20, 1° de mayo de 1926
056. El Obrero en Calzado, órgano de la Federación de Zapateros y Aparadoras, Santiago, 1° de Mayo de 1919
057. El Ácrata, julio de 1900
058. La Luz, por la humanidad libre, enero 1904.
059. La Agitación, n° 13, 13 de agosto de 1902
060. La Agitación, nº 1
061. El Faro, nº 3, octubre 1902
062. La Agitación, n° 13, 13 de agosto de 1902. Esta modalidad tampoco excluía a figuras del movimiento anarquista
internacional, como Hamon y Nettlau: El compañero A. Hamon solicita de sus compañeros de Chile le envíen todos los folletos y
periódicos anarquistas y socialistas que se publiquen en el país. Dirección A. Hamon, Universidad Nueva, Rue Garnier, Neully-sur-
Seine, Francia" LA AGITACIÓN, N° 8, marzo, 1, 1902, p.3. "Pedimos a los grupos i compañeros que editen periódicos i folletos
relativos a la cuestión social, se sirvan enviar un ejemplar a cada una de las direcciones siguientes: Dr. M. Nettlau, The Avenue,
Surbiton (Surrey)- Inglaterra Prof. A. Hamon, Rue Garnier, 9- Neully-sur Seine -Paris- Francia" (La Agitación, n° 20, febrero 26 de
1903)
063. El Vaporino, n° 1, junio 28 de 1903
064. La Batalla, Nº 52, 1ª 15ª marzo 1915
065. ver el listado de periódicos extranjeros recibidos por los grupos locales a comienzos del siglo XX, más adelante.
066. El Ácrata n° 4, revista de sociología, p. 8, segunda quincena de mayo de 1901
067. Cuando era Muchacho...; sobre correspondencia desde China: La Batalla, nª 35, 1ª 15ª julio 1914
068. El Grito del Pueblo, 29 de noviembre 1896
069. Ciencia Social, n° 9 abril de 1899
070. Ciencia Social, 2 de mayo de 1899
071. La Protesta Humana, N° 174 de fines de mayo de 1902, fecha ilegible
072. La Protesta, Buenos Aires, 28 de agosto de 1904.
073. La Protesta Humana, 20 septiembre 1903
074. La Protesta, Buenos Aires, 23 agosto de 1904
075. ver cap Símbolos, Mártires y Héroes
076. L' Agitatore, n° 10, Bahía Blanca, 15 Giugno 1906
077. L' Agitatore, 18 de mayo de 1905
078. AHN, Fondo Judicial, Santiago, Legajo 1675.
079. datos tomados del folleto Patria, de Hamon, precio: 10 cts. De estos folletos aún podemos conservar algunos.
080. La Agitación, N° 1, 9 Septiembre 1901.
081. La Agitación, n°17, p.4, 10 de diciembre 1902
082. ver sus declaraciones de 1946, en cap. Los anarquistas...
083. Tierra y Libertad, Casablanca, N° 461, segunda quincena de octubre de 1904; La Agitación, Estación Dolores, n° 3
084. se ha revisado el folleto, disponible en biblioteca Nacional.
085. El Ácrata n° 3, p. 4; 6 de mayo de 1900.
086. El Ácrata, 1º julio 1900
087. El Alba. N° 5, 1° 15° enero de 1906
088. El Oprimido nª 3, septiembre 1906
089. La Reforma, 27 de octubre de 1906
090. ver ultima parte de este trabajo, especialmente.
091. se ha revisado este folleto, del cual se conservan algunos ejemplares.
092. La Batalla, nª 54, 1ª 15ª abril 1915
093. Intendencia de Santiago, vol. 497
094. Las Últimas Noticias, 12 de agosto 1920
095. El Proletario, órgano de la I.W.W., Talca, 19 de marzo de 1922
096. Verba Roja, nª 37, 1ª de mayo de 1922
097. El Sembrador, Iquique, n° 3, 19 agosto 1922; esta edición económica a la que se refiere este aviso, aún se encuentra
disponible en la Biblioteca Nacional.
098. El Sembrador, nª 81, 8 de marzo 1924
099. Tribuna Libertaria, n° 4, 2° 15° septiembre 1923
100. ver Verba Roja, nª 17, 29 de agosto 1919
101. había enviado 20 folletos a El Surco (El Surco, 9 de marzo 1918). Sin duda, se trataba de quienes con anterioridad, editaban
La Batalla, en Santiago, entre ellos, Armado Triviño, se sumarían Alberto Baloffet, Manuel Antonio Silva, y luego Eduardo
Ranfasto. Este mismo grupo, hacia comienzos de 1919, una vez que Verba Roja fuera reprimida en el puerto, emprendería la
edición de esta en Santiago (ver Verba Roja)
102. Mar y Tierra, 2ª 15ª diciembre de 1920
103. ver folleto de Ignotus: "Los Subversivos. Las maquinaciones del poder "república" de chile, 1920" ediciones Spartacus, 2009,
en circulación.
104. AHN, Fondo Judicial, legajo 1658; El conocido folleto "Por qué somos anarquistas", de F. Merlino, era reeditado hacia 1920
por los grupos El Cartel y Luz y Libertad. Verba Roja, n° 34, 1° 15ª julio de 1920
105. El Sembrador, Valparaíso, marzo 27 de 1926
106. El Sembrador, Revista, Iquique, nº 75
107. El Sembrador, Revista, Iquique, nº 76, 2 d febrero 1924
108. El Sembrador, Revista, Iquique, nº, 86, 12 de abril 1924
109. En El Surco se daba la noticia de la formación de este del grupo El Sembrador en Valparaíso, señalándose como direcciones
para entablar contactos con este grupo a: "Juan Onofre Chamorro, casilla 1733 o Av. Errázuriz 414, Valparaíso" (El Surco, 7 de
marzo de 1925) En las erogaciones para El Sembrador, se puede ver también el nombre de Chamorro.
110. ver Sexual; El Sembrador, n° 13, 20 de noviembre de 1926
111. González Vera, Cuando era Muchacho, p. 136. Los demás grupos obreros utilizaban la misma táctica. En la zapatería "El
Soviet", de Eduardo Bunster, también estaban estas obras. En "Juan Andrés" (o "El Obrero Ilustrado", órgano satírico, muy
leído por los anarquistas hacia 1911 en Santiago) se lee: "¿quiere leer a Juan Andrés gratis? Sírvase en la peluquería "La
Amistad", Bascuñán Guerrero 65" (Juan Andres, 1911)
112. La Tiranía en Chile, op. cit.
113. El Surco, nª 21
114. El Sembrador, n° 52, 4 Agosto 1923

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